De héroe a villano
Boscha se recostó contra la pared agotada, no importa cuánto tiempo durmiera los recuerdos de los días anteriores le persiguen como fantasmas sumando que el grupo ya reducido de personas no la dejan respirar clavando sus miradas asesinas en ella, cada cosa que ella hiciera esta bajo la mirada de rencor y recelo del grupo, lanzando palabras bajas de veneno, culpándola.
Dentro de su mente, su conciencia está recriminándose y preguntado si tono la decisión correcta.
Pero solamente no hubo tiempo para seguir un plan, solo sucedió todo.
Recuerda todo, hace tres días ella y Prudence, Agatha y otra chica tomaron la decisión que no podían seguir ahí en esas duchas que hacían del olor insoportable, asfixiante, nauseabundo, todas ya tenían hambre, y no podían continuar bebiendo agua directa de las duchas.
No podían arriesgar a enfermarse, sumando que, Pandora empeoraba aún más en cuestiones de horas Pandora se veía deshidratada, con fiebre y para la desgracia de todas su cuerpo comenzó a expedir un terrible aroma, que daba la impresión de atraer a otros infectados. La pierna de Pandora era ya negra y la herida era horrible de ver, mover o tocar su pierna era provocar los peores gritos jamás escuchados que alborotaron a los infectados que aullaron en coro infernal, su cabello negro se cayó a mechones, y sus ojos tenían un color amarillento, su dientes se veían amarillos y escupía constantemente sangre, más bien coágulos gigantescos, y para el tercer día.
Pandora había perdido el control de sus esfínter, había sangre saliendo de su parte inferior, sangre y excremento con orina color cobrizo.
Ninguna de las chicas tuvo tanto estómago para ayudarla, la mantuvieron en las duchas con agua constante saliendo, pero el olor a carne podrida pero más potente les hacía sentirse más enfermas.
El plan de irse a los techos y prender fuego para captar atención fue la mejor idea de todas, pero ninguna de las chicas quería abandonar a Pandora.
Pero nadie quería cargarla, y nadie tenía los ovarios de tomar la decisión de dejarla morir con aquellas infectadas o por su infección.
Dentro de Boscha, sabía que Pandora no viviría.
Y debió haber tomado la decisión.
Eso debió haber hecho.
Pero si lo hubiera hecho todas la seguirán mirando como un monstruo, además que Prudence y su grupo de amigas cercanas pudieron haber colaborado para voltear los papeles y ellas quedar como las inocentes héroes y ella como la villana, Agatha fue la primera en decir "Pandora no sobrevivirá", Prudence continúo con un muy cínico "no podemos retrasarnos por cualquiera de nosotras, si una está herida estará por su cuenta propia."
Claramente estaban listas para apuñalar por las espaldas si eso hacia falta.
— Soy una idiota — Boscha se culpo dándose golpes mentales.
— A veces lo eres — Willow llegó dónde la capitana y se sentó a su lado. — Pero, lo que pasó no fue tu culpa.
Willow intento animarla sentándose a su lado recostando su cabeza en su hombro y tomando la mano y entrelazando sus dedos con los de la capitana, y con la otra mano le entrego una lata de comida y un refresco. Boscha se ruborizó un poco y giro su cabeza a otro lado, y Willow beso su mejilla.
— ¿Sin señal aún?— Dice aún con su ceño fruncido.
— Pude recibir mensajes de Augustus, dice que está en instalaciones militares junto con su papá y más sobrevivientes.
— Perras con suerte — Dice frustrada con la mandíbula apretada — perdón, no, yo, es solo que, me hubiera gustado por haber salvado a todas. — Con culpabilidad se aleja de Willow y abre desganada la lata de comida, no tiene hambre pero debía de comer algo.
— No seas tan dura contigo misma, nadie podía saber que pasaría — miro el celular y luego a Boscha, la miro con algo de tristeza — Augustus dice que varios puntos del pueblo están muertos, si no es por los constantes saqueos es por los infectados.
Boscha giro los ojos y se llevó la lata a su boca para comer algo.
— Wyonna me mensajeo, dice que ya viene en camino, viene por nosotras, eso fue lo último que llegó ayer.
Desde hace días la señal se ha vuelto intermitente, pero en intervalos de media hora es posible recibir todo tipo de señal, cosa que la gente que aún conserva algún aparato electrónico usa para intentar contactar a sus familias, amigos, ayuda, lo que sea.
Boscha, las primeras horas todas las chicas intentaron contactar a familiares y buscar atención y ayuda, pero la señal fue muriendo, todas las personas comenzaron a entrar en pánico, el no estar en comunicación con demás personas era terriblemente angustiante, sumando que el caos del exterior exploto, las primera 48 horas que pasaron encerradas, se comunicaron lo mas que pudieron dejando mensajes de buscando ayuda, pero como los de ellas habían cientos de de personas que tambien querían ayuda. Las redes se inundaron de videos, fotos, noticias, mensajes de auxilio que como los de ellas no han podido ser respondidos, la desesperación, ansiedad invadió a cada una de ellas.
Boscha despues de un rato busco llamar a su madre y luego a su padrastro en esos momentos en que la señal volvía, no tenia mensajes de ellos, tal vez de otras personas, pero de ellos nunca llego nada, y el cuarto día que perdió su celular en una huida no recibió nada, Boscha nunca fue unida a su padrastro y su madre y ella su relación era complicada, sabía que su padre estaba en la ciudad y su madre iba en camino a la casa de los Blights para ir de compras con la madre de Amity. Boscha tenía el presentimiento que ya no tenía a nadie, más que a Willow, y lo único que le importa ahora es reunir a Willow con su hermana.
Willow por su lado tenía llamadas y mensajes de sus padres del día que comenzó todo, mensajes donde le decían que ellos iban por ella de inmediato, que ellos podrían darle un aventón a Boscha y a otros amigos de Willow.
Pero ellos no llegaron.
Y Willow intenta tener la esperanza que ellos están bien, que solo fueron retrasados ellos llegarán.
Willow se quedó en silencio con algunas lágrimas al borde, pero Boscha acarició la mejilla de Willow y tomo entre sus manos con delicadeza su rostro.
— Vamos a esperar a Wyonna, juntas, ¿De acuerdo cupcake? — Boscha dijo, dándole un beso en su frente y luego en sus mejillas.
Lo que quedaba de chicas sobrevivientes estaban atrincheradas en la cocina de la escuela, con comida, ahora el plan de Willow y Boscha era llevar al grupo hasta el techo y ellas dos esperar en la cocina el momento en que su hermana llegará.
— ¿Estás segura?
— Completamente chica flor — Beso la mejilla de Willow y la abrazó, escondiéndo su rostro. Era el fin del mundo que importaba verse melosa enfrente de todas esas chicas que la odian.
Ya no importaba.
— ¿Solo nosotras dos? — Boscha pregunta con su voz amortiguada, pero Willow la escuchó.
— Yo...no sé si mi hermana tenga espacio o en que vaya a llegar ella, me dijo que venia con una ami-
Todas se quedaron mudas, todas voces de las chicas que hablaban fueron calladas abruptamente con ruidos externos, los muertos parecían estar muy ruidosos moviéndose con velocidad de un lado a otro.
Boscha tomo su crosse ya abollada y Willow la imitó.
Las que tenían armas se preparon mentalmente. Por cualquier cosa sucediera, todas sostuvieron sus respiraciones, algunas listas para huir, otras para golpear aunque no del todo preparadas para escuchar esos gritos que daría cualquier persona normal si es golpeada salvajemente.
Boscha camino a paso lento y firme dónde Prudence.
— ¿Está bloqueado? — Apuntó con su cabeza a la puerta.
— Si, por cuánto tiempo no tengo idea. — Habla en voz baja y neutra, pero el miedo se refleja en sus ojos negros. — Esperemos a qué se alejen, y vamos a los techos.
Ambas asienten, y comenzaron a revisar las provisiones, no podían decir con exactitud cuánto tiempo pasarían en los techos, pero llevaban comida suficiente para todas.
Boscha y Willow apartaron la comida que ellas dejaron, tomando lo que pudieron de forma discreta y la guardaron en la bolsa que habían tomado del suelo.
Ya solo quedó la interminable espera, cada ruido parecía maximizar en aquellos corredores que poco a poco el olor se sentía más fresco.
Significa que los infectados están lejos, Boscha y Prudence mueven los objetos con que bloquearon la entrada lo más silencioso posible, y al terminar de desbloquear, Boscha se da cuenta que Prudence lleva la comida, solo ella.
Lo cual en cualquiera que fuera los casos, si algo le pasa dejaría a las demás sin suministros. Pero no quiso decir nada, no sentía que debía hablar, por como todas le miran, no quiere causar problemas.
Caminaron por el pasillo alertadas y con al abrumador silencio, perplejas por el panorama tan devastado de los pasillos.
Todas están con la ansiedad al máximo, algunas con unos tics fáciles, otras apunto de vomitar de los nervios y el olor que incrementa peligrosamente.
Todo el ambiente es aplastante, tanto, como si todas las paredes se acercarán para aplastarlas y destruir cada hueso de sus cuerpos, comprimir tanto que sus ojos saldrían de sus órbitas, sus huesos estarían pulverizados todos su órganos serán papilla y saldrán por cualquier lado. Claro si esto no sucedía serían asaltadas por infectados directo a sus cuellos, decoradas en vida, y después del incidente de días atrás no quedaba duda del miedo, y profundo dolor que causaría ser atacadas como estás cosas.
Con el simple hecho que tendrían que pasar dónde ocurrió todo. Ninguna estaba lista para lo que se vino en esos momentos, nadie lo estaba.
Pero no hay vuelta atrás y hay que seguir adelante.
Por la lentitud en que todas caminan tardan en llegar hasta las escaleras que para su desgracia está llena de esas cosas que siguen quietas.
En esos días que había transcurrido desde el día uno, información fue liberada y Willow con ayuda Augustus pudo confirmar y obtener más información.
Hay muchos puntos que aclarar con la información que se obtiene, pero en ese momento hay dos clases de muertos vivientes, los que están quietos esperando a desatarse de forma salvaje, y los otros, que estos están moviéndose como si les hubieran inyectado bebidas energéticas durante años.
Ambos son peligrosos, los primeros no son tan peligrosos se mueven en un caminar rápido, son peligrosos más fuertes, y cuando están en manadas numerosas no hay mucho que hacer. Por otro lado están los veloces, ellos siempre se están moviendo en busca de más víctimas, y son más agresivos y fuertes.
Y en esos momentos nadie de las chicas quería moverse, por qué en cualquier movimiento incorrecto que causaría un ruido, las cabezas de lo que días atrás fueron sus compañeros se girarán e irán tras de ellas.
— Hay que evitar que nos vean, cuando la distracción haga efecto — Prudence con cautela se gira, y varias se miran las unas a las otras.
— ¿Umm Prudence? — La voz de una de las chicas suena frágil.
— ¿Si? — vuelve su atención a ella.
— ¿Qué es la distracción? — Se quedaron en silencio pensando.
— No es qué, sino quien.
Las gargantas de todas se cerraron, y sus ojos se abrieron como platos mirándose las unas a las otras, atemorizadas, deseando no ser ese quien. Prudence dejo que ese silencio se prolongara lo que ella deseo para mantener a todas sosteniendo aun mas su respiración excepto Boscha, Boscha quien le reta con una mirada venenosa y ella con cinismo la sonríe.
— quién mejor que la capitana del equipo. ¿Verdad Boscha? Eres la capitana, se supone que eres la mejor de todas aquí, se que podrás alcanzarnos en el techo. — Boscha ríe amargamente y levanta su dedo medio y esforzándose para no romper la cara de Prudence.
Todos los ojos caen en ella y no queda mucho tiempo para confrontaciones tiene que aceptarlo de la forma "buena" ella ya vio ese lado, para su desgracia solo ella, y no queria verlo otra vez.
— Está bien — entre dientes contesto
— Perfecto, nos esconderemos, y tú haces que todos ellos se vaya.
Boscha ni contesta solo se da la media vuelta con amargos y doloroso recuerdos frescos se palpan en su mente, el recordar lo que paso días atrás se ha vuelto su fantasma.
Todas las chicas se fueron a un salón, y antes que Boscha comenzará su distracción, Willow la sujeta con su mano.
— No tienes que hacerlo, a veces ser el villano no es tan malo Bo — Willow dice con algo de súplica en su tono de voz. — Quédate
— Willow. . .— Boscha miro a todos lados sin bajar la guardia — Yo...tienes comida suficiente, intenta buscar un salón vacío, yo volveré contigo y si no es así yo te-
Varios gritos femeninos fueron escuchados, haciendo que la sangre de ambas chicas se helara. Y en cuanto vieron salir del salón a al grupo en pánico total, fue su bandera roja. Boscha sujeto a Willow por su mano, vieron caer a Amelia contra el suelo sobre de ella estaba dos infectados y Cat, devorando su cuerpo en vida llamando a mas infectados con sus gritos de dolor, ya varias chicas huían directo a las escaleras, ellas dos comenzaron a correr, pues gruñidos y gimoteos de ex compañeros resonaron por los pasillos produciendo ecos.
Ambas corren, asustadas, intentando que está emoción nobles provoque su muerte, Boscha levanta su crosse y la sujeta, ambas chicas corren con tanto como sus piernas les permiten, sin importar si hacen mucho ruido, sus corazones golpean dentro suyo, disparando sangre y adrenalina por sus sistemas.
Boscha en diversas ocasiones azota el palo de metal contra los cuerpos de estos infectados para apartarlos, Willow daba fuertes empujones con su respectivo crosse intentando que estás cosas no se les acercarán. Siguieron corriendo hasta llegar a una zona medio vacía, no hay salones, solo pasillos largos.
La única puerta está al otro extremo, ambas chicas se miraron decididas a correr otra vez, y cuando estaban a unos metro está puerta se abre asomándose una cabellera negra que al verlas les hace señas para que se den prisa y suban, con desesperación las dos chicas usan toda la fuerza de sus piernas para llegar a la puerta y adentrarse a esta. Giraron de forma abrupta y se meten de forma brusca tropezando y golpeándose contra la pared.
Boscha se levantó de inmediato y se aseguró que Willow estuviese bien, después miro quien abrió la puerta y se encontró con...
— ¡Emira! — Ambas jóvenes dijeron sorprendidas y Emira las abrazo, Fue raro para las más chicas pero devolvieron el abrazo con fuerza y con algo de alivio de saber que ella estuviera bien y que ellas no eran las únicas en pie.
— ¿Chicas? — Emira esta algo conmocionada pero alegre de verlas, las tres se quedaron en él abrazo durante largos minutos hasta que la castaña les hizo una señal.
— Oigan podemos continuar con la reunión mas tarde tenemos que ir a buscar provisiones y—
— ¡No!, tenemos algo de comida aquí para todas — Willow les mostro el bolso del cual se habían caído algunas latas de comida pero hay suficiente para todas si lo racionan.
— ¿y Edric? — Boscha dice al notar la ausencia del chico alto, y esta pregunta hizo que la mirada ámbar de Blight se llenara de lagrimas y su expresión se entristeciera.
— Él — la voz quebrada de Emira hizo que todas se miraran deprimidas.
— El, estará bien Emira — la voz compasiva de esta castaña hizo que Emira sostuviera un poco mas sus lagrimas. — El esta muy deshidratado y agotado, débil, por eso buscamos comida, bueno buscábamos.
Emira no dice nada solo asiente con su cabeza aun cabizbaja, y todas se quedaron mudas y mirando a la Blight, sin saber bien que debían decir, este triste silencio se prolongo durante varios minutos hasta que los pasillos se quedaron silenciados.
— ¿y como saldremos de aquí? —Boscha recordó.
— Oh, si, la escuela tiene los pasillos que usan la gente de limpieza o maestros, solo que debemos ser silenciosas por que hay algunos infectados que llegan desde la sala de maestros. —La castaña explica ya con una voz mas baja. — Nuestro escondite esta en la enfermería del tercer piso.
Todas asienten y van siguiendo a la castaña con una distancia caminando en línea recta y despues girando por algunos pasillos oscuros y estrechos, prestando atención a cada ruido del lugar, y al girar en un pasillo un pestilente todas se detienen en seco, sosteniendo todo ruido de su cuerpo, están atrapadas en pasillos muy pero muy estrechos, si eran atacadas no abra forma de escapar.
La castaña las hizo regresar lentamente y con rapidez, pues el olor parecía acercarse a donde ellas estaban, Boscha caminan hacía atrás con cuidado pero el olor a muerte tambien parecía venir por donde ella vuelven se giro con dificultad y se paralizo al ver esa cabellera negra larga y un cuerpo en obvia descomposición, una pierna de color morado negruzco con pozos de mordidas por los que están chorreando liquido negro, y brotan de entre la piel gusanos blancos.
— ¿Pandora? — Boscha jadea entrando en pánico, los restos de la chica están destruidos, no tiene su mandíbula y su rostro tiene profundos rasguños y de hecho tiene una cuenca vacía. En su cabeza hay una poso, de golpes a los que ella en vida fue arremetida. Lo que alguna vez fue Pandora extiende su brazo descarnado y putrefacto, e intenta abalanzarse sobre Boscha.
La capitana que ya tenia los ojos algo llorosos, empujo el cuerpo andante contra la pared tan fuerte que algo espeso cayo por su espalda y cabeza llenándola de un horrible aroma, seguido de esto Boscha empujo el cuerpo contra otro pasillo y levanto su crosse y con los ojos llorosos arremete contra la cabeza, cada golpe le hacia llenarse de culpa y los recuerdos de los últimos días le hace sentir rabia e impotencia, la infectada ya no se movía pero Boscha continuaba golpeando hasta que fue detenida por Willow, de igual forma arrastrada por esos pasillos de tenue luz que poco a poco se extingue, conforme avanzan.
Era imposible no pensar en aquellos recuerdos que se repiten en bucle en su cabeza, que cortan su garganta, tembló al sentir como su mente la sumerge en el pasado y la va ahogando en remordimiento...
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