Capítulo 5: La mayor derrota de Thor

—Eso que dijo nuestro querido guardián me da el puente perfecto para las siguientes historias —exclamó Wednesday—. Thor fue alabado como el mayor protector de Midgard pero incluso él término cayendo en la oscuridad de la locura. Todo comienza con una invasión de los temibles gigantes a Asgard.


Flashback

El cuerno glalhorne era soplado por fuerza por el poderoso Heimdall mientras los guerreros se preparaban y los gigantes se aproximaban.

Los monstruos eran liderados por un gigante llamado Farbauti que traía una enorme hacha de hielo con la cual cortaba através de los cuerpos de los einherhar; los guerreros de Asgard.


E

l campo de batalla estaba cubierto de sangre y cuerpos mutilados tanto de hombres como de gigantes. De pronto, cuando un grupo de gigantes tenía rodeado a varios guerreros de Asgard, cayó frente a estos últimos uno de los más grandes campeones del reino dorado: Thor.

El Dios del trueno rugio furioso y de su martillo disparo poderosos rayos que atravesaron a sus enemigos y llenaron de valor el corazón de sus aliados. Un jotnar de tan solo tres metros armado con un garrote y un escudo corrió hacia el hijo de Odín que, a pesar de verlo, no hizo nada para detenerlo. El jotnar le intento aplastar la cabeza con su garrote pero Thor lo atrapó con una sola mano antes de darle un golpe ascendente en la mandíbula con Mjolnir. La cabeza del monstruo explotó en un mar de carne, sangre y huesos destrozados por el arma favorita de los dioses.

—Esto es lo que se ganan por invadir mi hogar, bestias asquerosas.

Thor, cuyos ojos estaban rojos por el combate, sujeto con firmeza a Mjolnir mientras sonreía con arrogancia al ver a más enemigos acercarse.

—¡Adelante, guerreros! —exclamó Thor con vigor a los soldados detrás suyo—. ¡Demostremos porque somos hijos de Odín!

El poderoso dios salió volando con Mjolnir por delante contra un inmenso gigante para destrozarle loa dientes, ingresar en su boca y salir por su nuca cubierto en sangre. Se quedó flotando en el aire y lanzó su martillo para atravesarle la frente a un enemigo antes de que volviera a su mano. Giro en el lugar y con Mjolnir golpeo una espada de un gigante que intentaba atacarlo logrando destruir el arma blanca. Thor alzó su martillo al cielo y cuando lo hizo descender cayeron miles de rayos en el campo de batalla que cegaron la vida de los gigantes.

No falto mucho más para que la batalla terminara con la victoria de los dioses. Varios de los gigantes sobrevivientes escaparon del lugar con magia oscura para volver a Jotumheim, sin importarles dejar a sus camaradas muertos atrás. Tras finalizar el combate un grupo de Asgardianos se reunieron el círculo con gran horror por los cadáveres que encontraron.

—No dejen que Thor vea esto —ordenó Odín que había descendido de su caballo.

—¿Ver qué? —preguntó Thor que apenas llegaba al lugar.

—Vete de aquí, hijo.

—¿Qué me están ocultando?

—Hermano, por favor... —exclamó Loki, incluso él no tenía palabras.

Thor busco con la mirada entre los presentes y al notar ciertas ausencias su corazón se lleno de preocupación.

—Apartense —ordenó con enojo.

—Thor, no debes —intento hablar Tyr, hermano de Thor y dios de la guerra.

—¡Qué se aparten! —grito el primogénito de Odín.

—Hagan lo que él dice —exclamó Odín.

Todos los presentes se apartaron y allí se pudo ver a tres cadáveres profanados pues sus cabezas habían sido cortadas y no se encontraban presentes. El rostro de Thor se convirtió en una mueca de incredulidad y dolor mientras caminaba a pasos torpes hacía los cuerpos sin vida. A pesar de no tener cabezas podía reconocer fácilmente que se trataban de sus dos hijos: Magni y Modi, y de su amada esposa: Sif.

Thor cayó de rodillas frente a los cadáveres de su familia y, con el rostro apuntando a los cielos, grito de puro dolor y rabia ante aquella escena mientras truenos y relámpagos se dejaban ver como muestra de lo que el dios sentía.

Fin del flashback.

Una pequeña lágrima rodaba por el rostro de Wednesday que quedó mirando a la nada por un momento al terminar de contar la historia.

—¿Esta llorando, profesor? —pregunto uno de los alumnos.

Wednesday rápidamente se limpió la lágrima.

—Perdonen a este viejo sentimental —exclamó el hombre con una sonrisa cansada—. Me siento identificado con esta historia en particular pues todo el que sea padre y haya perdido a un hijo puede entender el dolor por el cual Thor paso. Los humanos y los dioses tenemos eso en común: ambos podemos sufrir pérdidas que nos arrancan el corazón.

Darcy noto por el rabillo del ojo que Donald ya no se encontraba en el lugar y comenzó a buscarlo con la mirada. El ex dios se encontraba de rodillas entre los árboles mientras nubes de tormenta se apoderaban del firmamento.

—Lo lamentó, hijos míos —exclamó el hombre mientras lágrimas caían desconsoladamente por sus ojos—. No pude protegerlos.

Relámpagos y truenos se apoderaron del cielo junto a una fuerte lluvia mientras el rubio clavaba sus dedos en la tierra y lloraba con gran dolor sin saber que Darcy Lewis lo observaba desde atrás.

—Lo lamentó, hijos. Lo lamentó, Sif.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top