Continuos y fuertes sonidos como si se trataran de explosiones era lo único que se podía escuchar, hasta que en eso 2 destellos de energía aparecen e impactan entre sí en mitad del aire, y luego de eso 2 leones jóvenes parecieron haber chocado entre sí para después retroceder un par de metros cada uno por su lado en el suelo, tratándose de los "gemelos", Kion y Shetani, quienes se encontraban realizando su habitual entrenamiento matutino.

-¿Qué pasa idiota? ¿Te agotaste tan rápido?- preguntó el de ojos rojos con esa sonrisa un tanto burlona que solía mostrar algunas veces.

-No...para nada...Pero, recién despertamos hace unos minutos ¿Sabes?- fue la respuesta del ojinaranja, quien también sonreía y miraba fijamente a su rival, antes de tomar su impulso y arrojarse en contra de el, acción que fue imitada por su gemelo, comenzando un intercambio de golpes a una velocidad un tanto elevada, a la vez que desaparecían de la vista de cualquiera y simplemente podían apreciarse múltiples ondas de choque en un lugar y después en otro.

Y mientras ellos estaban en eso, a varios metros del lugar, sus respectivas parejas, Fuli, Nishati y Chuluun se encontraban dirigiéndose hacia otra parte, específicamente la chita de ojos rosas quería presentarles a su nueva amiga Usiku, de quien solamente Shetani tenía conocimiento.

-¿Ya hace cuánto tiempo pasó desde que la conoces?- preguntó Fuli yendo literalmente al mismo ritmo que su "gemela".

-Casi ya un mes, fueron solo algunos días luego de que llegáramos a este sitio- esa fue la respuesta por parte de la ojirrosa- Creánme que les va a agradar bastante, es muy hiperactiva, incluso creo que me supera con su actitud y energía...Además tiene una voz muy agradable y sabe cantar.

-¿En serio?- preguntaron las otras 2 mostrando algo de interés por conocer a esta felina, así que por ello continuaron avanzando a paso ligero, hasta que llegaron al supuesto lugar, encontrándose no solo a la leona de melena azul, sino también a alguien que no pretendían hallar, al menos por el día de hoy no...Se trataba de aquel felino de pelaje un tanto rayado y actitud que sobretodo las chitas no encontraban divertido o similar.

-Deberías mantener tu lugar niña, no te metas en asuntos que no te convienen- fueron las palabras de este último dirigidas hacia la peliazul, quien simplemente se mantenía en silencio pero con un rostro serio por la actitud del ojiazul- Así está mejor ¿No lo crees?

-¡Oye tú! ¿No tienes otro lugar para molestar a otros?- fue la pregunta por parte de Nishati en voz alta, mientras se acercaba para llamar la atención de los 2.

-¡Hey, hola Nishati!- exclamó la peliazul con una sonrisa mientras el rayado gruñía y daba unos cuántos pasos al frente para encarar a la de ojos rosas.

-Con lo que uno se encuentra por pura casualidad...Chitas, el animal más rápido según ellos mismos- fueron las palabras del felino sonando con notorio sarcasmo y burla- Pero supongo que su era ya terminó ahora que estoy aquí.

-Si, si, habla cuánto quieras, solo vete y no nos fastidies con tu presencia- señaló la chita con una sonrisa al notar como el felino mostraba los dientes- Oh, perdón ¿Te ofendí acaso?

-Solo hay una manera para cerrarle la boca a presumidas como ustedes- señaló el felino en voz baja mientras su sonrisa confiada volvía a aparecer, y entonces en menos de un segundo pasó al lado de la chita, entonces con una de sus patas sostuvo del cuello a la chita para después estrellarla contra el suelo.

-¡Nishati!- exclamó la peliazul mientras veía como la chita se iba reincoporando lentamente.

-¡Aléjate!- fue la advertencia de Fuli lanzándose contra el felino para propinarle un zarpazo, sin embargo este volvió a desaparecer, y ahora se encontraba subido en una cornisa siendo observado por las 4 féminas- Rayos.

-Vamos, sé que esto no es lo mejor que tienen- señaló el ojiazul mientras se levantaba un poco- Adelante, intente atraparme y verán como salen humilladas de nuevo ¡Jajajajajaja!

Al terminar de hablar saltó de aquella cornisa y se perdió a toda velocidad por el pasaje contrario, siendo perseguido por Fuli junto a Chuluun, mientras Usiku se acercaba a la otra chita para comprobar que estuviera bien, y tras decirle que sí, Nishati también salió corriendo tras el felino, no sin antes decirle a su amiga que si podrían juntarse otro día en el que no habría ningún tipo de interrupciones.

Ahora mismo, tanto la leoparda de las nieves como las 2 chitas perseguían al felino rayado, sin embargo en contra de lo que ellas habían imaginado, los segundos se iban convirtiendo en minutos y todavía no conseguían siquiera pisarle los talones al ojiazul, estando a un metro y medio de distancia exactamente...Además de ello estaba el hecho de que gran parte del territorio que estaban cruzando era en diagonales o en zig zag, por lo que los únicos que podían avanzar sin tanto problema eran Chuluun y el mismo Haraka, mientras que Fuli y Nishati tenían que frenar o bajar la velocidad cada vez que estaban por llegar a aquellas zonas, pero esto hacía que estuvieran cada vez más lejos de alcanzarlo.

Los minutos continuaron avanzando y los 4 felinos de igual manera continuaban con su trayecto sin rumbo fijo, sin embargo el hecho de que Haraka no bajara la velocidad y mucho menos se detuviera hizo que al menos una de las hembras comenzara a pasar por el agotamiento...Chuluun, pues si bien había tratado de probar su resistencia y a pesar que con su velocidad había logrado mantenerse al mismo nivel que las chitas, poco a poco empezó a sentirse agotada, tanto que tuvo que frenar y detenerse para poder recuperarse, dejando solas a las 2 chitas en contra del felino rayado.

-Voy a quedarme con ella, pero te alcanzaré después- fueron las palabras de Fuli mientras continuaba corriendo al lado de su "gemela"- Trata de que pueda sentir tu energía, entonces se me hará más fácil llegar hasta tí.

-Bien, nos veremos ahí entonces- fueron las palabras por parte de la chita de ojos rosas antes de acelerar un poco el paso quedando a un metro atrás del león con rayas- Ahora sin interrupciones, voy a alcanzarte ¡Ya verás!

-En verdad eres obstinada ¿No te lo han dicho?- señaló este último mientras continuaban avanzando a través de los cañones, aunque parecía que en ciertos puntos repetían el mismo camino una y otra vez- ¡Vamos niña! ¿Es todo lo que tienes?

Habían pasado poco más de 20 minutos, y luego de permanecer rodeados por cañones mientras continuaban avanzando a gran velocidad, finalmente llegaron hasta un espacio más abierto, específicamente una llanura en la cuál Nishati creyó que ahora si podría tener una ventaja en lo que continuaba persiguiéndolo, hasta que en ello el felino terminó desapareciendo de su vista en un segundo, por esto mismo la chita entonces tuvo que hacer algo de presión en el suelo para frenar, quedando justamente cerca de una roca.

-¡¿Qué esperas?! ¡Sal y muéstrate!- exclamó ella mientras sus colmillos relucían y miraba hacia todas las direcciones, hasta que en eso recibe un golpe en el costado, el cuál la hizo dar una vuelta en el aire, quedando tendida en el suelo pero podía recomponerse.

-¿No me puedes ver? Eres demasiado lenta entonces- eran las palabras de Haraka, quien nuevamente había desaparecido de vista mientras la chita se había levantado y trataba de encontrarlo- Sin importar cuánto lo intentes, no llegas ni siquiera a ser una molestia.

-¡Ey, estamos aquí!- fue la exclamación de Fuli acompañada por la leoparda de las nieves, quien parecía estar algo recuperada ya- ¡¿En dónde es...?!

Su pregunta fue interrumpida cuándo algo pasó rápidamente por debajo suyo, haciendo que diera una vuelta en el aire así como su gemela, pero esta vez la ojiverde estuvo algo más atenta y logró aterrizar de pie mientras se ponía en alerta.

-Es muy veloz, yo ni siquiera lo puedo ver- eran las palabras de Chuluun hacia ella misma sabiendo que no poseía las mismas habilidades que las chitas, hasta que en ello al girar su vista alcanza a encontrarse con la mirada del ojiazul, pero este no le dió tiempo a responder al terminar por arrastrarla un par de metros y haciendo que se estrellara contra un árbol cercano- Rayos.

-Será mejor que no estorbes, así que quédate ahí- fueron las palabras del felino antes de notar como Fuli se le estaba acercando, entonces salió corriendo siendo perseguido por la chita de ojos verdes- ¡A ver cuánto aguantas tratando de seguirme el paso niña!

Por su parte ella no respondió, y simplemente tenía la vista totalmente fija en su objetivo, a pesar de que este le sacara unos cuántos metros de ventaja, mentiría si dijera que no estaba intrigada y a la vez sorprendida por el hecho de que este felino simplemente corriera a una velocidad muy comparable a la suya y no mostrara señales de cansancio en ningún momento...Sin embargo al ahora esta en un espacio abierto creía tener una chance para al menos distraerlo o acorralarlo pese a que no se lo estaba dejando nada fácil esta simple misión.

Los segundos fueron pasando y volviéndose minutos, ninguno de los 2 parecía querer dar su pata a torcer, por su parte Fuli aumentó la velocidad logrando estar a menos de medio metro del felino, sin embargo este último no retrocedía ni aceleraba, mantenía un ritmo constante en su carrera antes de empezar a cambiar su trayectoria, esto le empezó a complicar la situación a Fuli, pues hasta ahora no había logrado realizar maniobras en zig zag y simplemente tenía la ventaja si se trataba de ir defrente, pero el ojiazul parecía saber perfectamente este y por ello repetía sus acciones una y otra vez...La intensidad aumentó todavía más, Fuli todavía podía seguir a la velocidad en la que estaban, pues debido a los constantes entrenamientos, su resistencia era mucho mayor a lo que sería para un chita ordinario.

Desde la distancia, Nishati y Chuluun podían aprovechar una estela de polvo que iban dejando atrás ambos felinos, esta "carrera" continúo durante algunos minutos más, con Haraka pretendiendo que la chita estaba por alcanzarlo, sin embargo justo entonces iba aún más rápido, viéndose claramente superior en esta situación, mientras Fuli no tenía de otra que hacer lo mismo, pero ya poco a poco sentía que su energía empezaba a disminuir por lo que no podría seguirle el ritmo a menos que este decidiera bajarle a su velocidad, pero el ojiazul no pretendía hacer eso y simplemente continúo "jugando" con la chita, hasta que las señales del cansacio comenzaron a hacerse notorias en ella.

-¿Eso es todo mocosa?- se preguntó el ojiazul viendo de reojo como ya le estaba costando mucho mas seguirle el paso- Aunque voy a decirte algo, si te hubieras rendido desde el principio esto sería aburrido...Menos mal que ustedes son obstinados.

-Sí, y es por eso...que no...pienso...detenerme...aún- fue la respuesta que ella le dió, pese a que ya comenzara a respirar a un ritmo agitado mientras que la situación con el felino era todo lo contrario- Deja de estar...jugando...con...nosotras.

-¿Y por qué debería hacerlo? Esto es muy divertido- señaló el ojiazul con una sonrisa antes de desaparecer de su vista confundiéndola, sin embargo en menos de un segundo fue embestida y arrinconada a una roca, con el felino sosteniéndola del cuello- Será mejor que te rindas, no eres ni capaz de resistir por un rato más...Patética.

-¡A ver tú...resiste esto!- exclamó Nishati tras haberse acercado sigilosamente; y reuniendo su energía lanzó una ráfaga de ataques, los cuáles generaron una mediana explosión al impactar directamente contra su objetivo.

O eso era lo que ella creía, pues solamente se encontró con su gemela, quien al parecer había recbido al menos uno de sus ataques directamente, antes de sentir una fugaz brisa a su lado izquierda, quedándose estática mientras a sus espaldas se encontraba el felino rayado, quien simplemente sonreía y tenía los ojos cerrados.

-Buen intento, pero te hará falta mucho más que solo eso- fue lo que dijo este último con burla hacia la ojirrosa, quien rápidamente se dió la vuelta y trató de atacarlo- Pero bastante más.

La chita mostró los dientes y gruñó antes de lanzar un zarpazo directo a su rostro, sin embargo el de ojos azules desapareció y luego estaba frente a ella a una distancia considerable, entonces ella comenzó a reunir energía nuevamente, sin embargo el de pelaje con rayas simplemente sonrió antes de acercarse en menos de un par de segundos y propinándole un fuerte golpe en su rostro.

-Ghhh...Maldición, y esta vez...no lo perdí de vista- fue lo que dijo para sus adentros la chita, antes de que el felino la sometiera contra el suelo, entonces Fuli reapareció para ayudarla, sin embargo el ojiazul sostuvo a Nishati del cuello para arrojarla hacia su gemela, haciendo que ambas terminaran rodando por el suelo unos segundos.

-Uhhh...¿Enserio este es el límite que tienen?- preguntó Haraka con una ceja arqueada mientras veía como ambas chitas se iban reincorporando, antes de voltear hacia en dónde estaba la leoparda- Qué aburrido.

Una vez dijo eso, y a una velocidad sorprendente, mordió la cola de Chuluun y comenzó a moverse en múltiples direcciones llevándola consigo, hasta que se acercó hasta uno de los muros de roca cercanas, y ahora con su pata sujetó a la leoparda antes de estrellarla con fuerza contra las rocas, dejándola incrustada en ellas.

-Cómo ya había dicho, con lo débil que eres lo mejor es que te apartes y no estorbes- señaló el ojiazul viendo de reojo a la leoparda, antes de que Fuli y Nishati se acercaran a el, entonces en un movimiento rápido atrapó con sus patas el cuello de cada una antes de someterlas contra el suelo- Ya mejor guarden silencio, es irritante oír sus quejas.

Mientras decía eso comenzaba a hacer presión en el cuello de las felinas, causando que estas poco a poco sintieran como si les faltara el aire pero continuaban haciendo un esfuerzo para poder soltarse y tratar de atacarlo, hasta que fueron moviéndose cada vez menos, terminando por caer inconscientes mientras el castaño se apartaba y volteó a verlas por solo unos segundos antes de salir corriendo de esa zona, dejando atrás a las 3 inconscientes felinas.

Mientras tanto

El silencio reinaba desde hace unos minutos, y ahora mismo el león llamado Némesis junto a su compañera Aibu se encontraban dando un pequeño recorrido, luego de haber tenido otra reunión con aquellas misteriosas felinas que habían formado ese trato con el castaño.

Por su parte, la pelirrosa tenía constantes dudas, pues la aparición repentina de las mencionadas y que de la nada lo buscaran para aquel objetivo contra el que ella no estaba de acuerdo...Ella no estaba a favor de la violencia, desde pequeña siempre fue así y luego de notar que su compañero felino tenía ciertos problemas de temperamento y control de la ira, los cuáles al parecer estaban relacionados con ciertos hechos ocurridos en su pasado, tratándose de la muerte de sus padres Jelani y Kapuki.

Dejando esto de lado, últimamente ella tenía bastantes nervios cada vez que estaba junto al león, y esto debido a que ella quería expresar sus sentimientos, teniendo cierto temor sobre lo que el le respondería y sobretodo como sería su relación de ahora en adelante.

-¿Sucede algo?- preguntó el castaño sacándola de sus pensamientos mientras la veía de reojo.

-¿Ah? No, no te preocupes...Solo...pensaba en otras cosas- le respondió la pelirrosa desviando un poco la mirada antes de acercarse a el- O-Oye...yo...quería saber algo.

-Adelante, puedo responderte en caso de que tengas alguna duda- señaló el castaño mientras continuaba avanzando sin prestar mucha atención si es que tenía algo o a alguien cercano en los alrededores.

Hasta que en ello ambos notan como por el mismo pasaje que ellos, pero acercándose porque venía en dirección contraria apareció un felino adulto de pelaje oscuro y melena roja...Este los vió solo un breve instante antes de volver a mirar hacia el frente, como si pretendiera ignorarlos y pasarlos de largo...Aunque justo cuándo pasó al lado, una sensación invadió el cuerpo del felino castaño, quien se mostró sorprendido y se quedó estático unos segundos antes de voltear la cabeza, pero aquel misterioso felino había desaparecido del lugar.

-¿Qué fue eso?- se preguntó en su cabeza mientras parecía algo confundido, sobretodo porque había sentido no solamente la presencia de aquel león de pelaje oscuro, sino también algo más, una clase de poder o energía, y bastante grande- ¿Pero qué...?

-¿Qué pasa?- fue la pregunta de Aibu sacándolo de su confusión, pero este simplemente evadió la pregunta y comenzó a caminar de vuelta, por lo que tuvo que ser un poco ágil para seguirle el paso.

En otra parte

Tras haber permanecido varios minutos solamente enfocados en su entrenamiento, Kion y Shetani quisieron dar una vuelta por los alrededores, y aunque no estaban cansados, no querían extender su preparación por prácticamente horas.

-¿Y qué es lo que deberíamos hacer ahora?- preguntó Kion mientras ambos caminaban cerca de una zona algo concurrida, específicamente aquel lago que habían descubierto recientemente, en dónde gran parte de los habitantes del reino venían para saciar su sed o resfrescarse con un chapuzóon- Digo, apenas y conocemos a los que viven aquí.

-Yo iré a ver a Nishati, dijo que iría a reunirse con su amiga así que podré ubicar en dónde están- señaló el de ojos rojos con esa idea en mente, aunque antes se acercó al lago para beber un poco mientras su compañero imitaba su acción.

...

"De todos los lugares posibles, no esperaba encontrarte de nuevo de esta manera"

Shetani entonces abrió los ojos, mostrándose algo sorprendido por esa voz, antes de darse la vuelta y terminó por encontrarse con aquel felino que apareció durante la batalla en conjunto contra Norus...El león que respondía al nombre de Khan, y poseedor de una energía que era capaz de destruir prácticamente todo lo que tocara.

-¿Qué haces tú aquí?- preguntó el de ojos rojos mientras se agazapaba un poco, mostrando los colmillos y preparado para pelear, sin importar que estuviera siendo observado por la gran cantidad de animales presentes en este sitio.

Por su parte, Khan simplemente lo observó con indiferencia antes de cerrar los ojos por un momento mientras a su mente venían los recuerdos de aquel enfrentamiento que ambos tuvieron en las Lejanías, el cuál concluyó con su derrota tras un intento casi de sacrificio por parte de Shetani, entonces abrió los ojos nuevamente, mostrando que estos en lugar de rojos pasaron a adquirir una tonalidad violeta, mientras su rival gruñía y dejaba ver sus garras.

"No he venido hasta aquí por una vieja disputa...pero tampoco pretendo huir de una lucha...Adelante niño, esta vez no habrá escapatoria..." 

Hola, soy Kion.

Ahora estamos prácticamente rodeados por enemigos, y no podremos huir o sino lastimarán a cualquiera en este lugar.

Esto no puede ponerse peor de lo que ya está...¿O tal vez sí?

El próximo capítulo de TLG: UJII será: Fortaleciendo Lazos, Los Peligros no dejan de Acechar.

No se lo pierdan...

En fin!!!

Y este fue el capitulo de la semana, si te gustó no olvides hacer click al botón de la estrellita de ahí arriba.

Si es primera vez que lees uno de los capítulos, realmente te gustó y solamente si quieres...Sígueme, subo capítulo...cada vez que puedo.

Daré una pequeña aclaración y es que desde la próxima semana empezaré mis clases en la universidad tras haber ingresado, así que ese será el motivo del porque tal vez las actualizaciones sean mucho más lentas de lo que ya son...Pido perdón por ello.

Aún así agradezco el apoyo que sigue teniendo la historia, y me gustaría que la difundieran un poco para atraer a nueva gente que le guste este tipo de contenido...Lo agradecería un montón la verdad.

Sin más que decir, yo me despido, les mando un abrazo psicológico y nos vemos...hasta la próxima.

Los quiero a todos, cuídense mucho.

Chau, chau.