Capítulo 3: La Despedida
Ha pasado un día desde la advertencia de Rafiki, y la confusión permanece en las mentes de Kion y de sus compañeros.
Y más que confusión, la preocupación está presentes en la Familia Real, especialmente Kiara, pues, el viaje hacia el Árbol de la Vida fue una cosa, pero ahora...el destino al que tendrían que ir estaría mucho más lejos...Y el pensamiento de que a su hermano le podría pasara algo no la dejaba tranquila, al igual que a la reina Nala, y no mucho menos al rey Simba.
Ahora mismo
Cerca de un abrevadero, se encuentra el líder de la Guardia del León, mirando su reflejo con una mirada aparentemente tranquila, mientras que en su interior no es la misma situación.
En eso, alguien se le acerca.
-Ey...¿Estás bien?- preguntó una voz femenina, perteneciente a ese alguien que llegó.
Y tras girar su vista a la izquierda, se encontró con su compañera, de ojos verde esmeralda.
-Sí...Solo un tanto confundido- respondió el felino antes de volver a mirar su reflejo.
-Yo igual, no dejo de pensar en lo que pasó...se sintió más real que una simple visión- señaló la felina antes de sentarse a su lado.
-Dímelo a mí...ese golpe se sintió demasiado real- añadió el león recordando a esa enorme silueta de ojos marrones y luego blancos.
-Oye...¿No te preguntas quienes fueron esos que vimos?- preguntó la chita.
-La verdad sí...especialmente ese que me atacó- respondió el, antes de que ambos se quedaran callados por unos segundos- ¿Qué piensas sobre el viaje que tenemos que hacer?
-No sabría decirte, más que nada por el hecho de no saber porque lo hacemos exactamente- respondió ella.
-Yo estoy igual, pero Rafiki que la razón es para evitar algo que podría llevar a una gran devastación- dijo Kion nuevamente recordando la imagen de ese felino de ojos blancos- Si es así, y la vida de todos, incluyendo de los Forasteros está en riesgo, entonces no me quedaré aquí sentado...Iré.
Un segundos después, sintió algo apoyarse en su pata, y se trataba de su compañera, quien en un principio solo lo miraba, antes de esbozar una sonrisa y una mirada determinadas.
El correspondió al gesto, antes de que escucharan a alguien detrás de ellos, encontrándose con el felino de ojos rojos y su compañera.
-Ni piensen que serán los únicos que se irán de aquí- fue lo que dijo Shetani.
-Yo me apunto, será interesante saber si ese lugar tendrá secretos o algo así- añadió Nishati.
-Y sobretodo, saber si tienen a alguien fuerte con ellos- dijo Kion con una sonrisa- Si tendrá habilidades secretas o algún truco con el.
-No importa quien sea...mientras no sea alguien débil como tú me conformaré- dijo Shetani.
-Oye...Yo no soy débil- dijo Kion un tanto ofendido.
-¡Entonces pruébalo!- exclamó Shetani, antes de que un aura roja lo envolviera.
-¡Lo voy a hacer!- exclamó el felino de ojos naranjas, mientras un aura blanca aparecía y lo envolvía.
Y entonces, ambos desaparecieron de la vista de sus compañeras, antes de que varias ondas de choque empezaran a aparecer en el aire.
-Uf...No tienen remedio- dijo la chita de ojos rosas suspirando.
Unas horas más tarde
Ahora, los 4 felinos se encontraban en su rutina diaria de entrenamiento, aunque el de los leones era más intenso.
Kion se encontraba bloqueando los ataques de Shetani, hasta que este último le acertó un cabezazo, seguido de un golpe que lo envió hacia abajo.
A varios metros, Kion logró detener su caída, antes de mirar rápidamente hacia arriba, y empezar a movilizarse hacia adelante, atrás, derecha e izquierda, evitando varios destellos de energía, que impactaban en el suelo generando pequeñas explosiones.
Mientras tanto, con sus 2 compañeras, una de ellas perseguía a la otra con ráfagas de energía, hasta que la otra respondió, y también empezó a atacar de esa manera, generando unas cuántas explosiones en el aire.
-¡AHHHHH!- exclamaba Shetani mientras seguía enviándole ataques a Kion con ráfagas de energía, pero este las esquivaba sin hacer mucho esfuerzo.
-¿Eso es todo lo que tienes Shetani?- preguntó Kion con una leve sonrisa.
-¡Vuelve a decir eso y me aseguraré de barrer el suelo contigo!- exclamó el felino antes de salir disparado hacia su rival.
-Esto es lo que quería- se dijo Kion para sus adentros antes de imitar la acción del otro felino.
-¿De verdad tratas de seguirme el paso?- preguntaba Nishati moviéndose a la derecha- Porque no se nota.
-Aún no estás viendo lo mejor de mí- respondió Fuli mirándola fijamente a los ojos.
-¡Entonces, muéstrame de lo que estás hecha!- exclamó la chita de ojos rosas, antes de abalanzarse hacia ella, terminando ambas chocando frente con frente.
-Eso era lo que iba a hacer- decía la felina de ojos verdes tratando de ejercer presión sobre su compañera y rival.
Treinta minutos después
Ahora, los 4 felinos yacen en el suelo, los 4 mirándose entre ellos fijamente, mientras inhalan y exhalan.
Entonces, los 4 cierran lentamente los ojos, antes de volver a abrirlos, y decir: "Ahora"
Y en menos de un segundo, los 4 desaparecen de vista, solo para que un segundo después múltiples ondas de choque aparecieran por los alrededores, dando a entender que se trataba de ellos, realizando movimientos a una velocidad incluso superior a la normal de un chita.
Hasta que vuelven a aparecer en el aire, esta vez, los leones entablan un combate contra las chitas.
Kion intercambia ataques con Nishati, antes de enviarla de un cabezazo al suelo, y luego va detrás de ella.
La chita da una vuelta en el aire, aterrizando de pie, para luego saltar hacia atrás, mientras Kion aparece en el lugar en el que ella cayó.
-¡Toma!- exclamó ella, antes de cargar energía en su pata derecha y arrojársela, generando una explosión mediana.
Mientras tanto, persiguiendo a Fuli desde el aire, estaba Shetani lanzando ataques de energía desde su pata izquierda.
Pero, a diferencia de antes, y gracias a la ayuda de Kion, ahora ella podía moverse a los lados incluso llevando una velocidad considerable, así ya no teniendo problemas debido a que los chitas solo podían correr en línea recta.
-Podrás correr, pero no me perderás haciendo eso- fue lo que dijo el felino, antes de abalanzarse hacia ella, pero cuándo iba a dar un golpe, ella desapareció.
-¿Aún lo crees?- preguntó la felina apareciendo desde la derecha y embistiéndolo.
Pero el se la quitó de encima, antes de dar una vuelta y elevarse en el aire, siendo seguido por ella.
En el otro enfrentamiento, luego de una lucha de fuerzas, Kion y Nishati se alejaron uno del otro, antes de que la felina lanzara un ataque de energía hacia el león, y este último hizo lo mismo, generando una pequeña explosión cuándo estos chocaron entre ellos.
Sin embargo, la nube de humo que se formó, se disipó cuándo estos se lanzaron el uno contra el otro, y Kion ahora solo se limitaba a bloquear los ataques de la chita.
-Jeje ¿Esto te trae recuerdos?- preguntó ella con una sonrisa, pero sin dejar de atacar.
-Sí...Dieron una buena pelea allá en el Árbol de la Vida...La verdad ni yo me la creí cuándo los derroté- decía el león con una sonrisa sin dejar de estar atento a los movimientos de la felina.
-Y es por eso que no tienes que confiarte- dijo ella, lanzando un golpe directo al rostro del león, este último se movió a la izquierda, reunió alfo de fuerza, y de un cabezazo envió hacia atrás a su contrincante, antes de aparecer nuevamente junto a ella, y darle un golpe, haciéndola chocar contra el suelo.
-Tú tampoco- dijo el felino antes de ofrecerle su pata y ayudarla a levantarse.
Tras oír unos cuántos gruñidos y ligeros gritos miraron hacia un lado, viendo como Shetani lanzaba golpe tras golpe, pero Fuli lo evitaba sin problemas.
-¡Ahora sí!- exclamó el felino, antes de retraer su pata derecha y lanzar un golpe con ella, pero la chita lo evitó, antes de darle un cabezazo en el mentón, y luego darse la vuelta, para asestarle un golpe con sus patas traseras, que lo hizo retroceder unos metros.
-¡WOOOHHH! ¡Ese es el poder de las chicas!- exclamó Nishati acercándose en un destello y posicionándose al lado izquierdo de Fuli.
-Te veías muy confiado- dijo Kion acercándose al felino de ojos rojos.
-Cállate- fue lo que dijo Shetani antes de mirar hacia Fuli, y esbozar una sonrisa- Nada mal chita, pero ¿Quién dice que estás lista para el segundo asalto?
-Tú solo dilo y te venceré- respondió Fuli con una sonrisa.
-¿Nishati?- preguntó Kion también con una sonrisa.
-Cuándo quieras- respondió la mencionada de igual manera que su compañera.
Y entonces, los 4 volvieron a lanzarse uno contra el otro, para reanudar el enfrentamiento.
En la noche
Ahora, dentro de la cueva de la Guardia, los 4 felinos se encontraban ahí, Nishati recostada sobre una roca, con Shetani sentado cerca, mientras Kion y Fuli estaban sentados juntos.
-Entonces ¿Mañana nos vamos?- preguntó la chita de ojos rosas.
-Sí, eso fue lo que dijo Rafiki- respondió la otra felina.
-¿Por qué no solo nos dice que pasa y acabamos con esto de una vez?- preguntó Shetani con una mueca de fastidio.
-Así es el- respondió Kion como si fuera lo normal, antes de recostarse- ¿Saben? Nada fue mejor hoy que estar descansando luego de un par de horas de entrenamiento.
-Sí...Ustedes no nos la dejaron fácil- dijo Nishati alzando la cabeza.
-Lo mismo decimos nosotros- señaló Fuli con una ceja levemente arqueada.
-Es cier...- era lo que iba a decir Kion, pero un bostezo salió de su boca- Bueno, todavía no es tan tarde, pero ya quiero dormir...Buenas noches.
-Buenas noches- fue lo que dijo Fuli, antes de acostarse junto a el.
Shetani simplemente mostró una mueca de fastidio, y luego acostarse, pero mirando al otro lado.
Aunque no pasaron ni 10 segundos, antes de que Nishati se levantara, se acercara y acurrucara junto a el, para poder dormir bien según ella.
Al día siguiente
Faltaba una hora para el mediodía, pero ya fuera de la Roca del Rey, se encontraban reunidos la Familia Real, la Guardia del León, Shetani y Nishati, y por último Rafiki.
-Te estaremos esperando hermanito- decía Kiara dándole un abrazo al león.
-Gracias Kiara, y tranquila, una vez terminemos con todo esto regresaremos- fue lo que dijo Kion con una sonrisa.
-¿Saben regresar?- preguntó la reina Nala.
-Mientras tengamos al más inteligente y al de la vista más aguda con nosotros, sabremos como ir y venir- respondió Fuli señalando con la mirada a sus 2 compañeros alados.
-Fuli- fue lo que dijo el rey león acercándose a ella- ¿Podemos hablar un rato a solas?
-Emmm...Claro majestad- dijo ella antes de alejarse un par de metros con el rey- ¿Y que quería decirme?
-Primero que todo, no sé si te moleste lo que diré en un principio...te pido perdón de antemano- dijo el rey antes de suspirar- Hace un mes que me enteré de la relación que tienes con mi hijo...Y...en ese momento, solo estaba confundido y no sabía si aceptarte o no...más que nada por ser ambos de una especie distinta.
-Oh...ya veo- decía la chita bajando un poco la mirada.
-Pero...desde entonces he visto lo tanto que te importa y que tu le importas, el te quiere de verdad, tú también...Y por eso...solo quería decir, que les deseo lo mejor a ambos...Espero que sean muy felices- era lo siguiente que dijo el rey, con una sonrisa.
-G-Gracias majestad- fue lo que dijo Fuli, igualmente con una sonrisa, conteniendo la alegría que sentía en ese momento.
-Mejor volvemos con los demás, vaya a ser que empiecen a sospechar algo- dijo el rey, antes de volver junto a su esposa.
-Ey- dijo Kion llamando la atención de su compañera- ¿Qué te dijo mi papá?
La respuesta la recibió unos segundos después, cuándo ella le dió un beso en los labios, dejándolo con las mejillas rojas, sorprendido, pero también un poco confundido, hasta que se separó.
-E-Ehhh- era lo único que podía decir.
-Te lo cuento en otro momento- fue lo que dijo ella, guiñándole un ojo antes de ir con el resto de su equipo.
-Brrrrrr...- fue lo que dijo el felino sacudiendo su cabeza antes de acercarse al grupo- Bueno, ya nos tenemos que ir.
-Un momento- dijo Rafiki llamando la atención de todos- Quizás Vitani deba ir con ustedes.
-¿Qué?- preguntó la mencionada.
-Rafiki ¿De qué hablas?- preguntó Kion.
-Es solo una corazonada...pero tampoco es que la vaya a obligar- respondió el mandril.
-Vitani ¿Tu qué dices?- preguntó el león de ojos naranjas.
-Y más vale que elijas rápido, no tenemos todo el día- dijo Shetani con insistencia.
-Yo- fue lo que dijo la leona de ojos azul-grisáceos.
-¿Vitani?- fue lo que preguntó Kovu acercándose a su hermana.
La leona lo miró a los ojos, y luego miró al resto que estaban ahí, solo para que un segundo después suspirara.
-Está bien...iré con ellos- dijo ella.
-De acuerdo- dijo Kion, aún confundido por lo que dijo el mandril, de que el hecho de que Vitani los acompañara, solo era una corazonada.
-¿Y ya nos vamos o qué?- preguntó el león de ojos rojos.
-Cálmate, yo también estoy impaciente, pero al menos lo disimulo- le dijo Nishati haciendo que este muestre una leve mueca de fastidio.
-Les deseamos buen viaje a todos- dijo el rey Simba.
-Gracias papá, y no se preocupen, regresaremos en una pieza- dijo Kion con una sonrisa tranquila.
-Miren, los habitantes de las Praderas les quieren desear buen viaje como la otra vez- fue lo que dijo Rafiki haciendo que todos se dieran la vuelta, mirando a los animales que estaban ahí reunidos, dejando un espacio en medio para que el grupo pueda retirarse sin complicaciones.
Entonces, Kion dió un par de pasos adelante, antes de suspirar, sonreír y mirar a sus acompañantes.
-Bien chicos, vámonos ya- fue lo que dijo antes de empezar a avanzar, y el resto solo lo seguía.
Durante el trayecto, y así como la vez anterior, algunos de los habitantes de las Praderas se despedían de un miembro de la Guardia específicamente, a excepción de Shetani y Nishati.
Kion iba adelante junto a Fuli y Vitani, mientras el resto estaban a medio metro detrás de ellos.
-Apuren el paso ¿Quieren?- dijo Shetani antes de acelerar un poco el paso.
-¡Oye! ¡Espéranos!- exclamó Kion para luego salir corriendo detrás del león, y el resto también aceleraba el paso.
Una vez ya estaban a una distancia considerable, Rafiki miró el camino por el que se habían ido, antes de que una imagen apareciera en su mente.
"Me pregunto si ella lo reconocerá cuándo estén frente a frente...ha pasado ya mucho tiempo desde lo que pasó"
Hola, soy Kion.
Ya comenzamos con nuestro recorrido, y parece que durará incluso más que nuestro viaje al Árbol de la Vida.
Hablando de eso, me pregunto si habrá pasado algo nuevo por allá.
El próximo capítulo de TLG: UJII será: El Trayecto Comienza, y Cruzando a través de las Montañas.
No se lo pierdan...
Ennnnn fin...
Y este fue el capítulo de la semana, si te gustó por favor hazle click al botón de la estrellita cerca de la esquina superior derecha de la pantalla.
Si es primera vez que lees uno de los capítulos, si te gustó, y solo si quieres, sígueme, subo capítulo...todos los viernes.
Ya sé que este y el anterior se han tardado un poco, pero para que no vuelva a ocurrir, trataré de tenerlos listos durante el fin de semana, siempre y cuándo no me surgan inconvenientes.
Sin más que decir, aquí yo me despido, les mando un abrazo psicológico y nos vemos...en el próximo capítulo.
Cuídense mucho.
Chau, chau.
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