Camila podía ver aquella alma a través de esos ojos llenos de temor y soledad, casi moribundos por el hambre, puede ver como el rostro de esa pequeña se aferraba a algún rasgo de esperanza desde que ella misma empezaba a darle tanto a esa niña como a los demás algo de comida extra.

No sabe bien cuando mas pueda mantener ese ritmo de llevar comida pasando desapercibida pero no volvería a cometer el error. Juro proteger y ayudar, se lo había prometido a su pequeño Lucas el día que el partió del mundo, cuando presencio como la vida se escapaba por sus ojos. Desde entonces haría cualquier cosa por salvar vidas, y ahora en esa situación de inminente peligro, no podría permitir dejar que gente fuera usada de forma incorrectas y pocas éticas, no lo permitiría.

Su plan de salvar personas a escondidas del senadora Darius pondría en peligro su vida, y quizás incluso las de sus hijas si es que ellas estaban vivas, claro que lo estaban, Camila sabe lo capaces que son sus hijas, ellas estarían bien, repite mentalmente en momento de duda.

Como en ese momento, en esas paredes ya ensuciadas de sangre y penetradas por terribles hedores, tras esa puerta puede verlos, puede verla a ella, esa alma, una pequeña con ojos deseosos por libertad momentánea.

El gobierno había enviado a diversos lugares "cargamentos" de sobrevivientes, pero en este caso, estos sobrevivientes seria usados para experimentaciones, según Darius, era cosa del destino, un bien mayor, podría entenderlo Camila si se trataran otro tipo de instalaciones con mejores tecnologías, pero en este caso, están en una escuela, en viejas instalaciones, haciendo un pseudo cura. Era una puta excusa para que jugaran a ser científicos y había algo más que no había podido descifrar todavía, pero se sentía en la punta de su lengua.

Camila suspiro pesadamente y abría la puerta dejando entrar una bolsa con comida, la mano de la chica se extendió con un poco de confianza al saber que se trataba de la doctora Camila, la pequeña entrego la comida a las demás personas con quien comparte espacio reducido, en su mayoría encadenados como si fueran criminales.

—Espera — Camila susurro a la pequeña que ya iba a ocultarse en la oscuridad de la habitación, la niña asoma sus ojos. Y si, son parecidos a los ojos avellanas de sus pequeños, puede ver una piel un poco mas clara que la suya bajo los múltiples moretones, rasguños y suciedad. La niña se asoma con una mirada de curiosidad. —¿Cuál es tu nombre cielo? — La voz maternal despertó una acogedora sensación en la pequeña, esa amabilidad desinteresada y genuina, la hace dudar si acaso es real.

La niña se quedo bastante tiempo en silencio pensando, hasta que se animo un poco a balbucear, Camila necesitaba escuchar otra vez, así que se acerco un poco a la puerta esperando, a que la chica repitiera su nombre, y pudo entender algo.

—¿Vee?

—Mhmm — Afirma la niña haciéndose hacia atrás.

—Bueno Vee, prometo que voy a sacarte a ti y a los demás. — Camila promete de forma maternal a esa niña y el rostro de la chica parece iluminarse al escuchar esas palabras.

—¿enserio? — Vee mostro su mano, llena de cicatrices en las muñecas y moretones, extendiendo el dedo meñique, Camila se esforzó para no mostrar que le partía el alma verla así.

—Enserio. — Camila junto su dedo meñique en el dedo de esa chica bastante huesudo a diferencia suya, y sorprendida de lo fría que ella estaba. No lo pensó dos veces, tomando su suéter y dándoselo a la chica para que se mantuviera el calor. —Consérvalo por favor — Le explica insistente cuando ve que Vee no quiere tomar la prenda asustada. —Prometo traerles a los demás ropa, solo guarden el secreto, en lo que resuelvo esto, ¿sí?

Vee titubea bastante, pero al final suspira asintiendo, tomando la prenda de lana que olía bastante limpio, le sonríe a la mujer y por fin se deja engullir por la oscuridad cerrando el cuarto, Camila cerró la puerta con el seguro y candado para evitar que ellos "escaparan", realmente ya no había un lugar a donde ir.

Camila se apresuro a salir del lugar pues escuchaba unas voces muy a la lejanía, en esa zona de Glandus los ruidos llegan mas rápido, por lo que se aseguro de dejar todo como lo encontró, y sale, atravesando por la camilla donde el cuerpo muerto del gobernador Belos estaba recostado, con los ojos bien abiertos y movía su mandíbula.

Las voces se escuchaban muy cerca de donde estaban, así que trato de fingir que estaba atendiendo al gobernador, la puerta se abrió poniéndose ella tensa al escuchar la voz de Darius y otras personalidades importantes de las Islas Hirvientes y condados cercanos.

—¡Ah aquí esta mi doctora estrella! — alzo la voz con una voz condescendiente, mientras que los demás políticos reían acompañándolo, Camila trago saliva para darse valor y apretó sus labios en una sonrisa tratando de disfrazar su nerviosismo. —Cuéntenos Doctora Camila, ¿algún avance que reportar?, ya que viene usted muy seguido aquí abajo — Darius trataba de disimular tras una sonrisa un tono de voz de sospecha.

—Ya sabe senador Darius, no podemos perdernos de los detalles del gobernador, en los detalles podemos quizás descifrar como funciona esta enfermedad. — Camila dijo apretando una libreta con apuntes de antiguos pacientes.

—¿No es acaso ella muy inteligente? — le hablo un poco burlón. —bien, entonces, cuando podremos continuar con los trasplantes, queremos comenzar a remplazar la carne podrida por una nueva.

Camila se quedo en silencio mirando a esa libreta con muy pocos apuntes que se trataban realmente del Gobernador Belos, los demás eran ideas de planes para un futuro.

—Creo que aun falta tiempo para esos procedimientos, debemos esperar un poco mas que el cuerpo del gobernador no rechace los órganos... donantes. Tomará algo de tiempo, sobre todo en estas condiciones tan inusuales. — Camila trata de sonar lo mas profesional, cosa que parece ser comprada por los políticos que sonrieron satisfechos.

Los presentes siguieron una conversación que parecía estar en un código que Camila obviamente nota pero no captaba del todo, y puede presentir que hablaban de ella pues veía sus miradas encima de ella, cosa que le causaba un escalofrió y un retorcimiento en su estómago, Darius dio por terminada la conversación con una sonrisa y dándole a Camila una mirada que le causo un deja-vu, así que solo deicidio fingir que no notaba esa mirada clavada en ella, mientras que los demás se iban escoltados en automóviles por la parte trasera de la escuela, aquella área que era el estacionamiento exclusivo para maestros, ahora siendo resguardado por soldados rasos y alumnos que eran bastantes altos y atléticos, al menos lo suficiente para hacerlos usar uniforme y portar armas.

Camila por momentos siente una segunda mirada sobre su espalda.

Miro a los lados con mucha atención, solo notando como de reojo una figura se escondía de regreso, le hubiera gustado creer que se trataba de Hunter, sin embargo, podía ver a Hunter sentado firmemente con otros soldados.

Así que al ver que Darius no volvía a dirigir la mirada, camino de regreso a su dormitorio para continuar con su plan de escape de Vee y los demás.

[...]

Gustaf se encontraba sosteniendo respiración, en ese pasillo casi olvidado por Dios, como todo el planeta en ese punto de la historia humana, solo deseaba no ser notado por la doctora Camila, que ya se había dado cuenta de su mirada desde la distancia, pero simplemente el no podía detener ese investigación, incluso si le costara la vida, quería llegar al fondo de todo, hasta las ultimas consecuencias, porque lo que presencio en la antigua área de soldados no había sido simplemente objeto de ataque por ciudadanos radicales que aprovechaban el caos, algo no cuadra en esa historia, ni si quiera era una historia, eran relatos y rumores contados por los sobrevivientes y lo que pudo escuchar de algunos soldados dentro de aquel lugar.

Si la situación de la actual exterminación humana no fuera suficiente le parecía absurdamente posible que cualquier conspiración suena totalmente racional, y quizás todo este en su cabeza que quiere llenar lagunas de información con especulaciones y estrés de la su situación actual.

Algún lado tendría que llegar, sin importar lo que fuera a suceder, lo que importaba era la verdad de lo que fuera que estuviese oliendo a descomposición letal en entre esas paredes donde se refugian alrededor de más de doscientas personas.

Espero paciente como la doctora Camila miraba a sus alrededores y desiste en seguir buscándolo a él, la doctora camino por el pasillo tomando una desviación por dentro de las estructura de la escuela, algo así solo tenia acceso el personal autorizado, o sea soldados y personal de medicina, enfermería.

Gustaf se alzo y fue caminando por la puerta donde si llegara a suceder cualquier civil debería entrar, por aquella área descuidada y peligrosa que se quedó en plena construcción y quizás se continuaría si es que Darius, daba la orden de ampliar la escuela.

La luz del patio central golpea sus ojos otra vez y el se dirige a la zona de los dormitorios, habían tenido suerte que sus "habitaciones" tuvieran un colchón, del cual debían estar en constante vigilancia que nadie fuera a robárselo, porque a pesar de ser el fin del mundo y se necesitaba estar juntos en todo momento, la gente en Glandus lo habia dejado muy claro, si quieres algo, lo tomas, y si no puedes tomarlo, te sientas a envidiar desde tu miseria.

Gus ciertamente había perdido las esperanzas de encontrar a su padre vivo, aunque no lo admitía en voz alta frente a su primo, además que aun no procesa esa idea de saber que su padre esta muerte, al final uno siempre espera que vera morir a su progenitor años más tarde, siendo un adulto y su padre/madre ya ancianos, en una muerte pacifica, brindarles una despedida pacífica. Aun vive dentro de su corazón el destello de esperanza que su padre debería estar en algún lugar oculto, que se volverían a encontrar, por otro lado, desde que había topado mirada con esa chica alta y de piel bronceada y rasgos más típicamente latinos, pero aun así con similitud innegable a la novia de su mejor amiga. Era como ver una versión más adulta y latina, cosa que esto despertó una nueva duda que no se ha despegado de su mente desde que encontró a esa chica, ciertamente quizás esa nueva duda le ayuda a evadir la realidad que ha creado.

Así que los rumores que Boscha tenía una hermana perdida por ahí eran ciertos.

Y si es así, esta chica desconocida tendrá información de Boscha y si es así, puede que averiguar algo sobre el paradero de su novia y mejor amiga.

Gus, llevaba desde que habia llegado a los domitorios un apunte de los rumores y de quienes provenían en esos rumores cuando el mundo no se acababa.

Cuando escucho esos rumores en su momento no quiso entrometerse ya que al final de cuentas, parecía ser algo que afectaba a Boscha, y no seria un patan para preguntarle ni a ella, como Willow y Skara, sabia que ese tema era un nervio delicado en Boscha, la cosa a cambiado, el ver esa chica podría guiarla con sus amiga y novia, no era lo mejor ni la manera, pero es una buena causa.

Su primo entro al salón y fue directo donde el estaba, solo que lo ignoro por completo quitándole su libreta y pluma para irse al lado de sus apuntes.

—¡OYE!

—shh, tengo una nueva teoría

—Ugh — Gus hizo una mueca y siguió mirando a su alrededor habían otra quince personas en lugar, algunas entran y salen por momentos, y a veces pasaban alguno que otro soldado.

Estar en Glandus era sentirse atrapados en una imagen de grises y marrones, con luces tenues amarillentas que parpadean, por las ventanas entran algo de luz, pero ya hay varios salones que no tienen luz desde hace semanas, cosa que si no fuese por la cantidad de personas se sentiría un poco mas fresco, cosa que saben que en unos meses llegaría el invierno.

Gus mira de reojo a los apuntes de su primo notando lo que el anota.

—¿Encontraste algo? — Gus susurra lo suficiente para que el lo pueda escuchar.

—Solo tengo teorías, nada solido aún, sin embargo, tengo sospechas en — el chico miro su alrededor tratando de ver quien podría estar escuchando, y sin fiarse para hablar, transcribe en una libreta. — Ella, estoy seguro de que ella sabe más cosas, parece que el —escribe otra vez en la libreta — la quiere mantener cerca suyo, algún raro interés romántico, que claramente ella — apunta al nombre escrito anteriormente — no tiene interés, pero parece que no puede hacer nada, por mantener apariencias o algún otro motivo. Pero estoy seguro de que, si tengo la oportunidad de tener una conversación, podría saber un poco mas para comenzar con una mejor investigación, y llegar a saber que diantres esta sucediendo.

—Creo que será muy sospechoso, debes de buscar una manera disimulada de hablar con ella, algo muy conveniente.

Ambos comenzaron a discutir como podrían hablar con la doctora Camila, pero podrían confiar en ella, y viceversa.

Debía ser precavido cuando llevara acabo el encuentro, muy discreto, no podía haber mas oyentes que pudieran poner en peligro la integridad de la investigación, que esta hecha con el propósito de mostrar que hay algo más turbio sucediendo, más allá de la mediocridad de los jefes de estado de manejar la crisis de salubridad.

Hay algo más allá que incluso con las presentes consecuencias que los jefes de estado no quieren que la demás población se enterara.

[...]

N//A; ya por fin salí de clases ya puedo descansar, literal dure con quince días seguidos con tics nerviosos pero si se pudo, y aaaaah los últimos capítulos de the owl house madre mía que joya fueron muy gods y philip es un pendejo de mierda en fin

Hasta la próxima

Byeeeee