"Game Over"...

—Perdiste —comentó ella, muy serena, cuando escuchó provenir del televisor las palabras "Game Over", mientras leía un libro titulado: The Long Walk" (La larga marcha).

—Lo sé... —comentó él, algo frustrado, era la cuarta vez que perdía en ese dichoso juego de consola. Sin duda alguna, su amigo el embustero se moriría de la risa; y su "discípulo" ya le estuviera preguntando si algo le pasaba o si algo le molestaba.

—¿Ya van como cuatro veces? —preguntó ella—, desde hace más de media hora que aún sigues en ese mismo nivel—. Sin despegar su mirada de la lectura ella le comentaba a su novio el tiempo que perdió en ese mismo nivel del juego.

Él tristemente no había avanzando en lo más mínimo, y era muy frustrante.

—Lo sé, pero debo seguir intentando —dijo. Sin esperar mi un segundo volvió a reiniciar el combate—. Quiero demostrarle a King que yo puedo vencerlo al menos en este juego.

—¿Eso es realmente tan importante? —preguntó ella. No entendía muy bien por qué su novio se empeñaba tanto en querer superar al "King" de los embusteros.

—Sí, Fubuki —respondió él.

—Mmm —murmuró ella, cambiando de página.

Sin esperar un segundo ella ya se hubiera quejado con él por estar desperdiciando su valioso tiempo de héroe en algo tan "estúpido" como lo era jugar videojuegos, pero ser abrazada por su novio mientras ambos estaban recostados en el suelo sentir su calidez y compartir un momento a solas, eso... no tenía precio.

"Game Over"...

—¡Ho vamos! ¡¿Es enserio?!—se quejó el pelón, de una manera infantil, si su discípulo hubiese estado ahí, ya se hubiera alterado, y seguramente hubiera incinerado esa consola.

—Volviste a perder —Fubuki no pudo evitar que una pequeña risa se le salga, ver a su novio actuar de esa manera por un simple videojuego, siempre le provocaba una sonrisa.

—¿No me digas? —en un tono sarcástico le preguntó.

—Sí te digo —respondió, mirándole a los ojos—. ¿Cariño y si mejor lo dejas?.

—No, lo intentaré una vez más, si me rindo ahora jamás lograré derrotar a King, no quiero vivir bajo su sombra siempre —respondió con tono firme y decidido.

Ella suspiró, seguido de una sonrisa. Mientras su novio apretaba esos botones con desespero, ella terminó de leer, se acurrucó en el pecho del calvito sin capa.

Una brisa muy helada ingresó por la ventana, haciendo que Fubuki tiemble un poco. Al parecer pronto iba a llover. Ella se calentó las manos con su propio aliento.

—¿No tienes frío? —preguntó.

—¿Perdón qué? —preguntó Saitama, sin despegar literalmente ni un centímetro su mirada del televisor.

—... —ella suspiró y negó con la cabeza—, nada, olvídalo —usando sus poderes, cerró la ventana, bajó la cortina, y el libro que tenía a su lado lo devolvió al librero que yacía en la habitación.

Usando nuevamente sus poderes, trajo una galleta hasta dónde ella se encontraba. Fubuki terminó por acostarse en el regazo de su novio, mientras él continuaba con su juego y ella comía dicha galleta de chispas de chocolate.

—¿Quieres una? —preguntó ella.

—No, gracias —respondió.

Apretó bruscamente los botones del joystick, buscando desesperadamente hacer un Combo ganador. Su personaje le quedaba poco de vida, y el rival no dejaba de atacar.

—Vas a perder calvito-kun —comentó Fubuki, con cierto tono burlón.

—No lo creo —respondió. Finalmente, luego de mucho intento, de casi una hora de intentarlo, lo logró, ganó el primer nivel.

"You Win"...

—¡SI!... ¡SI!... ¡SI! ¡TOMA ESO KING! ¿QUIÉN ES EL MEJOR AHORA, HE?—casi dando un salto, levantó sus brazos en señal de victoria, de alguna manera ganar en ese juego le hacía muy felíz.

—Felicidades, lograste pasar el primer nivel, estoy muy orgullosa de tí —comentaba Fubuki con una sutil sonrisa, mirando como su novio celebraba esa victoria.

—Gracias, Fubuki.

Saitama bajó su mano hasta dónde su novia tenía recostada su cabeza, en su regazo. Le acarició los cabellos, y ella se durmió ante tales caricias. Él la miró con ternura, desde que se volvieron novios, ese vacío que sentía en su corazón ya no estaba ahora.

—Bien, el segundo nivel, veré si puedo pasarlo a la prime...

"Game Over"...

—¡Me lleva la grandísima...!