El suelo tembló, y una preocupante ruido se expandió por el pueblo que llevaba varios días sucumbido en silencio.

Sus corazones vibraron, todas se miraron buscando respuesta, y no tardó en verse en el cielo azul una enorme columna de humo negro.

— Busquemos un refugio — Lucia hablo ya sin importarle su volumen, pues todos los muertos en la redonda comenzaron aparecer.

Amelia apretó su mandíbula, avanzo rápido, aturdidas y desconcertadas, por ver toda la ciudad reviviendo, en un caos apocalíptico.

Un panorama infernal, gente que había estado escondida salió de algún lado, siendo perseguida por  cuerpos descarnados.

El silencio cada vez muere por la música del nuevo caos, después de tiempo todas se sienten abofeteadas por la crudeza de la realidad.

Por más que ellas avancen en su caminata, cada ruido les hace sentir más paranoia, Luz tenía un tic en su ojo, Amity se aferra a las prendas de Luz, cada vez los olores putrefactos son asfixiantes,  era casi inevitable no voltear a ver a la calle cuando escuchan motores de autos arrancando con ferocidad quemando llantas, con presumiendo el poder de su música.

Era como estar en el set de The purge, pero en realidad no hay un corté de escena, el miedo escarba por sus pieles, arrullando los gritos de personas, cada vez más aturdidas por las presencias de tantos ruidos repentinos.

— ¡Cuidado! — Wyonna alzó su hacha y la balanceo golpeando con un cuerpo putrefacto, que al golpear su epidermis, nervios y astillando el hueso, el cuerpo deja caer la mandíbula seguido de un genuino alarido de dolor humano.

Causando escalofríos en todas que no se esperaban, que aquel cuerpo andate de ojos saltones fuera gritar, luego se movió de forma errática y seguido de vociferanciones roncas y desgarradoras que atrae más cuerpos, y el alarido se quedó sin aire y se volvió en unas chirriantes risas. 

Willow movió con ansiedad el hacha golpeando la cabeza, una tras otra, pero el cuerpo seguía riendo. 

Lucia se avalanzo a la pelea dando un patada tirando el cuerpo, y puso sus pies a cada extremidad externa.

Los gritos vuelven y suenan tan desesperados como si fuera una persona viva, el cuerpo se sacude con violencia, pero Lucia ignorando los gritos tan humanos.
Se prepara a golpear como su fuera a jugar golf, respiro hondo y con una mueca de desagrado, desarmó la cara del cuerpo con agresividad y naturalidad en su forma de golpear.

Cuando terminó relajo sus hombros, pero eso no significa que están fuera de peligro varios muertos viene. En su dirección, Luz aparto la mirada con ansiedad, Amity enterró su rostro en Luz, y las otras mayores se sintieron distintas emociones, entre seguridad, miedo, y asco.

— Busquemos un refugio —Dice escupiendo al suelo pues el olor parece empeorar.

Todas asienten y a tes de moverse se paralizan al ver helicópteros de militares rondar por el cielo y dirigirse al origen de las humo negro.

Y fue cuando otro avión distinto aparece por el cielo que parece volverse más oscuro, más columnas de humo negro aparecen, y la tierra tembló, aquellos ecos solos habían escuchado en los cines, tal vez alguna vez en la vida real pero jamás se habían sentido tan intensos.

— Están disparando — Wyonna apunto al firmamento, viendo como esos aviones despliegan armas. — Nos están disparando.

Los ritmos cardíacos se elevan, repitiendo el veloz patrón, expidiendo por sus venas la adrenalina, aterradas.

El suelo tembló con agresividad, indudablemente habían dejado caer algo grande, ¿una bomba?.

Se elevó una niebla de polvo, los sonidos de motores y gritos aparecen cada vez más cercas de ellas, pueden sentirse atrapadas.

El cielo que pareció ser azul más temprano es empañado por el negro y rojo.

Ninguna de ellas sabe bien que pasa, solo avanzan Lucia asegurando que su hermana vaya a su ritmo, la banda de guerra más tétrica y melancólica mes hace sentirse desamparadas.

La tierra tembló, y un débil destello percibieron, los cristales de distintos edificios y automóviles temblaron simultáneamente y estallaron. Algunos edificios de cimientos se sacuden.

Ninguna de ellas se detienen, solo avanzan lo más lejos que pueden, con genuinos rostros de temor y ansiedad, desesperadas por la falta de visión, haciendo difícil enfocarse en un camino fijo y libre de mordedores.

Esa sensación de impotencia encarna en sus huesos, provocando que sus piernas les flaqueen y sus gargantas son expuestas al humo haciendo que ella tengan tos rasposa, ojos irritados por las partículas de polvo.

Pueden escuchar gritos en sus alrededores, ni siquiera saben si son de personas vivas o de esas cosas, Luz juro escuchar el llanto de un infante y Amity pudo ver figuras difuminadas arrancando pieza por pieza a algo muy pequeño, hasta que la cabeza fue desmembrada. 

Amity pensó que era un sueño, es irreal, aún que no pudo escuchar.

Otra gran explosión, las hizo ponerse de rodillas y un dolorosa ventisca las azotó, los edificios tiemblan, y todas se levantaron adolorido y con algunas lágrimas de dolor, al caer al suelo cayeron en piedritas y fragmentos de vidrios, habían tenido suerte varios postes de luz cayeron junto con cables de luz, algunos grandes avisos, pedazos de edificios se derrumbaron, y autos fueron puestos en otros lugares.

Sus tímpanos eran atormentados por un pitido agudo, aturdiendo a las jóvenes.

Lucia arrastró sus rodillas por el suelo, ayudo a Amelia apoyarse de Wyonna, y fue hasta donde Luz, y la ayudo a levantarse, y le quitó de la espalda a Amity, la chiquilla se aferró a ella, y levantó a Luz del brazo como si no pesará nada Luz.

Miraba por todos lados cada vez más desorientada. Apretando su manos heridas en un puño, que dejó blancos a sus nudillos.

Todo seguía en diminutos temblores, se acercaron sus espaldas contra las de todas y están agotadas.

Sus piernas se sienten pesadas.

— Nos vamos a meter a una casa — sugiere Lucia

— Una tienda de abarrotes suena mejor. — Amelia opino.

— No — Dice ofendida por ser que le han llevado la contraria

— ¿No?

— Una tienda puede tener más gente, infectados es mucho más peligrosa. — Explico en un tono irritado

— En una casa que te asegura que no tenga personas dentro, con armas y al menos en la tienda de abarrotes podríamos tomar provisiones.

— Es demasiado riesgoso.

— ¿Quieres quedarte aquí? — Pregunta fastidiadas pero era su miedo hablando. — Aquí estamos-

— Muy desprotegidas, lo sé, claro que lo sé — Exclama enojada, sintiendo que le están diciendo incompetente.

— Chicas los departamentos están algo lejos, pero estoy segura que no es buena idea. — Wyonna habló — En todo caso, lo más cercano es Dans Club. — Wyonna inclinándose a la idea de Amelia. — Aún que, no sabemos que tantas personas estén ahí, y si tendremos alguna oportunidad de llegar hasta ahí.

— Wyonna debería llevarnos Lucia, no sabemos dónde estamos — Luz intervino antes que su hermana se ponga más terca por los nervios.

Todas están de acuerdo con eso, si Lucia les seguía guiando lo más probable es que las dejé algo más lejos de Hexside.

— Al llegar a la tienda podemos irnos en la mañana a Hexside. — Amelia dice rápidamente. Pero esto no le complace a Lucia.

— Como sea, vámonos, Wyonna iluminanos — Contesta con cierto recelo Lucia.

La densa niebla de polvo parecía ceder y permitir una mejor vista, Wyonna tomo la muñeca de Luz, y tardo unos segundos antes de comenzar a caminar de forma automática.

— Es por aquí