Capítulo 2: Encuentro
Ver a Steve feliz junto a su prima era algo hermoso pero sumamente doloroso de ver pero tampoco quería alejarse del rubio. Porque vivir sin ver a Steve era como pedirle que no respirara. Constantemente estaba preocupado por el rubio y aún que trataba de evitarlo tanto como le era posible, al fin de cuentas vivían en la misma casa.
El complejo era enorme pero desde que el rubio fue dado de alta del hospital, todos concordaron en tener una mejor convivencia para facilitar la vida del capitán. Steve necesitaba de su viejo hogar. Un hogar libre de pelea para volver a recrear su vida. Por lo que todos estuvieron de acuerdo en vivir tranquilamente y sin decirle nada al capitán de su relación con Tony.
Al principio Bruce, Rhodey, Natasha y Bucky se habían negado pero al ver la determinación del castaño para que Steve cumpliera su sueño, decidieron resignarse, además Steve venía engañando a Tony desde hacía mas de seis meses. No era justo para ninguno de los tres vivir de esa manera.
Sharon se alegro al escuchar que Tony se haría a un lado para que tanto Steve como ella fueran felices juntos. Y si bien se disculpo con él castaño por lo ocurrido, no dejaría pasar la oportunidad de estar con él rubio. Siempre soñó que sería la esposa de Steve Grant Rogers.
Aunque al principio Steve simplemente se acercaba a ella para hablar de Peggy, pronto era más que obvio que ambos congeniaban bastante, y con la ayuda de Tony y los demás Vengadores, llego la primera cita del soldado y la agente.
Por primera vez en 20 años, Tony volvía a dormir en la cama de Rhodey, mientras lloraba amargamente, tratando de sacar la tristeza de su destrozado corazón. Él coronel se dedicaba a besar los cabellos castaños mientras mecía con suavidad a su pequeño amigo. No pudo evitar recordar que la última vez que Tony se había puesto así fue después de la muerte de María. Tal como lo había hecho aquella noche, rogo para que su amigo se recuperara.
Así como la vida continua, las salidas de Steve y Sharon se hacían cada vez más y más frecuente, finalmente no pudiendo soportar más aquello, con ayuda de Pepper y Rhodey decidió comenzar una gira por el mundo para promocionar los últimos productos de industria Stark y visitar a su amigo Bruce Wayne, quién prontamente contraería nupcias.
La última noche en el compuesto, se encontraba sentado en su laboratorio observando con cierta nostalgia el anillo de compromiso de Steve, el cual llevaba siempre en su persona, con una larga cadena alrededor de su cuello.
A pesar de haber pasado ocho largos meses, aún se negaba a soltar aquella pieza de joyería. Era lo que lo ataba a su amor a Steve y a la promesa que le había hecho.
Un golpe suave sobre el cristal, lo hizo voltear rápidamente hacía la entrada. Allí se encontraba su rubio soldado, con una sonrisa tímida, y una tibia y humeante taza de café. Su corazón salto de alegría dentro de su pecho. Su Steve solía traerle café en aquellas madrugadas donde el ingenio lo atacaba y lo hacía trabajar sin cesar. Sin dudarlo desbloqueo la puerta, permitiendo que el rubio ingresara. Deleitándose de la expresión sorprendida del soldado al ver su laboratorio.
-Buenas noches Tony- saludo el capitán- Te traje una taza de café- declaro mientras le tendía la humeante taza
Sin dudarlo tomo la taza, rosando los dedos del rubio sin querer. Su cuerpo entero se estremeció de placer y anhelo. Extrañaba tanto las caricias del rubio. -Gracias Steve- recordó sus modales- Ya necesitaba mi preciado elixir de la vida-tomo un sorbo, gimiendo de felicidad al probarlo – manjar de los Dioses
Él rubio sonrió un tanto enternecido y divertido por la expresión del castaño. Quizás no recordara mucho de esos siete años, pero estaba seguro de haber presenciado aquella expresión de placer de Tony, y en más de una ocasión.
Tony observo como el rubio movía sus pies de forma inquieta y desviaba constantemente su mirada, Steve estaba nervioso y no se animaba a decirle lo que cruzaba por su mente. -¿Qué sucede Steve?
El rubio finalmente se animo a mirar al castaño- ¿Tanto se me nota?- Cuestionó
Tony rio bajito -No demasiado pero te conozco lo suficiente para saber que algo te preocupa- admitió
-Debimos ser grandes amigos entonces- declaro el soldado sin saber que con cada palabra estrujaba el corazón del millonario -Lamento haber olvidado nuestra amistad Tony-
Tony quiso decir tantas cosas. Gritar otras cuantas. Pero al ver aquella mirada un tanto triste, se resigno. Guardaría aquellos sentimientos para sí mismos. Después de todo Steve no necesitaba saber el daño que le estaba causando -Tranquilo Steve-
Steve asintió- A pesar de que no puedo recordar mucho. Agradezco poder decir que somos amigos- Tony asistió con su cabeza. No confiando en su voz. – Y como somos amigos y eres el primo de Sharon….yo quería pedir tu bendición para poder casarme con ella-
Pensó que estaba listo. Creyó que el dolor de saber que Steve nunca lo recordaría jamás seria superado. Intuyo que el verlo salir con Sharon lo prepararía lo suficiente como para hacerse a la idea de que había perdido al rubio. Estaba equivocado. Muy equivocado.
-Tienes mi bendición para ser feliz junto a Sharon. Yo pagaré la boda y la luna de miel- hablo un tanto conmocionado- pero si me disculpas, aún tengo cosas que hacer- señalo a varías piezas en su mesa de trabajo
-Por supuesto. Gracias Tony. Muchas gracias- el rubio se retiro luego de haberle agradecido al millonario. Sin duda Tony era un gran amigo.
La soledad que lo invadió luego de que Steve se retirara del laboratorio comenzaba a asfixiarlo. El dolor en su pecho empeoro de forma drástica. Dolía. Dolía demasiado hasta que le era imposible respirar. Se aferro al anillo del rubio, repitiéndose una y otra vez que esto era lo mejor.
----------
Steve observo al millonario marcharse en su jet privado en compañía de Pepper y Happy. De forma inconsciente llevo su mano a su corazón, por alguna extraña razón ver al millonario marcharse le generaba malestar y tristeza, como si acabara de perder algo sumamente importante, desgraciadamente no podía recordar ni hallar razón para tal tristeza.
Se consoló a si mismo, diciendo que el castaño volvería a tiempo para su boda, tal como se lo prometió aquella mañana. Y sabía que el castaño jamás rompería una promesa.
----------
Recorrer el mundo nuevamente en compañía de su querida Pepper y su protector Happy, le hacia recordar viejos tiempos donde el respirar no le era tan doloroso.
Había pasado tres semanas desde que dejo el compuesto y cada día extrañaba más al rubio, aún así agradecía ese pequeño respiro, donde podía olvidar que su rubio prontamente se casaría con Sharon. La compañía de sus amigos era un bálsamo a su maltrecho corazón.
Su última parada antes de volver al complejo era la boda de Bruce Wayne. Su rival en los negocios y amigo de la infancia.
-Estoy seguro de que Bruce será muy feliz junto a Diana- murmuro Pepper. La pelirroja tenía el placer de conocer a la morena- ella es muy hermosa
Tony sonrió ante las palabras de la pelirroja- Bruce no aceptara a nadie menos que perfecto e inteligente a su lado. Demasiado perfeccionista para aceptar menos- afirmo con seguridad- Me alegro que haya podido encontrar a alguien luego de su rotundo fracaso con Selina
Ambos guardaron silencio. Tony recordaba la tristeza de su amigo luego de que Selina intentara matarlo nuevamente. Al parecer Catwoman jamás cambiaria sus mañas. No importaba que tan enamorada estuviera de Bruce. Su instinto era superior a su amor por el murciélago.
Finalmente los dos empresarios llegaron ante la imponente mansión Wayne. A pesar de que ahora Pepper y Happy estaban casados, el ex boxeador se negaba a dejar la protección de su esposa y amigo en manos de otra persona. Pepper tomo el brazo de Tony, quien guiaba a la elegante pelirroja dentro de la mansión, seguidos de cerca por Happy. Fueron recibidos por Alfred.
-Sr y Sra Hogan. DR. Stark- saludo un alegre mayordomo- me alegro que pudieran asistir a la boda del Sr. Wayne y la señorita Diana-
Tony se adelanto, abrazando al hermano menor de su amado Jarvis -Alfred- el mayordomo sonrió con discreción ante la muestra de cariño
-Por favor diríjanse hacia el patio. La ceremonia empezara pronto- declaro Alfred
Los tres se dirigieron hacia el patio. Sin duda Bruce no había escatimado en gastos para su segunda y dios quiera ultima boda, y a diferencia de su primera boda, esta parecía mas discreta pero no por ellos menos magnifica. Pudo reconocer a varios de los amigos de Bruce. Y también a los hijos adoptivos de su amigo. Jasón, Richard y Tim. Sentándose en la segunda fila. Saludo al comisionado Gordon.
Por un rato estuvo conversando con el Comisionado pero pronto comenzó a sonar una melodía más suave y Bruce acompañado de otro hombro tomaron lugar al lado del altar, junto al juez de paz. La típica melodía de nupcial comenzó a sonar y por la alfombra roja caminaba una elegante mujer de brillante ojos castaños, enfundada en un maravilloso vestido blanco con forma de sirena acompañada de una mujer un poco mayor y de cabellos rubios.
Sin duda Diana era una de las mujeres más hermosa que tuvo el honor de ver. Miro la cara embobada de su amigo, y se alegro de saber que aquel niño solitario halla podido encontrar la felicidad.
No obstante a pesar de estar atento ante las expresiones de su amigo, no pudo evitar desviar su mirada hacía el hombre al lado de Bruce. Viendo aquellos ojos azules tan apagados y casi sin vida. Se sorprendió. Aquella mirada tan llena de dolor y desesperanza era igual a la suya. Era como estar viéndose reflejado por esos ojos azules.
Como si se hubiera sentido observado, el hombre de ojos claros, desvíos su mirada de la pareja y se encontró con los ojos de Tony.
Dos miradas rotas se encontraron y fue como si el mundo alrededor de ellos se hubiera detenido y desaparecido. Solo ellos y su dolor se encontraba allí.
Esa fue la primera vez que Tony Stark veía a Clark Kent pero algo le decía que no iba a ser la ultima.
-----------
Steve se removió inquieto, Sharon se había quedado dormida después de que por primera vez hicieran el amor. Sin duda se había sentido fantástico, no obstante no podía decir porque se sentía insatisfecho. Con cuidado y tratando se no despertar a la agente dejo la cama que ambos compartían, colocándose sus pantalones pijamas, salió de su cuarto.
Por alguna extraña razón su mente era un revoltijos de ideas y recuerdos difusos. Sin querer llego a la habitación de Tony. No supo que lo impulso pero entro en el cuarto del millonario.
Observo con cuidado alrededor del cuarto, encontrándolo familiar. Se sentó en la orilla de la cama disfrutando de la suavidad de las sabanas. En el mueble junto a la cama yacía una fotografía del equipo original en un parque.
Sonrió notando lo joven que lucia el millonario.
Extrañaba a Tony. Esas tres semanas se le habían hecho eterna sin la compañía del castaño.
No supo en que momento pero se había quedado dormido mientras abrazaba la almohada del castaño.
-----------
Clark observaba a Bruce bailar con Diana. Sin duda ambos lucían sumamente felices. Verlos era como ver dos mitades de un todo. Ambos se complementaban de una forma extraordinaria. Sin duda estaba felices por sus amigos. Pero verlos así de feliz le recordaba a su amada Lois. Su bella y valiente esposa.
Aquella que había muerto a manos de su eterno némesis. Lex Luthor. Quizás por ellos nunca iba a ser capaz de aceptar a su hijo Connor. El niño tenia tanto su sangre como la de Lex. Por alguna razón siempre que veía al niño, recordaba la muerte de su esposa y su bebe neonato.
Odiaba aquel sentimiento de vacío y dolor. Por un momento le gustaría olvidar que su Lois estaba muerta.
-¿Noche difícil, eh?- la voz de Tony Stark le hizo desviar su mirada
-Lo mismo podría decir Sr Stark- dijo al notar la mirada anhelante de Tony
El castaño negó un poco divertido. Vaya ironía la vida -Mírenos Sr Kent. Somos dos hombres adultos que han perdido a sus parejas. Mirando a nuestros amigos de forma anhelante, viéndonos absolutamente patéticos-
Clark sonrió un poco. Quizás era la soledad o su rabia contenida durante meses. ¿Quién sabe? Pero aquella noche se sintió extrañamente valiente. -Y ¿Qué sugiere que hagamos señor Stark? –
Tony bebió su whisky de un trago. Era como el octavo en esas ultimas horas. Se acerco con cuidado al hombre de acero colocando sus brazos alrededor del cuello del hombre mas alta. Elevo su cabeza hasta poder susurrar -sugiero que por esta noche nos olvidemos del mundo. De nuestros fantasma y de nuestro dolor-
Tony ni siquiera porque estaba haciendo aquello. Quizás era la soledad, la bebida, o que por primera vez conocía una persona con una mirada parecida a la suya ¿Quién sabe? Pero por esa noche quería olvidar su dolor. Necesitaba u quería sentir algo más que su corazón muriendo lentamente. Y estaba seguro que lo mismo sucedía con Clark.
Los labios de ambos hombres se encontraron en un beso lleno de desesperación y hambre. Por un momento el cerebro de ambos emitió una advertencia antes de que la necesidad de sentirse completos hiciera de lado aquellas advertencias.
Las manos de Clark se dirigieron aquellos glúteos redondos y firmes, estrujándolos con sus manos, provocando gemidos por parte del castaño. El super hombre beso con desesperación el cuello, aspirando el aroma a café y aceite que emanaba del castaño. Los gemidos lascivos del millonario lo excitaban demasiado pero temía que alguien los escuchara, a pesar de que ambos estaban en uno de los tantos balcones fuera del salón.
Cogiendo al castaño por sus muslos, este no dudo en envolver sus piernas alrededor del periodista, la erección de ambos se rozaron a través de la ropa. Por un momento Clark se sostuvo de la columna, el placer que había recorrido por su cuerpo le hizo perder el equilibrio por un momento.
Momento que fue aprovechado por Tony para repartir varios mordiscos a lo largo del cuello de Clark, y mecer sus caderas para rozar la entre pierna de ambos.
Sin poder esperar más, Clark voló hacia su habitación, Tony ni siquiera se dio cuenta de la situación, demasiado ocupado tratando de quitarle la ropa al pelinegro. Al notar la dificultad del millonario no dudo en arrancarse la camisa del esmoquin, dejando que el castaño disfrutara del musculoso y firme pecho del hombre de acero, acaricio con cuidado los pectorales, disfrutando se acariciar los pezones rosados, Clark cerro sus ojos ante la sensación maravillosa que le provocaba las caricias de su compañero, hubiera preferido que Tony se divirtiera un poco más adorando su cuerpo, pero su necesidad era más fuerte.
Tony rio como niño travieso al ver como Clark destrozaba la ropa de ambos. Tan necesitado. Tan dispuesto. Tan adorable y absolutamente sensual con ese cuerpo de adonis y la mirada totalmente nublada por el deseo.
Esos ojos azules tan parecidos a los de su Steve.
Clark sintió como el cuerpo de su pareja se tensaba y las carias en su espalda se detenían, dejo de besar el torso de Tony y acariciar los muslos de este, para fijar su mirada en esos ojos castaños. Notando lagrimas en ellos. Comprendió la inseguridad y dolor. Estaba dispuesto a detenerse pero no quería dejar al castaño encerrado en su dolor.
¿Acaso ambos no habían sufrido suficiente ya?
-Te hare olvidarlo. Solo por esta noche se mío- las palabras del alíen lo sorprendió - a cambios ayúdame a olvidarme de mi propio dolor-
Tony levanto su cabeza para besar esos carnosos labios. Maravillándose por el sabor a chocolate y vainilla. Dulce. Como las caricias de Clark. Como sus sinceras palabras. Como el mismo Clark.
El toque de Clark quemaba, con cada caricia, beso o lamida, era como si tratara de limpiar la existencia de Steve de su cuerpo. A cambio el trataba de alejar la pena y la culpa del cuerpo de Clark, amando y acariciando cada centímetro de la piel pálida de Superman.
Ambos se entregaron por esa noche. La primera de muchas noches.
----------
Buenos. Espero que les haya gustado. Lo digo y lo diré siempre. No me gusta escribir lemon. NO soy buena, pero necesito practicar para mis otras historias y esta historia trata un poco de esto. Por lo que espero que les guste.
Se que dije que la historia estaba terminada pero cada vez que la voy a corregir y editar, se me ocurren más cosas para hacerla más interesante. Antes eran tres capítulos y ahora son más. Quiero llorar.
No iba a ser Mpreg tampoco pero me lo han pedido tanto que ahora no se que hacer. Quiero la opinión de ustedes. ¿Qué les parece? ¿Lo hago Mpreg o no?
Por ultimo pero no menos importante. Se que no conteste sus mensaje. Lo siento. Pero los leí a todos y me deleitó mucho leyéndolo. Para mi sus comentarios son un mimo para mi alma. Los amo y por ello me gusta tomarme mi tiempo para contestar y no poner "gracias por leer"
Espero ponerme al corriente con eso.
Bueno me despido. No sin antes pedirle que si tiene alguna imagen Clark/Tony que me las pasen jejeje. Se los agradecería de todo corazón
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top