Tae iba de camino a casa de su mejor amigo, trataba de entretenerse en cualquier cosa para evitar pensar en lo difícil que fue su conversación con Namjoon, a la hora de ir a dormir, el más alto lo abrazo durante toda la noche, lo escucho llorar lo más bajito que podía y quiso, por un momento, un minúsculo momento, que JK no hubiera aparecido.

Todo con Namjoon ahora le sabia a despedida y le dolía, le dolía realmente porque el moreno habia estado con él por mucho tiempo, habia sido su soporte, su amigo, su amante, su todo.

Y las cosas no fueron realmente comodas en la veterinaria, para nadie paso desapercibido que ahora llevará un pequeño al hombro, todos preguntaba curiosos sobre él y JK no dudaba en hablar y hacerse notar.

Lo realmente bueno fue que, con la presencia de JK , los animalitos se mantenian más en calma durante las revisiones y cuando debía hacerse una curación o aplicar una inyección. JK hacia que todos se sintieran tranquilos y felices a su alrededor.

Suspiro cansado cuando estaciono frente al hogar de su mejor amigo, recién ahí se dio cuenta de que la pequeña criatura dormía acurrucado a un lado suyo. Lo tomo con mucho cuidado y lo acomodo en el bolso central de su sudadera, hizo todos sus movimientos con sumo cuidado de no despertarlo pero tratando de ser rápido.

— ¡Tae! — la voz emocionada de su mejor amigo le hizo sonreír.

YoonGi tenía su misma edad, pero se veía tan joven con esa sonrisa en sus labios que difícilmente había desaparecido en los últimos ocho años. Se veía tan feliz.

— Que bueno verte, Yoonie — saludo Tae abrazando al pelinegro.

Ambos ingresaron a la gran casa que el joven poseía y se situaron en la sala mientras una chica de servicio iba a preparar café y galletas para ellos.

— Tenía mucho tiempo que no venías a verme — reprochó el pelinegro con un puchero en los labios.

— He estado muy ocupado, Yoonie.

— Lo sé, pero te he extrañado.

— También yo a ti. ¿Cómo has estado?

— Bien, un poco ocupado con lo de la fiesta de aniversario, pero todo bien. ¿Vendrás?

— Por supuesto, no me la perdería.

— Me alegro, estaba tentado en decirle a Jin a que obligará a Namjoon a arrastrarte hasta aquí.

La sonrisa del rubio decayó un poco y su amigo lo noto.

— No sera necesario, si vendré.

Tae recorrió la habitación con la mirada, no le extraño ver aquel casi altar que el mayor habia colocado al centro de la habitación. En el había una camara fotográfica profesional, una foto de un paisaje con la cabeza de alguien asomandose por casualidad, un certificado de matrimonio y una foto de bodas, estos últimos enmarcados.

— Veo que Jin se ha tomado muy enserio lo de atesorar su unión — YoonGi poso su vista en el aquel rincón y sonrió.

— Jin agradece nuestra unión, te juro que no deja que nadie toque nada de ahí, incluso me compro otra cámara y rebusco hasta que encontró el rollo de donde venía la foto donde lo encontre por primera vez, ni que decir de las hojas donde nuestros nombres aparecieron juntos por primera vez, y eso que se trata de una lista de asistencia de clases — YoonGi sonreía en grande.

Amaba a su esposo, su unión fue increíble. Sus Tiny's aparecieron juntos, justo el día de inicio de clases en la Universidad, el mayor era profesor de contabilidad y YoonGi su alumno, apenas había cruzado la puerta del salón cuando el resplandor alerto a todos los presentes del nacimiento de los pequeños, fue extraño y mágico. Los pequeños Suga y Jinnie corrieron apenas se pusieron de pie. Ambos se encontraron a mitad de camino y se abrazaron mientras reían emocionados. Para él resto también fue emocionante darse cuenta que el amor y las criaturas no tenían un límite ni condición. Poco después encontraron una fotografía que YoonGi había tomado de un paisaje, fue una toma casual en la que parecía Jin meses atrás, dando inicio a su camino como destinados.

Desde entonces, Seokjin y YoonGi apenas si se habian separado un poco.

— Me alegro mucho.

— ¿Sucede algo? Te noto extraño. No esperaba tu llamada para avisarme que vendrías.

— Ha pasado algo, por eso he venido a hablar contigo.

Tae no pudo continuar porque se escucho revuelo a un lado de la habitación, junto a las puertas de cristal que daban al gran jardin trasero. Un par de pequeños Tiny's aparecieron montando un pequeño auto de juguete donde se transportaban, la pareja había decidido darles algo con lo que movilizarse, los pequeños también debían tener su espacio y sus momentos juntos.

— ¡Hay un Tiny aquí! — grito el pequeño Suga cuando llego hasta los pies de YoonGi.

— ¿Qué?

— ¡Que hay un Tiny aquí! ¡Podemos sentirlo! — Grito Jinnie escalando junto al otro pequeño hasta acomodarse sobre las piernas de YoonGi.

El pelinegro, confundido, miro a su mejor amigo mientras este de sonrojaba ante lo dicho.

— Ayer por la noche apareció un Tiny en mi cama — explicó.

— ¿Y donde esta él?

Tae señaló el bolso de su sudadera y YoonGi tomo a sus pequeños para acercarse y mirar. La pequeña criatura de su amigo dormia acurrucado dentro de aquel sintió, fue hermoso verlo, pero YoonGi se tenso un poco al ver detalles de su físico más no dijo nada.

— No deberías dejar que duerma así. Cuando Jinnie llegó conmigo, bueno Suga también estuvo a mi lado por lo que acondicione el estuche de mi cámara como una pequeña habitación móvil para ambos.

— ¿Debería acondicionar una de esas maletas donde transportan cachorros?

YoonGi miro al pequeño una vez más y sonrió de lado, se separó un poco de su amigo y llamo a la chica de servicio. Le dio una indicaciones y tomó lugar, ahora a lado de su mejor amigo.

— Descuida, te dare el estuche de J&J, ellos ya no la ocupan por lo que no habrá problema.

— Gracias, amigo.

— No es nada. Dime, ¿como lo ha tomado Namjoon?

— No tan bien, claro que dice que lo entiende, que él podrá y sabra respetar el destino pero se que le hiere.

— Imagino eso pero no se puede hacer nada, el destino ya ha marcado el camino.

— Pero no quiero herirlo YoonGi.

— No puedes hacer otra cosa, no es intencional lastimarlo.

— Lo se, por eso he venido a hablar contigo. Tu puedes ayudarme.

— ¿En que puedo ayudarte?

— Has estudiado a los Tiny's, tu debes saber una forma de que esto no nos afecte. Digo, podrías quedarte con JK y yo podria irme lejos para evitar el encuentro con mi destinado, no quisiera dejar a JK, pero se que para Namjoon sera difícil verlo...

— No puedes hacer eso, los Tiny's nacen del amor, ellos viviran mientras el amor también lo haga.

— ¿Como se supone que puedo amar a alguien que ni siquiera conozco? Creo que eso de que nacen del amor significa que nacen del amor que tengo en mi interior no del amor hacia otra persona...

— No sabría explicartelo Tae, sólo de que tu pequeño nació porque tu destinado esta cerca y ha llegado el momento de unirse.

— No puedo unirme a él.... 

— ¡ERES UN HUMANO CRUEL Y DESPIADADO! — grito el pequeño Suga comenzando a golpear una de las manos de Tae. Los golpes no eran fuertes pero, al ser constantes, causaban dolor el la zona. Jinnie tomó a tu compañero y fulmino al humano con la mirada mientras el pequeño de bandana lloraba desconsolado.

— No soy cruel, sólo no quiero que mi esposo sufra.

— ¡LO ERES! ¡ERES UN HUMANO MALO! — ahora el grito venia de Jinnie.

— ¿Sabes lo que sucederá si te alejas de tu Tiny? ¿Si no te unes a tu destinado? — cuestionó YoonGi con evidente cautela, dudaba que su amigo estuviera enterado, de ser así, él también diria que era cruel por tomar esa decisión.

— Pasara algo muy feo, algo mucho muy feo, tan feo que no es bonito — respondió JK tallandose sus ojos, al fin despierto gracias al alboroto de los otros pequeños.

— Es lo que JK dice cuando le pregunto al respecto pero no se que significa.

Tae recibió al pequeño en sus manos y lo acomodo en su pecho, JK se acurruco en silencio mientras algunas lágrimas discretas bañaban su pequeño pálido rostro.

YoonGi se sintió mal al ser el portador de la información, sabía que era tema difícil para los Tiny's no consumados por lo que JK no habia dicho nada pero él lo sabía de experiencia familiar y por sus pequeños, debia alertar a su mejor amigo.

— Si tu te alejas de tu destinado, JK ira apagandose, perderá su energía, su fuerza y su vitalidad. Poco a poco dejará de moverse hasta morir, no pasara mucho tiempo hasta que a ti te pase lo mismo.

— ¡Eso no puede ser posible!

— Lo es y créeme cuando JK dice que el algo tan feo que no es bonito, lo dice de verdad.

— ¿Cómo lo sabes?

El semblante de YoonGi cambio a uno triste. El recuerdo le dolía, más porque nadie sabía realmente aquello. Sólo su hermano y su esposo.

— Mis padres murieron por ello. Sus Tiny's llegaron cuando mi hermano y yo ya estábamos con ellos, mamá y su destinado se negaron a unirse por respeto a mi padre y ambos murieron. Un par de años después llegó el Tiny de mi padre, fue cuando contrato a una asistente. Él decidió alejarse de la chica sin permitirle saber nada todo por respeto a la memoria de mamá, poco después murió al igual que ella. Vi como la vida de ellos de marchitaba y se desvanecia ante mis ojos, pero nadie podía hacer nada. Ellos no sólo son el amor de nuestto interior, son nuestra vida, de nosotros depende seguir vivos, por eso debemos unirnos a nuestros destinados.

— Eso es muy cruel — a ese momento Tae lloraba sin disimulo — Estoy casado, tal vez mi destinado también lo este y tenga una familia, será muy cruel alejar a nuestras parejas por alguien que ni siquiera conocemos.

— Lo es, pero es más cruel morir ante los ojos de quienes te aman. 

『 ♡ 』

En otra parte de la cuidad un auto transportaba a JungKook, este permanecía en silencio sin saber como despedirse de aquellos que amaba.

— Deberías dejar que el pequeño salga, tenerlo dentro de una mochila le hará daño — hablo Seokjin mientras se detenían en un semáforo. Había notado el movimiento inquieto de una pequeña maleta de su cuñado y no tardó en atar cabos.

JungKook hizo caso a la recomendación de su cuñado y el pequeño V salió a toda prisa de la pequeña maleta que lo portaba apenas se abrió.

— Gracias hombre hermoso, Kookie es una bestia desconsiderada.

— Hola pequeño, mi nombre es Jin.

— Hola Jin, yo soy V.

El pequeño le regaló una sonrisa rectangular al humano y este no pudo evitar relacionarla con alguien más.

— ¿Desde hace cuánto esta contigo? — pregunto el mayor a su cuñado, JungKook miraba fascinado a la criatura, aunque habia dolor en su mirar.

— Desde anoche, apareció mientras estaba en el avión — JungKook no queria admitirlo pero se sintio feliz y emocionado cuando el pequeño apareció, aunque supiera el dolor que al final los mataría.

— ¿Porque no se lo dijiste a YoonGi?

— Porque he tomado una decisión, no quiero hacerlo sufrir.

JungKook habia decidido alojarse en un hotel antes de ver a su hermano, necesitaba tiempo para asimilar que su muerte estaba cerca.

— No se cuál sea tu decisión aunque me doy una idea. Pero debes saber no puedes decirdir por ti mismo, tienes hablar con tu destinado antes de cualquier otra cosa.

— No lo hare, por eso me mantendré encerrado, no podre conocer a nadie mientras este encerrado, así todo sera menos difícil.

Seokjin no dijo nada, no era difícil sumar dos más dos, ahora entendía la llamada de su amigo y su pedido de ir a beber esa noche.

JungKook podría haber decidido encerrarse y no conocer a nadie, pero el destino tenia formas muy divertidas de hacer cumplir sus designios.

Estaba aparcando a fuera de su casa cuando vio aquel otro auto, JungKook no lo sabía, pero el destino se había burlado de él apenas subió a su auto.