Capítulo 8- ¿Yo? ¿En qué momento he dicho eso?
Jin's pov
Miraba a mi hamburguesa como si fuera lo más interesante del mundo.
Parecía que no iba a poder librarme del simio, pues ya era la tercera vez en el día que me lo encontraba, y francamente, estaba considerando seriamente lo que antes le había dicho de denunciarle por acoso.
El tío estaba sentado a mi lado y me observaba con una intensidad increíble, y de más está decir que tenía esa jodida expresión de superioridad en su rostro.
Los otros hablaban con naturalidad, completamente ajenos a nuestra pequeña competencia de miradas, o mejor dicho, a su competencia de miradas, porque como antes comenté, yo no le miraba a él, sino a mi hamburguesa, la cual terminó dándome lástima, porque con todo esto, se me habían quitado las ganas de comer y la pobre probablemente se mantuviese entera.
Sin más la solté y la dejé en el plato con un suspiro.
- ¿No vas a comer? - Preguntó el peligris.
- Eso mismo digo yo. ¿No piensas comer? - Inquirí alzando una ceja y de brazos cruzados.
- Lo estoy haciendo - Y como para demostrar su punto, tomó una patata frita de su plato y se la llevó a la boca, todo esto aún enfocado en mi persona, y sin ocultar sus risueños hoyuelos.
- Ya claro, me estás comiendo a mí con la mirada - Contesté exasperado por su actitud. Era realmente difícil verle dejando atrás su cinismo.
- ¿Prefieres que te coma con otra cosa? - Preguntó alzando una ceja.
- Gilipollas - Comenzó a reír.
- Realmente eres divertido princesa.
En lo que llevábamos de conocernos, había dicho que era divertido más de lo que me lo había dicho Tae en toda la vida, y definitivamente el castaño era la única persona antes de él, que podría adjudicarme ese adjetivo.
Yo sería guapo, estiloso, un genial cocinero y todo lo que queráis, pero... ¿Gracioso? Nop, no había nacido con ese don.
Sin embargo, nuestro corto tiempo de interacción, me había hecho comprender que básicamente era imposible discutir con él, y que iba a seguir diciéndome princesa y divertido todo lo que le diese la gana, así que me ahorré mi comentario, y le di un sorbo a mi batido.
- Vaya, pensé que me dirías idiota, o me golpearías o algo así. Estamos progresando - Mostró una sonrisa amistosa y luego mordió su bocata, a la par que yo le fulminaba con la mirada.
- Mira Namjoon, no sé que bicho te habrá picado, ni por qué estás tan encaprichado conmigo, pero déjalo hombre, ya ni sé si me persigues porque me quieres follar, o porque quieres burlarte de mí, pe-
- Por la primera, la primera - Me interrumpió y contestó como un niño pequeño al que le preguntan la tabla del 2.
Conté hasta diez mentalmente, definitivamente odiaba que me interrumpiesen.
- No me interrumpas... Y lo que te estaba diciendo, cualquiera que sea tu motivo, me da igual, porque antes o después te aburrirás de que te mande a la mierda y te buscarás a otra persona que te entretenga y que acepte follar contigo, por tanto... ¿Por qué no nos ahorramos todo ese problema y saltamos directamente al final? Ese en el que los dos hacemos como que no nos conocemos y tú te tiras al primero que esté disponible - Hablé cual actor de telenovela, haciendo numerosos gestos con un dedo y para finalizar mi interpretación, di una sonrisa más falsa que el trasero de la Nicky Minaj, a la par que pestañeaba repetidas veces.
- Princesa, pero el problema es que yo no me quiero tirar a más nadie - Alcé una ceja - Bueno, por lo menos ahora no, de hecho desde el viernes no quiero, que después de que te fuiste yo también me marché y no me enrollé con nadie, lo digo de verdad - Levantó una mano y me mostró su palma para demostrar que no mentía, y yo... Bueno, yo rodé los ojos, pues obviamente no me creía nada, menos viniendo de una persona como él.
- Ya, y a mí me espera Lonardo DiCaprio en casa.
- Lo digo en serio, nunca había insistido tanto con alguien para echarle un polvo, considérate especial.
- Pues mantén tu tradición y no insistas... - Me encogí de hombros como si hubiese dicho lo más obvio del mundo.
Y es que para mí lo era, yo jamás le insistiría tanto a una persona, a menos que me gustase para algo más que tener sexo, pero evidentemente, este no era su caso.
- Venga ya. ¿Me vas a decir que no te atraigo ni un poquito? - Preguntó, pero por la forma en que lo hizo, parecía que ya supiera la respuesta.
- Nop, nada de nada - Respondí con falsa indiferencia. Era obvio que estaba mintiendo.
Pero es que a pesar de que le aborreciera, era difícil no estimularse ante su increíble físico.
- Ya. ¿Y por qué te sonrojaste cuando estábamos en la columna? - Alzó una ceja.
- Pues porque hacía calor imbécil - Respondí evasivo, y rojo por haber recordado el momento, causando que él comenzara a reír escandalosamente.
- Ya. ¿Y ahora por qué te sonrojas?
- ¡Pues porque me haces pasar vergüenza recordándome eso!
- Joder Jin, reconócelo, te pongo - Dijo encogiéndose de hombros como si fuese una verdad que él no necesitaba que yo le confirmase, y con una expresión de orgullo en el rostro. Y tal vez tenía razón... No, de hecho, la tenía, pero igual nunca lo admitiría en voz alta.
- Eres insoportable.
- Un insoportable que está muy bueno, aunque no tanto como tú - Rodé los ojos y reí ligeramente. Este tío era incorregible, así que decidí ignorarle y ver si me comía la dichosa hamburguesa. Además, eso de recibir cumplidos constantemente no estaba tan mal - Joder, de verdad te ves increíble cuando sonríes.
- Siempre me veo increíble - Intenté demostrar que su comentario no me había afectado, y él me sonrió asintiendo, pero no como las otras veces, era más una expresión de admiración o algo así.
Y yo no pude seguir haciéndome el duro, por lo que también sonreí ligeramente, y seguido le di una mordida a mi comida.
Luego de haber pagado y salido del lugar, me disponía a largarme con mi hermano a casa y alejarme cuanto antes del simio, que si bien no me había desagradado tanto en esta ocasión, igual me ponía incómodo y lo consideraba un imbécil, por lo que mientras más lejos estuviera de mí, mejor.
- Hyung, vete tú antes, yo me voy con Tae, ha dicho que nos invitaría al cine - Kookie se encogió de hombros.
- ¿Yo? ¿Cuándo he dicho yo e- El castaño fue callado por la mano del menor, quien seguidamente me guiñó un ojo.
Maldito niño, ya se enteraría en casa.
Jimin comenzó a reír, y ellos, junto a Hoseok y Yoongi, se alejaron en la dirección contraria a la que yo iría, y a pesar de que ninguno de los más jóvenes vivía en ese sentido, supuse que de verdad forzarían al pobre Tae a pagarles las entradas, o pasarían el rato en sabría Dios dónde.
Cuando todos se alejaron, me volteé hacia el moreno, que me miraba burlesco con sus manos en los bolsillos.
- ¿Nos vamos? - Ignoré completamente su pregunta y empecé a caminar, molesto por tener que pasar los 20 minutos restantes a su lado - ¡Hey princesa espera!
- ¿No tienes nada mejor que hacer que esto?
- ¿A qué te refieres? - Preguntó fingiendo ignorancia y le lancé una mirada asesina.
- A seguirme.
- No te estoy siguiendo, te acompaño a casa... Y en todo caso igual me tengo que ir por este camino, mi casa también queda por aquí - Una vez terminó de hablar, yo frené.
- Vale, pues que te vaya bien, olvidé que tengo que ir a comprar algo al súper - Mentí, cruzándome de brazos.
- Vaya, que casualidad, acabo de recordar que yo también tengo que comprar algo - Obviamente me estaba vacilando.
- Tío, en serio, para ya, me estoy cansando de esto.
- Jin, ¿qué pasa ahora? Creí que habíamos resuelto nuestros problemas ahí dentro - Señaló al local de comida rápida donde estuvimos la última hora.
- Lo que pasa es que sigues persiguiéndome, y me da igual lo que insistas, no voy a acostarme contigo.
- Vale, entonces hagamos una cosa, olvidemos todo hasta ahora y seamos amigos.
- Ya claro, porque tú seguro que tienes mucho interés en ser mi amigo - Respondí sarcástico.
- Bueno, si no hay más remedio, algo es algo - Se encogió de hombros.
- ¿Por qué insites tanto con alguien que no quiere estar contigo? Si lo haces porque te molesta que te haya rechazado la primera vez y quieres que follemos por tu orgullo o alguna mierda de esas que sepas que-
- Eh, eh, eh, para el carro - Interrumpió mi discurso, y la verdad que lo agradecí, pues estaba realmente curioso por que me explicara - No sé si te habrás dado cuenta, pero vergüenza es algo que precisamente no tengo, así que si estoy insistiendo contigo es porque me interesas lo suficiente como para eso, no porque me moleste que me hayas rechazado o lo que sea que estés pensando.
- Sigo sin entender, es decir, sé que soy jodidmente guapo y tal - El simio rió por lo bajo ante mi "modesto" comentario - Pero a mí en tu posición se me hubiesen quitado las ganas de insistir desde el tercer rechazo...
- Y a mí normalmente también me hubiese pasado eso, pero además de estar bueno, me caes bien, así que pretendo seguir insistiendo hasta que por lo menos podamos hablar sin que quieras morderme la cabeza - En los últimos momentos había dejado de lado su expresión risueña inicial, y ahora hablaba con total seriedad, por lo que me sentí ligeramente intimidado y por mi cabeza pasó la idea de que tal vez se estuviese interesando en mí verdaderamente, y no solo para cubrir sus necesidades carnales. Pensamiento que tan rápido como llegó, se esfumó, pues me había quedado claro que Simiojoon era un pervertido, y que probablemente esta fuese algún tipo de táctica - ¿Entonces qué dices? ¿Amigos?
Me ofreció una sonrisa segura y extendió su mano para que la estrechara. Y juro que por un momento casi me lo creo y se la doy, pero en el último instante reaccioné y la aparté con brusquedad.
- Vete a la mierda Simiojoon - Y seguí mi camino con la cabeza bien alta, avanzando en mi fase diva de la que ya os he hablado antes.
- ¿Simiojoon? - Preguntó, para acto seguido reír y seguirme el paso - De verdad eres divertida princesa.
Hice caso omiso a su comentario y seguí caminando con fingida indiferencia, mirándole de reojo y notando que había vuelto a su expresión burlona habitual, a la cual ya me había comenzado a acostumbrar.
Y...
¿Para qué mentir?
A estas alturas no me desagradaba completamente.
Nuevo capítulo, espero que os esté gustando esta historia, yo la verdad me la estoy pasando muy bien escribiéndola.
Muchas gracias a los que votáis y a los que no lo hacéis también, el simple hecho de que le estéis dando una oportunidad a esto me pone muy feliz.
Besos 😘😘😘😘
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top