— ¡Por que no mueres de una vez! Eres desagradable— Brama en tono chillón y le lanza una lata, sin importar el tono de su voz o el estridnete sonido del metal chocando. 

— Eda aun así me quiere — Canturreo de forma burlesca acentuando su voz molesta haciendo enfadar al otro chico, el cual solo pone los ojos en blanco y sigue caminando a través del sendero que ya saben de memoria. — ¿Cuándo crees que nos enseñe a disparar con estas? — El chico castaño mostro una arma de juguete y sonríe de forma que incomoda al otro chico de mechones blancos . 

— Si, sigues hablando acabaras como Snaggle, ¡Devorado!—  Exclamo en un intento de asustarlo pero el otro chico ya se encontraba revolcándose en el lodo como si nada — ¡King aquí hay insectos, ¿quieres? — Dice para sumergir su rostro en el fango, y el chico de mechones lo mira asqueado pero no sorprendido

— Eda por que me hiciste esto — se lamento al tener que ir a levantar a su compañero del lodo, mientras dentro suyo hubiese preferido quedarse con Eda y no hacer nada, aun que la dama Búho dijo estar ocupada, y con ocupada se refería a dejar a Owlbert dormido y ella molestando a su hermana mayor. A él tambien le gustaría estar molestando a la fracasada de la hermana de Edalynn, en vez de eso esta en el bosque con molesto compañero del cual a King le gustaría cortarle la lengua, aun que tampoco arriesgaría a que él le muerda, mete su rostro en el primer charco de lodo que ve, su boca es tan contaminada mas que el mismo basurero del que el salió. 

La casa ya se veía cerca, King detuvo a Hooty de que lo siguiera pues tenían que revisar alrededor de la casa que no hubiera nada fuera de lo ordinario, y eso hicieron Hooty a protestas se fue por su lado y King agradeció la paz momentánea mientras busca indicios de algo sospechoso. 

Eda desde semanas había estado de buen humor, incluso con el mundo comenzando a desmoronarse frente ellos, Eda mantenía su sonrisa torcida y no paraba de hablar de esta tal, "Camila" y de las hijas de ella, King llevaba tres años viviendo con la famosa estafadora Dama Buho, y a pesar del tiempo aun no entendía el cambio repentino, nunca le menciono nada sobre la supuesta Camila y de sus crías, Lilith cuando intentaba joder el buen humor de su hermana decía cosas como "no podrás mantenerlas a salvo, no lo hiciste con los vivos menos con los muertos" cosa que si, arruina la expresión de Eda provocando que su rostro se arrugue en una desolada expresión, esta recobra el brillo de maldad que hace que Eda le contra ataque con otra respuesta mucho mas graciosa e ingeniosa y luego le enviaba a que liderara con Hooty, que era la segunda persona que mas saca de juicio a Lilith.

Bueno se trata de Hooty a quien no sacaría de quicio.

King da la ronda que le corresponde, se aseguro que las casas donde había búhos aun tenían agua y con eso ultimo revisado fue asegurarse que Hooty no se haya caído a una trampa, lo cual no estaría mal, pero por mucho que Hooty fuera tan desagradable y molesto, Eda aun le tiene aprecio por lo loco que era el chico, que a pesar  de verse joven no lo era, y además que el tiene un extraño trato con Eda del cual King tampoco esta enterado, solo sabe que Eda no se deshará de Hooty en un largo tiempo y el...no sabe que hace el en la casa de Eda pero tiene que soportarlo, mientras no toque sus varios peluches todo tranquilo. 

Al llegar donde se suponía que esta Hooty cuidando, se lo encontró en el suelo con las gallinas negras de Eda lleno de plumas y quiere creer que es tierra y no otra cosa. 

—Levanta tu desagradable y en plumado trasero, tenemos que volver — alejo a las gallinas de el chico

— ¡Buu! — King volteo los ojos y tomo del cuello de la camisa de Hooty y lo saco del fango. — Uy una mosca.

Hooty se lanzo sin importar si su caída inesperada se llevaría a King haciéndolo ensuciarse, King gruño pero cuando estaba apunto de reclamar furico, se encontró con Hooty cavando en el suelo sin darse cuenta que delante suyo esta...

— Hooty abajo — King tomo una de las piedra que estaba en el suelo y la lanzo directo a la cara haciendo que perdiera el equilibrio, Hooty se levanto del suelo y tomo una piedra mas grande y pesada, King busco apresurado una rama y la alzo y se acerco donde eso estaba intentado acercarse, golpeo las rodillas con toda la fuerza que pudo y balanceo su torso con la rama y arremete contra la cabeza, fue un movimiento fuerte y certero, despues de eso siguió dándole golpes hasta que esta cosa cae al suelo por falta de equilibrio, y antes que se pudiera levantar del suelo Hooty dejo caer sobre la cabeza esta piedra enorme.

— Lo siento amiguito — Dice el chico lleno de lodo y plumas, que se pone en cuclillas a punto de revisar al muerto, pero King lo toma de la oreja y lo aleja de el. — Oye yo queria-

— Eda y Lilith se encarga de eso, nosotros vamos a descansar.

Ambos chicos caminan apresurados, al entrar se encuentran al entrar a Owlbert recostado en el sillón, por ser el mas pequeño no lo arriesgarían a algo, sin duda Eda acabaría con todos quien le hiciera daño a su pequeño protegido, desgraciadamente el era el consentido, claro despues de King o eso quiere creer el chico.

Mientras tanto Eda resopla algo agotada sacando una hacha y llama a su hermana, que tambien va muy disgustada por el trabajo que tendría que hacer ahora mismo, y era obvio, Lilith paso de tener un trabajo distinguido por ser la segunda al mando del ahora difunto gobernador.

Aunque todo el mundo sabía que Lilith era solo el jugete de desquite del gobernador Belos, era ella quien le daba la cara a los problemas del estado, la que se llevaba la mierda, mientras que el gobernador parecía nunca equivocarse.

Lilith le despidieron un mes atrás, cuando su hermana Edalynn mostró un fraude y su hermana no pudo evitarlo, fue humillante la renuncia y dolorosa la golpiza que tuvo que pasar.

Y aquel día por la noche que fue hablar con el gobernador Belos, tal vez fue el karma el ver al gobernador ser devorado por sus guardias de seguridad y por la otra perra faldera.

Pero con todo lo malo que pasó en su antiguo trabajo, sin duda prefería eso, a estar en la mal oliente tarea de recoger cadáveres y lanzarlos a una.fosa común a varios metro lejos de la morada  de su hermana menor, que con cada día de cada mes le va recordando todos sus errores y lo humillante de su renuncia.

Pero por un demonio, Lilith llevaba años sin ver a su hermana, después de aquel "incidente", la extraño.

Además que la culpa la carcome de dentro afuera.

Si fue gracias a ella que aquella pandilla dió con el paradero de su hermana, pandilla que la golpeó enfrente de las hijas de su "amiga", fue parte de su culpa el que Edalynn se quedará sola por tantos años incluso antes de varios incidentes.

Tal vez era por eso que Eda había decidido cuidar de esos niños       callejeros, que si bien no eran callejeros venían de un orfanato y otro chico de un hospital psiquiátrico, ambas instituciones mal cuidadas por su culpa y su ineptitud de no haber evitado los fraudes y desvío de fondos, agradecía que Eda no se haya quedado por tanto tiempo sola.

El trabajo de desmembrar un cuerpo es jodidamente asqueroso, y horrible, Lilith ya tenía demasiado pecados en su conciencia para ir agregando más, el olor es asqueroso y desgraciadamente Edalynn insiste en no usar tan seguido las duchas para que cuando llegue Camila y las "niñas" tengan suficiente agua.

Lilith no tenía idea de cómo hacerle entender a su hermana menor que tal vez ellas ya no estén con vida y que lo más seguro es ir a los puntos de militares donde llevan refugiados.

Aunque tal vez en cuanto todos ellos ponga un pie dentro de esas instalaciones sean encarceladas.

— Lucía y Luz les encantaba un libro de brujas, ¿Astra? ¿Hex? No recuerdo el nombre, pero si ves algo así me avisas. — Eda parlotea emocionada e ignorando las constantes moscas que salen del cuerpo.

— ¿Cómo puedes ignorar el olor?

— Bueno, no es como si tú olieras a rosas querida hermana — Contesta con su típico tono fanfarronía y le da un codazo a su hermana. — ¡Anímate Lili! Este no es tan grande como el último — Termino de decir mientras alzaba su hacha y partía totalmente una sección del cuerpo y lanzaba al pequeño risco. — y eso fue el último pedazo, ufff, vamos a comer apestosa.

Tal vez pasarán años, pero Eda parece nunca madurar.