Capítulo Once: Perdón.

Dylan, Dylan, ¿dónde mierda estás?

—agh lo odio— dije refiriéndome a Dylan, estaba hablando con Cam, este chico me entiende tanto.

—agh la odio— dijo Cam.

—¡ni siquiera sé cuál es su problema!— exclamé bufando.

—se puso brava sin ninguna razón—dijo él.

—¿me estás escuchando?— pregunté sabiendo que hace más de media hora hemos estado "hablando" él no me escucha y yo no lo escucho.

—por supuesto que no— aclaró bromeando— ¿qué me decías?

—Dylan se puso bravo conmigo porque le dije que no se preocupe por mí, pero agh quiero disculparme con él, soy una tonta y él está desaparecido— le conté suspirando.

—es Dylan, dale tiempo, sólo búscalo y hablen— murmuró aconsejándome.

—claro, pero ¿qué te pasa a ti?— pregunté siendo directa.

—Melissa, cuando te fuiste llorando, ella trató mal a una chica y sé que no es de mi incumbencia pero me pareció que se sobrepasó un poco y le dije que no fuera tan grosera con ella, pero ella me ignora y se aleja de mí cada vez que quiero hablarle— me explicó Cameron sin titubeos.

—¿defendiste a Amanda? ¿Por qué?— pregunté ofendida, claro que entendía a Lissa es obvio que Cam se equivocó.

—pues en mi defensa, echarle el licuado, especificando que era MI licuado encima me pareció un poco pasado de la raya— se excusó moviendo las manos exageradamente.

—está bien, las personas se equivocan, sólo tienen que hablar, su relación es increíblemente especial y no es bueno que se eche a perder por culpa de Amanda McZorra que esa sólo destruye vidas y relaciones— le aconsejé en voz un tanto alta. Luego vi pasar corriendo a Amanda llorando, mierda— ya vengo Cam, tengo que hablar con alguien, ¿si ves a Dylan me avisas?

—está en la terraza del colegio— me indicó yéndose de allí, ¿teníamos terraza en el colegio?

Tenía dos opciones, ir donde Amanda o ir dónde estaba Dylan. Saqué una moneda, cara era Dylan y cruz era Amanda, era lo correcto, dejarlo a la suerte era lo mejor; lancé la moneda dió un par de vueltas y luego aterrizó en mi mano y fue cara, iría a donde estaba Dylan.

—hey tú ¿dónde queda la terraza?—le pregunté a un chico muy guapo que pasaba por allí.

—sube las escaleras del tercer piso y ya— contestó obvio, ¿teníamos tercer piso?

—gracias, ¿tú nombre es...?— custioné esperando su respuesta.

—Jordan bla bla— oh, el lindo chico se llama Jordan.

—Jordan, lindo nombre, soy Kassie— le dije tendiendo mi mano derecha y él la estrechó para luego decir un "nos vemos luego" él es muy lindo.

Subí al tercer piso y habían tres puertas entre a la primera de ellas y era una biblioteca, toda mi juventud estudiando en la misma preparatoria y hasta ahora me entero que tenemos biblioteca; le pedí orientación a la bibliotecaria y ella me indicó cómo llegar a la terraza, resulta que estaba al lado de la segunda puerta a la derecha y no la primera porque esa era la de la biblioteca. Subí las pocas escaleras que me separaban de Dylan.

—hola— lo saludé cuando vi a Dylan contra las barandillas de la terraza. Él quería evitarme, e intentó alejarse de mí cuando me acerqué lo suficiente.

—¿qué quieres? Déjame sólo— pidió brusco.

—¡White!— grité mientras me le lanzaba encima, pecho con pecho, nariz con nariz, estábamos a centímetros de distancia.

—Dylan, por favor, no te alejes de mí, tenemos que hablar— susurré contra sus labios.

—Kassie no me voy a meter en tu camino nunca más, ¿eso es lo que querías?— preguntó molesto.

—no, nunca dije que no quería estar contigo, sólo que no me acostumbro a que las personas se preocupen mucho por mi, y es que tampoco estoy acostumbrada a que me gusten chicos tan lindos e inalcanzables, perdón Dylan.

>>Desde aquel día que te conocí todo ha sido diferente, y perdón por hablarte mal, y decirte que no te preocupes por mí porque eso es lo que quiero, que te preocupes por mí. Soy una tonta, yo y mi bocota, no puedo creer que acabo de decirte eso; se suponía que nadie se enteraría de lo que siento por ti, ¿por qué no puedo callarme? Dylan di algo, ¿por qué no dices nada?, Dios... Debo callar...

Dylan interrumpió mi lucha contra mí misma con un corto beso en los labios ¿qué acaba de pasar? Quedé petrificada, Dylan me besó. Me besó.

—no parabas de hablar, lo siento— gimió levantándome de encima suyo con facilidad.

—¿qué...?— dije confundida.

—Kassie te perdono, pero perdóname tú, no debí besarte— yo negué con la cabeza y le di otro beso, sus labios eran perfectos, encajaban perfectamente con los míos se movían a un compás perfecto, sentía como todo lo demás no importaba y me concentraba en él, en sus labios, en sus beso, parecía que estuviera en un sueño de lo maravilloso que fue. Seguía besándolo sintiendo como nuestras lenguas se tocaban tímidamente y él me agarraba de la cintura, era totalmente increíble como coordinábamos; Dylan me soltó bruscamente, sentí un vacío cuando sus labios ya no tocaban los míos y el frío me envolvió.

—ugh perdón joder, tengo que controlarme, no puedo besarte de ese modo— refunfuñó golpeando una pared, pobre pared.

—¿por qué?, sé que no beso muy bien pero ha sido mi mejor beso— dije sonriendo tímidamente.

—porque esto no es correcto Kassie, no eres tú, créeme, besas increíble, es que no puedo controlarme— mirándome fijamente.

—ha sido nuestro primer beso juntos— dije un tanto dolida.

—eso lo sé, sólo que no lo entenderías— dice pensativo.

—está bien, ¿hagamos un trato si?— propuse— nada de besos pasados de raya.

—¿ósea que puedo hacer esto?— preguntó dándome un pico por sorpresa.

—claro que si— respondí mordiéndome el labio.

—trato hecho— dijo riendo.

—bien, ahora tenemos que entrar a clase— digo viendo como todos desaparecían de todas las partes de la escuela que se podían ver desde arriba.

—es cierto— recordó poniendo mostrándome la palma de su mano.

—¿Linda mano...?— dije confundida.

—no tonta— dice mientras entrelazaba nuestras manos— ¿mucho mejor?

—no.— respondí seca.

—¿qué?— preguntó extrañado.

—no es mucho mejor, es simplemente perfecto— confesé mientras él reía y caminábamos de la mano.

Llegamos al pasillo de lockers y todos nos veían raro, me escondí detrás de Dylan, él sólo rió y me frenó.

—Kassie ¿qué importa lo que piensen los demás?— preguntó mientras miraba alrededor y a propósito me dió un beso lento pero no tan perdurado.

—¡eres un idiota!— exclamé regañándolo.

—te gusto, me gustas, ¿y eso a ellos les importa? La respuesta es no— gruñó diciéndolo en voz alta, haciendo que los demás no nos miraran más.

****

Estaba en Geografía con Lissa, le dije que debía contarle algo muy importante y ella sólo esperaba que sonara el timbre ansiosa, era la última clase de ese largo día.

—cuéntame ya— exigió Melissa impaciente.

—aguarda quedan solo tres minutos— ratifiqué malévola, quería hacerla sufrir.

—oye por cierto como te fue con Cameron— quise saber.

—intentó disculparse pero luego perdió su oportunidad de reivindicarse— gimió seca- ¿ya me contarás?

—está bien— me rendí sin ganas— es una larga historia.

—tengo hasta la eternidad— bromeó mirando su reloj.

—nos besamos— solté e sonriendo al ver la cara de "WHAT THE FUCK" que hizo, luego le relate, todos los hechos que pasaron, desde lo de Cameron hasta lo del pasillo.

—wow, wow, wow, wow, wow, wow y wow— estaba sorprendida.

—cállate, pareces un perro— dije riendo a lo que ella rió, salimos del salón de ultimas, Lissa me pidió detalles, mientras respondía cada pregunta extraña que Mel me hacía, y yo buscaba a Dylan con la mirada.

—tierra llamando a Kassie— dijo Melissa graciosa.

—perdón— me disculpé apenada— debo dejar de pensar en él.

—pienso lo mismo chica— asistió riendo— ¿qué tal si hoy vamos con los chicos a jugar bolos?

—soy malísima en los bolos— dije negando con la cabeza— pero está bien, vamos a jugar bolos.

—¡si!— chilló Melissa de la felicidad.

—hola— saludó Ethan a mis espaldas, me volteé y no estaba solo, eran Dylan, Ethan, Cameron e Ian. Dylan, se veía tan bien que me gustaba mucho más que antes.

—chicos ¡queremos hacerles una propuesta!— exclamó Lissa haciendo un mohín.

—¿vamos a bolos hoy?— pregunté.

—por mí está bien— dijo Cam mirando intensamente a Melissa, ella sólo apartó la mirada.

—si por nosotros está bien— afirmó Dylan mirándome fijamente.

—entonces vamos— pidió Ethan riendo.

—yo conduzco— grité, pero Ethan ya estaba sentado en el asiento del conductor, hice una cara de lamentación.

—jódete— me gritó Ethan lanzándome un beso al aire, yo lo miré mal.

—está bien, puto— le dije sacándole el dedo de la mitad.

—pufff— dijo Ian pasando a mi lado y chocó mi hombro con el suyo.

—¿sigues enfadado?— le pregunté y él ni siquiera volteó.

—¿acaso hoy es el puto día para que todos se enfaden conmigo?— grité furiosa, recordando a Dylan, y luego a Amanda.

—¿qué le hiciste?— preguntó Dylan pasando su brazo por mis hombros.

—lo he estado molestando mucho— dije y luego agregué:— le dije gay.

Dylan explotó en risas, pero al ver mi cara de pocos amigos se intentaba callar pero no podía dejar de reírse, me moleste y quite su brazo de mis hombros.

—vamos Kassie, él es todo menos gay— rió pasando su brazo en mi pero ésta vez fue por mis caderas.

—lo sé, era una broma— fingí tristeza.

—pídele perdón, es Ian, él no es rencoroso.

—gracias— agradecí mirándolo a los ojos.

—oh, me podrías agradecer con un beso— dijo gracioso agachándose a mi altura, yo agarré sus mejillas para atraerlo a mi, y le di un beso en sus adictivos labios.

—¿mejor?— pregunté riéndome.

—completamente— puntualizó justo cuando todos los White y Lissa gritaban viéndonos orgullosos.

—cállense— les ordené mientras subía al auto, justo en la parte de atrás con Dylan, íbamos sólo los dos en la última sección del carro.

—tengo hambre— gruñí haciendo que Dylan riera, luego me acurruqué en sus brazos, y él me rodeó con estos.

—Melissa perdóname— se escuchó decir a Cameron— te amo y lo sabes.

—pero la defendiste a ella— negó mirando por la ventana.

—mírame— pidió Cam, ella hizo lo que él pedía— te amo a ti, eso es lo que importa.

—te amo, y no puedo estar furiosa contigo— dijo Melissa— pero lo vuelves a hacer y te surto.

—si mi amor— luego se dieron un beso largo.

—bien hecho Cameron— dije feliz, chocamos manos.

—tenías razón Kassie— dijo Cam feliz.

—yo siempre tengo razón— bromeé haciendo que todos rieran en el auto.

Cuando llegamos al gran centro comercial, habían muchas personas, niños, adultos, ancianos, etc.

—vamos— dije enérgica, de pronto se me había quitado él hambre y había empezado a caminar junto a los chicos y de la mano con Dylan.

—amo los bolos— acotó Dylan.

—odio los bolos— confesé, él me miró ofendido y simplemente me susurró.

—eso cambiará— estaba tan cerca a mí que no me resistí a darle otro beso, nunca me cansaré de besarlo y eso que la primera vez que lo besé fue hoy, él sólo me sonrió.

—vamos tórtolos— nos dijo Ian riendo.

—ya vengo— le dije a Dylan, él asintió soltando mi mano— ¡Ian espera!

—Kassie no me molestes— dijo acelerando el paso, yo corrí y salté a su espalda y él instintivamente agarró mis piernas, pero se empezó a reír- Kassie sólo para aclarar, no soy gay y perdón.

—no eres gay pero ¿por qué pides perdón?— pregunté aún en su espalda.

—por esto— dijo cuando empezó a correr y a dar vueltas conmigo en su espalda, oh Dios, lo único que hice fue gritar y clavar mis uñas en su espalda.

—¡Ian White, bájame ahora!— grité y luego él freno en seco y soltó mis piernas haciendo que casi me cayera de culo al piso, si no fuera porque me atrapó antes de que me rompiera la espalda contra el suelo.

Dios hasta ahora Me daba cuenta cuán lindo era Ian. Kassie ¿qué estás pensando?

—imbécil— mascullé levantándome con su ayuda— casi me matas del susto.

—te lo merecías— dijo burlón, es un idiota.

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Holaaaaa los amooooo.

Estoy súper contenta de escribir el capítulo once hoy miércoles, tal vez ustedes lo lean el sábado o el viernes.

Quiero decirles que he estado súper feliz de escribir éste capítulo porque es el muy esperado beso en este caso besos.

#Beso💋
#Ian_Y_Kassie👌🏻😏

Les dejo foto de Ethan grrrrrr.

XOXO THE_BIG_K