Capítulo 10- ¡Hyung! ¡Quiero volver a salir en los capítulos!

Jin's pov

- Y estos son los servicios para los clientes - Mencionó Tae Il apuntando hacia los baños.

Aún quedaban comensales en el local, pues solo eran las 8, pero nuestro horario había terminado, y como bien él dijo anteriormente, al terminar nos mostró todo el lugar.

El sitio era precioso, sin duda, era espacioso y la decoración tenía tanta clase como podía imaginarse, sin embargo, a pesar de poseer tantos lujos y tanta modernidad, resultaba cálido y acogedor, no sabría bien cómo explicarlo.

El caso es que era fascinante.

Yo, en una situación normal, hubiese observado como un fanático que conoce a su ídolo, sin embargo, por cierto simio con cabello gris que no salía de mi cabeza, no pude disfrutar del tour como Dios manda.

- Y bueno, eso es todo chicos, espero que haya sido de vuestro agrado... Mañana os espero a la misma hora - Nos ofreció una sonrisa de ángel, de esas que solo él podía hacer, y luego volvimos a entrar a la cocina, para posteriormente ir hacia la sala de descanso y marcharnos por la puerta que nos dio la bienvenida.

- Ha sido un placer hyung, de verdad que esperamos con ansias trabajar aquí - Dijo Youngjae.

- Sí... Ha sido increíble, de verdad, muchísimas gracias por esta oportunidad.

Estaba nervioso, si bien Namjoon no había vuelto a aparecer, no podía evitar pensar que todo se iría al traste por su culpa, o bueno, mejor dicho, por la mía, porque por haberle tratado mal todo este tiempo desde que nos conocimos, me temía que hablase con el dueño para que me expulsara o qué sabía yo.

Realmente me puse un poco paranoico, pero no podía evitarlo.

- Espero que mañana me impresionéis - Hicimos una venia a modo de despedida, y acto seguido, salimos.

Fuera, ya estaba todo oscuro, solo había una farola, y hacía un poco de frío.

Me disponía a salir del callejón junto a Youngjae, cuando...

- Joder, ya era hora - Una voz que conocía a la perfección, hizo acto de presencia, para que luego su portador se separara del muro en el que estaba recostado y saliera a la luz, dirigiéndose hacia mí con una sonrisa de medio lado que, aunque jamás lo hubiese admitido en voz alta, me ponía bastante - Princesa, ¿tienes un momento?

- Nam-mm-joon - Sabía que antes o después me lo encontraría porque, joder, este era el puto negocio de su padre, pero... No pensé que fuese tan pronto.

- El mismo - Sonrió burlón - ¿Podemos hablar? O mejor dicho, creo que tenemos que hablar.

- No creo que ahora podamos, quiero decir, está Youngjae aquí y tengo que acompañarle porqu-

- Oh no, tranquilo, mi madre me ha avisado de que ya ha llegado, así que yo os dejo ¿vale? Adiós - El castaño se despidió y emprendió su camino dejándonos totalmente solos.

Yo por mi parte veía cómo se marchaba con mirada suplicante, rezando porque se volteara con un repentino cambio de opinión y dijera: "No Jin, pensándolo bien, mejor me voy contigo, lo siento chico guapo, en otra ocasión hablareis"

Pero evidentemente eso no pasó.

- Bueno, ahora sí que podemos.

- ¿Qu-é pa-asa? - Contesté nervioso, una vez más, y en este caso no solo por lo sucedido en el restaurante, sino porque estar en un callejón, a oscuras, con un moreno que estaba buenísimo y que tenía un abierto interés sexual en mí, no era mi idea de situación ideal.

O tal vez si lo fuera, porque menuda película porno que podría salir de esto, pero realmente no tenía cabeza para nada más que el hecho de que Namjoon era el hijo de mi puto jefe.

- Bueno, pues que parece que ahora nos vamos ver mucho más a menudo - Respondió encogiéndose de hombros, con sus manos en los bolsillos, y mirándome con burla.

Seguramente pensaba que me tenía acorralado, y pretendía amenazarme con hablar con su padre para que me expulsara si no follaba con él o alguna locura de esas, pero aunque esa posibilidad me asustaba enormemente, yo, Kim Seokjin, obviamente no iba a ceder, así que adelantándome a los acontecimientos, decidí exponer sus planes y negarlos incluso antes de que los propusiera.

- Mira Simiojoon, creo que sé por dónde vas - Puse una mano en alto, mostrándole la palma - No, mejor dicho, sé por donde vas, porque desgraciadamente, siempre vas por ahí, así que si piensas chantajearme con mantenerme en este sitio para que folle contigo, pues ahorrátelo, no pienso hacerlo, y me da absolutamente igual que tu padre sea el puto dueño, no voy a venderme por un puesto a un pervertido gigante que piensa con el elemento que vive entre sus piernas. Así que, ¿sabes qué? ¡Vete a la mierda! - Solté todo eso a una velocidad inquietante, mientras le señalaba con el dedo.

Él simplemente miraba con los ojos muy abiertos y con cara de asombro, probablemente porque no pensó que me negaría de antemano a su macabro plan.

- ...

No hablaba, y el rubor comenzaba a escalar por todo mi rostro.

- ¡Pero di algo por Dios!

Esta vez tampoco respondió, pero a cambio, empezó a reírse escandalosamente, tan fuerte que de seguro le escuchaban en cocinas, y estuvo tanto tiempo haciéndolo, que terminó doblándose y con las manos en el abdomen, a la par que pequeñas lágrimas salían de sus ojos rasgados.

Y como os podéis imaginar, a este punto, yo ya estaba rojo como un puto tomate.

- De verdad... que... eres divertido... princesa - Dijo entre risas y respiró profundo, limpiando las gotas que resbalaban por su cara, para después agregar: - Tienes mucha imaginación Jin - Y una vez se hubo incorporado, pasó una mano por mi cabello, mano que aparté con brusquedad, cual perrito rabioso.

Me crucé de brazos frunciendo el ceño.

- ¿Imaginación? Sí claro, como si no pensaras sacar provecho de esta situación.

- Bueno, la verdad es que sí pensaba hacerlo, pero no de esa forma. Había planeado pasarme todos los días por aquí para verte el culo mientras cocinabas - Rodé los ojos ante su pervertida frase - De hecho, eso que has dicho ni se me había pasado por la cabeza. Pero ahora que lo pienso... - Dijo esto último con voz coqueta, subiendo y bajando las cejas rápidamente, gesto que lejos de resultar atrayente, me dio escalofríos.

- Namjoon - Le paré antes de que continuara la frase.

- Na, pero en serio Jin, no tienes idea de la alegría que me dio verte ahí. Pensé que te habrías escapado de la escuela por un pasadizo subterráneo o algo así para no tener que verme y-

- Espera - Le interrumpí - ¿Estuviste en mi escuela?

- Sip, llegué a eso de las 2:10 ¡Y estuve esperándote hasta las 4! Pensaba buscarte para invitarte a comer o algo, y ya sabes, reforzar nuestra amistad - Se encogió de hombros - Pero como vi que no salías, me marché pensando que habías huído de mí y planeando esperarte mañana por la mañana, pero vaya, resulta que a partir de ahora no tendré que pasar tanto trabajo para verte - Me sonrojé violentamente otra vez, pues me sorprendió que hubiese hecho eso, quiero decir, tal vez lo de esperarme en la escuela no me impresionaba, pero que estuviese por dos horas, me tomó totalmente desprevenido, de hecho, yo le hubiese echado 20 minutos de espera como mucho.

Además, también me extrañó que después de eso le quedasen ganas de verme al otro día, si una persona me hubiese hecho esperar por tanto tiempo, yo de seguro le mandaba a la mierda y no le volvía a ver en la vida, a no ser que fuese alguien importante.

Definitivamente Namjoon me tenía totalmente desconcertado, me costaba trabajo creer que solo quisiese follar conmigo.

- ¿En serio hiciste eso?

- Pues sí, y además, te he esperado dos horas más aquí fuera, no tenía idea de a qué hora salíais y no pregunté porque hubiese sonado raro... Supongo.

- ¿Y para qué me esperabas ahora?

- Pues porque me apetecía verte -  Y una vez dijo esto, sonrió hermosamente.

Creo que fue la primera vez que le vi hacerlo de forma tan pura, no había rastro de burla o perversión, solamente... Ilusión.

- Yo... Bueno, supongo que lo siento por, ya sabes... hacerte esperar - Contesté sin saber muy bien qué decir.

- No te preocupes, valió la pena.

Y ahí mi corazón comenzó a bombear como un jodido loco, realmente no podía entender a este chico, sus cambios de actitud me tenían totalmente perdido.

- Por cierto, creo que debería aprovecharme un poco de esto, ¿no? - Alcé una ceja, sin tener idea de qué barbaridad iba a soltar ahora - Tranquila princesa, que no te voy a pedir que follemos ni nada, o por lo menos no ahora - Rodé los ojos, ya volvía a parecerse al Namjoon de siempre - Bueno, había pensado en que me recompensaras con una cita, o  por lo menos que quedásemos a tomar algo de forma casual, de hecho, me conformaría con charlar un rato en plan serio, sin que lances fuego por la boca... Y antes de que digas algo, me refiero a charlar de verdad, no en modo pervertido - Me hizo gracia que me aclarara esto, porque precisamente, por el mal empleo del término "charlar", empezó esta especie de relación que llevábamos.

- Supongo que... - Lo dejé en el aire para ver su reacción, y me derritió totalmente el que pusiese una expresión genuina como la del gato de Sherk. Le salía sola, se notaba que no la forzaba y que estaba ansioso por que mi respuesta fuese positiva. Se veía tan adorable que antes de que pudiera considerarlo, ya estaba pronunciando las siguientes palabras - Estaría bien eso, lo de charlar un poco, digo.

Y de nuevo, esa puta sonrisa de pura felicidad que hacía que mi corazón adquiriera vida propia e intentara salirse de mi pecho.

¡Holis!

Por fin el Jin le está dando un chance al RM😂😂😂 Muchísimas gracias por leer, pronto subiré el otro capítulo.

Besos  😘😘

Pd: En el próximo si pienso sacar a Tae, lo digo por quienes los extrañais, incluyéndome.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top