En medio de un sitio lleno de formaciones rocosas, y de un tamaño considerable, se escuchan sonidos, como si hubiera un intercambio de golpes, hasta que...

¡AHHHHHH!

Una mancha amarillo-naranja va cayendo en picada hacia el suelo, sin embargo, a un metro de este, da un par de vueltas y se detiene.

-Uf...Menos mal que...- fue lo que dijo esa mancha, quien resultaba ser Kion.

Este sonreía, hasta que un segundo después miró hacia arriba, notando otra mancha del mismo color dirigiéndose en picada hacia el.

-Ayy...- fue lo que dijo antes de dar un salto rápido hacia atrás, y justo a tiempo, pues cuándo esa mancha impactó en el suelo, aparte de generar una nube de polvo.

Pasaron algunos segundos, en los que el polvo generado se disipó un poco, permitiendo ver una silueta idéntica a Kion, mirándolo a este último.

-¡Vamos Shetani! ¿Qué pasa?- fue la pregunta por parte del felino.

Y entonces, la "silueta" pareció dar un salto en el aire, además de liberar un grito que generó una leve corriente la cuál terminó de disipar lo que quedaba del polvo, dejando ver, al que podría ser el hermano gemelo del felino, si es que tuviera uno claro.

-¿Shetani?- preguntó nuevamente Kion, mientras arqueaba una ceja.

La respuesta que recibió, fue que el mencionado mostró una sonrisa, antes de mover un poco su pata derecha, y en ella aparecía una esfera roja, para arrojarsela luego de unos segundos.

Kion se movió un tanto a la izquierda, haciendo que la esfera pasara de largo y se estrellara contra uno de los muros de roca, generando una pequeña explosión.

-¡Presta atención idiota!- exclamó el segundo felino, acercándose rápidamente a Kion, para luego propinarle un golpe en el pecho, que lo envió a estrellarse de espaldas contra las rocas.

-No estaba listo- dijo el de ojos naranjas, abriendo lentamente sus ojos- Aunque no fue un mal golpe...Bien hecho Shetani...Jeje...

-Cómo sea...¡Ya deja de perder el tiempo y continuemos!- exclamó el mencionado con un rostro que no demostraba demasiada paciencia.

Un tanto lejos de ahí

-¡HUWEZI!- fue lo que dijeron 2 voces femeninas, sin embargo lo único que se podía apreciar era 2 estelas de humo que eran dejadas por un par de chitas hembras.

Estas 2 iban corriendo a una velocidad que superaba a la promedio de su especie, tanto así que si se decidieran a usar el 100%, dejarían en ridículo a cualquiera.

Tanto así, que habían comenzado una carrera contra otro chita, pero a este ya lo habían dejado atrás desde hace rato.

-¿Cuándo Fuli se volvió tan rápida? Azaad está sorprendido- era lo que decía el felino, notando desde lejos el rastro de polvo que esas 2 iban dejando atrás.

Diez minutos después

-Ja...¿No decías que nadie te ganaba a tí chita?- fue la pregunta de una de ellas, cuyos ojos eran de un color rosa.

-Eso solo había pasado con Fuli- señaló el felino, autoidentificado como Azaad, quien disimulaba un tanto la molestia por esa felina con una sonrisa de lado- Pero ahora estás tú.

-¿No te agrada que esté aquí?...Da igual, era evidente después de lo que hicimos- dijo ella antes de alejarse un rato.

-Fuli- dijo el chita acercándose a la otra hembra que aún estaba con el- Se que...Kion dijo que ellos están ahora de su lado...Pero...¿De verdad están seguros...que no los están engañando?

-Ellos nos ayudaron con una situación extrema allá en las Praderas, y ahora, la considero como mi hermana...Antes de ella y de tí, no había tenido la oportunidad de conocer a otros como yo- señaló la chita.

-Bueno...en eso tienes razón...Pero...- eso dijo antes de recordar los momentos que pasaron durante la aparición de ella y su compañero felino en el Árbol de la Vida-...Ellos...

-¿Recuerdas cuándo me preguntaste porque teníamos a de amigos a las hienas? Yo te dije que era porque se ganaron nuestra confianza...Y ahora es lo mismo con ellos...Si...causaron muchos problemas, algunos de ellos probablemente no hubieran tenido solución...Pero ahora están aquí...Y estoy segura de que...aunque no lo demuestren, quieren hallar una forma de redimirse- eso lo dijo mirando fijamente al chita.

Este último se había sorprendido, más que nada por la forma seria, y también la seguridad con las que ella había hablado.

-Uf...De acuerdo...Si tu dices que...ellos...ya no son un problema...Entonces...Azaad te creerá- eso lo dijo el después de unos segundos.

-Gracias- dijo ella con una sonrisa.

-¡Oigan! ¡¿Van a venir o tengo que rogarles?!- exclamó la otra felina, ya a varios metros de dónde estaban ellos.

-¡Ya voy!- exclamó Fuli, antes de ir corriendo directamente a dónde estaba- ¿Lista para otra carrera?

-Siempre lo estoy- fue lo que dijo la chita de ojos rosas, cuyo nombre era Nishati, antes de que ambas miraran hacia el frente- ¡En sus marcas!

-¿Listas?- añadió Fuli agachándose junto a su compañera.

-¡HUWEZI!- así exclamaron ambas, antes de salir corriendo a toda velocidad.

El chita simplemente se quedó mirando el lugar por el que se fueron, para luego simplemente suspirar e ir detrás, no sin antes decir: "Mibinamet"

Con Kion y Shetani

Estos 2 simplemente se iban teletransportando varias veces, hasta que lelgaron a detenerse, quedando frente a frente.

Entonces, Kion se posicionó para pelear, Shetani volteó a verlo con una sonrisa antes de acercarse a el, acertar un par de golpes en su rostro, seguido de uno en el abdomen, y el último que lo dejó de espaldas al suelo.

Sin embargo, el felino se dió la vuelta y pasó su pata por su mejilla, antes de desaparecer de la vista de cualquiera, y el de ojos rojos hizo lo mismo, haciendo que después de algunos segundos ondas de choque empezaran a aparecer por una parte del lugar, hasta que de nuevo se dejaron ver, intercambiando golpes, terminando con la pata de uno en la cara del otro.

Ya unos minutos después, se miraron entre ellos, y se separaron, entonces Kion creó una esfera y se la arrojó, Shetani la esquivó moviendo su cabeza a la izquierda, pero no pudo evadir un par de golpes en su rostro, antes de que Kion lo sujetara del cuello con sus patas, diera un par de vueltas y lo arrojara hacia el suelo.

El de ojos rojos iba a frenar a unos centímetros del suelo, sin embargo, al abrir los ojos, solo pudo ver un par de esferas cerca de el, las cuáles, al impactarlo lo cubrieron con una leve pantalla de humo.

Kion iba descendiendo lentamente, y cuándo el humo se fue, solo pudo ver una marca en el suelo, con grietas alrededor.

-¿Shetani? ¿Estás ahí?- preguntó el felino un tanto dudoso, antes de llegar al suelo- ¿Hola?

Y entonces su respuesta llegó, cuándo algo salió del suelo, levantando algunas pequeñas rocas del suelo, medianas y pequeñas.

-¿Se habrá enojado?- se preguntó Kion a sí mismo, con una sonrisa nerviosa y una pata detrás de su cabeza.

Shetani por el otro lado, emitió un grito mientras un aura roja envolvía su cuerpo, y en su pata aparecía una esfera del mismo color de su aura, aunque esta emitía algo de brillo.

-Ay- fue lo único que dijo Kion, antes de apresurarse y hacer lo mismo, solo que el aura que lo envolvía, y la energía que el concentraba era de un color azul claro.

Y tan solo unos segundos después, ambos lanzaron su respectivo ataque, los cuáles colisionaron entre ellos.

Los 2 felinos se mantenían fijos en su ataque, ninguno estaba dispuesto a retroceder, sin embargo, la presión en medio de los ataques se iba incrementando, hasta disiparlos luego de una explosión, la cuál iluminó el entorno entre ambos.

Treinta minutos después

Ahora ambos leones iban saliendo de ese lugar repleto de rocas e inhabitado, conocido como la Escarpadura Cikha, sin decirse nada o bueno, al menos Kion quería hablar, pero, no se le ocurría de que.

-Oye Shetani...¿Puedo preguntarte algo?- dijo el felino.

-Ya lo hiciste...¿Qué quieres?- fueron las palabras del mencionado.

-Pues...Solo quería saber...- no terminó de hablar cuándo dió un salto para posicionarse frente a su compañero- ¡¿Por qué me golpeaste hace 2 días?!

-Yo no te hice nada...No me molestes- fue lo que dijo Shetani, antes de empujarlo levemente y seguir caminando.

-Espera...¿Tú no lo hiciste?...Pero si estabas detrás mi...- era lo que iba diciendo Kion antes de darse cuenta que el de ojos rojos ya estaba una distancia media de el- ¡Oye! ¡No he terminado!

Así estuvieron ambos, Kion queriendo obtener la respuesta, mientras Shetani solo pretendía ignorarlo, aunque ya estaba a punto de llegar a la mitad de su límite de paciencia.

Y cerca de dónde estaban, 2 leopardos iban caminando, sin hablarse, pero de rato en rato miraban a sus alrededores, hasta percatarse de los 2 leones que iban caminando, e "interactuando".

Las reacciones de ambos leopardos, al ver primero a Kion, el macho mostraba una cara de no mucho agrado, pero lo disimulaba con una sonrisa, mientras que la hembra también sonreía, pero parecía estar un tanto nerviosa.

Tan solo unos segundos después, sus gestos fueron reemplazados por un gesto, que transmitía entre seriedad, sorpresa y nerviosismo.

-¡Vamos, dime!- eran las palabras de Kion para su compañero.

-Si no te callas, te juro que yo te cerraré la boca a golpes- dijo Shetani con una vena pequeña en la parte izquierda de su rostro, antes de darse cuenta de los otros 2 felinos que tenían enfrente a un metro de distancia.

-¿Qué pa...?- era lo que iba a preguntar el de ojos naranjas, dándose cuenta también de la presencia de los leopardos- Hola Makucha, Chuluun.

-Tú...¿P-Por qué? ¿Q-Qué estás haciendo aquí?- fue la pregunta de la leoparda.

-Me recuerdan...- señaló el de ojos rojos.

-Cómo no recordarte...¡ACABARÉ CONTIGO!- exclamó el leopardo corriendo y saltando hacia el león.

Este último mostró una mueca de fastidio, antes de propinarle un golpe al felino, dejándolo de cara contra el suelo.

-Maldi...- era lo que decía el leopardo reincorporándose, solo para ver como Kion se ponía en medio de ellos- ¡Quítate!

-Si...Deja que vuelva a intentarlo- dijo Shetani mostrando una sonrisa del lado.

-Makucha...Cálmate ¿De acuerdo?- preguntó el de ojos naranjas.

El leopardo simplemente lo miró a el, luego a Shetani, y finalmente hizo un sonido con sus dientes, para luego retirarse.

-Jm- fue el sonido que provocó el león, antes de empujar levemente a Kion y también retirarse, pero dirigiéndose a otro lado.

-¡Nos vemos después!- exclamó Kion mirando a su compañero perderse a lo lejos.

-¿Por que el...?- iba a preguntar la leoparda.

-Escucha...Se los explicaremos a tí y al resto después...¿De acuerdo?- dijo el felino estando a unos centímetros de la hembra.

-D-De acuerdo- dijo ella con un ligero sonrojo por el acto, pero simplemente miró a otro lado, esperando que el no se diera cuenta...y asi fue...

(Ustedes a Kion seguramente: Pero qué imbé...)

Pasaron algunos segundos, en los que el silencio reinaba, y para Kion se volvía un tanto incómodo el ambiente...hasta que...

-Oye- dijo al hembra llamando su atención- No...¿Quieres ir por ahí un rato?

-Bueno...iba a estar entrenando...-  iba a responder el felino, mientras arqueaba una ceja- Pero si tu...quieres...Claro...vayamos.

Dicha respuesta le sacó una sonrisa a la felina, antes de moverse, quedando al lado derecho del felino, y así ambos empezaron a caminar.

Unos minutos después

Los 2 ya habían llegado cerca de un bosque pequeño, y durante todo el camino, habían estado hablando, ella más que nada, sobre lo que ha pasado desde que la Guardia se despidiera del Árbol de la Vida hace tiempo.

-Entonces...¿Con la Manada Nocturna ya están...bien?- preguntó el león.

-Así parece, dejaron de vigilarnos, y no nos metemos en algún problema- respondió ellla.

-Menos mal...La verdad...esa vez que dije...que yo mismo los echaría si se negaban a respetar el Ciclo de la Vida...No sé en que estaba pensando...Lo siento- fue lo que dijo mientras encorvaba las orejas.

-Y-Ya no importa...- dijo la leoparda, antes de notar la expresión del felino- Oye...Te ves mejor cuándo sonríes...

-¿Enserio?- preguntó el con una ceja arqueada.

-N-No me hagas caso ¿Ok?- dijo ella dándose la vuelta.

-De...acuerdo- dijo el felino apoyando su pata derecha detrás de su cabeza.

El estaba confundido, y ella nerviosa, hasta que Kion decidió acercarse para ver que le pasaba, y ahora ya que estaban los cerca y de espaldas al resto, no se dieron cuenta que Fuli junto a su "gemela", llamada Nishati, se iban acercando.

-Ja...Tu amigo se rindió ¿No?- fue lo que dijo la chita de ojos rosas.

-Pues lo dejamos demasiado atrás...Y eso no nos agrada a nosotros los chitas- señaló la de ojos verdes.

-En eso tienes razón- fue lo que dijo Nishati, antes de darse cuenta de Kion y la leoparda, los cuáles seguían aparentemente ignorando al resto- Oye ¿Esa no es...?

Fuli la miró un tanto confundida antes de fijar la vista hacia el frente, y darse cuenta de lo que pasaba, haciendo que se quedara quieta.

La otra chita no se dió cuenta hasta 5 segundos después, y al hacerlo, simplemente miró con una sonrisa al león, pues parecía haberse metido en un aprieto.

-Emmm...¿Segura que estás bien?- preguntó el león.

-S-Sí...- dijo la leoparda, ocultando un poco su sonrojo, pero logrando mirarlo fijamente a los ojos.

Ella se estaba perdiendo en esos ojos naranjas, mientras el la miraba con una ceja arqueada, sin embargo, antes de que algo más pasara, alguien se acercó y se posicionó al lado derecho del león.

-¿Fuli?- preguntó el, sin darse cuenta de la seriedad que transmitía la mirada de su compañera.

Y no era la única, pues Chuluun también la miraba de la misma manera.

-Je, ya empieza a sentirse la tensión- fue lo que señaló Nishati riéndose un poco para sus adentros.

-Ehhh ¿Chicas?- se preguntó Kion mentalmente.

-¿Qué pasa...chita?- fue la pregunta de la leoparda forzando una sonrisa de lado.

-Nada- así respondió la felina de la misma manera, sin apartar la vista, como si se tratara de una competencia de miradas.

-Me gustaría quedarme a ver más, pero tengo que irme...¿A dónde habrá ido Shetani?...Mmm...Igual, si intenta esconderse lo encontraré- eso fue lo último que dijo la segunda chita, antes de que un aura rosa envolviera su cuerpo, y saliera volando en una dirección especifica.

Regresando con las otras 2 felinas, estas seguían mirándose fijamente, mientras Kion miraba de un lado a otro, confudido, pero también nervioso.

-Kion...Iré con Anga y los demás...¿Te veo allá?- preguntó la felina de ojos verdes mirándolo a los ojos.

-C-Claro...Ve adelantándote- dijo el con una sonrisa.

-Está bien- eso lo dijo antes de acercarse y darle un beso en la mejilla- Nos vemos...¡HUWEZI!

Una vez ella ya se había alejado lo suficiente, Chuluun cerró los ojos y suspiró antes de mirar al león.

-Yo...también tengo cosas que hacer...Nos vemos más tarde- fue lo que dijo la leoparda mostrando una sonrisa, antes de hacer lo mismo que hizo Fuli antes de pasar a retirarse.

Kion se había quedado ahí, un tanto sorprendido, pero luego parpadeó un par de veces, antes de mirar hacia los lugares por el que se fueron ambas felinas, y preguntarse:

"¿Qué está pasando entre ustedes?"

Hola, soy Kion.

El quedarnos en el Árbol de la Vida un rato no es mala idea, pero nuestra misión es otra.

Y parece que, obtendremos el primer indicio, que nos guiará en nuestro camino, hacia el reino de Felidae.

Esperamos no tener demasiados problemas, pero nunca se sabe, así que tenemos que estar preparados.

El próximo capítulo de TLG: UJII será: Primera Pista, y la Tensión entre Fuli y Chuluun se intensifica...No se lo pierdan.

Ennnn fin...

Y este fue el capítulo del mes, si te gustó por favor dale click al botón de la estrellita cerca de la esquina superior derecha de la pantalla.

Si es primera vez que lees uno de los capítulos, si te gustó, y solo si quieres, sígueme, subo capítulo..."Todos los sábados".

Os pido de verdad a todos ustedes por demorar tanto, pero es que la inspiración se me iba, o me quedaba bloqueado, lo cuál parece que ya es algo normal para mi últimamente...

Pero bueno, esta vez si, los capítulos saldrán todos los sábados, y si es así, puede que la historia dure todo este año, y espero que la disfruten a pesar de la demora.

Sin más que decir, yo me despido, les mando un abrazo psicológico, y nos vemos el próximo sábado.

Cuídense mucho.

Chau, chau.