Capítulo 25: El día siguiente y el siguiente y el siguiente... Parte 1
ChanYeol descubrió que sí fue un error haberse dormido sin haber limpiado cuando despertó a la mañana siguiente algo pegajoso, todavía sudoroso y claramente sucio, pegado al siempre pulcro y libre de toda mancha BaekHyun, que incluso amanecía con el cabello tan bien peinado como si no le hubiera movido con todo el ajetreo de anoche.
Quizá era algo Luminian también. Aunque le fascinó despertar a un lado de ese Luminian.
Por algún motivo, BaekHyun ya estaba despierto y lo veía con ojos curiosos y casi tan inocentes como si se hubiera embriagado y no tuviera idea de lo que hicieron el día anterior.
Sonrió coqueto al captar su mirada en la ahora despierta de él.
"Buenos días, precioso. ¿Despertaste hace poco o tienes ya tiempo observándome como stalker?"
"¿Cómo?" se rio, encantado con la ternura de BaekHyun.
En serio, no sabía qué le pasaba, pero ahora lejos de sentir ese picor en los dedos, aun con el Luminian desnudo a su lado, lo único que quería era abrazarlo y cuidarlo entre sus brazos.
"Nada. No importa. Lo que sí importa es," se separó lo poco que físicamente alcanzaría solo para verlo. "¿Cómo te sientes?"
"Bien. ¿Cómo debería sentirme?"
"No lo sé, ¿tienes algún dolor, algo de qué quejarte, quizá en las caderas, de la espalda, tu trasero? ¿No te molesta algo?"
Vaya poco pudor para hablar del dolor de culo. Ahí tenía por eso ChanYeol a su BaekHyun tímido e inocente que se sonrojaba, y más con las caricias leves que dio con su pulgar a su cadera al reposar toda esa mano en su muslo.
"No, estoy bastante bien, ChanYeol, lo único que me molesta," resopló y se sentó tan rápidamente que solo dejó caer la mano de ChanYeol a un lado. Aunque no creía que lo hiciera intencionalmente, solo había sido descuidado. "Agh, son los llamados de mis Padres ahora mismo. Están pidiendo que los vea tan pronto despierte, donde quiera que esté, ellos sin saberlo, pero ya estoy en el Palacio. No han dejado de fastidiar desde temprano, por eso desperté, lamento no decirte nada, era solo que no quería sacarte de tu estado pacífico, pero tampoco quería dejarte solo y que despertarás sin verme, ni siquiera dejando una nota que me excusara."
BaekHyun fue diciendo todo eso mientras se paraba sin dificultad alguna. ChanYeol se fijó—por obvias y científicas razones— en su trasero azul tan redondito y precioso, y notó además que el Luminian no mostraba ninguna cojera o dificultad que simbolizara un dolor que, por no querer preocuparle, BaekHyun no le hubiera mencionado.
Se preguntaba si era bueno porque había sido delicado con BaekHyun como debería en su primera vez o malo porque quizá, luego de tanto tiempo en abstinencia voluntaria, había perdido su toque.
Vio luego cómo el Luminian usaba de nuevo sus pantalones y se molestó por perder esa buena vista, con la ligera diversión de BaekHyun al percibirlo aún sin mirarlo, y al tomar en cuenta que ni siquiera aparentó estar sucio como ya decía que él sí lo estaba, le dejó pasar sin mencionar nada al respecto.
(Aunque luego un sucio pensamiento, como el que era creer que, así como la piel de BaekHyun absorbía el agua lo había hecho con su semen, le recorriera y casi lo puso duro una vez más como una roca. Vergüenza, ChanYeol, eres una maldita-pervertida-vergüenza.)
Eso hasta que BaekHyun se volteó con su camisa y saco sin botones y aun al mostrar su pecho desnudo, le miró con clara indignación sobre sus actos de la noche anterior.
Bien, quizá sí se había pasado un poco.
"Oye, tú no te quejaste de eso anoche," y así se defendió al levantar sus manos con las palmas expuestas.
BaekHyun bufó, y le lanzó luego a la cara su propia ropa tirada cerca de la propia.
"Sí, como sea, de todas maneras, vístete, hay que salir sin ser vistos del Palacio, regresar a la casa para tomar un baño rápido—porque sí, apestamos— y fingir como si nada pasara para que tú puedas irte a tus actividades normales con tu nave y yo ir a calmar a mis irritantes Padres."
A ChanYeol no le gustó cómo sonó eso. Fingir. Sabía la situación en la que estaban, pero aun así...
No se esperaba un BaekHyun tan borde a la mañana siguiente luego de haber hecho el amor como ambos habían expresado.
Le detuvo por eso antes de verle moverse de nuevo y ya estar a medio de abrocharse su pantalón.
Con eso puso su sonrisa coqueta, le acercó pronto y detuvo el aliento de su acompañante al descubrir que aún tenía dominio sobre esa bella persona.
"¿Podríamos hacer algo más que bañarnos al llegar a casa, no crees?"
"ChanYeol, no hay tiempo..."
"No, Baek, para nosotros siempre hay tiempo."
Le besó entonces, y recibió ese mismo gesto enamorado de BaekHyun al tener su mano en el rostro.
Pero se despegó solo con escuchar esos malditos llantos...
Justo como la noche pasada.
No iba a caer en su trampa, ignoraría a su mente, porque era esto lo que él quería y se merecía.
★★★
Salir de un Palacio lleno de Guardias y evitar cualquier mínima cercanía de la presencia Luminian para que no alcanzaran a ser percibidas las emociones incontrolables de ChanYeol al estar BaekHyun medio desnudo por el pecho, con un aspecto sucio—y peor el de ChanYeol—, además de un claro olor a sexo, era la cosa más difícil que, en su vida, BaekHyun había hecho.
Un dato curioso—que seguro resolvería unas de las dudas más morbosas que ChanYeol tenía—: la piel Luminian de BaekHyun sí había absorbido el sudor, saliva y todo tipo de fluidos de ChanYeol, así que, aunque no lo pareciera, BaekHyun cargaba con una inmensa suciedad por dentro que para ojos humanos como los de ChanYeol no sería visible, pero para los Luminians...
Era como si ChanYeol se hubiera orinado en él—básicamente algo así había hecho—, porque tenía toda la esencia de ChanYeol marcando su cuerpo, olía como él, apestaba al olfato de un Luminian. Si alguien los interceptaba, sabrían inmediatamente lo que habían hecho, ya no solo por su aspecto, sino por el olor.
Que, aunque a BaekHyun podría tener gustoso y ciertamente complacido, para cualquier otro sería una falta gravísima y ya no solo por su posición y estado—más lo que ayer había faltado.
No era como si ante una sociedad terrícola lo más normal fuera que gritaras a los cuatros vientos que habías tenido sexo, ¿o sí?
Aun cuando fuera descrito como 'hacer el amor', tan románticamente.
El olor y todos los rastros que ChanYeol había dejado en él solo desaparecerían cuando tomara un baño y se rehidratara para sustituir los fluidos combinados en su interior por agua limpia. Pero, para que eso pasara, debían llegar primero a su casa, y luego regresar ahí con sus Padres como si nada hubiera sucedido.
No le gustaba pensar de ese modo, porque la noche anterior sí fue especial para él, y se sentía tan mal por casi hacerle creer a ChanYeol que no le daba importancia—porque claro que percibió su desánimo en la mañana—, pero a pesar de los sentimientos que tan a fondo sentían, ¿cómo iban a continuar con esta situación?
BaekHyun se estaba proponiendo algo, sabía que quizá no debería, pero si quería demostrarle a ChanYeol todo lo que en tan poco tiempo por él ya sentía, debía arriesgarse un poco. Quizá al menos intentarlo.
Entonces, tuvieron muchos percances en su salida y agradecía al menos saber los pasadizos secretos del Palacio, porque así se evitaron demasiados encuentros con Guardias, gente del servicio y uno que otro Blanco que pudiera estar por ahí en el Palacio por asuntos de élite, o del mismo Pueblo, en una visita 'turística' del Palacio.
De un modo u otro lograron salir sin ser descubiertos y llegaron a su casa en un trote veloz para tampoco ser identificados en la Costa. Se alegraba que la mañana siguiente luego del Festival fuera un día de asueto, al menos no había gente trabajando cerca de su casa ni fuera de sus propias viviendas. Quien hubiera asistido a la fiesta, debería estar ahora descansado, no como sus Padres que estaban despiertos desde tan temprano y le fastidiaban mediante vibraciones.
El deber de un gobernante no tenía descanso.
"No sé tú, pero yo he sentido eso como estar en una Misión Imposible, tener que pasar por pasadizos, ocultarnos a ojos de otros y correr de un lado a otro, eso fue algo divertido, Baek," ChanYeol comentó al ya llegar y entrar a su casa, donde BaekHyun se deshizo de su ropa desecha y tomó en cambio una bata limpia de ducha para cubrirse antes de soltar un suspiro cuando MongRyong se acercó tan preocupado a él para olfatearlo por todos lados.
Debió estar asustado porque no regresaron luego como se lo dijeron, pero fue obediente y se quedó en la casa. Eso prácticamente le estaba diciendo en su idioma de ruidos como chirridos mientras aún le examinaba como si buscara alguna herida que cuidar. Aunque seguro MongRyong ya le olía bien y sabía lo que había pasado.
"Tenía tiempo sin hacer algo como eso. No fui mucho de los que tuvieran sexo casual y luego abandonaran la habitación antes de despertar al otro en la mañana siguiente, pero me tocó alguna que otra vez tener que huir para no ser descubierto. Fue tan vergonzoso, no te imaginarías ni a quién tuve que dejar con la cama fría."
¿Era necesario que ChanYeol hablara de eso ahora con él o era solo que era muy estúpido?
No quería escuchar sus aventuras de amor con otros antes ni mucho menos ahora.
"Más te vale que conmigo no le consideraras sexo casual o como le llames, porque ahora tú estás conmigo, ¿me escuchaste, Park?" sentenció algo feroz al casi gruñir y girarse rápidamente para apuntar con un dedo sobre el pecho a ChanYeol y cortar cualquier otra simple cosa que deseara comentar de sus aventuras.
Quizá fue algo agresivo sin notarlo, porque pudo percibir tarde esa inmensa sorpresa en ChanYeol y casi el paso de un escalofrío por el cuerpo humano con su mirada filosa, ante la que él se sintió como un desconocido.
Ya que, realmente, él no solía comportarse así nunca, ¿qué pasaba ahora o como solo así se había orillado a eso?
Quiso retroceder, avergonzado por su acción, pero antes de que pudiera, una sonrisa conciliadora atravesó el rostro de ChanYeol, y al tomarle la mano que apuntaba con un dedo acusador, le besó el dorso y lo dejó cerca de su cara, en esa expresión que comenzó a hacerlo sentir más que avergonzado. ¿Se estaría sonrojando?
"Claro, BaekHyun, jamás dije que tú fueras como esos otros. Todos antes de ti son pasado. Estoy aquí contigo ahora, y te lo dije, lo nuestro fue hacer el amor, no solo sexo. Créeme que, con eso, yo soy todo tuyo."
Se sentía tan bien por esto estar con ChanYeol. Era casi tan correcto.
"Tengo que asearme, mis Padres me siguen esperando," se excusó, un poco sobre exigido por las palabras de ChanYeol como para saber contestarle con algo que no fuera más que aventársele, enredar sus piernas al torso y dejarse hacer el amor todo el día como si fuera un animal en celo. Sentía que, a pesar del bien que le hacía ChanYeol, algo aterrador se estaba formando a causa de ello dentro. "Puedes asearte después de mí, lamento si te dejo antes, pero ya no puedo retrasar más esto, no quisiera que mandaran a alguien hasta aquí por mi desobediencia."
«Ya habían tenido suficiente de ella anoche.»
"Claro, lo entiendo. Entonces estaré por aquí mientras tanto. Muero de hambre, buscaré algo que preparar, espero que no te moleste que tome cosas de tu cocina," se alejaron, ante lo que BaekHyun apenas hizo mínimos gestos para responderle a ChanYeol antes de adentrarse de una vez al baño y empezar con lo que ya debería haber terminado. "¿Quieres que te deje algo para el desayuno?"
"No, está bien, tomaré algo en el Palacio, supongo," se excusó, con MongRyong que aún lo quiso seguir. Tenía al bubble haciendo tantas preguntas que no pensaba contestar ahora, y por eso parecía querer anclarse a su cuerpo. Lo único que pudo hacer fue advertirle de castigarlo si no lo dejaba entrar al baño solo, para hacerle alejarse. "Cualquier cosa, solo toca la puerta y llámame si me necesitas."
ChanYeol le dedicó una sonrisa, ya desde su cocina, al mismo tiempo que le guiñaba el ojo. Qué cortejo.
"Lo tendré en cuenta, cariño."
★★★
"¿Dónde demonios estabas? ¿Tienes idea de cómo nos dejaste a nosotros ayer por la noche? ¿Tuviste siquiera la consideración de la vergüenza que nos hiciste pasar con tu desaparición en el Festival a la Medianoche?"
BaekHyun agachaba la cabeza. Su Padre estaba muy molesto. En realidad, no esperaba que lo recibieran con un buenos días, Hijo, qué bien te ves, ¿gustas compartir con nosotros unos aperitivos? ', pero tampoco imaginó que estaría así de enojado.
Los había reunido, a él y a su Madre únicamente con puerta cerrada y ningún Guardia a la vista en su salón especial de descanso para evitarse el que alguien los escuchara, más al estar tan furioso, con la cara oscura de sus emociones percibidas mientras le gritaba a todo pulmón sobre sus faltas.
Lo estaban regañando, como siempre le habían hecho, desde niño, sentado en un banquillo, con su Padre al frente al reclamarle todo lo malo que había hecho. Él callaba y escuchaba si no quería recibir un peor castigo del que ya podrían imponerle. No tenía siquiera permitido ver a su Padre a los ojos porque eso sería una falta de respeto que solo empeoraría su dócil imagen que debía mostrar para aceptar esa culpa ante sus errores y las consecuencias que vendrían de ellos.
Su Madre, callado, se sentaba detrás de su Padre y mantenía esa postura tan bondadosa donde quería proteger a su Hijo de todo y todos, pero al aceptar el mandato de su Pareja, se quedaba ahí presenciando toda la reprimenda como si mostrara apoyo a la opinión de SiWon. Como la Pareja de la Divinidad Suprema, esa era su función oficial, más que nada.
BaekHyun no respondió a eso, como debía, aunque la garganta le picara por querer soltar tantas palabras, se mantuvo abajo. Y dejó que su Padre siguiera con su reproche.
"Estuviste toda la Noche revoloteando de un lado a otro, presente en medio de todo, ¿y decidiste simplemente desaparecer para el único momento en el que eras requerido? Es parte de nuestra tradición, debías presentarte no solo ante tu Pueblo con tu Prometido, ¡sino para con nuestros ancestros también! ¿Tienes idea de la vergüenza y desdicha que has provocado además para los Wu con eso? Se han sentido más que ofendidos. YiFan estaba devastado, se sentía rechazado."
«Sí, claro, lo único que ese bastardo quiere es el trono. No importa sobre qué medio, él sería feliz con yo odiándolo mientras eso no le evite tener cierto poder en el Palacio. Tal vez sí sería bueno dejarlo a él embarazado, para que sepa lo que es la responsabilidad verdadera...»
"Eres inaceptable, BaekHyun, para ti nada es suficiente. Te hemos dado tantas libertades y solo nos has pagado con esto. ¿Acaso no puedes obedecer al menos una sola vez?"
«Sí obedezco. Siempre obedezco. Estoy harto de obedecerlos.»
"Lo peor de todo es cómo ha quedado tu imagen ¿Quién te tomará en serio cuando tomes mi puesto, hmm? Una Pareja irresponsable, que no toma sus tareas en serio."
«¿Qué tipo de tareas piensa mi Padre que debo adoptar? ¿Debo ser una damisela para YiFan? ¿Debo ser la Pareja sumisa y callada, obediente que le lava y besa los pies a su amo?».
"Y además que se muestra más accesible a tratar con lo más bajo del Pueblo en lugar de su Pareja. ¡Su Prometido—!" BaekHyun tuvo hasta eso para mantenerse callado.
«Oh, no, con mi Pueblo no se meten.»
"Mi Prometido no es alguien al que pondría por encima de mi Pueblo. ¡Sobre todo de la población más baja!"
Su Padre por un segundo quedó en silencio, quizá sorprendido por verle alzar la mirada y retenerla en sus ojos—casi como si lo estuviera retando—, además de responderle con la voz alzada. Creyó escuchar incluso a su Madre retener el aliento, pero eso no lo avergonzó ni retractó en sus palabras.
Hablaba en serio. Y si su Padre iba en contra de ellos, entonces lo juzgaría mal por su comportamiento tan hipócrita del de anoche al mezclarse y hablar con todos en el Pueblo, cuando ahora mismo estaba pensando así de ellos.
"Eso no quita que has sido irresponsable. Tienes un deber, BaekHyun, y debes abstenerte al rango de ello."
"¿Sí? ¿Y qué es eso? ¿Volverme un frío gobernante, doble cara que solo se preocupa más por su categoría que por una población total en igualdad? ¿O ser una Pareja serena y seguidora de YiFan, tratándole como un dios y lamiendo por donde vaya pisando?"
"¿Te estás dando cuenta de cómo me estás hablando? Soy tu Padre y la Divinidad Suprema..."
"¡Sí, y yo soy tu Hijo!" exclamó al levantarse sin más de su asiento por no estar cómodo de seguir por debajo, y aunque su Padre fuera aún más alto que él, igual ya no se veía en tanta desventaja. Casi chocaban por la proximidad que guardaba. "Pero tú no puedes ver el daño que aun así me haces. No me conoces..."
"¿De qué estás hablando?"
Había agachado la mirada al decir aquello, ya desesperado. Triste y decepcionado, había dejado que ello fluyera sin más. No podía seguir reteniéndolo, se dijo que al menos lo intentaría...
Por ChanYeol.
"Padre, no quiero unirme a YiFan. No lo amo a él ni deseo unirme a él. Por favor, te ruego que canceles el compromiso," de pronto, recordó su posición, el modo en el que ello debía tratarse y se puso sobre sus rodillas ante su Padre, sin verlo a los ojos, por lo que suplicó. "Por favor, Padre, no me hagas unirme a ese hombre."
"BaekHyun..." su Madre le llamó, con lo que él solo lo vio de reojo y pudo ver cómo acababa de pararse, bastante sorprendido por su posición adoptada.
O quizá por sus palabras.
El silencio le dejó por otros segundos de ese modo, hasta que su Padre le tomó del hombro y lo hizo volver a incorporarse sobre sus pies. Le miró directo a los ojos, inquieto, aún sin soltarle del hombro.
"¿Quién te ha hecho esto, Hijo?" frunció el ceño al no entender lo que su Padre decía. "Dímelo. ¿Es cierto entonces lo que escuché del Pueblo? Que te han visto huir con alguien más, alguien de abajo, y por quien ahora estás cambiando tu decisión con respecto a este honrado compromiso."
"Padre, yo no..."
"¡No me mientas!" exclamó su Padre. BaekHyun se sorprendió en cuanto lo abofeteó con eso mismo, y quedó su cara de un lado, por lo que no pudo sentirse más avergonzado e indignado de lo que ya estaba.
Realmente no mentía, no se había enamorado de algún otro Luminian. Amaba a ChanYeol, y él no era ningún inferior a ellos. Nadie lo era.
"Hijo, te hemos dado tanto, ¿y así es como nos estás pagando? Olvídate de quien sea que veas, YiFan es el hombre para ti, alguien amable y honesto, al igual que su Familia. Por eso, ahora, habrás de disculparte con ellos por lo de anoche, sinceramente, y acompañarás a tu Prometido el resto del día, o de los días hasta que llegue su Unión. Que esto te sirva de enseñanza, dejarás tus aventuras de niño y enfrentarás tus responsabilidades como se debe. Jamás volveremos entonces a tocar este tema, ¿te queda claro?"
BaekHyun aún no podía ver a su Padre. Le ardía la mejilla golpeada, se imaginaba su piel marcada y pronto amoratada por la fuerza del golpe.
Se preguntaba si su Padre le importaría que otros supieran de lo que había hecho como reprimenda o para 'guardar apariencias' habría de pedirle maquillar su rostro.
«¿Y el dolor cómo se ocultaba por dentro?»
"¿Me has escuchado o es que quieres además que investigue quién es ese con el que te has liado y termine condenándolo a un severo castigo?"
"BaekHyun..." su Madre le imploró de nuevo.
Pero BaekHyun no necesitaba escucharlo una tercera vez, con esa amenaza impuesta se daba cuenta de la posición que él tenía en esto. No quería que le hicieran daño a ChanYeol, aunque buscaba hacer algo por ambos, sabía que, si insistía solo un poco más, su Padre podría tomar medidas tan drásticas que no solo evocarían un golpe en su mejilla. Los humanos podrían terminar siendo unos de sus enemigos, condenados por algún tipo de mandato que recién estableciera su Padre solo por lidiar con su orgullo herido y la desobediencia a sus órdenes.
BaekHyun siempre supo que, aunque su Padre lo amara, era muchas veces cegado por sus propios intereses. Por esto se negaba a las alternativas de su Madre, porque ellos realmente no sabían cómo su Padre contestaría a ellas.
Ahora lo sabían.
«Lo siento, ChanYeol, lo intenté...»
Y sabía que debía proteger lo que más amaba.
"Sí, Padre. Está bien, Padre."
★★★
Todo era color rosa y un hermoso día soleado con aves—que no eran aves— que cantaban junto a la brisa playera del hermoso Lumiscia para ChanYeol en esa mañana.
Era extraño y muy inusual decirlo, pero casi se veía como todo un campeón cargando con su premio mientras caminaba con la mayor lentitud y todo el gozo que podría a esa hora de la casa de BaekHyun con destino al Palacio.
Porque, a pesar de la separación que tuvo con su adorado Luminian luego de todo lo que ya antes pasaron juntos, era cierto que también debía hacer caso a sus responsabilidades, y tenía una nave de la que ya ocuparse, seguro ya con un KyungSoo gruñón que le reprocharía por no ponerse a trabajar en seguida.
Aunque ahora no estuviera muy entusiasmado por seguir con el motor de la nave. ¿Qué caso tenía? De todas maneras, sin la energía ni un contacto, jamás podrían salir de ahí, ¿cierto?
Tal vez eso era mejor para ellos.
«O para ti.»
Auch, ¿qué fue eso? ¿Él reprochándose? ¿Acaso era que no sentía que podía ser egoísta a veces? Tanto tiempo que sirvió solo al Sistema y poco se preocupó por sí mismo. ¿Con eso esto no era correspondido?
Tal vez fue eso lo que le convenció a pasar antes al Comedor del Pueblo para tomar unos aperitivos—además del desayuno ya tomado en la casa— para comer en el camino.
Esa mañana en serio tenía tanta hambre, se sentía como si apenas hubiera salido de un eterno ayuno, y nada todavía le satisfacía. No era eso alguna consecuencia del sexo con un Luminian, ¿cierto?
«ChanYeol, por favor.»
Continuó comiendo como si la vida se le fuera en ello. No le importaría subir un par de kilos si eso le permitía volver a amar y estar junto a BaekHyun como ayer lo había estado. Vaya, ¿qué le había hecho BaekHyun con tanto y tan poco? Lo tenía envuelto en su meñique ahora mismo.
Ya lo extrañaba—pero era obvio que debía dejarlo estar por un rato. Tampoco era que pudieran pegarse el uno al otro de por vida.
Entrar a la sala de estadía de su nave y encontrar a KyungSoo subido en el techo de ella, donde traía unos lentes de protección, guantes y un taladro atornillador, fue algo que ciertamente no se esperaba.
Lo hizo incluso detenerse en su voraz apetito, y dejó de lado la comida que traía en manos para acercarse de inmediato a su cadete, porque aun con todo el ruido que hacía y las chispas que se sacaban, intentó alzar su voz para hacerse oír entre todo.
"¡KyungSoo! KyungSoo, para, ¿qué estás haciendo? ¡KyungSoo!"
"Oh, ChanYeol, estás aquí," su amigo le escuchó, afortunadamente, y se detuvo por lo cual le miró desde lo alto y sonrió como si así pudiera reírse de su posición, aun sin moverse de la misma. "Es bueno saberlo, porque tienes que ponerte manos a la obra. Ya tuviste tu noche de diversión, ahora vamos a lo serio. El trabajo viene primero, ¿puedes continuar con el motor para tenerle listo? Hay que apresurarnos, no podemos hacer pasar más tiempo."
Luego de eso, regresó a su trabajo en el techo, y volvió con todo el ruido que molestó a ChanYeol, más cuando sacó un enorme martillo y siguió ahora golpeando con el metal. Las herramientas eran Luminian, pero tenían su similitud con las humanas.
Eso, sin embargo, no le aclaraba lo que estaba haciendo ahora mismo.
"¿Qué dices? KyungSoo, espera, no me has respondido. Quiero decir, sé que debo seguir con el motor y su reparación, pero ¿cuál es la prisa ahora? ¿Y qué tanto haces con el exterior de la nave? ¡Deja de golpear así a mi bebé!"
"¿Ahora la nave es tu bebé?" KyungSoo se burló y volvió a detenerse, con ChanYeol que se avergonzó por escuchar eso. No sabía por qué lo había dicho, solo había salido. "Quería darte las buenas noticias luego, pero supongo que no dejarás de insistir porque tu curiosidad siempre ha sido algo insaciable. Bien, espera un poco."
ChanYeol vio con el ceño fruncido cómo KyungSoo bajó del techo. Se ayudó de una escalerilla anexa y trajo sus herramientas requeridas en una caja abierta.
Se colocó a su lado y se quitó los guantes al mismo tiempo que los lentes, y los dejó en su cabeza al solo sacudirse un poco la ropa antes de regresar esa sonrisa con él que le inquietaba ahora tanto, y con lo que no se esperaba lo que venía.
"Ok, sé que sonara sorprendente, pero tienes que creerme cuando te digo que esto no ha sido un sueño ni ninguna imaginación mía y mucho menos una broma que te estoy haciendo porque yo nunca podría darle humor a esto, ¿de acuerdo?"
"KyungSoo, ve directo al grano, ¿qué—?"
"Ayer logré comunicarme con Kai en el Sistema de Seguridad," eso sin duda le cortó el habla, y lo dejó sin alguna, por lo que KyungSoo sonrió, entusiasmado al no del todo ver las cosas como ChanYeol. "Aparentemente él encontró algunas cosas, pero nada que deba importarte ahora. Lo que sí es que él ha dicho que debemos regresar pronto al Sistema, y estando al tanto de nuestra situación por mí, me ha dicho que cuando logremos reparar la nave, él y otros pocos vendrán aquí para sacarnos de Lumiscia. No entrarán al Planeta porque no quieren alertar a nadie, ni a los habitantes de aquí o al Sistema porque básicamente estarán haciendo una exploración no autorizada, pero fuera de eso—"
"¿Ellos vendrán aquí por nosotros?"
"¿No me escuchaste? No aquí, sino fuera de la órbita. Pero sí, van a venir por nosotros, y nos ayudarán a transportarnos en espacio-tiempo al Sistema. Hay algunas cosas que quizá te deba explicar, pero no por ahora. Lo único que debes saber es que nuestra desaparición en el Sistema pasará casi desapercibida," completó, a lo que ChanYeol volvió a callar, un poco indeciso con lo escuchado. ¿Qué se suponía que dijera ahora? "Y debes terminar con el motor para que ello pase rápido. En cuanto esté listo y podamos conectar todo en él para partir, saldremos de aquí y volveremos a casa. Yo estaba solo arreglando un par de detalles imperceptibles, un par de cosas que poco importan, pero mi emoción no me ha dejado dormir demasiado por ahora. ¿No estás ansioso? ¡Volveremos a casa, Chan! ¡A casa!"
ChanYeol se dejó abrazar por KyungSoo, quien brincaba de un lado a otro mientras balbuceaba toda esa emoción descrita, e incluso parecía burlarse de un par de cosas que con él veía.
Pero ChanYeol no tenía una sola palabra para responder con él, ni mucho menos sabía cómo sentirse al respecto.
Sin embargo, ¿qué era eso que se formaba con dolor por dentro? Tan solo pensar en BaekHyun y lo que habían compartido anoche en esos momentos le hizo sentir remordimiento, casi náuseas.
Aunque, ¿qué se suponía que iba a hacer, de cualquier modo?
"Entonces pásame esa caja de herramientas, KyungSoo, hay que ponernos manos a la obra."
"Sí, señor."
★★★
BaekHyun tuvo que reunirse con los Wu como su Padre le había ordenado y rogar por su perdón con una reverencia muy marcada. Sobre todo, frente a su Prometido.
Tuvo que soportar escuchar esos ligeros reclamos por parte de los Condes, al mismo tiempo que su Prometido los acallaba y con su gran actuación le rodeaba por los hombros para incorporarlo de su posición sumisa y aceptar sus disculpas al tiempo que envolvía su cuerpo en un abrazo.
Tuvo que pasar toda una tarde en el Palacio, escuchar las pláticas de Blancos con sus Padres, reír junto a los Wu, con su Prometido sentado a su lado, y tomar su mano en todo momento.
Como si temiera que en cualquier momento se escapara. No lo haría, le había quedado claro, no podía siquiera intentarlo.
Y al final del día, incluso tuvo que dejar que YiFan le condujera de vuelta a su casa, porque, aunque sus Padres le habían dicho que debía solo estar en el Palacio y junto a su Prometido, parecía que al menos aún respetaban su decisión por estar en su propio espacio por la noche, de un mismo modo que YiFan en un principio había aceptado.
Solo que YiFan lo sabía. Ya las cosas no eran a su modo.
Se detuvo a la puerta de su casa, mientras YiFan aún le tomaba de la mano, y con la que quedó libre le acarició la mejilla. BaekHyun tembló ante el gesto, le habían aplicado un gel restructurador para desaparecer la marca del golpe, pero, aun así, él lo sentía como si ahí siguiera.
"Ahora entiendes, ¿no? Sé que lo nuestro nunca ha sido algo hermoso para ninguno de los dos, BaekHyun, pero debes adaptarte a ello. No hay forma de que esto se detenga, si no quieres hacerte daño..."
"No lo hago por mí, por ti ni mis Padres, YiFan, que eso te quede claro," BaekHyun dijo y levantó la mirada para demostrar esa ferocidad para con su Prometido.
"Si tanto amas a tu Pueblo, harás lo que sea por ellos," YiFan añadió y sonrió luego como el bastardo que era. "Por él."
"Ahora más que nada, te odio, Wu YiFan," clamó, con el pesar casi expuesto en sus percepciones.
"Y yo a ti, mi Luz," contrario a sus palabras, YiFan lo tomó desprevenido cuando le besó a final de eso.
Para BaekHyun fue algo tarde cuando al fin se liberó de ese agarre, y dio solo media vuelta para entrar en su casa con un azote.
No le importó saber quién estaba o no, ni si YiFan ya se habría ido cuando algo lo sucumbió y fue directo al baño, con lo que se dejó caer ante el váter y fluir toda la náusea provocada por el anterior gesto.
Se recargó contra el material de su inodoro y respiró hondo al tirar abajo todo su campo protector porque no se sintió capaz de contener más el pesar ni todo ese dolor interior. Si fuera un humano, BaekHyun creería que lo que estaba haciendo se clasificaría como llorar. Lágrimas, esas gotas de agua escurrirían por sus ojos como una torrencial lluvia que casi no se veía en su Pueblo y le colmarían el rostro, añadido a sus sollozos, jadeos y el dolor acumulado en su pecho.
Se odiaba tanto por esto. Odiaba a sus Padres por no haberle escuchado, odiaba la posición que tenía porque aún al ser una autoridad no le daban la libertad que quería, y odiaba a los Wu, a YiFan, porque le estaban haciendo esto solo un poco más difícil.
Sin embargo, se odiaba a sí mismo, por no ser lo suficientemente valiente para defender lo que amaba. Por sucumbir ante todo y todos, ¿cómo podría ser así un buen gobernante al final?
No quería.
Por primera vez se dio cuenta de lo egoísta que estaba siendo. Iba a cambiar la libertad y el valor de su Pueblo solo por un deseo propio.
Estaba cansado al mismo tiempo. Tan cansado que en ningún momento se dio cuenta de que su casa en realidad estaba vacía. Que solo MongRyong había llegado con él y estaba ahora revisándole en cada aspecto para procurar su bienestar, pero nada malo le había pasado.
Él solo había exagerado su reacción.
Él solo estaba dramatizando su situación al quedarse ahí en el piso de su baño, sin mover un solo músculo más que para hacer la descarga en su váter y volverse a tirar en el piso.
Con un MongRyong que en seguida le siguió y se recostó junto a él, para acariciar con sus costados y nariz por encima de sus prendas, desde su pecho hasta su abdomen. Fue un gesto bastante reconciliador para el lastimado Luminian, quien se abrazó a su único amigo.
★★★
ChanYeol esa noche vio el acto entre BaekHyun y YiFan, y por algún motivo con eso decidió no regresar al lugar de BaekHyun. Porque con eso él supo que debía regresar a casa.
★★★
Por más extraño que pareciera, los días siguientes a esos, ChanYeol y BaekHyun los vivieron lo más separados que se podría.
Quizá incluso era su primera vez siendo tan distantes con el otro desde que se encontraron en Lumiscia. Ni siquiera cuando ChanYeol se había empeñado en no dirigirle la palabra a BaekHyun se podría comparar con esto. Tal vez era más porque esta vez ninguno de los dos parecía querer verse o hablarse.
ChanYeol se sentía un poco incómodo, algo inseguro. Sabía lo que KyungSoo le había dicho y no parecía tener otra alternativa más que irse, no podía volver a mirar a BaekHyun sin pensar en que pronto, en uno de esos días, lo dejaría. Aquella noche donde él decidió no entrar a la casa de BaekHyun, fue su tiro de gracia.
Había pensado que debía decirle al Luminian lo que su amigo le informó para hacerle de algún modo entender que tenía que irse, que de algún modo no tenía otra alternativa—a menos, claro, de que él la propusiera, porque, a pesar de tanto y poco que habían vivido juntos, eso no les daba clara estabilidad en lo suyo. Pero entonces vio a BaekHyun besarse con YiFan.
Su prometido.
No entendió de lo que hablaron antes, pero ni siquiera le importó, no lo tomó en cuenta, así como las siguientes acciones de BaekHyun o la posición del Conde porque en ese momento solo pudo pensar que aun con lo que ellos habían compartido, BaekHyun seguía teniendo una vida ahí.
Seguía teniendo una posición, una familia, un prometido del cual no parecía siquiera pensar en separarse por lo que él había confesado la noche anterior.
¿Cómo debía reaccionar él a eso?
¿Acaso BaekHyun creía que podía tomarlo como su aventura, como un concubino?
No quería pensar mal de ese Luminian que para él todo en sí brillaba. Mucho menos porque muy por dentro sabía lo que había con YiFan no podía ser lo mismo que entre ellos se sentía..., pero, aun así, ver eso le dio rápidamente a entender y caer en la cuenta de lo cierto.
Lo suyo con BaekHyun, por más importancia que pudiera o no tener para ellos, no podría ir más allá de lo que ya hubo. No quería hacerse más daño avanzando y cayendo tan hondo.
A pesar de que ya estuviera en lo más profundo, decidió pensar poco en sus consecuencias, y se dio la vuelta en esa noche con un pensamiento tan diferente a como se habría visto esa mañana.
BaekHyun tenía una responsabilidad, y también él. Así que la tomaría como le correspondía.
Por esa misma razón se distrajo en los días siguientes arreglando el motor de la nave, como KyungSoo le había pedido. Y apenas se distraía, porque no sabía cómo muy internamente estaba tardando tanto con ello.
Quizá aun había algo de él que quería que las cosas fueran diferentes y se retrasaba a propósito solo como si esperara que BaekHyun regresara a él.
Lo cual, por parte de BaekHyun, tampoco había sucedido.
BaekHyun no había estado evitando a ChanYeol del todo, él más bien estaba cumpliendo con su deber, con su función obligada. Había ido cada día al Palacio como debía y tomaba un par de nuevas lecciones impartidas por su Padre. Cosas sobre cómo gobernar al Pueblo, su mandato, la obediencia y serenidad que debía mostrar. Así mismo tuvo que continuar con sus ensayos de la Ceremonia de Unión, y luego de ello, pasaba todo el día junto a su Prometido o su familia.
Poco a poco se iba drenando un poco en aquella posición.
Pero fingía todas las sonrisas necesarias y volvía a subir sus murallas al evitar que otros percibieran sus emociones por camuflarse con un señuelo que había conseguido establecer.
No quería pensar en ChanYeol porque hacerlo solo le hacía recordarse cómo no podía abrazarlo, tomarlo de la mano, besarlo y expresarle todo ese amor que por él sentía. Ya no como antes.
Por eso quizá también ignoró el poco tiempo que habría pasado con él. Si tenían suerte, se cruzaban en la casa cuando ChanYeol iba a cambiarse y BaekHyun estaba por salir de vuelta al Palacio. Una que otra vez se veían en los pasillos del Palacio, e incluso habían fingido compartido sonrisas y saludos como si a ninguno de los dos les molestara ver al otro.
BaekHyun había tenido que poco a poco aceptar que quizá lo poco que había compartido con ChanYeol solo quedaría en eso. En poco.
Pasaron cerca de tres o cuatro días. Y luego las cosas cambiaron.
ChanYeol llegaba a dormir a la casa de BaekHyun solo para aparentar con KyungSoo que las cosas iban bien, porque, aunque escuchar quizá de él que se estaba apegando a la idea de dejar a BaekHyun y todo lo vivido en Lumiscia de lado para regresar al Sistema de Seguridad podría ser algo satisfactorio para KyungSoo.
Pero ChanYeol no quería al mismo tiempo que KyungSoo se interesara por él y le diera esa plática sobre cómo lo suyo con BaekHyun tal vez estaría mejor así que seguro lo haría llorar como niñita y le dejaría caer ante la debilidad de volver a por BaekHyun como ya se decía que no debía.
KyungSoo quizá lo dejaba estar porque podría pensar que intentaba pasar sus últimos días junto a BaekHyun, aunque nunca le hubiera aclarado que había—o hubo— entre ellos en ningún momento—ni todo por lo que pasaron y nunca hicieron. Sabía que su amigo tampoco era estúpido, lo veía, y de alguna manera sabía cosas.
Por ello, regresaba a la casa de BaekHyun, pero al hacerlo había notado que el Luminian llegaba mucho más tarde que él, así que se quedó solo despierto una noche para confrontarlo y tímidamente decirle que podía volver a dormir en su cama.
"Ya que KyungSoo no está y nadie la ocupa, creo que sería apropiado que tú... ah..."
"Sí, sí, dormiré en mi cama. Muchas gracias, ChanYeol."
Y esa fue toda su charla, en esos tres-cuatro días.
ChanYeol continuaba así mismo sus actividades, y BaekHyun intentaba no pensar demasiado en ChanYeol.
No fue tan difícil cuando hubo otras cosas por las que preocuparse entre algunos de esos días.
"¿Por qué no se quita? ¿Qué demonios es esto? ¡Bórrate, bórrate, bórrate! Ugh, si esto es como otra manifestación de mi acné anterior, entonces habré muy pronto de eliminarte," BaekHyun amenazó esa mañana a un punto blanco y brillante en su pómulo que casi parpadeaba como una lucecita, y por la cual se estaba atrasando al arreglarse frente a su espejo en el baño. "Bien, por ahora solo te maquillaré, quedarás ahí mientras tanto, pero nadie habrá de verte, ¿te queda claro?"
Era obvio que ya le hacía falta hablar más con alguien aparte de sí mismo.
Se aplicó del maquillaje negro sobre la dicha lucecita, y la tapó con una oscura estrella de cinco picos que tristemente le hizo recordar el collar que ChanYeol le había dado... y que había guardado entre sus cosas por ahora usar su collar de compromiso.
Suspiró.
"Se ve bien así y eso es lo que por ahora importa."
Ese, sin embargo, fue solo el primer incidente.
Otro día pasó, y otros sucesos entretuvieron a BaekHyun. Las charlas exhaustivas con su familia comprometida, por ejemplo, y cómo lo aburrían al tener que escucharlos hablar de sus lujos de Blancos y lo que les fascinaba de cierto mercado de altos rangos.
Él estuvo sentado con YiFan en todo momento, su Prometido sonreía con gusto y posaba una mano sobre su muslo, como si le perteneciera.
BaekHyun, a pesar de su desagrado, debía considerar que, para cumplir con su trabajo, tenía que sonreír de igual modo y prestar atención a todo.
"Sí, esos platillos elaborados en la casa de los Duques fueron fabulosos. ¿No estás de acuerdo, Hijo?"
"Por supuesto, Padre, no he probado cosa más increíble que ello. A excepción de la cocina de mi Luz, eso claro estará, ya muero por saber que cocinará para mí mi Prometido," YiFan le dijo y rio al apretar su agarre, con lo que le dejó a él esa misma sonrisa incómoda que decidió no decir nada a cambio como en su mente ya lo hacía. «Cocinar para ti, mis pelotas, YiFan.» "Oh, mi Luz, ¿sucede algo? Estás..."
YiFan le soltó de pronto el muslo, y lo miró con tanta sorpresa, pero cierto gesto repulsivo se incluyó en eso. Incluso se paró de su asiento y se alejó claramente de su lado.
"¡Estás sangrando!"
"¿Qué?" BaekHyun entonces sintió el líquido espeso y caliente que se derramó por su nariz. Pasó una mano como reflejo y pudo ver fácilmente la sangre manchando su piel.
Levantó en seguida la cabeza al solo esperar retener así la hemorragia. La sangre (como otros pocos líquidos) no podía ser absorbida por su piel como cualquier otra cosa por la pesadez, y por eso tenía más bien que detenerla.
"Oh, demonios, YiFan, ¿me pasas un papel para limpiar esto? Yo..." BaekHyun se cortó al ver con mayor claridad el asco en toda la expresión de su Prometido, y frunció el ceño por su mal gesto, porque ni siquiera supo qué más añadir cuando YiFan ya había decidido lo que haría.
"Llamaré al Sanador del Palacio. Él te ayudará con eso. Ya regreso."
Claramente su Prometido no regresó esa tarde. Su familia comprometida lo abandonó también cuando el Sanador llegó y él estuvo con una compresa para detener el sangrado por otras tres horas.
Al menos no tuvo que soportar a su familia comprometida por otras tres horas. Y nadie dijo nada del incidente, creyeron que el comentarlo incluso con sus propios Padres solo podría hacer que el rumor se extendiera y a nadie ahí le gustaría que el Pueblo creyera tener un heredero enfermo.
Mejor para él, al menos así no tendría que explicar con sus Padres cómo creía que su sangrado estaba relacionado con el estrés que le provocaba escuchar a su familia comprometida y sus estupideces todo el día.
Nadie tendría que saber, además, que por las noches en los siguientes días volvía a repetirse el incidente.
A la mañana siguiente, hubo otra historia que contar, de cualquier modo.
"Hijo, ¿me estás escuchando?"
"Lo hago, Padre, es solo que..." BaekHyun llevó sus dos manos a la cabeza al no tolerar más con eso su propio silencio. "Mi cabeza..."
"¿Te duele?" su Madre completó y se acercó de inmediato a él al parecer verificar en su rango si pudiera identificar lo que le pasaba.
No pudo, porque BaekHyun igual no mostraba nada además de un gesto de completo dolor.
"Me siento adolorido, Padre, lo lamento, no puedo así concentrarme," respiró hondo, ni siquiera abría los ojos ahora, tenía los dientes unidos, estaba conteniéndose casi para no gritar ahí y ahora.
El dolor le era insoportable.
"Está bien, terminaremos hasta aquí nuestra lección. Puedes regresar a casa, descansa un poco. Recuerda que mañana debes volver temprano para el ensayo de tu Unión que tendremos."
"Ah... S-Sí, Padre..."
"SiWon, ¿no podemos darle un día más de descanso? BaekHyun no está muy bien, tal vez necesite descansar otro poco o ver a un Sanador..."
"Déjalo así, HeeChul, BaekHyun debe acostumbrarse a este ritmo. No va a excusarse de sus responsabilidades como gobernante solo por un contratiempo así. Debe tener en cuenta que así y más será su trabajo. Estresante, cansado, adolorido..."
"Está bien, ya deja de hablar, hasta a mí me das migraña," HeeChul rodó los ojos y ayudó a su Hijo a ponerse en pie y apoyar parte de su cuerpo en él para dejarle caminar con mayor seguridad. "Vamos, Hijo, te llevaré a tu casa. Si necesitas algo más, solo manda una señal, enviaremos alguien contigo en seguida."
Apenas asintió, pero, aunque el resto del día se la pasó quejándose de su dolor agonizante de cabeza con tan solo el cuidado de MongRyong para traerle unas comidas, decidió no llamar o mandar vibraciones al Palacio.
Quería probarle a su Padre lo capaz que era para la posición que tomaría. Resistió el dolor que como Divinidad Suprema obtendría día con día.
Hasta dormir y que, al siguiente día, ni siquiera recordara su malestar. Excepto por la lucecita en su rostro.
"¡Ahora son dos! Demonios, ¿de dónde salieron? ¡Basta! Ni siquiera puedo exprimirles como a los puntos que tuve en mi adolescencia," se quejó y vio esa anterior lucecita en su pómulo derecho que parecía haberse duplicado en su pómulo izquierdo. Tomó el maquillaje negro como único remedio. "Bien, hoy me maquillaré entonces de ambos lados. Me encargaré de las dos luego."
Ese luego tardó en pasar cuando aquella tarde, al estar en el Palacio y dar el ensayo de su Unión, tuvo un nuevo problema que atender.
"BaekHyun, ¡BaekHyun! ¿Qué pasa contigo, Hijo? Debes aceptar la tiara de YiFan, ¿por qué no lo haces?"
"¿No lo hago? Es lo que estoy haciendo. Yo... E-Estoy estirando mis manos hacia YiFan, ¿no?"
"Hijo, estás extendiéndolas en el lado equivocado. YiFan está aquí, a tu derecha," HeeChul lo corrigió, y BaekHyun, que parpadeó doble vez al ser movido de dirección, siguió con sus manos extendidas. "¿Qué sucede? ¿Acaso no ves bien o cuál es tu problema?"
Se burló, casi con tono bromista, a lo que BaekHyun quiso reír, si no fuera porque estaba en lo cierto. Poco veía bien, estaba intentando enfocar su vista, pero parecía tener un derredor borroso, y en algunas ocasiones incluso de doble percepción. Se sentía como si no tuviera el aumento adecuado en los lentes que no usaba. O como si tuviera vista doble.
Ello lo mareaba un poco. Y le trajo una clara risa incómoda en respuesta a su Madre.
"Sí, claro, Mamá, lo siento."
Nadie debía saber que además chocó con paredes y puertas al salir del Palacio en el regreso a su casa o que tardó media hora en poder abrir su puerta porque no encontraba su perilla. Mucho menos que luego le volvió a sangrar la nariz hasta haberse dormido.
Y al siguiente día...
"¡Basta, MongRyong! Tienes que soltarme, sabes que debo salir de la casa, aunque no lo quieras. Es mi deber, necesito llegar a tiempo al Palacio."
El bubble le contestó en su idioma que solo ellos se entendían. BaekHyun frunció el ceño por lo escuchado. MongRyong se escuchaba preocupado.
"Nada va a pasarme, MongRyong. Estaré bien. Sé que estos últimos días no han sido los mejores, pero hoy estoy perfecto. ¿Sabes? Incluso creo que las luces en mi cara han ido disminuyendo en su brillo."
Eso no pareció conciliar a su mascota, solo lo alteró más y lo dejó pegándose a él como una lapa a la altura de su abdomen. Lo cual era curioso si consideraba que ni siquiera tenía brazos o manos con las que tomarle, pero aún podía adherirse como goma a su cuerpo.
"¿A qué te refieres con que eso es lo que te preocupa? ¿A quién te refieres con 'él'? ¿Ya no estás hablando de mí? No te entiendo, MongRyong. No hay razón para preocuparse así. No es como si fuera un bebé o algo."
Entonces BaekHyun escuchó algo de su bubble que jamás se imaginaría.
"¿Qué? ¿Acaso estás...? ¿Hablas en serio?" su bubble asintió, y BaekHyun se sintió perdiendo colores. "No, estás equivocado. No tendría sentido. Ni siquiera he tenido sin—" se calló a sí mismo, mucho más cuando vio a ChanYeol salir de su baño ahora duchado y cambiado, mientras se dirigía a su cocina y parecía estar por prepararse un desayuno.
BaekHyun sintió entonces enrojecer tan solo con ver cómo ChanYeol lo miró algo avergonzado por volver a cruzarse luego de tantos días de casi ignorarse, y los recuerdos de sus últimos minutos pasados juntos lo bombardearon, los que casi le hicieron caer en su terror.
ChanYeol parecía estar por decirle algo, pero él lo ignoró pasado su silencio y, en voz baja, con su idioma, se dirigió de nuevo a MongRyong.
"Hablaré contigo cuando regrese, hoy serás buen chico y te quedarás aquí como te he dicho, yo saldré mientras al Palacio, ¿de acuerdo?"
Salió despavorido de su casa luego de la resignada confirmación de su bubble.
Agradeció en todo caso la obediencia que tenía su mascota. Era fiel y sabía callar algunas cosas.
ChanYeol, por otro lado, suspiró.
Acababa de ver a BaekHyun básicamente huir al verle luego de casi completos diez días sin hablarse directamente. Y pensar que la última vez que bien lo hizo estaba ahí mismo, sentado en su desayunador, y se mostraba como el hombre más orgulloso y encantado con el mundo al coquetearle y decirle nombres tan empalagosos como 'cariño'.
Por Dios, qué farsa era. Había tratado esa mañana a BaekHyun como si fuera su Rey por darle un buen sexo, y luego lo había evadido como la peste al casi hacer quedar su encuentro como una cogida espontánea y de una noche que no repetiría.
Era como esa incómoda sensación de haber besado al que considerabas tu mejor amigo. Lo hiciste por impulso al creerte enamorado, pero al no ser correspondido, fingiste no tener idea de qué había pasado y a los pocos días perdiste su amistad por la incomodidad propiciada e imposible de evadirse.
"Pero qué gran mierda eres, Park, ¿es que no valían tus palabras ni tus deseos de antes?" ChanYeol se reprendió entonces, ahora en voz alta y al estar solo mientras comía su desayuno improvisado, a mala gana, aunque moría de hambre.
Pero su hambre no se comparaba al reproche que seguía haciéndose día con día.
"Si realmente te importara, te gustara y lo amaras como dijiste hacerlo antes, simplemente dejarías de ser un cobarde y le dirías lo que sabes. Lo de cómo y por qué es que debes irte. Como toda una sociedad depende de ti y por qué... habrás de abandonarlo."
MongRyong se había acercado a él luego de decir eso y pareció hablarle con sus extraños sonidos chirriantes que hacía, por los que él solo pudo sonreír amargamente al acariciar al bubble del que también ya se había encariñado. Sus sonidos se parecían ligeramente a los llantos de un canino.
"En serio lo siento, MongRyong, pero no puedo evadirlo. Yo debo irme, tengo una responsabilidad. Tengo... Solo no puedo hacerle esto a BaekHyun."
«Entonces no lo hagas. Por favor, BaekHyun te necesita.»
Bueno, como pueden ver al inicio del capítulo, sí, el 25 está dividido en dos, así que ya verán la segunda parte luego... ¡Que empiece el drama! 😈
Creo que muchas cosas pasaron en este capítulo, así que solo voy a dejar caer dos preguntas ahora:
¿Todavía les causa conflicto imaginarse a un BaekHyun azul?
¿Y quieren decirle algo a esta bella familia en particular? (Al ver esta imagen pensé tanto en la historia, por eso quise traérselas hoy, hehe) 👇🏻
Subí también una (en ese entonces) nueva historia que en realidad es una combinación de otras de mis historias en mi perfil, así que si han leído Moving On, Five Children and Counting y ¿ChanYeol está qué? quizá les interese checarla, se llama CROSSOVER, además, pronto esperaré estar subiendo más cositas (como ya lo hice ahora, incluso involucrando algo de esta) por ahí de muchas de más historias ^^ ~
Y quizá... No lo sé, con tanta situación que ha estado pasando con MongRyong (ahora sí regresando a algo con respecto a esta historia) creo que me estoy animando... ¿Qué les parece MongRyong como personaje? ʕ•ᴥ•ʔ
¡Ya saben que los quiero! Gracias por leer hasta aquí, nos veremos hasta la próxima 🙆🏻
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top