"So make the friendship bracelets"

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NARRA CASSIDY✮

Eran las 10 de la mañana, y la tranquilidad se sentía en todo el paddock, teniendo en cuenta de que tan sólo era martes, era semana de carrera y las personas que trabajamos aquí, cada quien con sus diferentes tareas, debíamos empezar a prepararlo todo

Entro a el garaje de Redbull con cámara en mano en busca de los pilotos de esta misma escudería, y cuando estoy dentro estaban ambos en el garaje de Max esperándome.

—Buenos días chicos— hablo sonriente

—Hola Cassy— habla Max, el era con el que mejor me llevaba de los dos ya que hacía muchos años que lo conocía y eramos amigos desde antes de que entrara a trabajar en redbull

Checo también me saluda y esperamos a que llegue Christian.

Tan solo 5 minutos después una voz a nuestras espaldas nos llama la atención

—Me alegra ver que ya estáis aquí— dice Christian acercándose a nosotros— venga, vayamos a la pista, los coches ya están preparados— los 4 salimos fuera del garaje y rápidamente nos metemos en la pista.

Un trabajador de redbull me trae mi trípode, como no, lleno de pegatinas de redbull y de sus respectivos sponsors, era lo que tenía ser la fotógrafa de redbull.

Una vez en la pista, ellos tres posan para que les pueda tomar las fotos, teniendo a Max y a Checo cada uno a un lado ee Christian, con Max a la derecha y Checo a la izquierda, y los dos monoplazas de fondo.

Con total paciencia para que salga perfecta, tomo la foto, y una vez tomada le hago una seña a los 3 para que vengan a verla.

—Está perfecta Cassidy— felicita Christian poniendo una mano en mi hombro, y yo sonrío satisfecha

Los chicos me felicitan, y después de un rato más haciéndole fotos a cada uno respectivamente para las redes sociales de redbull, Checo y Christian se van, y yo empiezo a recoger mi tripode, ya que a lo largo del día tan solo usaría la cámara.

No me sorprendo cuando veo a Max a mi lado esperándome, ya que desde que empecé a trabajar aquí nos hemos hecho más amigos de los que ya lo eramos.

—Tus fotos son realmente buenas— dice Max rompiendo el silencio

—Te lo agradezco mucho Max, ya sabes que si necesitas que te haga alguna foto para tus respectivas redes, tan solo tienes que pedírmelo— le contesto terminando de recoger mis cosas

—Lo sé, lo sé— dice rodeando mis hombros con su brazo y caminando juntos de nuevo dentro de su garaje de redbull— quieres dejar tus cosas en mi driver room?— dice viéndome cargada con las cosas de la camara, a lo que yo sin pensarlo dos veces, asiento.

Dejamos las cosas y volvemos al garaje, a lo que yo me siento encima de una mesa vacía esperando a que haya algo interesante en el garaje de el Holandés a lo que le pueda hacer fotos.

Max se sienta a mi lado y nos quedamos en silencio, hasta que de nuevo, el vuelve a romper ese silencio

—Ya has hablado con tu padre?— dice mirándome directamente a los ojos

Yo al escuchar esa especifica pregunta, no puede evitar el desviar la mirada, posando mi vista en los cordones de mis zapatillas.

Max al no escuchar respuesta por mi parte, apoya su cabeza en mi hombro.

—Se que es difícil— dice Max, y es que el era de las pocas personas que me comprendía, con un padre tan presente pero tan distante a la vez

—Lo es, pero que puedo hacer?— rio sarcasticemente— no quiere hablarme desde que empecé a estudiar fotografía, y cuando supo que iba a trabajar en la F1 como fotógrafa aún se enfadó más— digo haciendo una pequeña pausa para no derrumbarme— cuando estaba estudiando aún me hablaba, aunque solo fuese para hacerme discursos intentando convencerme de que dejara la fotografía para estudiar ingeniería, pero desde que terminé y empecé a trabajar aquí, no me ha hablado más, como si se hubiese dado por vencido conmigo — digo apoyando mi cabeza en la de Max, la cual ya estaba en mi hombro

El no dice nada, sabe que no me gusta hablar de esto, así que respeta eso y guardamos silencio, un silencio reconfortante, Max era uno de los mejores amigos que tenía, aunque no el mejor amigo que tenía, ya que ese espacio era para cierto Alemán con ojos azules.

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Después de un rato, Max debe irse a comprobar varias cosas de su monoplaza, por lo que aprovecho para dar una vuelta al paddock con mi camara colgada del cuello.

Y sin darme cuenta, me veo caminando hacía los garajes de Haas, por lo que sonrío inconscientemente.

Una vez en la puerta, a unos metros me encuentro a Mick, el cual no me ve porque está hablando con Guenther respecto al monoplaza, el cual estaban comprobando.

Yo como si nada, saco la cámara y le hago un par de fotos a Mick, me encantaba fotografiarlo, siempre salía increíblemente guapo en todas y cada una de las fotos que le sacaba, luego se las enseñaba y el siempre me pedía que se las pasara todas, aunque estuviesen mal hechas en muchas ocasiones.

Una vez termina de hablar con Guenther, como si sintiese mi presencia se gira hacia mi, y cuando me ve sonríe para rápidamente acercarse a mi y enrollarme en un abrazo.

—Te he echado de menos Cassy— dice dándome un besito en la coronilla

—Mick, me viste hace 3 días— digo riendome

—Pues eso, mucho tiempo— contesta el sonriente

Yo niego divertida y dejo que me siga abrazando.

—Enséñame las fotos— dice una vez nos separamos

—Son horribles, sale Guenther de fondo— le digo haciendo una mueca

—No pasa nada, les ponemos photoshop para que no salga— dice susurrando para no ser escuchados

Lo cierto es que ninguno eramos grandes fans del team principal de Haas, y eso se notaba.

—Ya he terminado de hacer las revisiones que me tocaban, te apetece dar una vuelta por Silverstone?— pregunta sonriente esperando a que mi respuesta sea una positiva

Yo me lo pienso un poco, debido a que conociendo a Christian, me llamaría de la nada pidiéndome que le haga 1 y mil fotos a Max

—Bueno, está bien— digo tomándolo del brazo— pero si Christian me llama, ten claro que voy a tener que salir corriendo— contesto a lo que Mick se ríe fuerte.

—A este paso voy a pensar que te tienen explotada en Redbull— bromea el Alemán

—No te alejas mucho de la realidad— contesto divertida.

Ambos salimos de paddock entre risas y salimos a las calles de silverstone.

Eso era lo que más me gustaba de Mick, me conocía más que nadie, lo sabía absolutamente todo de mi, y me conocía tanto que sin siquiera decírselo sabía cuando necesitaba un descanso.

Y yo lo conocía tanto, que sabía perfectamente que el no había terminado para nada su trabajo por hoy en Haas, y que tan solo lo hacía por mi.

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NOTA DE LA AUTORA

Hola reinas, espero que os guste este capítulo así como medio introductorio.

Amo tanto a Mick😭

Espero que os guste y disfrutéis de esta historia.

Nos leemos en el próximo capítulo 💓