"Bobby, lo estás haciendo genial en la bodega. ¡Tu abuelo no podría estar más orgulloso de ti!"

Lori estaba teniendo una de sus muchas conversaciones por celular con su novio fuera del estado. Si bien vernos sólo podía suceder de vez en cuando, sus teléfonos siempre los mantenían conectados. Lori había dejado de hacer todas cosas para hablar con su Bobby boo boo osito, bueno todo excepto ir por un vaso de jugo de la cocina.

Bajando las escaleras, Lori tuvo que esquivar a las gemelas que se perseguían. A diferencia de su hermana, Leni, ella podía hacer multiples cosas a la vez y no perdía ni un minuto. Deslizándose por la pared continuó bajando.

"Lo sé. Lo sé. ¡Espera! ¡Literalmente no lo sabía!" Lori estaba a punto de entrar en la cocina cuando la vista de su hermano le llamó la atención.

El pequeño bobo estaba justo delante de la nevera tomando un aperitivo. Mientras jugueteaba con un táper que contenía sobras de macarrones con queso, su teléfono estaba bien sujeto entre su oreja y su hombro. Lori se detuvo a escuchar su conversación por pura curiosidad.

"Sí, tengo todo el fin de semana libre para que podamos tener nuestra cita". Lincoln logro abrir la tapa de sus sobras, "No puedo esperar a verte también".

Lori se agachó detrás de la entrada de la cocina. ¡¿Lincoln tiene una cita?! Pero estaba saliendo con Ronnie Anne, la hermana pequeña de Bobby, ¡eso solo podía significar una cosa!

"¡Dios mío! ¡Bobby, no me dijiste que vendrías de visita este fin de semana!" Lori gritó en su teléfono. "Estoy tan emocionada que no puedo-"

Una mirada de confusión apareció en su cara.

"Pero Ronnie Anne va a venir para una cita con Lincoln... ¿Tiene una prueba? ¿El lunes? Estudia todo el fin de semana..." su mente estaba llena de pensamientos. "Oh, entiendo lo que está pasando." Lori comenzó a dar vueltas a su cabello con un solo dedo.

"Quieres mantenerlo como sorpresa pero es demasiado tarde, boby boo boo bear. Lincoln accidentalmente revelo tu sorpresa... Realmente no vienes... ¡¿Entonces con quién está hablando Lincoln?!" Lori gritó.

El pobre chico de cabello blanco salía de la cocina sin ver a su hermana. Su comida estaba calentada en un plato (calentada en el microondas) en una mano, su otra mano tenía el célular en su oído. Había un buen ritmo en su paso, obviamente estaba pensativo por la cita mencionada.

"Bueno, ¿qué te gustaría que me pusiera?"

"¡LINCOLN!"

"Aah!" Su plato fue lanzado al aire y cayó al suelo. Lincoln miró hacia abajo con tristeza.

"Lori, ¡¿por qué hiciste eso?!" Le gritó a su hermana mayor. Una pequeña voz de su teléfono habló y tuvo que retroceder. "No, no, no, no es algo que hayas hecho. Mi hermana sólo me asustó."

"¡Lincoln! ¿Con quién estás hablando?" Una pequeña voz salió de su propio teléfono. Se levantó y habló en un tono más alegre. "Lo siento, boo boo osito. Necesito convertir a mi hermanito en un pretzel humano". Beep.

La adolescente volvió su mirada hacia el chico. Su cara transmitía su disgusto y se inclinó por la cintura para estar a la altura del chico. La mandíbula de Lori sobresalía como un bulldog hambriento y gruñía mientras hablaba. Un dedo señaló la cara del chico.

"Si estás engañando a Ronnie Anne, te juro que te voy a-"

"¡No estoy saliendo con Ronnie Anne!" se acercó al marco de la puerta de la cocina. La sombra de su hermana se asomó sobre él como un demonio a punto de agarrar su garganta. Una voz de su teléfono lo hizo entrar en razón. "Sí, Ronnie Anne es la chica con la que intenté salir antes de que se mudara."

"¡Lincoln!" Lori le dijo: "¿Quién está al otro lado de esa llamada?"

"¡Mi novia, de acuerdo!" la voz le corrigió, "¡Alma gemela!"

Los ojos de su hermana se encendieron de rabia. Lincoln se dio cuenta de repente de lo que había dicho. Le dio la espalda a Lori, una acción de la que se arrepentiría, y le susurró al célular.

"¡No me estás ayudando! ¡Deja de reírte!" De repente se giró con fuerza violenta. Sus pies pataleaban cuando Lori lo levanto hacia su cara.

"¿Rompiste con Ronnie Anne?" Su voz era baja y llena de malicia. "¿Rompiste el corazón de la hermana pequeña de Bobby?"

"Um-um-um..." Una explicación más tarde. "N-Nosotros nunca salimos... jeje..."

"¡Tonto!"

Lori lo dejó caer, su teléfono se cayó en el suelo. Se arrastró rápidamente para agarrarlo.

"¡Cariño, me tengo que ir!" Sus pupilas se dilataron por las siguientes palabras de la pequeña voz. "¡Espera, no vengas! ¡Puedo manejar esto! No, espera!" beep.

Lincoln frunció el ceño cuando se dio cuenta de que su novia secreta se acercaba.

"¡LINCOLN!" Se dio vuelta y miró a la cara del miedo. Empezó a correr.

"¡PASÉ TANTO TIEMPO PREPARÁNDOLES UNA CITA  A USTEDES DOS!"

"¡Lori, cálmate!"

Lori lo perseguía a velocidades descomunales por toda la casa. La única ventaja que tenía Lincoln era su pequeña estatura. Se deslizó por debajo de la mesa del comedor y salió por el otro lado. Se las arregló para mantener una distancia adecuada de ella, pero lo estaba cansando. Dobló una esquina y maldijo su físico de nerd. Mirando hacia atrás, Lori también estaba sin aliento, pero no tanto. ¡Ella seguía enojada como el demonio! Lori se detuvo de repente, Lincoln suspiró de alivio pero luego la vio respirar profundamente.

"¡LINCOLN ROMPIÓ CON RONNIE ANNE!"

"¡¿EL QUÉ?!"

La casa Loud se llenó de un estruendoso sonido mientras las puertas se abrían. Las hermanas enojadas estaban en el nivel superior. Todas ellas comenzaron a inundar el primer piso en una estampida de chicas enfurecidas. Los ojos de Lincoln se ensancharon de horror cuando el grupo femenino se acercó.

Bajar, saltar, esquivar Lincoln estaba haciendo todo lo posible por seguir los pasos de supervivencia  en el gimnasio. Los brazos de sus hermanas salieron disparados en todas direcciones. Las uñas arañaron su piel dejando miles de rasguños. Sus pulmones ardían y su corazón estaba a punto de estallar. Una sutil mirada le hizo consciente de la mayor amenaza. Como una roca rodante en un antiguo templo, Lynn se dirigía en línea recta hacia él. Con su destreza atlética de años de entrenamiento, fue derribado al suelo.

Con todo el alboroto no escucharon el timbre de la puerta. Leni, que perseguía a Lincoln, se detuvo y se olvidó de su persecución para saludar al visitante.

"¡Hola, Yo te conozco! ¿Pero de dónde?" La rubia estaba confundida por la repentina aparición de esta persona. "¡Oh, espera! Estamos haciendo algo ahora mismo, ¡no puedes entrar! ¡Chicas, ayudenme! ¡Guau, eres fuerte!"

Lincoln fue rodeado en el suelo con una llave de cabeza. Las piernas de Lynn se envolvían alrededor de su torso así que no había escapatoria aunque le quedara energía. Sus hermanas lo miraban con desprecio. Lori habló desde la multitud.

"¡Muy bien, tonto! Explícame por qué no debería convertirte en un pretzel humano".

"¡Lori, ya te lo he dicho! ¡Soy WHOA!"

Dos brazos se extendieron sacando al chico y a su hermana del grupo. Lynn fue arrojada al grupo donde estaban todas las chicas enojadas. Y el otro trajo a Lincoln en un fuerte abrazo. Las chicas jadeaban.

"Chicas, traté de detenerla pero era muy fuerte". Leni entra explicando. "Por cierto, ¿quién es ella?"

El grupo miró al intruso. Llevaba una chaqueta corta de cuero que se apoyaba en sus hombros. Debajo de ella había una combinación de falda de tubo bronceada y amarilla que acariciaba sus curvas y mostraba su amplio escote. Su calzado consistía en un par de botas negras, hasta el tobillo, de cuero. Las chicas no se dieron cuenta de que habían revisado su cuerpo primero. Sacudiendo sus cabezas, finalmente hicieron contacto visual, excepto Luna que seguía mirando ese cuerpo. En serio, ¡qué par de piernas!

Aunque su mirada estaba actualmente furiosa con ellas, se podía ver que esta mujer era hermosa. Sus ojos marrones estaban marcados por un maquillaje excelente que sólo estaba ahí para embellecer su belleza natural. Había piedras preciosas negras en cada uno de sus lóbulos de su oreja y se veían cuando se ponía el pelo marrón rizado detrás de ellas. Su cabello se mantuvo sujeto por el uso de gafas de sol como cinta para el pelo. Por lo que pudieron ver, si no hubiera tenido algún tipo de descendencia europea, sería esa "chica de los ojos marrones" de la leyenda.

"H-Hola QT... veo que encontraste la casa..." Lincoln se las arregló para hablar después de sacar su cara de los pechos que ella le había metido durante el abrazo.

"¡¿Es Hermosa?!" Sus hermanas gritaron incrédulas.

La mujer sonrió suavemente y acurrucó su mejilla en su pelo blanco pero tomó una postura de poder poco después. Miró a las chicas atónitas y con un enojó giró la cabeza hacia ellas.

¿Qué está pasando... ?