Pov : ???

Hola...mi nombre es Yahiruk Kohiro, tengo 17 años de edad y actualmente vivo en una Isla Tropical mejor conocida como "Puerto Rico", mi segundo hogar por asi decirlo. Soy de sangre puertoriqueña por parte de mi madre y sangre japonesa por el lado de mi padre, soy de una familia bastante adinerada desde hace un tiempo, creo que desde antes de que naciera o no estoy seguro. En fin...antes era feliz, junto a mis amorosos padres y la verdad..¿que más podia pedir? Una mujer trabajadora y amable, que siempre me consolaba y escuchaba, era su "bebé" siempre y ni hablar de su comida, dios bendiga las manos de las madres puertoriqueñas. Mi padre no era alguien tipico como dicen por ahi, a pesar de su trabajo duro y todo eso, siempre se encargaba de pasar tiempo conmigo y mi mamá, era el mejor hombre que habia conocido en toda mi vida, realmente el era el mejor ejemplo que tenia en casa. Gracias a el viviamos en un muy buen estado economico, habian viajes a mi otro hogar conocido como "Japón". Todo era perfecto para mi a la edad de los 3 a 5 años de edad...hasta que ocurrio el accidente que cambiaria mi vida por completo.

El 24 de Diciembre a unas altas horas de la noche en el pais tropical perteneciente a E.E.U.U, recuerdo estar en el auto con mis padres de camino a casa, la casa que tenemos por acá, la emoción era mucha, pues era noche buena y al otro dia podria tener mis regalos de navidad. Recuerdo estar semi dormido en la parte tracera del coche, escuchando musica navideña con un ipod que mis padres me habian dado años atras, tambien recuerdo escuchar la voz de ambos charlar animadamente. Todo estaba saliendo perfecto, nada podia arruinarlo..¿verdad? Bueno..lamentablemente sucedio lo peor. No recuerdo mucho de ese accidente, solo recuerdo un fuerte impacto en el lado derecho de mi cuerpo, el auto habia sido chocado por un gran camion de carga, mis oidos tenian un fuerte sumbido, no podia escuchar casi nada...solo pude escuchar las sirenas de policias y ambulancias llegar, mientras los cuerpos de mis padres parecian estar muertos...o eso parecia, pues al instante habia quedado inconsiente. Desde ese dia no volvi a ser el mismo en ciertos aspectos, tal vez sobrevivi de milagro en aquel accidente...me habria gustado decir lo mismo de mis padres, los cuales no habian corrido con esa misma suerte.

Pase 12 años de mi vida viviendo en la isla con mis tios maternos, pues mis abuelos paternos no podian atenderme durante un buen tiempo por trabajos, claro que venian a visitarme por meses y todo eso...pero sin mis padres presentes, realmente no era lo mismo. Tambien desde ese dia tengo un problema en el oido, un sumbido, siempre esta allí y solo escuchando musica se va, algo con lo que me acostumbre a vivir por 12 años. Pero hoy finalmente me ire a mi otro hogar, a japón, pues continuare con mis estudios por allá, asi que bueno..no debe ser tan malo cambiar su estilo de vida, digo...¿Que podria salir mal?.

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Pov : Narración 3ra persona

En uno de los aeropuertos de Puerto Rico, especificamente en la capital de dicho pais, el cual se llamaba "San Juan". Entre la multitud de personas que caminaban con sus equipajes de un lado a otro, se encontraba un chico de aproximadamente 17 años de edad. Poseia un cabello entre negro y castaño, era algo alborotado y de una textura lacia. Este chico tenia una piel un tanto bronceada, aunque casi no se le notaba y resaltaba más su color crema en la piel, sus ojos eran de un hermoso color azul celeste que resaltaban mucho en el chico por su color de piel. Este poseia una altura de más o menos de 1.79 o 1.78, una altura bastante considerable para cualquiera que lo viera. Este venia vestido con una camiseta Azul con blanco, unos mahones y unas vans de color azul, por encima poseia un jaquet de color azul oscuro con letras rojas en su pecho, poseia lentes de un color celeste y unos auriculares azules que estaban conectadas a su celular. Este era nada más y nadie menos que el chico de nombre "Yahiru Kohiro", el cual se preparaba para su despegue, el cual lamentablemente tendria escalas por lo lejos que debia ir.

Este antes de despegar en el avión en el que estaba, observaria los mensajes de sus tios deseandole un buen viaje y que este les avisara cuando llegaran, cosa que lo habria hecho sonreir antes de sentir como su avión tomaba finalmente vuelo hacia su destino con paradas de por medio. Las horas habrian sido largas y aburridas para aquel joven, el cual solo pudo observar por su ventana, caminar un poco en sus paradas y finalmente despues de casi un dia en un avion y em aeropuertos, llegaria a su nuevo hogar. Una vez este bajara del gran transporte aereo, iria por sus maletas y todo estaria yendo normal, hasta que este finalmente saldria hacia afuera y observaria a lo lejos un hombre vestido de manera elegante, con un carter que decia su nombre y detras estaria una limusina esperando por el, a lo que Kohiro solo caminaria directamente hacia dicho hombre de vestiduras bastante finas y elegantes.

- ¡Buenas amo Kohiro! Es un gusto tenerlo de vuelta por acá -comento el hombre con educación, el cual poseia pelo blanco y rostro de una persona mayor, más o menos de unos 66 años.

- Es un gusto volver a verte despues de tanto tiempo, Sr.Niworth -responderia Yahiru con una calida sonrisa y quitandose los audiculares.

- Deje le ayudo con el equipaje amo, el Sr y Sra Kohiro, osea sus abuelos, estaram felices de verte hoy -comento el mayordomo mientras tomaba el equipaje y lo metia a la capota del vehiculo.

- Imagino que si, ya extrañaba estar por acá..y más ver a mis abuelos, me llena de nostalgia el lugar -comentaria el castaño oscuro con un tono un tanto nostalgico.

Aquel hombre vestido de mayordomo daria un leve suspiro ante eso, sabia por lo que aquel joven habia pasado desde la edad de 5 años y por ende podia entenderlo por un lado. Sin más que comentarle, abriria la puerta del auto para permitir la entrada del joven de ojos celeste, para acto seguido este caminar hacia el asiento del conductor y ponerse a trabajar en ello de camino a la casa de los abuelos del joven. Yahiru estaria por todo el camino escuchando musica que lo relajaba bastante, mirar la enorme ciudad desde la ventana era algo que simplemente le encantaba, era inevitable tener recuerdos bonitos de cuando veia estos paisajes cuando sus padres aun seguian con vida, cosa que lo habria hecho suspirar un poco por la tristesa, algo que el mayordomo de apellido "Niworth" notaria a simple vista. Los minutos pasarian volando y el joven se quedaria dormido en el auto, mientras que afuera la luz de la luna reinaba en los cielos oscuros y estrellados, hasta que luego de un buen rato de estar muntado en el vehiculo, se veria como estos llegaban a un area privada con una enorme casa de fondo, donde Kohiro finalmente despertaria para observar la casa de sus abuelos.

Una vez el auto se estacionara, se veria como el castaño bajaba del auto y lo primero con lo que se encontraria serian con varios mayordomos y sirvientas de la casa, los cuales al ver a aquel joven de cabellera alborotada, solo harian una leve inclinación mientras decian "Bienvenido a su hogar, Kohiro-sama". Yahiru de manera amable saludaria a todos con gentilesa, mientras que el otro mayordomo bajaba su maleta y se dispondria a meterse a la enorme casa mientras cargaba dicho equipamento. El chico de cabellera castaña oscura estaria caminando por los grandes, anchos y largos pasillos de aquella mansión perteneciente a sus familiares, mientras que detras de el caminaban todo el equipo de sirvientes y sirvientas que parecian "escoltarlo" hasta la sala principal en la que se encontraban los abuelos de este. Yahiruk tambien iria notando que habian guardespaldas en ciertas areas de la casa y incluyendo la entrada del hogar, observaria las camaras que habian en cada esquina y no podria evitar soltar un gran suspiro al ver que su nuevo hogar estaba lleno de vigilancia.

Despues de unos 5 minutos más de caminata, llegarian a una especie de sala, la cual seria abierta por dos guardespaldas que se limitaban solo a observar y a abrir dicha entrada. Una vez las puertas se abrieran, se verian a una pareja de una edad entre los 65 y 60 años de edad, dos ancianos que parecian estar tranquilos observarian la llegada del Kohiro menor, el cual solo sonreiria al ver a las personas que tenia en frente. El hombre se mantenia bien fisicamente, poseia un pelo algo alborotado y con canas, sus ojos combinaban bien con sus ojos, pues eran de un color silver(plateado), siendo el su abuelo de nombre "Shiro Kohiro". Por otro lado habria una señora de ojos celestes con una sonrisa tranquila y cariñosa, con un pelo de color negro un tanto corto al nivel de sus hombros y que aun conservaba sus encantos como señora a pesar de su edad. Esta era su abuela de nombre "Heiwa Kohiro". La parejita de alta edad al ver a su querido nieto, no podrian evitar levantarse de sus respectivos asientos con sonrisas en sus rostros.

- ¡Yahiruk, mi muchacho! Cuanto haz crecido -diria el abuelo con una sonrisa muy cariñosa.

- Estas más alto y obviamente apuesto -dijo su abuela con un tono tranquilo y amoroso.

- Abuelo, Abuela..me alegra poder verlos otra vez -responderia el castaño oscuro mientras se acercaba y les daba un abrazo a cada uno.

- Tambien nos alegra verte, hijo -respondio Shiro con alegria en su voz.

- Mirate..eres identico a tu padre cuando tenia tu edad -comento Heiwa mientras tocaba su mejilla- Y como no, no podian faltar los hermosos rasgos de tu madre -comentaba con una mirada llena de amor.

- Gracias abuela..aunque no me aprietes tanto las mejillas, luego me vere muy cachetón -expreso el Kohiro enojado comicamente.

- Ay, lo siento hijito -se disculpo la señora con una mini risita.

- Bueno, debes estar cansado por todo el viaje que tuviste de allá para acá -comento el hombre de mayor edad mientras ponia su mano en el hombre de su nieto- Deberias irte a descansar, tu habitación esta lista y cualquier cosa tienes la sala muy cerca de ti, eso incluye la cocina -finalizo con una sonrisa.

- Gracias por entenderlo abuelo, ire a ponerme comodo en todo caso, despues de todo mañara iremos a inscribirme a la nueva academia a la que estare, ¿no? -preguntaria al final Yahiruk mientras pasaba una de sus manos al rededor de su cuello.

- Es correcto hijo, ahora ve a tu cuarto, ¡Chitose Itou, da un paso al frente! Por favor -grito de mamera tranquila Shiro mientras una sirvienta daba unos pasos al frente.

- ¿Si señor? ¿En que puedo ayudarlo? -pregunto la joven sirvienta, la cual tiene el cabello corto y oscuro recortado uniformemente alrededor de su cabello con la longitud que llega hasta su cuello. Su flequillo, en contraste, no se corta, sino que se desplaza de manera desigual hacia la derecha y tenia los ojos de un color verde claro.

- Desde hoy tu y Niworth se encargaran de mi nieto a ayudarlo en lo que el necesite, ¿entendido? -pediria el anciano de forma educada, asi viendose como los mencionados acentian con la cabeza- Bien, ya pueden llevarlo a su cuarto -finalizo con una sonrisa.

- Por favor Kohiro-sama, es por aqui -dijo Chitose mientras empezaba a caminar.

Yahiruk solo suspiraria un poco y seguiria a los dos encargados de el, los cuales caminaban tranquilamente hacia el cuarto del joven de cabellera lacia y castaña. Despues de unos minutos de caminata, llegarian a una parte de la mansión donde se veia la sala, la cual era bastante grande y luego pasarian cerca de la cocina, entre otras habitaciones en el area. Luego llegarian a la habitación nueva de Kohiro, el cual silvaria al observar su nuevo cuarto, para acto seguido ver como su sirvienta y mayordomo le deseaban lo mejor, para asi proceder a irse de allí y dejarlo un rato tranquilo, para que se relajara y descansara un poco. Aquel chico se tiraria sobre la gran cama que tenia y observaria a traves de la ventana la luna llena. En eso, un mini sumbido empezaria a escucharse en su oido, por lo que este fruncio un poco el seño, para acto seguido, acomodarse sus audifonos y poner alguna musica de su galeria. Se quitaria los zapatos y la camiseta, rapidamente se tiraria sobre la cama y en pocos minutos, este estaria cerrando sus ojos, para finalmente quedarse dormido despues de un largo dia de viaje.

A la mañana siguiente, la luz solar estaria iluminando su rostro, por lo que este daria leves quejidos y empezaria a buscar una mejor postura, para no tener el sol en su rostro. Este parecia estar tranquilo, dormido, sin que nada lo molestara ni un poco...lamentablemente, eso duraria bien poco. Ya que su mayordomo, Niworth, abriria la puerta y moveria al muchacho para que se despertara, con el unico propocito de que debia ir a desayunar junto a su familia. Yahiruk con los ojos semi abiertos y con ojeras incluidas, daria un enorme bostezo e iria rapido a bañarse y sepillarse los dientes. Una vez hecho esto, este iria al comedor, donde sus abuelos estaban desayunando y mirando algunos papeles, tambien se verian algunos sirvientes trayendoles el desayuno o directamente trayendo más papeles que debian leer. El Kohiro menor se sentaria con tranquilidad y le traerian su comida, asi este empezaria a comer tranquilamente sus alimentos.

- ¡Oh, buenos dias hijo! ¿Como dormiste? -preguntaria su abuelo mientras bebia cafe.

- Dormi bien, supongo, con frio por el aire...pero me acostumbrare jeje -contesto Yahiruk con una leve sonrisa.

- Nos alegra saber eso! Y ¿estas listo para el dia de hoy? Iras a inscribirte a una nueva escuela, pronto inician las clases -comentaria la abuela de este con una sonrisa.

- ¿A donde ire? Exactamente -pregunto el chico con curiosidad.

- Iras a "Tokubetsu School", son solo tres años y a la universidad, es genial, ¿no? - Contesto su abuelo felizmente.

- Si, supongo que asi es -contesto el castaño oscuro mientras terminaba de comer.

- Cuando termines tus estudios, puedes hacer lo que quieras e incluso ayudarme con el negocio familiar -dijo Shiro con alegria- En fin, preparate, te llevaran para que puedas incribirte -finalizaria con una sonrisa.

Yahiruk simplemente sonreiria un poco ante esto. Asi que sin nada más que decir o hacer, este se iria a vestir para poder visitar dicha escuela en la cual estaria estudiando en pocos dias. No tardaria mucho en vestirse, solo se pondria una camisa manga larga de color negro, pantalones estirables del mismo color y unos zapatos de color blanco, acompañados de un gorrito con una calavera y diseños de navidad en ella de color blanco y negro. Sus espejuelos y sus tipicos audifonos. Una ves listo, este se iria junto a su mayordomo en el carro lujoso, donde por el camino, seria pura paz y tranquilidad. Nada lo molestaba o lo sacaba de su mundo, el solo estaba ahi, analizando todo lo que le rodeaba, mirando todo lo qur podia observar a traves del cristal del carro. Al cabo de unos 20 o 15 minutos, estos finalmente llegarian a la escuela, donde al parecer habia toda clase de gente, pues no era el unico que se inscribiria o algo por el estilo, aparte habian maestros o algunos estudiantes por allí. Kohiro miraba disimuladamente a las personas que estaban a su al rededor, mientras seguia de cerca a su mayordomo, quien no lo molestaba y solo lo observaba un segundo para darle una delicada y pequeña sonrisa.

Una vez llegada a la oficina, el Sr.Niworth le diria que tardaria un poco al tener que llenar multiples papeles, asi que le dio la idea de ir a explorar un poco el lugar, que podia hacerlo en confianza. El castaño oscuro no lo escucharia, solo leeria los labios de su mayordomo y acentiria con la cabeza, para asi este irse del lugar a caminar un poco. El lugar era grande, muy espacioso, habian zonas que estaban abiertas al aire libre y otras estaban cerradas con aire acondicionado. Todo parecia estar bien durante ese rato. Pero por descuido de este, chocaria con una persona, obligandolo a dirigir su mirada hacia al frente. Una vez sus ojos se centraron en frente, lograria apreciar a una chica de más o menos "1.50 cm" de altura. Su cabello era de color castaño, mantiene dos mechones de su cabello en trenzas que mantiene detrás de las orejas. Utilizaba un suéter y unos pantalones de mezcilla, junto a unos zapatos de color cafe. Dicha chica, a simple vista se veia que tenia un cuerpo curvilíneo y su sueter no lograba ocultar los enormes pechos de la chica, los cuales eran demasiado grandes para alguien de su edad...o incluso de su estatura.

La chica con sus grandes ojos claros, observaria al castaño oscuro, al cual nunca habia visto por allí. Llamando asi su atención y despertando curiosidad en ella.

- Diablos...vaya teto-pensaria al ver los enormes atributos de la chica- Lo siento, no vi por donde caminaba -se disculpo Yahiruk mientras hacia una leve reverencia.

- No te preocupes por eso, te ves perdido, ¿eres nuevo aqui? -pregunto la castaña algo curiosa mientras lo veia a los ojos.

- Seh...se podria decir que si -contesto el chico en un suspiro.

- Entiendo, mi nombre es Ai, sere estudiante de segundo año en este lugar -se presentaria la chica con una linda sonrisa- ¿Cual es tu nombre? ¿De donde eres? -pregunto otra vez con curiosidad.

- Es un gusto conocerte, Ai-chan, mi nombre es Yahiruk Kohiro y soy de aqui, pero por parte de mi madre, soy Puertoriqueño -contesto este con una sonrisa.

- ¡Oh vaya! Un puertoriqueño por acá, ¡eso es nuevo y genial! -hablaria Ai con emoción- Y dime, ¿te inscribiras aqui?.

- Aparentemente si lo hare, jeje -responderia mientras se rascaba un poco la mejilla.

- ¡Eso es genial! ¿Deseas que te de un leve tur por el lugar? Asi podras conocer mejor el lugar -se ofreceria la femina con una gran sonrisa.

- Bueno...si no es molestia, por mi esta bien -responderia Kohiro algo nervioso.

Ai con una gran sonrisa, le diria que la siguiera, para mostrarle todo el lugar. Durante todo ese tiempo, ambos estuvieron conversando y a la par conociendo la escuela, mostrandole donde estaban los salones de ciertas materias, los clubs de la escuela, los talleres y entre otros lugares. Como el salon de gimnacia, el patio, la pista de correr y entre otros. Era un lugar super enorme para el castaño oscuro, quien ahora no se sentia tan solo con la compañia de esa chica de cabellera castaña. Al cabo de un rato, ambos volverian a la zona donde se habian conocido, para luego estos dos sentarse en una vanca que estaba cerca de ellos. Ambos descansarian un rato en silencio, sin decir nada, solo mirando el hermoso ambiente escolar que los rodeaba a los dos.

- Gracias por enseñarme todo este lugar, Ai, fue divertido -comentaria el chico felizmente.

- Pienso igual, no suelo hablar con muchas personas ademas de mi amiga, mi mamá y hermana -contesto con una linda sonrisa la chica.

- Bueno, es bueno que conozcas a personas nuevas, yo lo estoy haciendo -responderia el chico de forma tranquila.

Ai-chan le sonreiria a este y acentiria con la cabeza. En eso, a lo lejos una mujer de edad madura, de unos 30 años más o menos, se acercaria junto a otra joven, las cuales tenian mucho parecido a Ai. La castaña al verlas, se levantaria y las saludaria desde lo lejos, para despues mirar al castaño oscuro y decirle que ya debia irse, que su trabajo allí habia finalizado. Yahiruk se pondria de pie, mostrando la clara superioridad en tamaño y le sonreiria a la femina, dandole las gracias por darle un pequeño tur por la zona. Antes de que Ai se fuera de allí, le diria que le diera su numero de telefono, asi en algun momento podrian hablar otra vez. Este algo nervioso y con un leve rubor en sus mejillas, aceptaria darle su numero de telefono y esta de manera tranquila le daria el suyo. Una vez estos terminaran de darse sus numeros, se despedirian con la mano. Ai-chan correria hacia la mujer adulta y la otra chica, donde las tres estarian alejandose de este poco a poco. En eso, esta voltearia su mirada para mirar al castaño oscuro y con una hermosa sonrisa, levantaria su mano, dandole asi el ultimo adios antes de desaparecer de la vista del joven Kohiro.

Este sin nada más que hacer, suspiraria y volveria a caminar por el lugar de manera tranquila, sin esperar algo en particular. Este se iria caminando tranquilamente hacia su mayordomo mientras volvia a escuchar su musica. Al llegar con este, le mencionaria que finalmente estaba inscrito en la escuela y que ahora podian irse a su hogar. El castaño oscuro acentiria con la cabeza y se iria caminando hacia el auto con el Sr.Niworth, pero antes de subirse, este frenaria en seco y le diria al hombre de edad mayor que el se iria a caminar un rato, que luego lo llamaria para que lo buscara. Su mayordomo no tan convencido, aceptaria esto y le diria que fuera con cuidado. Yahiruk solo acentiria con su cabeza, para luego darse la vuelta e irse a caminar por las calles un rato. Todo parecia ser normal, autos en las calles, personas caminando de igual forma, locales en cada esquina y un etc de cosas. Parecia ser un dia tranquilo, para ser apenas las 10:30 AM o bueno, seria lo normal, pues los demas solo estan trabajando o estan en sus hogares tranquilos. En eso, este llegaria a un pequeño puente, donde veria un pequeño lago bajo este, por lo que con algo de curiosidad, se iria en dirección a dicho puente.

Este al llegar, solo se quedaria ahi un rato respirando el aire fresco, observando el hermoso puente con el agua bajo sus pies. Estuvo durante unos 10 o 15 minutos, solo observando y escuchando musica, para luego este tomar la disición de irse a otra parte. Durante el camino, se encontraria una cafeteria bastante grande y casualmente, su estomago estaria sonando un poco, asi que un pequeño dulce no le haria daño a nadie o eso era lo que el pensaba. Una vez dentro, veria que estaba lleno de personas que disfrutaban la tranquilidad del ambiente local. Asi que sin decir algo, solamente se formaria en la fila para pedir lo suyo. Despues de 5 minutos de espera, este estaria comiendose un pequeño biscocho y un cafe, pero su momento tranquilo se veria interrumpido por un mensaje de su abuelo, el cual le pediria que fuera a la empresa donde trabajaba. Este sin muchas opciones, solo le escribiria a su mayordomo, quien sin problema alguno lo recogeria en donde estaba y lo llevaria hasta la enorme empresa de su abuelo.

Una vez el Sr.Niworth llegara por el joven, lo llevaria directamente hacia la enorme compañia de su abuelo, el cual consistia en un enorme edificio con más de 20 pisos. Una vez el castaño oacuro llegara al enorme edificio, su mayordomo le diria que lo estaria esperando en el estacionamiento privado, para asi desaparecerse de la vista del chico. Yahiruk solo se giraria y veria el enorme edificio, con aquel enorme nombre encima, el cual decia "Kohiro's industries.inc" con aquel pequeño eslogan de menor tamaño que decia "Todo por un nuevo mañana". Aquel castaño oscuro solo suspiraria y iria al interior del enorme edificio, donde se encontraria todo tipo de personal. Tanto secretarias/os, concerjes, guardias de seguridad y trabajadores de alta importancia. En varias ocasiones detuvieron al joven para ver quien era, pero al decir su nombre, rapido era reconocido y lo mandaban hacia el lider de aquella empresa, donde tuvo que subir piso por piso. En varias ocasiones este veria el entorno laborar de aquella enorme empresa. Veia robotica, experimentos cientificos con animales, creación de algunas armas y entre muchas cosas más. Yahiruk solo observaba mientras escuchaba musica y sin darse cuenta, ya estaria en frente de la puerta de la oficina personal de su abuelo.

Este tocaria dos veces y recibiria un "pase" desde el otro lado. Una vez paso, veria a su abuelo mirando la ciudad de japon desde su enorme ventanal, para luego este girar su cabeza y dedicarle su mirada a su recien llegado nieto.

- ¡Hijo! Que bueno que llegas, ¿como estuvo tu dia? -pregunto su abuelo con felicidad.

- Bien, Bien...supongo, algo tranquilo -respondio Yahiruk con una sonrisa en su rostro.

- ¿Que te parecio tu nuevo lugar de estudio? Se ve interesante, ¿no? -comento el Kohiro mayor mientras se sentaba en una silla.

- Seh, esta cabron, la verdad -diria el castaño oscuro para luego darse cuenta de la groseria que habia dicho- Lo siento...-susurro avergonzado.

- Jeje, no te preocupes hijo -dijo Shiro con una leve carcajada- Y nada nuevo que comentar? -pregunto tratando de sacarle platica.

- Ehh...no, nada inusual -contesto el joven, para luego recordar a la chica castaña que habia conocido- Bueno...tal vez si, conoci a alguien, es cool y me mostro la escuela entera -decia un poco avergonzado.

- ¡Eso es muy bueno, hijo! Muy bueno -contesto su abuelo mientras se ponia de pie y tomaba a su nieto del hombro- Se que todo esto es un cambio repentino, hijo, no es facil y se que ahora viviras diferente por acá -comentaba mientras se paraba frente a la ventana- Pero ya veras, todo desde ahora te saldra más que bien -finalizaba mientras veia la ciudad junto a su nieto.

Yahiruk observaria a su abuelo por un momento al rostro y veria la sonrisa de este, para luego voltear a ver la enorme ciudad de japon.

(Narra Yahiruk :

En ese momento, no estaba seguro de lo que decia mi abuelo. A decir verdad...tenia miedo de que nada saliera bien, de que nada salga como lo esperado, en si. Pero dare una oportunidad...quien sabe, puede que viva muchas aventuras aqui...¿No? Ademas, ¿Que tan malo podria ser...?

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Fin del Prologo.