Jungkook caminaba de un lado a otro intentando calmarse.

Estaba realmente nervioso, como nunca antes lo había estado en su vida, ni en las peleas clandestinas, las carreras ilegales, los asaltos o cualquier trabajo que haya realizado en el bajo mundo. Llevaba casi 10 minutos fuera del despacho del senador y aún no encontraba el valor para tocar la puerta.

(...)

Luego de que la mucama se alejara de la habitación del omega el alfa se había levantado lo más rápido que podía de la cama y habia ideado en su cabeza los escenarios posibles para huir.

Estaba entrando en crisis.

No se supone que hablara con el senador Park de esta forma. Él quería hacer las cosas bien para pedirle su permiso y así poder cortejar a Jimin como era correcto.

Pero al parecer su lobo no pensaba bien cuando estaba enamorado y hacían más estupideces de las que hacían normalmente.

Mientras el alfa tenía su pequeña crisis existencial, Jimin se dejó caer en la cama nuevamente, observó el techo de su habitación por unos minutos, las estrellas que había pegado cuándo era un cachorro de 8 años seguían ahí al igual que la luna que admiraba y adoraba.

Era extraño pero podía jugar que estaban brillando como nunca antes lo habían hecho, o tal vez solamente era que ahora su vida era diferente y las veía con otra espectativa.

Su papá no estaba molesto, lo conocía perfectamente, siempre había confiado en él (aunque claramente Jimin no había tenido la confianza suficiente para hablar con sus padres sobre todo lo que estaba viviendo).

Pero sabía que Seojoon apreciaba a Jungkook, lo había dejado acercarse, le confiaba su seguridad para acompañarlo a las terapias y lo estaba ayudando a salir adelante luego de todo lo que había pasado.

Así que no estaba preocupado.

Jungkook se detuvo en cuanto escuchó la tierna risa de su omega.

- ¿Cachorro?- el alfa estaba confundido. Las reacciones de Jimin eran diversas según la situación que enfrentaba.

Y con todo esto, la verdad es que Jungkook creyó que el omega rompería en llanto en cualquier momento, no esperaba que comenzara a reír de esa forma.

- ¿Qué está pasando?- preguntó el alfa.

- Te atraparon....- fue lo que dijo el omega.

- ¿Eh?

- Te atraparon...- repitió Jimin.

- Creo que nos atraparon a ambos cachorro....

- Bueno... Yo soy un simple omega de casa que no ha vivido tantas experiencias a comparación de cierto alfa que ha estado involucrado en el bajo mundo... ¿Cómo te pudieron atrapar tan fácil?- Jimin sonrió burlón.

Jungkook estaba atónito, su omega se estaba burlando de él. En su cara.

- Yo...- el alfa no sabía que decir.

- Parece que no eras tan bueno como tanto me presumias...- Jimin seguía burlándose.

Eso fue todo.

Jungkook se abalanzó sobre él y comenzó a hacerle cosquillas.

- Espera!!- Jimin reía a carcajadas y se retorcía en la cama.

- Te estás burlando de mi cachorro... No puedo permitir semejante osadía...

- ¿Osadía? Jajaja... Desde cuando tan refinado...

- Desde que conocí a cierto omega riquillo...

Jungkook continuó torturando con cosquillas por unos minutos más hasta que recordó que el senador Park lo estaba esperando, desearía poder seguir divirtiéndose con el cachorro, escuchar su risa era lo mejor.

Amaba verlo así.

El alfa se detuvo y observó los ojos del omega con amor. Jimin le regaló una sonrisa convirtiendo sus ojos en dos medias lunas.

- No te preocupes Kook... Mi papá no te va a reprender...

- No estoy preocupado...

Jimin alzó una ceja.

- Bueno... Sólo estoy un poco nervioso... No quiero decepcionar a tu padre... Yo...

Jungkook deseaba que el senador Park supiera que sus intenciones con Jimin eran las mejores, que lo quería y que lo respetaría por sobre todas las cosas, pero tal vez el haber entrado en su casa a media noche cómo un completo ladronzuelo no lo dejaría bien parado frente a su futuro suegro.

- Nunca lo harías Kookie... Tranquilo... Mi papá sólo quiere hablar contigo... No te preocupes, no te va a reprender...- Jimin acarició la mejilla del alfa con delicadeza.

El alfa asintió. Tenía que armarse de valor y hablar con el senador Park, tal vez no era como esperaba pero era mejor dejar las cosas claras de una vez por todas.

- ¿Tienes un cepillo de dientes y algún boxer que puedas prestarme cachorro?

Jimin volvió a reir a carcajadas, Jungkook era tan tierno.

Esa finta de fuckboy, cara de malo, lleno de tatuajes y de piercings sólo era una fachada para esconder al mejor alfa de todo el mundo. Alguien amable, responsable, amoroso y que se preocupaba porque las personas que amaba siempre estuvieran bien y fueran felices.

Ese alfa que queria verse lo más presentable posible para presentarse frente al padre del omega al que pretendía.

El omega dejó un beso en la mejilla de Jungkook y se levantó para ir en busca de lo que su alfa necesitaba para ver a su padre.

(...)

Jungkook respiró profundamente y cuándo por fin se decidió a tocar la puerta, está se abrió dejando a la vista al senador Park.

- Jungkook...- Seojoon observó al alfa frente a él y reprimió una sonrisa al ver como este parecía haber visto un fantasma.

Jungkook tardó uno segundos en reaccionar. Hizo una reverencia demasiado exagerada intentando calmar a su acelerado corazón.

- Buenos días senador Park... Yo... Lamento mucho...

- Entra...- Park dió media vuelta, camino unos pasos rodeando hacía su gran escritorio caoba y tomó asiento detrás de este.

Jungkook inhaló una ultima vez y entró al despacho cerrando la puerta trás él.

- Toma asiento muchacho...- Seojoon habló fuerte y firme, su rostro no demostraba ninguna emoción y eso sólo ponía al jóven alfa más nervioso.

Jungkook se sentó frente a él y los siguientes minutos inundaron aquel despacho de un silencio arrasador.

La realidad era que Seojoon estaba demasiado divertido con la situación, sus hombres le habían informado la hora exacta en la que el alfa se había colado en su casa, incluso habían guardado su moto en el garaje.

No estaba molesto.

Sabía que Jungkook era un buen alfa. Se había encargado de investigar hasta el último detalle de su vida, sabía todo su pasado, sobre su familia y todo el sufrimiento que habían pasado.

Pero eso estaba apunto de quedar en el olvido.

Seojoon había dado muchas órdenes. Pronto llegaría una oferta de trabajo para Jeon Jiwoo que sabía no podría rechazar. La información recabada en la investigación le hizo saber que la madre de Jungkook era una omega muy inteligente, sólo habia estudiado hasta la preparatoria pero se habia graduado como la mejor de su clase según los reportes, además de que era muy buena con los números.

Era buena candidata para formar parte de su equipo. Con las elecciones tan cerca necesitaba gente preparada y con ganas de trabajar. Sabía que Jeon Jiwoo haría un excelente trabajo.

Y eso sólo era el principio, Park estaba decidido a ayudar a la familia del alfa que estaba haciendo feliz a su hijo. Él se encargaría de que esa familia volviera a sonreír.

- Y bien Jungkook... ¿Puedes explicarme qué hacías en la habitación de mi hijo y cómo es que entraste a mi casa?

- Yo... Bueno...- Jungkook estaba sudando en partes de su cuerpo que ni siquiera recordaba que tenía.

Seojoon esperó pacientemente.

- Senador Park...- el momento había llegado- Lamento mucho haberle faltado al respeto de está manera... No fue correcto entrar a su casa y mucho menos a la habitación de su hijo sin su permiso... Mis acciones definitivamente no fueron las correctas... Sólo sentía la necesidad de ver a Jimin... Quería hablar con él... Estar con él... No pasó nada lo que deba preocuparse... Yo respeto a Jimin y a usted... Es sólo que últimamente se me dificulta mucho estar lejos de él...

Jungkook se tomó un minuto.

- Senador Park... ¿Puedo hablar con libertad?

- Adelante muchacho...

- Esto no es cómo lo había planeado pero... Yo quisiera pedirle que me permita cortejar a Jimin como es correcto... Quiero conquistar el corazón de su hijo... Mi único deseo es hacerlo feliz, así cómo él me hace feliz a mi...

Seojoon sonrió.

- Escucha Jungkook... No estoy molesto... Confío en mi hijo y también confío en ti... Me has demostrado ser un buen alfa, alguien responsable, que está dispuesto a todo por los que ama... Tienes mi permiso para cortejar a Jimin... Sólo te pido una cosa muchacho...

- Lo que sea senador Park..

- Cuídalo Jungkook, sé paciente con él... Mi hijo es un ser de luz, alguien tan especial y único que cuando ama se entrega por completo sin importar nada, estoy seguro que te habrás dado cuenta de eso... Justo ahora está saliendo de aquella oscura cueva en la que un mediocre intento de alfa lo mantenía cautivo... Está regresando a ser ese Jimin risueño, alegre y divertido que siempre debió ser...

Jungkook sintió su sangre hervir al recordar al estúpido de Kai.

- Están comenzando algo y lo mejor es darse el tiempo para conocerse, aprendan a respetarse, a cuidarse y a apoyarse siempre... Pero sobre todo ámense, ámense con todo su corazón... Que su amor sea más fuerte que cualquier obstáculo que se ponga frente a ustedes...

- Le prometo que así será senador...

- Confío en ti hijo... No me decepciones...

- No lo haré... Se lo prometo...- Jungkook dijo sin dudar.

Seojoon asintió. Los ojos de Jungkook mostraban determinación, eso lo hizo sentir tranquilo, confíaba en qué ese alfa era el indicado para su cachorro. Su lobo se lo decía también.

- Puedes entrar Min...- Seojoon habló fuerte para que su cachorro entrometido quien estaba espiando detrás de la puerta escuchara.

Jimin entró segundos después. El omega estaba completamente avergonzado pero aún así le sonrió a su padre.

- ¿Qué necesitas cachorro?

- Sólo quería saber si ya habían terminado de hablar... Mamá y yo los estamos esperando para desayunar...- Jimin observó a Jungkook y sus mejillas se pusieron rojas.

- Hemos terminado de hablar...- Seojoon se puso de pie- Vamos... Es tarde y debo asistir a una reunión después...

Los tres salieron del despacho y caminaron en dirección al comedor dónde la señora Park los esperaba mientras negaba con la cabeza y sonreía en dirección a su cachorro.

Se dispusieron a desayunar mientras mantenían una conversación amena.

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Jungkook negó una vez más con la cabeza ante las preguntas insistentes de cierto omega rubio que no dejaba de hacer pucheros intentando obtener alguna respuesta.

- Dimeeee~....

- Nooo...

- Kookiee~

- No.

El omega bufó. Ya encontraría la manera de saber que tanto habían hablado su padre y Jungkook.

- No te enojes cachorro... Fue una conversación de alfas...

- Pero hablaron sobre mí, así que tengo derecho de saber que hablaron...

- Lo sabrás...

- ¿Cuándo?

- Algún día...

Jimin puso los ojos en blanco y le sacó la lengua al alfa.

Jungkook sonrió divertido y subió a su motocicleta. Estaban fuera de la residencia de los Park.

- Oye...- el alfa habló segundos después- ¿No te gustaria hacer algo loco?

Jimin abrió mucho los ojos interesado en el cambio de tema.

- ¿Algo loco?

- Ajá...- Jungkook alzó las cejas.

- ¿Es algo ilegal?- Jimin preguntó entre emocionado y asustado.

- No... Seria algo loco y divertido que recordarás por el resto de tu vida... ¿Qué opinas? ¿Te animas cachorro?

Jimin lo pensó un poco.

Confiaba en Jungkook y sabía que a donde sea que lo llevara él lo cuidaría, no debía tener miedo a su lado.

- Está bien... ¿A qué hora vienes por mí?

- A las 6...

- Te estaré esperando...- el omega asintió.

- Perfecto... Nos veremos más tarde cachorro...

Jimin se acercó a él y le dió un beso en la mejilla antes de dar media vuelta y entrar corriendo a la residencia.

Era un cachorro.

Jungkook negó con la cabeza, encendió su motocicleta y desapareció por el camino segundos después.

Mientras tanto dentro de una camioneta negra blindada que estaba estacionada muy cerca de la residencia Park, un alfa lo bastante drogado y ebrio observaba todo con odio.

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Hello 💕

Bebés, cuándo comencé a escribir está historia pensé que seria corta, pensé en terminarla rápido pero ahora que la volví a leer y que estoy escribiendo nuevamente, muchas ideas aparecieron... Así que no sé... Veremos que pasa...

Gracias por esperarme... 🥺🥺 Estaba perdida pero ahora estoy aquí de nuevo...

Les quiero 💜