Narra Jin.

Este día iríamos a la playa, ha pasado una semana desde que me enteré sobre la fecha de mi operación.

Metí en mi pequeña maleta algunas prendas para usar en la playa, por lo que Nam tenía planeado era que nos quedaramos un día en la pequeña cabaña que tienen sus padres.

Cerré mi bolso y salí de mi habitación para luego ingresar en la de mi hermano. Sung se encontraba frente a su armario buscando entre las prendas.

— ¿Estás buscando la entrada a Narnia? — me adentre a la habitación y me senté en la cama doblando bien una de las camisetas de mi hermano.

— Quisiera — soltó un suspiro agobiado — No encuentro mi gorra — se acercó a mí y me observo con sus pequeñas esferas suplicantes.

— Debe de estar en tu armario — respondí con simpleza a lo que Sung soltó un quejido — No me mires asi ni hagas muecas, es responsabilidad tuya el mantener tu armario ordenado.

— ¡Hyung!, Por favor ayúdame— tomo entre sus manos una de las mías — ¿Si?

— ¿Qué ganaría con ayudarte? — pregunté a lo que él solo sonrió.

— El placer de saber que ayudaste a tu pequeño hermano.

Bufé divertido y me acerque al armario para buscar entre los cajones de este.

Sung salió de su habitación dejándome a mi solo, ¿Qué clase de hermano tengo? Al final encontré la bendita gorra en la parte de atrás del armario.

Salí de la habitación y me encontré a mi hermano en la cocina comiendo un poco de pastel; reí y me acerque a él para robarle un poco.

— Encontré tu preciada gorra, la dejé sobre tu cama — tome un vaso y lo llene de agua para luego beberlo.

Sungjin termino de comer y dejé el plato en el fregadero para luego salir hacia su habitación de nuevo.

La semana en la universidad había pasado tranquila, alguna que otra evalúacion, Ten tratando de provocar a Nam o alguno de los otros chicos y bueno, el trabajo en la editorial, el borrador de mi historia ya estaba en edición, ahora solo faltaba que este saliera a la venta y por lo que me comentó mi jefe, este sería lanzado dentro de dos semanas.

Escuche el timbre de la puerta principal, dejé el vaso en la encimera y me acerque a la puerta para abrirla y encontrarme con la presencia del moreno frente a mí.

— ¿Listo?— me preguntó mientras ingresaba con una sonrisa y dejando un pequeño beso sobre mis labios.

— Yo si, tú pequeño cuñado no — le dije cerrando la puerta tras de él — Aún es muy temprano, Nam.

— Bueno, si queremos evitar el tráfico es mejor a esta hora — tomo mi cintura y beso mis labios — Amo el sabor del bálsamo que tienes en tus labios.

Relami mis labios soborendo el sabor a fresa y piña que tenía sobre ellos — ¿Enserio? Bueno de ahora en adelante usaré solo este para tí — solté coqueto y me colgué de su cuello.

— Hyung's, ya estoy listo — Sung llegó a la sala con su pequeña maleta en mano.

— Bien, es hora — golpeé juguetonamente el pecho del chico para luego dirigirme a mi recamara y tomar mi maleta.

Salimos luego de seciorarme de que dejaba todo en su lugar. Tomamos el metro hacia la playa más cercana.

Fue un viaje corto de hora y media, no más de eso. Llegamos y lo primero que hicimos fue tomar un taxi, el cual nos dejaría en la cabaña del castaño.

⏳⏳⏳

Narra Namjoon.

Llegamos a la cabaña, pague el precio del taxi y saque las llaves de aquella pequeña (no tan pequeña) cabaña. Abrí la puerta encontrándome con la foto de la familia en la entrada.

— Pasen — los hermanos entraron observando todo lo que habitaba alrededor de esas cuatro paredes — Si quieren pueden subir para escoger habitación — les dije y los dos subieron hacia el piso de arriba para hacer lo mencionado.

Me acerque a la sala y tome un retrato de mis abuelos, ellos habían muerto hace unos años atrás, pero aún dolía y su ausencia está aún presente en mi.

Deje el marco en su lugar y subí de igual forma; me encontré con Sung en la primera habitación este se encontraba sobre la cama, reí un poco para luego caminar a la siguiente la cual se encontraba vacía y así hasta llegar a una. Entre en esta para encontrarme a Jin en el pequeño balcón, mire a mi alrededor recordando los momentos de esta habitación.

— Está era mi habitación en las vacaciones — comenté mirando las paredes las cuales aún tenían pegatinas de mis superhéroes favoritos y de alguno que otro insecto.

— Me imaginé que está habitación te pertenecía — Escuche la voz del pelicafe, me acerque un poco para abrazarlo por la espalda dejando mi mentón sobre su hombro — Espero no te moleste el que haya elegido está habitación — negué.

— No me molesta, porque lo que es tuyo es mío y lo que es mío es tuyo — susurré sobre su oído para luego depositar un beso sobre este.

— De pequeño siempre soñé con una casa así, frente a la playa, alejada del ruido. — sentí como Jin acariciaba mis brazos con sus dedos.

— Te la daré, te daré la casa, te daré la familia que quieres, te daré todo lo que quieras Jin — Respondí emocionado.

— Lo único que quiero de tu parte Nam, es que no me dejes nunca, que compartamos el tiempo que tenemos juntos.

— Jin... — El chico corto mis palabras.

— Promete que cualquier cosa que suceda durante la operación no te afectará y que saldrás adelante, ya sea conmigo o sin mí, promete que cuidaras de Sung también. — Dió la vuelta quedando frente a mí rostro; observé sus ojos los cuales estaban cristalinos con lágrimas amenazando en dejarse ver.

— No puedo prometerte eso, no cuando no sé si sería capaz — tome su rostro y retiré esas traviesas lágrimas de sus mejillas.

— Gracias por todo lo que estás haciendo, Nam — Negué y bese su sien.

— Gracias a ti por esto, por hacerme ver la vida de otra manera, por hacerme saber que lo material nunca importa que lo único que tendría que importar es lo que habita dentro de aquí — señale su pecho — Dentro del corazón y el alma.

Sonrió y se abrazo a mi cuerpo.

— Bien vamos que la arena, el sol y el mar nos esperan — tome su mano y nos adentramos a la habitación para cambiarnos de ropa.

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Espero les guste este capítulo, lxs quiero.

Nos leemos pronto ❤️💋🥰❣️

I Purple U 💜

S. Black Angel 🖤