—¿Estamos saliendo ahora o qué? — Pregunta por tercera vez Stiles, abrazándose a cierto lobo amargado después de haberlo hecho.

Dicho lobo amargado frunce el ceño. —O qué,— gruñe y Stiles automáticamente deduce que han pasado quince minutos desde su momento de pasión.

—No me gruñas.— Murmura frotando su cara contra los pectorales ridículamente bien definidos de Derek. —No me preocupa que no me respetes en la mañana, ya sé que no lo harás.—

Derek gruñe un poco más, mandando una vibración agradable a los oídos de Stiles, presionados contra su pecho, y roza con una mano de manera poco entusiasta el cuello de Stiles.

—Bien, bien. Me callo.—Dice Stiles con un bostezo, y lo hace. Por los siguientes cuarenta y cinco minutos, lo hace. Hasta que siente el cuerpo de Derek relajarse contra él, oyendo los suaves ronquidos del lobo. —Solo para que conste,—le dice al alfa durmiente, —Creo que lo estamos.—

Y luego él está de pie y fuera de la cama, vistiéndose un poco más rápido de lo normal porque siempre es incómodo que los pantalones queden atrapados alrededor de sus rodillas. Cinco minutos más tarde él está en su Jeep, cruzando el camino para llegar a la ciudad, con la música a todo volumen las ventanas abiertas y una sonrisa del tamaño de Texas plasmada en su rostro.

*

—¿Que está pasando entre Derek y tú? — pregunta Scott un par de semanas más tarde, entrecerrando los ojos de la misma manera que siempre hace cuando sospecha que Stiles le oculta algo.

—Nada— responde Stiles, porque ellos no son novios o lo que sea, solo pasan la noche juntos cuatro días a la semana y follan cada vez que pueden. Lo cual está bien con Stiles, más que bien de hecho. Él no es el tipo de persona que necesita cosas serias. Y Derek es todo lo contrario de un tipo romántico. Dios, la versión romántica de Derek probablemente implicaría criaturas del bosque muertas o algo igual de terrorífico. Stiles sonríe para sus adentros ante la idea de Derek dejando los restos de la mama de Bambi en su puerta, y luego tiene que parpadear de vuelta a la realidad, cuando se da cuenta que Scott está sacudiendo su hombro. —¿Qué?— pregunta, obligándose a concentrarse en su amigo.

Scott asiente. —Sí, nada,— dice sacudiendo su cabeza. —Solo ten cuidado que ese "nada" no te arranque la cabeza en la próxima luna llena.—

Stiles rueda sus ojos.

—¿Hiciste tu tarea de química?— pregunta, cambiando a un tema más seguro, donde Scott no pueda burlarse de él.

*

Allison mastica nervosa su labio inferior y mira fijamente a Stiles como si estuviera tratando de leer su mente. Es muy extraño y muy lejos de lo normal para ella.

—¿Estas bien? — pregunta, porque tiene buenos modales y sabe que no puede decir "Cuál es tu maldito problema" al igual que lo haría con Scott. O Jackson. O Lydia. Huh. Tal vez no son modales. Tal vez solo sea Allison y su rostro dulce para ser real.

Se sonroja, porque realmente es una princesa de Disney.

—Iba a preguntarte eso,— dice con una sonrisa.

—Oh, si bien.— Stiles se mete la tapa del rotulador en su boca y vuelve a su texto.

Allison ríe de nuevo, metiendo un mechón de pelo detrás de su oreja. —Entonces, ¿eres tú?—

—¿Yo que? —

—Bueno,— mastica su labio de nuevo. —Con, uh, Derek. ¿Todo bien?.—

Stiles solo parpadea. —Um,— se paraliza, sin saber que decir. Claro, él sabe que ella no es pura como la nieve e inocente, Scott ha dejado ese punto perfectamente claro, pero ella todavía... bueno... es una princesa de Disney y hablar sobre el sexo increíblemente agresivo que ha estado teniendo con este caliente hombre lobo no parece correcto.

—Quiere decir, no tienes que decirme si no quieres, pero,— agacha su cabeza un poco, luciendo tímida y esperanzada al mismo tiempo. —Simplemente, serial genial si quisieras.—

—Oh.— Stiles todavía no se le ocurre nada que decir. —¿Si?—finalmente logra decir. Porque, si, las cosas van bien entre Derek y el. Bien en el sentido de Maldita sea me vine cinco veces la semana pasada.

—¡Oh Dios!— Allison prácticamente rebota en su asiento y da rienda suelta a esas sonrisas con sol y flores. —Um, si quieres, podrías hablarme sobre, ya sabes,— echa un rápido vistazo alrededor del patio, estrechando sus ojos. —Cosas. Porque no tengo con quien hablar sobre lo que le pasa a Scott, um, durante su tiempo especial del mes. Pero tú, bueno, has tratado con el mismo tipo de cosas. Así que, si. Deberíamos hablar de ello.—

Se mira tan condenadamente feliz que Stiles ni siquiera se molestas en aclararle las cosas porque tiene el presentimiento de que si lo hace, la hará llorar o algo. Y no es bonito hacer llorar a niñas dulces como Allison, no importa el hecho de que ella es impresionante con el arco y probablemente podría matarlo con sus propias manos si quiera. Stiles medio le devuelve la sonrisa y se pregunta cómo demonios se convirtió en su mejor amigo gay.

—Oh, y no te preocupes sobre esa cosa de no salir oficialmente todavía,— dice alegremente. —Estoy segura que Derek lo superara tarde o temprano. Y si no lo hace, todos sabemos que están juntos. No es la gran cosa, ¿verdad? —

—Sí,— dice Stiles, masticando un poco la tapa del rotulador. No está preocupado. Nunca ha estado preocupado. No es eso. La cosa es que está empezando a pensar que tal vez debería preocuparse después de todo.

*

—Entonces, tú y Derek han estado saliendo, por cuanto, ¿tres meses?— Pregunta Lydia mientras se pinta los labios de una manera que no debería ser una distracción para alguien que le gusta chupar pollas tanto como lo hace Stiles. No debería, pero lo es.

—¿Qué?— Responde, sintiendo la misma vieja sensación de aturdimiento que le da cada vez que mira la boca de Lydia durante mucho tiempo.

Ella rueda sus ojos y chasquea sus dedos enfrente de su cara.

—Tú y Derek. han estado saliendo por tres meses, ¿verdad? Quiero decir, arruga su nariz, ese es el tiempo que has estado apestando a él.—

Stiles levanta su hombro. —Creo que sí. Um, excepto que no estamos saliendo.—

—Sí, lo están.—

Ahora es Stiles quien rueda sus ojos. —Mira, follando con alguien no es lo mismo que tener una relación. Pensé que lo sabias.—

—No seas un idiota,— dispara. —Y, lo que sea, ustedes dos no son solo follamigos. Se abrazan. Sin parar. Así no es como se tratan los amigos que solo follan.—

—Tomare tu palabra,— dice Stiles enojado, porque no le gusta hablar sobre su no-relación con Derek. Es un poco irónico, porque gracias a Allison está hablando sobre eso todo el maldito tiempo. Pero Lydia no es Allison. Stiles puede decirle que no. Stiles puede decirle a la mierda y que se ocupe de sus propios asuntos. Excepto que Stiles no hace tal cosa y en su lugar termina hablando con Lydia durante un hora sobre la perfecta y romántica cita de san Valentín que él y Derek con toda seguridad no van a tener.

Debido que Derek no le ha pedido ninguna cita, ni una sola vez durante estos tres meses en lo que sea que son. Y algo le dice que San Valentín no va a ser la mágica excepción a la regla de: Derek no está saliendo con Stiles.

Pero está bien. perfectamente bien. después de todo, el sexo es increíble. Y Stiles es un chico. Los chicos no necesitan toda esa mierda de corazones y flores. Pregúntale a cualquiera.

A cualquiera excepto Stiles.

*

Jackson están apoyado sobre el casillero junto al de Stiles sonriéndole de manera habitual, no es nuevo. Nada nuevo en absoluto. Pero Stiles no ha hecho nada particularmente estúpido recientemente, así que no puede entender del porqué, exactamente Jackson le esta sonriendo. No es su típica sonrisa de soy-mejor-que-tu, y el no saber le está empezando a molestar.

—¿Cuál es tu maldito problema? — medio grita haciendo girar las combinaciones de su cerradura.

Jackson se ríe, con malicia porque todo lo que Jackson hace tiene una connotación desagradable. —No tengo un problema,— dice todavía con esa estúpida sonrisa en su rostro. —Tú podrías tener uno.—

—No, estoy bastante seguro que tú eres el único que tiene problemas.—

—Oh, ¿Yo?— y ahí va una ceja levantada para unirse a la sonrisa. Maldita sea.

Stiles aprieta los diente en molestia y mete las cosas a su casillero lo más rápido posible. —Vete a la mierda.—

Jackson levanta las manos en el gesto universal de paz. —Mira, hombre, solo estoy tratando de hacerte un favor. Quiero decir, yo quisiera saber si la persona con quien estoy saliendo e intercambiando fluidos está viendo a alguien más.—

—Vete a la mierda,— Stiles se las arregla para responder, a pesar de que siente como todo el aire fue expulsado de sus pulmones y el mundo se detuvo.

—Bien, me voy.— Jackson se empuja fuera de los casilleros con una mirada de suficiencia en su rostro. —Nos vemos por ahí, Stiles,— dice, palmeando el hombro de Stiles como si fueran amigos en lugar de amienemigos. —O, tal vez no. No habrá mucho espacio para ti en la manada si otra perra ocupa tu lugar.—

Stiles debería decir algo, algo inteligente y mordaz para quitar esa sonrisa del rostro de Jackson. Pero todo lo que Stiles puede hacer es mirar en su casillero con los ojos en la nada excepto el ceño fruncido que es tan frecuente en el rostro de su lobo amargado.

*

—¿Cómo que estas ocupado?— Derek gruñe en el teléfono y Stiles no puede hacer más que apretarlo con fuerza.

—Como dije. Estoy ocupado. Por lo que, umm, no puedo verte esta noche.—

Derek hace un ruido de frustración. —¿Ocupado haciendo qué?—

—Cosas.— Stiles pasa una mano sobre su cabello. —Ya sabes, cosas aburridas que las personas tienen que hacer. Como tarea y quehaceres.—

—Está bien.— Derek no suena feliz. —Tienes que hacer la tarea. Y quehaceres. Por lo que estas ocupado. Y no puedes verme.—

—Um, si,— Stiles traga con fuerza, —Eso es. así que, um, tal vez mañana, ¿de acuerdo?— Excepto que él sabe que no va a pasar. Y Derek parece saberlo también, porque gruñe en el teléfono de nuevo. —Mira, me tengo que ir.— dice Stiles apurado.

—Si. Porque tienes una noche muy ocupada de cosas por hacer.— La voz de Derek es tensa por la ira y Stiles lo entiende, lo hace. A nadie le gusta perder su acceso al sexo fácil. Pero Stiles no está de humor. No lo ha estado por un tiempo. Y Derek... bueno Derek no está falto de compañía.

—Exacto,— dice Stiles. —Nos vemos después.— Y cuelga antes que Derek pueda decir algo más. Deja escapar un suspiro triste y luego desliza su celular en el bolsillo de atrás. —Bien,— dice en voz alta. —Maravilloso. Solo de nuevo, nada sorprendente.— Se lanza sobre la cama para ponerse de mal humor. Porque eso es lo que haces cuando terminas las cosas con tu sobrenatural no-novio. Te acuestas en tu cama y te enfurruñas. Pregúntale a Bella Swan.

Oh Dios. ¿Se acaba de comparar con Bella Swan? Stiles coloca una almohada sobre su cabeza.

—Alguien que me mate ya,— Le dice a su habitación vacía.

—Si estás buscando a alguien que haga el trabajo, podría estar dispuesto a ayudar.—

Stiles grita, lanzando la almohada mientras trepa sobre su cama.

—Derek, ¡te dije que estaba ocupado!.—

Los ojos de Derek están medio cerrados mientras frota su labio inferior. —Oh, sí. Puedo verlo. súper ocupado.—

Maldición. Así no es como las cosas deberían ir. Se supone que Derek solo... Stiles no está seguro de cómo debe comportarse el lobo, pero allí de pie apoyado en el marco de la puerta no es una de ellas. —Que, ¿estabas afuera de mi casa cuando llamaste?— pregunta cuando ya no puede aguantas más la intensa mirada.

—Sí,— dice Derek sin más explicaciones.

—Oh. ¿Estabas por el vecindario?— Stiles no menciona que no tiene porque estar ahí ya que ha estado evitando a Derek la mayor parte de la semana, no tiene que decirlo porque a juzgar por la expresión de su rostro, Derek ya capto el mensaje.

—No, no estaba por el vecindario. Vine para verte, Stiles. Como todos los viernes por la noche. Es como una cita.—

—No es una cita,— lo corta Stiles. —Nunca es una cita. Porque nosotros. No. Estamos. Saliendo.—

Derek exhala a través de sus dientes, sus manos cerrándose en puños como si no pudiera creer que Stiles tuvo las agallas de responderle así.

—Deberías de irte.— Dice suavemente Stiles. —No te quiero aquí.—

—Sí,— dice Derek más suavemente. —Puedo ver eso.— Le da a Stiles una mirada larga y dura, ese familiar señor fruncido de vuelta a su lugar. Luego asiente bruscamente, se gira sobre sus talones y se va.

Stiles no lo hace, no importa lo que digan, el no llora hasta dormirse.

*

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:c

Cada vez que leo este fic me hace doler y estrujar mi corazón pero es un dolor que me gusta? :) ahre que masoquista.

Nos vemos después dejen sus votos y comentarios besos <3