Capitulo 5
Natasha.
La atraccion es una fuerza poderosa. Vuelve locas a las personas y las lleva a cometer locuras impensables. Pero tambien es satisfactoria y bienvenida cuando es correspondida.
Me levante y estire mis brazos.
¿Que hora era?¿por que el maldito despertador no habia sonado?
Agarre mi telefono y maldije entre dientes.
¡Se habia quedado sin bateria!
¡Iba a llegar tarde!¡ mierda mierda y mas mierda!
Me pare de un salto y me meti en la ducha. Me cabeza parecia explotar ¿cuanto habia bebido anoche?
Me duche rapidamente y luego busque algo en mi guardaropa para ponerme.
Saque un body rojo con encaje y un jean azul al cuerpo. Me puse unos aros plateados y me maquille lo minimo y elemental.
Tenia unas ojeras que daban asco.
No desayune y eso era malo. No tomar mi cafe de la mañana me ponia de muy mal humor.
Arregle mi pelo como pude y baje a buscar mi audi para ir a la agencia.
Llegue dos minutos tarde. Habia saltado todas las reglas de transito y semaforos idos y por haber.
Si no me habia estrellado era de suerte.
Tome el ascensor y cuando este estaba por cerrarse un Simon con ojeras y malhumorado entro en el.
-¡Maldita resaca!-gruño por lo bajo.
Y no pude no mirar su aspecto. Iba impecable como siempre, pero las ojeras eran notables bajos sus ojos.
No traia corbata. Era algo que desde el primer dia me llamo la atencion. Se vestia formal , pero su camisa blanca siempre estaba desprendida hasta el tercer boton.
Facilmente podrian confundirlo con algun actor de hollywood o un modelo.
Simon Maclean era un hombre caliente.
La fantasia personificada del sexo femenino.
El parece percatarse de mi presencia por que se gira y al verme sonrie.
-Que linda coincidencia ¿como esta tu cabeza? La mia me esta matando.
Esperen un segundo ¿Que? O mejor dicho ¿como sabe el de mi resaca nocturna?
Intento hacer memoria de lo que paso anoche, pero todo aparece de forma borrosa.
-No me mires asi. Ya demostraste que tienes mas resistencia al whisky que cualquier agente de los nuestros. Cierto, ya casi me olvidaba, toma.
Me entrego un vaso de cafe late como a mi me gustaba.
Lo agarre con adoracion. Bendito sea el que invento el cafe.
-Ayer me dijiste que te esperara con un cafe o arrancarias mi yugular por embriagarte dejandote una muy mala resaca-hizo una mueca divertido.
-¿Que paso anoche?-dije cortante.
-¿La pelicula? Esta muy buena, si quieres te la presto.
-No estoy de humor para chistes Simon.
-Siempre arruinando la diversion mi querida mariposa. Tienes que aprender a divertirte, ayer pense que habiamos progresado.
-¿¡Que nosotros que!?-casi me atranganto con el cafe.
-¿Lo ves? Arruinas la diversion. No seas mal pensada querida, solo tuvimos una charla amena de colegas.
-¿Nada mas?-dije insegura.
El me dio unas de unas sonrisas de revista marca registrada y se acerco a mi , acorralandome contra una de las paredes del ascensor.
Me hizo acordar a la escena de Anastacia y Cristian del libro Cincuenta Sombras, que me habia prestado Megan.
Trague duro y levante la cabeza para poder mirarlo.
Era un dios griego. Espalda ancha, musculos definidos, un metro noventa de altura. Nariz medio torcida, ojos azules, labios carnosos y resto de lo que pudo haber sido su barba.
Sin olvidarnos de su irresistible perfume de Armani
Queria meter mi nariz en su cuello y olerlo mejor ¡Controla tus hormonas Natasha! No te metas en territorio peligroso.
-Si tu quisieras podria pasar algo mas-dijo con voz ronca.
No encontraba mi voz. Tenia la boca seca.
Lami mis labios y su mirada se poso directamente en ellos.
-¿Alguna vez te han dicho que tienes unos labios irresistibles? Que invitan a un hombre a querer besarlos.
Estaba en serios problemas y mis bragas tambien.
-Son normales-dije tratando de quitarle importancia.
-Nada de ti es normal Natasha-me susurro al oido de una forma muy caliente.
Toda mi piel se erizo y cerre mis manos en puños,para evitar la tentacion de lanzarme encima de el como una gata en celo.
Respire hondo unas cuantas veces como hacia en yoga. Necesitaba volver a tener el control.
-Hasta hueles demasiado bien-paso su nariz por mi cuello.
¡Joder!
-Me pregunto si sabras tan bien como hueles.
Justo cuando estaba por darme un paro cardiaco de la tension, el bendito ascensor paro su curso y las puertas de este se abrieron dandome un respiro.
Simon se aliso la camisa y me dio una de sus sonrisas irresisitbles y como si nada hubiese pasado dijo-nos vemos en la junta de las tres.
Pasaron unos minutos hasta que pude recomponerme y hasta me di cuenta que me adorado cafe yacia en el piso del ascensor y el vaso habia pasado a mejor vida.
Debia averiguar que diablos habia pasado anoche.
Sali hiperventilando y me regañe mentalmente. Habia estado a punto de entregarle mis bragas con moño y todo, para que el hiciera lo que quisiera con ellas.
Tenia que encontrar una manera de controlar a mis locas hormonas que parecian pedirlo a el a gritos.
¡Maldito seas Simon Maclean! Tu y tus irresistibles encantos.
Hola hola💕💕😄
¿Como estan?
¿Quien mas ama a esta parejita?
Simon es una cosita caliente ¿no les parece?
😈😈
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