Capítulo Diecinueve

Capítulo Diecinueve: "Flashback"

14/09/1896.

Ya no me sentía la misma de antes, ya no era la Harriet de antes, desde que Dylan desapareció de mi vida, desde que recibí esa terrible noticia de que el amor de vida se iría a la guerra mi mundo se arruinó, mi padre me había dejado también— él era también un coronel muy conocido— yo y mi madre nos sentimos vacías, ¿Alguna vez has sentido que te destruyen por dentro y por fuera? Pues yo sí, como si nos quitaran la mitad del corazón o el alma. Por otro lado aún tenía a Camille mi mejor amiga, mi hermana, mi confidente, ella me apoyaba y yo la apoyaba a ella, Cameron se iba a ir también, es una lástima, una mierda. El amor apesta. Dylan apesta.

Dos meses, dos meses han pasado en los que no hago más que lamentarme,he intentado olvidarlo, olvidarlo para que se vaya el dolor, que se vaya de mi vida, pero por más que lo intente lo único que logró es que mi amor por él crezca más y más. Últimamente leo constantemente las cartas que él me manda desde el campo para soldados.

Muevo el papel escrito con tinta y a mano negando con la cabeza.

"Para: Harriet Tomiltton.

Harriet, eres la mujer que me da fuerzas para seguir, ésta guerra se está prolongando más de lo esperado y en más de una ocasión he podido ver toda mi vida pasar por mis ojos, Harriet no quiero que sufras pero también quiero que sepas que la muerte me asecha y quiero verte ahora más que nunca. Quiero decirte que yo TE AMO, te amo desde que te conocí, has sido la única mujer que me ayudó a ser yo mismo, a poder vencer mis miedos y a nunca rendirme, siempre te amaré no importa, la distancia o lo que pase ahora o en un futuro más lejano.
 
Nunca te rindas, nunca, jamás dejes que el miedo y el dolor se apodere de ti, sé fuerte, mantente fuerte siempre, por ti por mi, por tu familia y por este amor que nos tenemos el uno al otro que perdurará para siempre; te pedí matrimonio como una promesa, de que volveré a ti, nunca te dejaré, lo prometo, nos volveremos a encontrar.

No creas que me estoy despidiendo todo lo contrario sólo quiero que sepas que siempre estaré aquí para ti.

Por siempre tuyo, Dylan"

Lágrimas corrían por mis mejillas, aunque fuera la enésima vez que la leía aún no podía controlar mis propios sentimientos, ¿Por qué nos pasa esto a nosotros? No hicimos nada malo sólo nos enamoramos, no es un delito sentir. No lo es.

Dylan me había hecho sentir, cosa que nadie había logrado en mucho tiempo, amor, era una palabra desconocida en mi lenguaje, pero por alguna extraña e inexplicable razón él lo había logrado. Por eso nunca me había preocupado en ese tema llamado "amor" era realmente fastidioso pensar que yo era la única sin novio, o con algún pretendiente, Camille era la persona que más me recordaba eso de que no tenía novio, hasta ahora, ya no era la "solterona Tomiltton" ahora era diferente era simplemente Harriet, la enamorada Harriet.

—¿lista para ir trabajar?— preguntó mi madre cuando entró en mi cuarto; tenía ojeras, sus ojos azules estaban opacos y su cabello rubio muy desordenado, era igual a mí.

—no pero, ¿tengo otra opción?— la respuesta era un rotundo no, ella negaba con la cabeza mientras yo asentía suspirando.

—ya es tiempo, no puedes faltar un solo día más.

—lo sé y me niego a hacerlo, me van a echar de mi trabajo si sigo así— reflexioné en un susurro.

Me levanté rápidamente de mi cama, le di una sonrisa a mi madre, me acerqué hasta el armario de ropa, para luego proseguir a cambiarme. Hoy iba a ser diferente.

—mmm mamá ¿Me darías un poco de privacidad?— cuestiono tomándola por los hombros y llevándola hacia la puerta por fin sacándola de mi habitación.

Respiro hondo y me tranquilizo, cojo la ropa que necesito y me adentro en el baño.

****

Iba caminando hacia mi trabajo, se preguntarán ¿Cómo es que tienes trabajo? Sencillo, desde que los hombres se fueron a la guerra, faltan personas para que llenen las vacantes en los trabajos, por lo que ahora muchas jóvenes podemos trabajar, dejando el machismo de lado.

Mi hermosa mejor amiga venía caminando hacia mi ¿Olvidé mencionar que Camille trabajaba en la misma fábrica que yo? Pues si, era una fábrica de zapatos en donde pasábamos la mayoría del tiempo, aceptémoslo solo queríamos olvidar el desamor.

—¿Lista para un gran día?— cuestiona con una falsa sonrisa de oreja a oreja, le devuelvo la falsa sonrisa y asiento.

—espero que sea un buen día, no soporto la idea de ser las aguafiestas para siempre— engancho mi brazo con el suyo y nos disponemos a ir a la fábrica.

Cuando llegamos puedo notar ese olor a oxidado y a caucho quemado penetrar mis pulmones, con ese olor tan terrible no sé como mis pulmones soportan tal cosa. Miro a la "recepcionista" y ella nos da una mala mirada medio le sonrió solo para molestarla, no la soporto, no es solo el hecho de que me odie o que se vista como una prostituta, sino también es el hecho de que coquetea con todo lo que respira, una vez intentó coquetearle a Dylan, suerte que él es perfecto y la puso en su lugar.

—Lucía que lindo verte— ironicé dándole una falsa sonrisa.

—lo mismo te digo Harriet ¿Cómo va todo con Dylan?— juro que la mataré, la mataré, la mataré.

—bien— respondí seca.

—oh vamos, no te pongas de ese modo, de seguro él sigue vivo— su tonta risa penetraba mis oídos y solo podía pensar en cómo asesinarla después, tenía ira consumiendo todos mis sentidos.

—lo está, está vivo a diferencia de ti si sigues hablando— amenacé y alguien me cogió por los hombros para luego guiarme lejos de la perra fácil de Lucía.

—cálmate amiga, sabes cómo es ella, solo quiere provocarte para crear un drama— me hizo entrar en razón Camille.

—tienes razón, solo necesito respirar y no pensar en cómo torturar a esa chica— suspiré repetidamente mientras que caminábamos a nuestros puestos de trabajos, duramos una hora terminando treinta pares de zapatos dentro Camille y yo.

Empezaba a oler a humo, mis pulmones se contraían buscando aire, miré a Camille con alerta y ambas salimos corriendo hasta la salida, cerrada, la otra puerta de emergencias, cerrada, gritamos por ayuda pero eso solo intensificaba la necesidad de tener aire fresco en nuestros pulmones.

Segundos más tarde se escuchaban gritos provenientes de la planta de abajo, era un caos total. Había un incendió y el humo nos estaba matando, las salidas estaban bloqueadas y la gente se acumulaba, después de unos minutos sentí que perdía el conocimiento y algo impactaba contra mi rostro, me levante después de unos mínimos minutos desmayada, no podía morir, no podía dejarlas morir a todas, Camille me necesitaba, mi madre me necesitaba, Dylan me necesitaba. No podía defraudarlos.

🌧☀️🌧☀️🌧☀️🌧☀️🌧☀️🌧☀️

Holaaaaa quería decirles que los amo muchoooo, el capítulo pasado se suponía que era Flashback pero se me pasó y pues aquí les traigo uno narrado por *tambores* Harriet.

#FlashBack
#HarrietQueen👸

❤️

Love you all

Voten, comenten, compartan la historia 👄

XOXO THE_BIG_K❤️

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top