+but it's okay.

[ she loves control, she wants it her way
and there's no way she'll ever stay
unless you give it up
she loves control, she wants it her way
and all it takes is just one tase
you wanna give it up

camila cabello | she loves control ]

—🌹—

DaeIn la siguió con pasos apresurados, aun sorprendida del repentino cambio que estaba teniendo su mejor amiga después de haber tenido aquella "relación" con Byun BaekAhn. ¿Es que tan siquiera se le puede llamar así? Seguramente no, pero ella no se metería en eso, no más.

— ¿Hablas en serio? Tú no vas a esas fiestas, Kyung. Nunca lo has hecho —no era un reclamo, al menos no quería que sonara así. Era incredulidad en su estado más puro.

— Todo es parte de mi plan, Dae. Las fiestas siguen sin interesarme, pero BaekAhn sí que me interesa. Oh SeHun no la tendrá por mucho tiempo, puedo prometerte eso —y lucía muy segura de lo que estaba diciendo. ¿En qué momento KyungHee empezó a ser de esta manera? DaeIn empezaba a preocuparse por su forma de actuar.

— ¿Estas obsesionada o algo así? —cuestiono, temía que todo eso se le saliera de las manos y terminara más herida que ahora, que toda la preparatoria se llegara a enterar, que se hiciera una tormenta en un vaso de agua. Pero KyungHee pensaba que tenía todo bajo control, así que no cedería. Así era ella, le gustaba pensar que tenía el control de todo, aunque no fuera así.

— Claro que no —soltó una carcajada y abrió su locker—, pero es BaekAhn. La necesito de vuelta...

— KyungHee —la miro seria y al ser ignorada, suspiro. Había hecho muy mal en mencionar el rumor de que la castaña era bi, ahora se daba cuenta de eso, pero en ese momento sólo quería apoyar a su amiga y que se aventurara a experimentar un poco con personas de su mismo sexo para salir de dudas—. ¿Con quién piensas ir de todas formas? ¿Sola?

— Uh-oh, contigo, obviamente —le sonrió, sacando su uniforme de gimnasia del locker y cerrándolo, por consiguiente—. ¿Pensabas que iba a ir sola? Ya es demasiado el ir a esa fiesta, como para hacerlo sola.

— ¿Y cuándo acepte acompañarte? —se quejó, empezando a enojarse de verdad, cruzada de brazos. Sí, ella era quien apoyaba a la pelinegra en casi todo, pero las fiestas no eran lo suyo y ni siquiera estaba segura de que sus padres le fueran a dar permiso para salir.

— Por favor, DaeIn —puso sus manos juntas, rogando—. Sólo será esta vez.

La miro con resignación, sabiendo que era una mala idea. Y en efecto, lo estaba siendo desde que estuvieron a metros de la gran casa.

Mala, muy mala idea.

Pero ya estaban allí, fuera de la casa de los Kim, a nada de entrar por la puerta. Kim JunMyeon siempre daba las mejores fiestas de la prepa, o eso era lo que todos los que asistían decían. Para KyungHee la fiesta estaba más arriba del nivel de tolerancia que tenía a esas cosas; demasiadas personas que parecía que la casa explotaría a pesar de lo grande que era. ¿Tan siquiera eran todos estudiantes de la preparatoria? Alcanzaba a reconocer unos pocos rostros a duras penas y el olor a alcohol junto con el cigarrillo estaban presentes en el ambiente, las luces mareándola.

Todo sea por BaekAhn.

— KyungHee, esto es mala idea. Quiero irme ya —murmuro su mejor amiga cerca de su oído, mirando alrededor y sintiéndose perdida. Ese no era el lugar al que pertenecían, ¿en qué se habían metido por un simple capricho?

— Sólo busquemos a BaekAhn un rato, si no la vemos en la siguiente media hora, nos vamos, ¿okay?

No sabía por qué le hacía tanto caso a KyungHee, pero allí estaban, buscando a la chica. Se separaron para hacerlo todo mucho más rápido, pero una vez más, fue otra mala idea. Un error tras otro. Sí, encontró a BaekAhn, pero terminó metida en un juego de verdades o retos, donde si no cumplías con lo que te ponían o si no respondías con sinceridad (ni idea de cómo sabían si lo que decías era cierto o no), debías tomarte dos shots de vodka y ella nunca ha bebido una gota de alcohol.

— KyungHee, ¿verdad o reto? —le pregunto JongIn cuando la tapa de la botella apunto hacia ella. Mordisqueo sus labios, suspirando

— Uhm... reto.

— 7 minutos en el paraíso —sugirió Oh SeHun, frente a ella, con una sonrisa ladina. ¿Acaso se estaba burlando de ella?—. Junto con ChanMin.

Se dio cuenta de la presencia de aquella pelirroja cerca de una chica que no conocía y quizá era el ambiente, el humo del cigarrillo o todo, pero se veía linda con el cabello cayéndole por los hombros y esos pupilentes azules, con el tinte en los labios de color carmín y la falda dejando ver sus piernas delgadas y largas. KyungHee tiene una debilidad por las piernas, debe admitirlo, pero ningunas se comparaban con la de BaekAhn. Siete minutos en el paraíso consistía en encerrarte en un armario o en cualquier lugar pequeño y cerrado con otra persona, esperando ver qué pasaba.

¿Por qué no con BaekAhn? Fue lo que expresaron sus ojos cuando hizo contacto visual con el platinado y mordisqueo su mejilla interna, maldiciéndolo mentalmente. ¿Qué sabía él para mirarla como si la tuviera bailando en su dedo meñique? Quería ir hasta donde estaba sentado y golpearlo hasta dejarlo inconsciente.

— ¿Aceptas el reto o shot? —le pregunta JongIn, sacándola de la pequeña lucha de miradas que estaba teniendo y su boca suelta la respuesta antes de que ella pueda siquiera procesarla.

— Acepto.

El armario era obscuro y pequeño, demasiado, sus cortas piernas entubadas en aquellos jeans negros rotos en las rodillas se rozaban con las piernas delgadas, largas y desnudas de ChanMin. Olía a alcohol y empezaba a sofocarse, no había pasado ni un minuto allí adentro. Su plan era lograr hablar con BaekAhn, aunque sea un segundo y había terminado allí, junto a la nueva del salón.

Pero no la malinterpreten... No era lo que quería, pero estaba bien; ChanMin era linda a su manera y aunque no le atraía de la manera en la que lo hacía la castaña allá afuera sentada en esa ronda, tampoco le desagradaba.

— ¿Chicos o chicas?

Intento ubicarla en medio de toda esa obscuridad, pero no pudo, así que decidió mirar hacia abajo donde se supone se encontraba su regazo. La respuesta a aquello era clara, tanto como la linterna del teléfono que acababa de encender Park.

— Chicos, por supuesto —mintió, nadie de la prepa, a parte de su mejor amiga y BaekAhn, sabía de sus gustos y esperaba que siguiera así hasta entrar a la universidad y estar bien lejos de todos ellos—. ¿Y tú? —pregunto con recelo, mirándola a los ojos y ella sonrió, observando la puerta del armario como si fuera más interesante que KyungHee al lado suyo

— ¿Cincuenta y cincuenta?

No supo qué decir, ni en qué momento empezó a haber cierta tensión sexual en el ambiente. Quizá porque aquella falda era muy corta y dejaba ver un poco sus panties rosaditos al estar sentada en un lugar tan pequeño. La misión de la noche dejo de ser intentar hablar con BaekAhn para centrarse en besar a la pelirroja con la que estaba encerrada, olvidándose por completo de DaeIn, de que probablemente luego intentaría matarla por abandonarla y llevando toda su atención a los carnosos labios tan besables que ahora estaban a unos cuantos suspiros de distancia.

Sus belfos apenas se rozaron cuando la puerta del armario fue abierta y se separaron a la velocidad de la luz. KyungHee intento cubrir su sonrojo y no fue tan difícil por las diferentes luces de colores alumbrando toda la casa, saliendo y arreglando el tirante de su blusa, que se había deslizado por su hombro. Nadie dijo nada por la cercanía, aunque tampoco es como si hubieran tenido más opción en un lugar tan reducido como ese.

BaekAhn la miro unos segundos, seria y sabía que se estaba preguntando qué habían hecho allí dentro, pero no le respondería ahora ni nunca, después de todo, estaba ignorándola así que no debería de importarle qué paso o qué no allí dentro. Se quedaría entre ChanMin y ella, o al menos eso es lo que esperaba.

Se retiro del juego luego de eso y la pelirroja le sonrió cuando estaba excusándose para irse, mirándola hasta que se perdió de su campo de visión.

Ahora debía de ir en busca de DaeIn, rogar para no ser asesinada y decirle que se vayan de ahí lo más pronto posible, pero fue detenida por BaekAhn mientras recorría la casa buscando con la mirada a su mejor amiga, preguntando si alguien la había visto. Esperaba que aún no se haya ido, dejándola tirada ahí. Se sorprendió bastante al verla tomándola del codo, casi que en cámara lenta o quizá sólo en su cabeza se reproducía la escena de esa forma; tirando de ella hacia no sabe dónde, exigiéndole caminar.

— ¿Qué...?

— Cállate y sígueme.

— No —intento deshacerse del agarre que tenía sobre ella, pero no pudo. Resoplo, acomodando su cabello detrás de la oreja con la mano libre—. ¿Por qué tendría que seguirte?

— ¿Eres idiota, KyungHee? Sólo hazlo —intento una vez más tirar de ella escaleras arriba, pero jalo en contra para impedirlo—. ¡Por dios, KyungHee!

— Me has estado ignorando todo este tiempo, dime una buena razón por la que debería seguirte.

— Tú me has estado siguiendo a mí, porque ¿tan siquiera te gustan las fiestas? Es demasiado obvio que estás aquí por mí, KyungHee.

Touché.

—🌹—

n/a:
ya que es sábado y obtuve dos buenas calificaciones el viernes, he decidido darme el tiempo de corregir este cap y subirlo ajdbskabaka tbh, no esperaba que les gustara tanto esto :'v pensé que el fem!au no era tan famoso, pero veo que me he equivocado ggg as always, espero que me digan que les ha parecido este nuevo capítulo y si les agrada como va avanzando la trama ♡

—d-bxynk©