Berlin - alemania
20 de abril de 1997

Estaba trabajando en mi más reciente invento, un traje que le proporciona al humano más fuerza y agilidad, pero eso no era lo mejor, con este traje el humano es capaz de viajar en el tiempo.
El traje ya estaba listo para probarlo, lo iba a probar en mi mismo porque no quería que nadie más sepa de esto, porque podría caer en manos equivocadas , el único que sabía de esto era mi amigo Giovanni, fue quien me ayudó en este nuevo proyecto, a Giovanni lo conocía desde que era niño, siempre fue mi mejor amigo, fuimos a la universidad juntos, siempre nos fascino la ciencia así que decidimos dedicarnos a la ciencia y trabajamos juntos desde entonces.
De hecho iba a ser Giovanni quien probara el traje, pero tuvo una emergencia familiar por lo que tuve que probar yo mismo a el traje.
Me puse el traje y el casco que eran muy cómodos y me sentí como más fuerte.
para viajar en el tiempo lo único que tenía que hacer era apretar el botón en el pecho del traje y pensar a qué año quiero ir.
Decidí ir al año 1947, veinte años antes de que yo naciera.
Me apreté el pecho, cerré los ojos y pensé en el año.
Abrí los ojos lentamente y me sorprendí mucho, estaba en un campo rodeado de vacas comiendo pasto.
De pronto alguien me gritaba diciéndome algo.
- ¡hey! ¿Intentas robar mis vacas? - dijo un hombre que parecía de unos sesenta años, era un poco petiso, llevaba unas botas gastadas, unos jeans también gastados, una camisa y un sombrero de color marrón
- eh no, disculpas me eh perdido ¿Me podría decir en qué año estamos?- dije yo
- ¿Acaso es retrasado? Estamos en 1947 - dijo el anciano
- ¡Funcionó! - dije yo sorprendido
- ¿que cosa? - dijo el granjero
- emm nada - dije yo haciéndome el inocente
- creo que no hay ninguna fiesta de disfraces por acá cerca - dijo el anciano mirando mi traje
- ¿Eh? Ah cierto la fiesta de disfraces debo irme - dije yo
- adiós - dijo el hombre mirándome como si fuera un bicho raro
- adiós - dije yo
Camine un buen rato hasta encontrar un lugar donde nadie me viera, pues no quería tener más problemas.
Apreté el pecho del traje y volví a mi tiempo muy feliz por lo que había logrado, apenas llegué a mi laboratorio llegó Giovanni muy sobresaltado y nervioso, le pregunté que ocurría y el me dijo que después de hacer sus asuntos familiares se encontró a un hombre que lo invito a tomar un café y el acepto con mucho gusto porque el hombre parecía amistoso. Mientras estaban en el bar el sujeto comenzó a hacerles muchas preguntas y Giovanni estaba muy nervioso y sin querer menciono lo del traje, entonces el sujeto se despidió sonriendo y se fue a su auto color negro en el cual había un hombre adentro esperándolo, entonces Giovanni se dio cuenta que había cometido un error y se apresuro a venir al laboratorio temiendo lo peor.
Guardamos el traje y nos llevamos todo lo que pudimos, Berlin ya no era segura para nosotros, mejor dicho alemania no era segura para nosotros y decidimos que teníamos que mudarnos de país.
Mientras íbamos al aeropuerto, tres autos iguales a los que vio Giovanni nos perseguían, aceleramos todo lo que pudimos, tanto que parecíamos unos criminales huyendo de la justicia.
Cuando llegamos al aeropuerto tomamos el primer vuelo rápidamente, que nos llevaba a California - estados unidos.
En California nos costó un poco conseguir alojamiento, días después nos encontramos con una chica llamada Mary que era nuestra compañera en primaria y se había mudado a California hace unos meses, los dos nos enamoramos y dos años después nos casamos, después del casamiento por alguna extraña razón Giovanni se enojo mucho conmigo y jamás lo volví a ver.
Decidí ocultar el traje porque no era seguro y trabaje en otros proyectos con los cuales gane mucho dinero, premios y títulos.
Luego mi esposa y yo decidimos tener un hijo y poco a poco me fui olvidando del traje.