El resto del día parecía alargarse para Corey. Claro, le encantaba su clase de arte. La maestra era genial y Alice estaba en la clase con ella. Las dos chica se sentaron una al lado de la otra mientras seguían junto con la maestra. Pasaron gran parte del período susurrándose tranquilamente la una a la otra, sin molestarse en prestar atención a la lección sobre el sombreado.

Después de arte, Corey tuvo que ir a su clase de inglés. Ella lo odiaba. No era que Corey era analfabeta - pensaba que a menudo bromeaba que lo era - era sólo que Corey odiaba escribir papeles. Era horrible analizando textos y aplicando investigaciones. Tenía esa clase con Angela, Jessica, Tyler y Edward. Edward no se sentó con ellos, por supuesto, pero le pareció gracioso cómo Corey habló sobre lo mucho que odiaba la clase en su cabeza.

La última clase del día fue Biología. Sorprendentemente, Edward le había ofrecido enseñarle el aula. Corey aceptó amablemente porque ninguno de sus otros amigos en la clase de inglés lo tenía con su siguiente período. Edward no estaría mintiendo si no se hubiera ofrecido solo para poder aprender más sobre la hermana de Corey. Aunque no estaba entusiasmada con la próxima clase, Corey estaba lista para ver a su hermana, a quien no había visto desde el almuerzo.

—Me preocupa, ya sabes — Corey explicó mientras caminaban lado a lado. —Ella es tan torpe y torpe. Quiero asegurarme de que nadie sea malo con ella o hiera sus sentimientos.

Corey se encogió de hombros y se detuvo en el escritorio del maestro.—Sólo quiero asegurarme de que a Bella le gusta estar aquí.

Edward asintió con la cabeza antes de dirigirse a su mesa. No parecía tener un compañero de laboratorio. Dos mesas detrás de él se sentaban Alice y Jasper, a quienes ella saludaba. Alice saludó con entusiasmo antes de susurrarle algo a Jasper, haciéndole girar los ojos y apartar la mirada de Corey.

Mike vino al aula con Bella a su lado. — Sr. Molina— llamó, señalando tanto a Bella como a Corey, que seguían de pie junto al ventilador.

—Hola, Mike— saludó el Sr. Molina. Luego sonrió a las hermanas. —Oh, sí... la Srtas. Swan 

Corey, a pesar de odiar al sujeto, le ofreció una sonrisa y se adelantó para entregarle su boleta para que lo firmara. Bella parecía dudar, así que Corey se giró para mirar a su hermana. Bella, que anteriormente había estado sonriendo, ahora frunció el ceño mientras le entregaba al Sr. Molina su boleta también. Mientras les daba sus libros de texto, Corey buscó lo que de repente había molestado a Bella. Sus calculadores ojos azules cayeron sobre el mismo Edward Cullen, que cubría la mitad inferior de su cara y miraba abiertamente a Bella.

Corey inmediatamente bloqueó a Bella de su línea de visión y le envió una mirada feroz. A ella no le importaba lo agradable que él y su familia eran para ella. Si él iba a ser malo con Bella, ella iba a ser mala con él. Cuando Edward la vio deslumbrada, se enfrentó rígidamente a la ventana.

—Tengo un asiento para ustedes dos aquí, son los dos últimos así que— Corey finalmente sintonizó de nuevo en el maestro mientras él la llevaba a ella y a Bella a sus asientos. Bella fue llevada al asiento junto Edward, poniéndole tenso. Antes de que Corey pudiera preguntar cuál era su maldito problema, el Sr. Molina la puso en la mesa justo detrás de Edward y Bella y justo delante de Jasper y Alice. Su pareja era Mike, quien le dio una sonrisa entusiasta. 

El estado de ánimo de Corey ya se había arruinado antes de que el Sr. Molina empezara a hablar de plancton, pero sin duda empeoró a medida que la clase continuaba. Edward seguía mirando a Bella, quien claramente estaba herida por sus acciones. Corey podia ver a su hermana que se sentía cohibida y nerviosa ahora. Y en el momento en que sonó la campana, Edward estaba huyendo de la clase. Corey estuvo al lado de Bella en segundos, sin prestar atención a Mike que intentaba hablar con ella. Apenas se despidió de Alice, que le había sonreído.

Bella no le dijo nada a su hermana mientras se dirigían a sus casilleros y luego a la oficina para entregar sus recibos. No necesitaba hablar. Bella solo necesitaba a su hermana, que mantenía su brazo unido al suyo de una manera reconfortante. Cuando llegaron a la oficina, fueron recibidos con la desagradable sorpresa de Edward tratando de cambiar su clase de ciencias.

A mitad del semestre.

—"Cada clase está llena, querido— explicó la recepcionista, mirando a las chicas. —Sólo un minuto queridas. Me temo que tendrá que quedarse en Biología.

Edward lentamente miró por encima de su hombro y miró a Bella, claramente frustrado  .              — Bien, tendré que soportarlo— Y luego se fue, rozando a una Bella  que estaba a punto de llorar  y a una Corey furiosa.

♦

—Lo mataré Bella, enserio que lo haré—grito furiosa Corey— ese doble cara ya esta muerto para mí!

—Vamos a - Sólo quiero ir a cenar con Charlie— dijo Bella, suspirando y desbloqueando el camión oxidado. —No te preocupes.

—¿No te preocupes?— preguntó Corey, burlándose. Sus ojos se posaron en Edward Cullen, que estaba junto a su familia junto a sus coches. Todos la miraban como si pudieran oírla hablar de Eduardo. Pero ella sabía que era sólo una coincidencia. Sus ojos volvieron a encontrarse con los de Edward, y su resplandor volvió antes de subir al camión. —Dios, no puedo creer que fui amable con él. Definitivamente no volverá a suceder. Edward Cullen puede irse a la mierda.

—¿Podemos hablar de otra cosa?—Bella preguntó, tratando de olvidar lo sucedido.

—Muy bien. Podemos hablar del hecho de que ese tipo Tyler se acercó a mí y me besó en la mejilla tres veces hoy— dijo Corey, con un tono molesto.

Bella le mando una mirada a su hermana confundida mientras conducía por el estacionamiento. Afortunadamente, su hermana la había distraído del hecho de que su coche estaba esperando en la cola justo donde los Cullen estaban estacionados. —Core, te encantan los besos en la mejilla.

— Claro, si son mis amigos—dijo Corey, remancando la palabra amigos —Hable con él sólo una vez y ya cree que somos los mejores amigos. No me agrada

—A ti no te cae bien la mayoria de la gente—Bella le recordo— Estoy muy segura que Angela fue la única que realmente te agrado

— Y no estás equivocada

♦

Corey y Bella se sentaron frente a Charlie en el Carver Café, en algún lugar de sus mentes las chicas recordaban haber comido ahí de niñas. Bueno, al menos Corey lo recordó, y estaba muy emocionada mientras la camarera ponia un plato lleno de dedos de pollo y papas fritas delante de ella. Empezó a deborar la comida, sin esperar a que a Bella y a Charlie les sirvieran su comida.

—No puedo creer lo grandes que están las dos— dijo la camarera, sonriendo a Bella y Corey. Corey se sintió mal porque en realidad no recordaba a la mujer, pero le ofreció una pequeña sonrisa y actuó como si lo hiciera. Su nombre decía Fiona. —Y tan hermosas.

—¡Hola, Bella! ¡Corey!— saludó un hombre que Corey sí recordaba. —¿Se acuerdan de mí? Hice de  Santa un año.

—Sí, Waylon... no han tenido una Navidad aquí desde que tenían cuatro años— dijo Charlie

—Deja que las chicas coman su comida, Waylon—dijo Fiona, sonriendo a las hermanas. —Tan pronto como termines te traeré tu favorito -"

—Pastel de frambuesas—Corey terminó mientras sonreía.— ¡Sí!

♦

Mientras la familia Swan hablaba de sus días en la cena, la familia Cullen estaba en su sala de estar, teniendo una discusión mucho más seria.

—¿Cuánto tiempo crees que va a estar fuera— Esme preguntó, refiriéndose a Edward. Tan pronto como regresó a la escuela, se fue a un viaje de caza prolongado.

—No mucho— declaró Alice con positividad. —Sólo necesita controlar su sed. Todos sabemos lo difícil que es mantenerse alejado de su Tua Cantante.

—Vale, entonces hablemos de otra cosa, y mucho más interesante— dijo Emmet con una sonrisa burlona formandose en su cara. Le dio a Jasper una mirada provocadora. —Hablemos de Corey Swan.

Jasper puso los ojos en blanco y miró su libro. Había estado toda la tarde intentando no pensar en Corey y no quería que su familia hiciera preguntas sobre ella.

Esme le sonrío a su hijo —Sí, Alice me llamo y me dijo que la chica había llegado, ¿te agrado conocerla?

—Supongo que sí— Jasper susurró, mateniendo sus ojos en el libro que estaba leyendo

—Bueno, no me puedo decirte mucho sobre el futuro porque temo que algo cambie—Alice dijo mientras se sentaba a un lado de Jasper — Pero te puedo decir que las cosas que se aproximan son buenas, excelentes diria yo!

—No deberían estarlo. Debería alejarme de ella como hace Edward. Soy un peligro para ella—dijo Jasper, apretando su mandíbula.

—Si pudiera... —Rosalie se entrometió, cruzando los brazos.

—Preferiría que no lo hicieras— murmuró Jasper, recibiendo una mirada de su supuesta hermana gemela.

—Mira, ya sabes cómo me siento acerca de interactuar con los humanos. Corremos el riesgo de hacerles daño y exponernos a nosotros mismos— Rose les dijo. —Pero esta chica es diferente. No es una Tua Cantante como su hermana. No podemos oler su sangre. Ni siquiera existe la tentación de ello. No digo que corras y le cuentes todo sobre nosotros, pero no creo que seria malos si fueran amigos. Mientras estemos alerta y no la hagamos sospechar.

Jasper suspiró, tomando en consideración el pequeño discurso de Rosalie. Era cierto. Corey no tenía olor - bueno, a menos que contaras su lavado corporal perfumado de fresa y el poco sudor que había en la mayoría de los humanos. Pero no había garantía de que duraría. ¿Y si se cortaba la mano en clase? ¿Y si su sangre olía entonces y Jasper podía matarla. No podía pensar en la cara sonriente de Corey sin imaginarla cubierta de sangre y muriendo por su culpa.

—No voy a hablar con ella— Jasper les dijo, de pie para salir. —Y tampoco debería ninguno de ustedes por su seguridad.

—Jasper, por favor— Alice prácticamente suplicó, de pie a su lado. Ella estaba haciendo pucheros y tirando de su brazo como una niña. —No ves lo que yo veo. Ustedes dos estarían tan felices y enamorados, si es que tan solo le das una oportunidad a esto.

—¿Jasper? ¿Abrirse? Es inaudito— bromea Emmett. Rose puso los ojos en blanco y sacó a su marido de la habitación, sin querer que empeorara las cosas.

Jasper volvió a suspirar de exasperación. —Alice, mira -

—No, mira!— Alice lo cortó. Ella habló tan fuerte que Jasper estaba un poco aturdido. ¿Por qué en el mundo estaba tan colgada de él y de esta chica que sólo había conocido por un día? —No llegas a ver mis visiones. No se llega a ver cuáles son las posibilidades. Si tuviera el poder de mostrártelas, lo haría. Ustedes dos bailando en su dormitorio, riéndose en nuestra cocina, persiguiéndose en el estacionamiento. Literalmente los he visto tan felices. Por favor, no hagas nada para cambiar eso.

Jasper miró fijamente a Alice durante un largo momento antes de sacar su brazo de su agarre.  —Superalo, Alice.

Su pequeña pero esperanzadora sonrisa cayó cuando Jasper salió rápidamente de la habitación, sus propias emociones por todas partes. Esme se acercó para poner una mano reconfortante en el hombro de Alice. Miró a su hija, que ahora tenía la mirada lejana de una visión en su cara.

—¿Ha cambiado el futuro?— preguntó suavemente Esme. Alice asintió mientras la visión terminaba. —¿Para bien o para mal?

—Aún no lo sé.

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