Shura y Aioros salieron lo más rápido que pudieron y entre Leo y Virgo la cabra no se aguantó. Lo recostó al arquero sobre las escaleras y volvió a besarlo frenéticamente. Su cuerpo sólo actuaba por inercia, pero le gustaba, le excitaba la situación.

Aioros:- E...esp..pera... vamos a Sagitario y ahí podrás hacer de mí lo que quieras... - Eso no era lo que quería escuchar... ¡era mejor aún!

El arquero estaba mareado, veía borroso y caminaba por inercia siguiendo a Shura quien lo arrastraba enérgicamente. La cabra estaba eufórica quería llegar cuanto antes, no podía esperar para tomarlo, comenzaba a excitarse de sólo pensar lo que encontraría debajo de esa ropa. Al pasar la casa de Libra Aioros cayó de rodillas apoyando las manos en el suelo.

Shura:- ¿Te sientes bien? - Qué pregunta tan brillante... - Ven, levántate. - Lo levantó estilo nupcial y lo llevó hasta Sagitario.
Aioros:- ¿Sabes...? - Lo ignoró prestando atención a sus pasos que ya de por sí eran bastante torpes. - Quiero beb...ber oootra copa... - Sagitario estaba realmente fuera de sus cabales...

Llegaron por fin a la casa de Sagitario y Shura lo bajó lo más "cuidadosamente" posible... ok, no. Intentando bajarlo se cayó al suelo encima del arquero... pero a ninguno de los dos le importó. Caprico comenzó a escalar al arquero lentamente desde sus piernas hasta estar frente a frente. Frotando su cuerpo en contra del de éste y sintiendo cada vez más el bulto en su entrepierna.

Shura:- ¿Quieres sentir cómo embiste la cabra...? - Lo hizo enrojecer cosa que le encantó ver. Lo tomó por el rostro y lo besó casi furiosamente. El arquero suavemente lo separó un poco, seguían en el hall de entrada.
Aioros:- Sh...Shura... vamos adentro... - Cabrita retobada suspiró y se levantó haciendo un gran esfuerzo para lograrlo.

Tomó a Sagitario y lo ayudó a levantarse cosa que fue muy difícil ya que casi no le respondían las piernas. Lo llevó a su habitación y lo recostó en su cama mirándolo fijamente como acechando a su presa. Se abalnzó sobre él volvió a besarlo a la vez que frotaba su propia entrepierna contra la del arquero. Pasó de su boca a su cuello mordiéndolo levemente lamiéndolo y subiendo hasta su oreja.

Shura:- ¿Ahora sí puedo...? - Su voz sonaba como un excitante ronroneo a la vez que no dejaba de acariciar insistentemente su entrepierna.
Aioros:- Deja de torturarme cabra... - Sonrió con malicia.
Shura:- ¿Así que te estoy torturando...? Mmm... eso es fantástico. - Disfrutaba sus reacciones, saber que él las provocaba.

La situación en los pantalones de Sagitario se ponía cada vez más dura de aguantar, dolía, necesitaba liberarse. Hizo a un lado la mano de Shura y se quitó pantalones y ropa interior, todo de un solo movimiento. Verlo así terminó por completar la excitación de Caprico. Entre movimientos algo torpes se quitó su ropa sin dejar de mirar al arquero, bien no sabía lo que hacía, pero necesitaba calmar el dolor que sentía por el exceso de irrigación sanguínea.

Aioros:- Hazlo, no lo soporto. ¡Entra ya! - Sólo lubricó su miembro y sin prepararlo ni nada lo metió cuidadosamente. - Aaaaay... - Esperó unos segundos a que se relajara un poco, le levantó las piernas sobre sus hombros y comenzó a moverse.

Al principio le dolía, nadie puede decir que no, Sagitario lo pidió de mandado, pero en realidad era virgen al igual que Capricornio.

Shura:- Está... muy... a...preta...do... - Seguía moviéndose sin darle descanso.
Aioros:- Se siente bien... - El alcohol hacía que los dolores casi no se sintiesen, pero que el placer y la excitación sean aún mayores. - Demasiado bieeen, ¡quiero más! No te detengas, por favor... - El macho cabrío llegaba a su punto, pero al ver que su arquero aún no estaba listo para explotar comenzó a masturbarlo. - ¡Mmmm...! Sí... Shura... Shura... - Suspiros, gemidos y jadeos de placer se escapaban de su boca y lo volvían más que loco a Capricornio.
Shura:- Ya casi no aguanto... Aioros... - Se dejó caer sobre él y mordió su cuello a la vez que acababa dentro suyo. - ¡MMMM!
Aioros:- Yo tam... ¡Aaaaah! - Estalló sobre su vientre y el de su compañero.

Ambos jadeantes, se separaron y se miraron, pero no duró mucho, Sagitario quedó inconscientemente sobre el pecho de Capricornio. Éste besó su frente y se dispuso a descansar a su lado.

Shura:- Descansa mi arquero... mañana será otro día... - Cerró sus ojos y se durmió profundamente.

En la casa de Escorpio la situación no era distinta...

Cubito estaba recibiendo amor por parte del Bichito...

Éste succionaba uno de sus pezones mientras pellizcaba suavemente el otro. Al sentirse sometido Acuario sólo suspiraba y jadeaba intentando sobrevivir (según él) a las descaradas y atrevidas caricias de Escorpio. Su otra mano bajó desde su pecho acariciando sus hermosos abdominales hasta llegar a su erección que por tanta excitación estaba mojándose en la punta y el alacrán no tuvo mejor idea que, con la punta de su dedo índice, jugar en círculos sobre ésta.

Camus:- ¡Mngh...! - Se retorció y satisfecho con su reacción lo soltó para volver a su cuello.
Milo:- ¿Estás ansioso...? -
Camus:- Ajám... - Forzosamente emitía palabras.
Milo:- Entonces es hora de hacerte ver las estrellas... -

Lo recostó en su cama lubricó sus dedos y empezó a jugar en su entrada preparándolo para, según él, la mejor parte. Primero un dedo... y ver las reacciones del peliverde quien se mordía los labios para no perder el control. Luego otro dedo... y Camus entre el alcohol y la excitación se sentía morir. Un último dedo... y el baile de los tres en su interior lo ponían más ansioso aún de sentirlo a Milo dentro de él.
El Bichito se posicionó entre sus piernas y tomó su miembro para introducirlo lentamente en su Cubito.

Camus:- Aaaaah... - Cerró sus ojos con fuerza, el escorpión era grande, pero comenzó gentilmente a moverse y Acuario a dejarse llevar por el momento.
Milo:- Eres hermoso y eres mío... sólo mío... - Se sentía en la cima del mundo al tener al bello Acuariano bajo su poder.

Las embestidas empezaron a incrementar su ritmo y fuerza, Milo se estaba dejando llevar y la excitación del momento se estaba apoderando de él. Camus se sentía en la gloria, nadie jamás había tenido el atrevimiento de ese ser tan jodidamente sensual e insolente.
Comenzó a masturbarse cuando una mano lo detuvo, intentó con la otra, pero también fue en vano. Escorpio tomó ambas manos y las levantó por sobre la cabeza de Acuario.

Camus:- Déjame, necesit... - No pudo terminar de decir lo que quería pues un beso desenfrenado tomó sus labios.
Milo:- Sólo quiero escucharte decir mi nombre. - Mordió su labio inferior, se separó de él sin dejar de embestirlo y éste de retorcerse.

Debido a la borrachera, Cubito casi no tenía fuerzas, en cambio el bicho sí y de más. Tomó su pene y empezó a masturbarlo mientras veía a su amado mordiéndose el labio inferior para no gritar. Pero como ya saben... en estos casos, la cordura se aleja más rápido que agua escurriéndose entre las manos.
Pareció soltar una enorme cantidad de aire y todo salió de su interior (excepto Milo, claro está).

Camus:- ¡Aaaaah! ¡MÁS! ¡QUIERO MÁS! ¡NO TE DETENGAS! ¡Siiiiiiiiiiií...! ¡¡MILOOO!!- Aaaaay... música divina para los oídos del peliazul...
Milo:- Sí mi Cubito, todo lo que quieras... - Aumentó su ritmo embistiendo sin control al Acuariano.
Camus:- Vente dentro de mí, llename como a un muñeco, ¡quiero sentirte fluir en mi interior! - (Oooook... ni yo conocía esa faceta de la hielera con patas...) Cada palabra lo hacía arder por dentro al Bicho.
Milo:- No aguanto más... ¡Camus! -
Camus:- ¡Milo! -
Ambos:- ¡AAAAAAAAAH...! - Qué hermosa corriente eléctrica seguida de un espasmo recorrió por completo sus cuerpos...
Camus:- Sí... Oooooh... sí, sí... jaaaah... - Intentando recuperar el aliento se desparramó por la cama de su amante.
Milo:- ¡DIABLOS! ¡AAARGH...! -

Salió de su interior y se retorció de placer cerrando fuertemente los ojos para luego ver la celestial imagen de Camus desnudo, todo sonrojado, con los ojos cristalizados, cubierto de su propio semen y el suyo escurriéndose de él.

Camus:- ¿Qué me ves Bichito? -
Milo:- Te ves hermoso... - Acuario se sentó como pudo y besó a Escorpio. - Quieres tomar un pequeño baño? -
Camus:- Sí... - Asintió tímidamente y pidió ayuda para levantarse.

Después de un relajante baño, ambos se dejaron llevar al reino de los sueños.

En otra parte del Santuario...
Los Géminis ya habían caído bajo el efecto del alcohol... Saga no esperó al juego previo ni nada, así como llegó se quitó toda su ropa y fue a su cama. Al verlo, Kanon hizo lo mismo y lo siguió.

Saga:- Que yo recuerde... - Sonaba a que se pasó de verdura con las copitas... - Tú... me debes una... -
Kanon:- Ah, ¿sí? Mira tú... - El menor no se quedaba atrás. - Yo sepa no te debo dinero. - Géminis mayor se levantó y caminó hacia él.
Saga:- Tú... - Se acercó quitándole totalmente su espacio personal. - Me debes eseee bello cuerpo que tienes... y que no me quisiste dar hoy... - Al sentir su cercanía, Kanon lo tomó por la cintura y lo besó frotando su miembro contra el de su hermano. - Mmmm... - No lo soltaba, pasó de sus labios a su cuello. - Aaah... desgraciado... - El menor sólo rió por lo bajo.
Kanon:- ¿Desgraciado yo? - Se separó de su hermano. - A ver, hermano... muéstrame qué puedes hacer... -
Saga:- Jajaja... - Una risa burlona salió de sus labios y se acercó al menor. - ¿Sabes algo...? Me encanta que seas así. - Lo tomó por la cintura y giró con él como si estuvieran bailando. Pero al finalizar lo hizo caer en su cama apoyando las manos y dejándolo boca abajo dándole la espalda. Se puso sobre él y lo tomó por el pecho acercándose a su oído. - Pero creo que ya deberías entender que no me debes dejar a cargo del juego a menos que quieras... no sé, ¿sufrir un rato? -
Kanon:- Oh, cierto, en ese caso, me toca a mí. - Quiso levantarse, pero el mayor no lo dejó.
Saga:- No-ooo... ya me dejaste el control a mí. Ahora, shhh... disfruta. -

Mordió su hombro derecho suavemente y luego pasó su lengua por él. Se sentía indefenso, pero le gustaba. Saga pellizcó sus pezones haciendo que se excitara a su tacto. El menor apoyó su frente en la almohada.

Kanon:- Maldito desgraciado, ¡ya deja de torrr...turar...me...! - La mano derecha de su hermano tomó la suya y la guió a su erección.
Saga:- Silencio. Mastúrbate para mí. -

El ronroneo de su voz era totalmente seductor, Kanon obedeció y comenzó a masturbarse tal y como él lo dijo. Saga soltó su mano al ver que comenzó a hacer lo que le pidió. Chupó sus dedos y los metió de a uno viendo a su hermano. Ido en locura, sudado y hambriento de más, una bella imagen según él. Al sentirlo preparado sonrió satisfecho y sin esperar más lo llenó de él.

Kanon:- Aaah... - Apretó los dientes con fuerza y gruñó para no gritar. Así mismo, soltó su erección a causa del placentero dolor.
Saga:- Mmmm... no veo que estés masturbándote... hazlo si quieres que me mueva. - Empuñó las sábanas cerrando sus ojos con fuerza y quedando inmóvil. - Si quieres puedo ayudarte... - Tomó su mano nuevamente y la dirigió hacia su pene haciendo que vuelva a masturbarse y acompañando el movimiento con la suya propia.
Kanon:- Hermano... - Volvió a moverse en su interior. - Oooooh... Saga... - Música para sus oídos... los hacía arder por dentro... de a poco sus embestidas empezaron a aumentar su ritmo. - Aaaah... -

Tiró su cabeza hacia atrás concentrándose y disfrutando de cada movimiento. Saga estaba a punto de explotar. Soltó la mano de su hermano y lo tomó por las caderas embistiéndolo de manera brusca.

Saga:- Siiiiií... hermanito... Kanon... -
Kanon:- ¡Saga, Saga...! Me vengo, ¡me v...! - Saga también acabó.
Ambos:- ¡AAAAH! -
Saga:- ¡Aaaaay! Fuck! Demonios... -
Kanon:- ¡Yayyyy...! Maldi...ción... -

Que hermoso es acabar tan maravillosamente bien, sentir esa corriente eléctrica en todo el cuerpo, el espasmo involuntario y lo mejor de todo, retorcerte de placer hasta que todo pasa.
El mayor acabó en el interior de su hermano y éste en su propia mano. Al salir de él, Kanon se dio vuelta para tomar venganza por lo de hacía un rato.

Saga:- ¿Qué harás con eso? -
Kanon:- Oooh... nada, sólo quería devolverte el favor. -

Frotó su semen en el pechode su hermano esperando recibir alguna maldición o insulto por parte de éste. Pero al contrario de hacer cualquiera de esas cosas, El mayor tomó un poco de éste y lamió sus dedos provocativamente causando un derrame nasal como hacía mucho no veía.

Saga:- Hermanito... - El menor corrió al baño a limpiarse la cara (bueno, es una manera de decir... realmente a los tumbos y tomándose de todo logró milagrosamente llegar al baño). - Parece que la jugada te salió en contra... - Fue tras él para darse un pequeño baño antes de irse a dormir y al igual que su gemelo tuvo un par de problemitas para llegar, pero no se metió a bañarse sin antes recordarle... - ¿Sabes? Eres delicioso... - Susurro a su oído y mordió su oreja para luego entrar en la ducha.

Kanon quedó congelado unos segundos y luego de lavarse las manos se fue a su habitación como pudo al igual que como llegó al baño.
Saga por su parte terminó su relajante baño y otra vez la misma odisea para llegar a su cama tomándose de cuanto mueble y/o pared se le cruzaba por el camino.

Ambos durmieron como bebés... El pequeñísimo problema sería sobrevivir al día siguiente...

Bueno, al fin logré terminar este capítulo, espero les haya gustado. Espero sus comentarios 😁 denme un voto de confianza si les gustó y denme alguna que otra macabra idea... 😏

Nos leemos en el próximo capítulo 😘

PD: No embarazo hombres, luego de eso, todo bonito 😉😋

Kanon:- Ay, gracias Dios que no. -
Autora:- Oye, querida copia de mi bello caballero, ¡¿podrías dejar de meterte donde no te llaman?! -
Kanon:- Ok... gata rayada... -
Autora:- No sabes qué feliz me hace que me llames así. -
Kanon:- Ah, ¿sí? -
Autora:- Sí, ahora,  ¡¡DUÉRMETE Y DÉJAME DORMIR!! -
Kanon:- Aishh... está bien... ya me callo... -
Autora:- 😡 -
Kanon:- ... -
Autora:- Así mejor. Bye señoritas 😘 -