Las facciones de HyunJin se deformaron y su corazón se detuvo por un pequeño instante. Volteó hacia JeongIn, quien tuvo la misma reacción, luego volvió a observar a Chan, este parecía completamente asustado. Ambos pensaron en lo peor.

───¿Cómo que Felix no está en el baño? ───preguntó Hwang, pretendiendo estár en calma.

───No lo hallé ahí. ───contestó el australiano.

───De seguro escapó, no me sorprendería sabiendo que detesta moverse ───les comentó el hombre───. En fin, sigamos.

Los demás se levantaron sincronizadamente para seguir con las actividades. Pero HyunJin y sus amigos se rehusaron a mover un solo dedo.

───¡Vamos, chicos! ¡Muevanse! ───exigió el profesor, pero ellos omitieron los gritos─── ¿No me digan que están preocupados por su amigo? Por Dios, chicos, ni que hubiera sido raptado.

───Usted no lo sabe ───respondió HyunJin, mirándolo───. Alguien está acosándolo, profesor.

───Están exagerando, no le pasará nada, es lo suficientemente hombresito como para defenderse.

MinHo gruñó con molestia y sin esperar un poco más, tomó sus pertenencias y avanzó hasta los baños. Los demás lo imitaron mientras ignoraban al hombre responsable.

Sus pasos se oyeron en unísono mientras se acercaban a los baños. Una vez llegaron a su destino, todos entraron a excepción de Chan y SooJin, los cuales se quedaron observando en el contorno de la puerta, mientras que el resto abría los cubículos con la esperanza de hallar al rubio.

Todos los cubículos habían sido revisados. En ninguno estaba Felix.

───Se los dije, él no está aquí.

───Maldición, Chan ───HyunJin apretó sus puños, volviéndolos rojos. Sus ojos se iluminaron a causa del llanto próximo a resbalar───. No me digas que ese idiota se lo llevó. Por favor...

Su espalda se recostó en la pared sin cuidado, dejándose deslizar hasta el suelo. Sus manos ocuparon el trabajo de ocultar su rostro y entonces sus lágrimas brotaron por montones. Se había roto.

SooJin no lo pensó cuando se adentró al baño para abrazar a su primo, ofreciéndole sus tibios brazos para consolarlo. Los demás se observaron entre sí, HyunJin no era el único que estaba llorando.

MinHo se había derrumbado también.

───Joder no ───murmuró JiSung, preocupado───. No lloren, quizá solo está en alguna parte del instituto. No se preocupen.

───¿Pretendes que no me preocupe ni llore cuando realmente le pudo haber pasado algo malo a Felix? ───cuestionó MinHo─── Es mi mejor amigo.

───Lo siento, MinHo. Pero sería mejor que fuéramos a buscarlo.

───JiSung, tiene razón, vamos a buscarlo. ───contestó JeongIn, intentando mantenerse fuerte ante alguna emoción que quisiera atacarlo.

Aún no sabían si realmente había desaparecido, quizá solo estaba por allí. Y realmente esperaban que fuera así.

YuNa

"Misión cumplida, Kim. Ya le entregué el agua"

Había leído SeungMin minutos antes de que Felix fuera al baño y se derrumbara en uno de los cubículos. Sonrió victorioso cuando tomo el cuerpo inmóvil del debilucho de Lee entre sus brazos. Era una jodida pluma.

Tan fácil.

Salió del instituto con una sonrisa que gritaba superioridad. Aquello había sido tan sencillo, ahora solo tendría que esperar a destrozar por completo a Felix y a la vez a todos sus amigos.

"Oh, pobre de HyunJin cuando sepa que su pequeña princesa fue una perra mala con SeungMinnie"

Rió.

Para su fortuna, su casa se hallaba disponible. Dodo estaba bajo el cuidado de MinJi desde el amanecer y no había ningún impedimento para acostarse con Felix.

Abrió su puerta con brusquedad y se dirigió hasta su cuarto, lanzando la frágil figura del rubio a la cama, sin preocuparse de causarle algún daño. ¿Qué importaba un daño físico, si de todas maneras se preocuparía más en el daño mental que aquello le dejaría?

SeungMin disfrutaría de dejarle un trauma a Felix. Tan sólo necesitaba esperar a que despertara y suplicara por que lo dejara libre.

Sería un espectáculo magnífico.

Sus manos se deslizaron por las prendas de Felix hasta dejarlo al desnudo. SeungMin lo observó con lujuria. Totalmente perfecto.

Como disfrutaría de atacar con fiereza su débil cuerpo, hasta dejarlo tan desecho que ni siquiera pudiera mantenerse respirando de forma correcta.

───Oh, SeungMinnie, eres tan malo. ───se dijo a sí mismo y rió de una forma algo perturbadora incluso para su gusto.

Se posicionó encima de Felix una vez empezó a despertar. El terror en sus ojos al notar la situación en la que estaba no tuvo precio para Kim.

───¡Sueltame, idiota! ───exclamó él. Intentó golpearlo pero de antemano había apresado a sus muñecas, imposibilitando cualquier movimiento─── ¡Eres un jodido..!

───Las princesas no insultan ───Kim lamío el lóbulo de su oreja y Felix se apartó con disgusto. No faltó mucho más para que el llanto se hiciera presente en el pecoso───. No se vale llorar, preciosa.

Aquello era completamente sucio, nefasto. Felix preferiría morir antes de hallarse bajo el cuerpo de aquel enfermo. Sus lágrimas expresaban dolor y terror en tanto se deslizaban por sus mejillas, acabando entre los mechones de su cabellera.

Se arrepintió tanto de no haberse quedado en su casa como había dictado su madre, más aún cuando SeungMin comenzó a tocarlo de una manera tan descarada. Deseó gritar, pero las sucias manos ajenas taparon su boca.

Sucios toques sobre la inocente piel. Asqueroso.

Cuando SeungMin planeó llevar la situación al siguiente nivel y Felix creyó que caer en un abismo. La salvación había llegado.

La puerta había sido bruscamente abierta, ingresando allí varios policías junto a MinJi, MiYeon y Dodo. SeungMin se exaltó y se apartó del lugar donde originalmente se hallaba, Felix se acurrucó en su lugar mientras lloraba con más fuerza. Dos de los policías acorralaron a Kim, tomando ambas de sus muñecas y aprisionándolas entre las esposas.

En tanto aquello ocurría, MiYeon había ido hacia Felix, tapándolo con una sábana y regalándole un abrazo acompañado de unas palabras que intentaban confortarlo. "Ya estás a salvo, pequeño"

───Usted, Kim SeungMin, es arrestado por violación. ───citó un oficial.

SeungMin observó a MinJi, quien se mantenía en una esquina de la habitación con Dodo dormida entre sus brazos. Ella daba todo de sí por mantenerse fuerte ante la situación; no obstante por dentro quería llorar.

───¡Maldición, no lo iba a violar! ───mintió en un intento por defenderse.

───Pues la situación no dice lo mismo. Además, acabamos de recibir denuncias hechas por otras víctimas.

───¡Eso no es cierto! ───exclamó, forcejeando para liberarse de los policías─── ¡No tienen ninguna prueba!

───Claro que hay pruebas, SeungMin ───respondió MinJi───. Incluso más de las necesarias, así que no hay forma de que te salves.

───Joder contigo, ¿por qué me traicionaste así, eh? ¡Ya lo sé! querías quedarte con Dodo. Siempre lo supe. Eres una maldita perra. ───gruñó, acto seguido los guardias lo guiaron fuera de la residencia para montarlo a la patrulla.

MinJi pudo suspirar con tranquilidad.

Giró su mirada hacia los integrantes restantes en la habitación. Felix se aferraba a MiYeon como si su vida dependiera de tal acción, aún estaba tan asustado. Ni siquiera quería pensar el daño mayor que le hubiera provocado Kim si llegaban tarde, aunque por suerte JeongIn les había avisado que Felix había desaparecido y tenían una idea de donde hallarlos.

Afortunadamente, Kim SeungMin ya no provocaría más destrozos.

───Tranquilo, Felix, él ya no te hará ningún daño.