Jimin

Miraba con atención a Jungkook, mientras mordía una manzana, ese animal enorme estaba preparando el desayuno para ambos, me parecía muy extraño verlo cocinar, Yoongi y él tienen todo el tipo de no saber freír un huevo, pues podría obligar con solo una mirada a que cualquiera lo haga por ellos.

Pero ahí estaba él, haciendo panqueques, cortando fruta y friendo huevos para que pudiera comer algo antes de tomar mi medicamento.

-¿Desde cuándo se conocen tu y Yoongi?

-¿No te lo dijo?

-Me conto algo, pero quiero escucharlo de ti, siento que tienes detalles que él no me diría.

Me sirvió el desayuno y se sentó frente mío en la barra de la cocina, para cortar un gran trozo de panque y meterlo a su boca antes de hablar.

-Nos conocemos de la adolescencia -dio un sorbo de café -lo ayude a cometer su primer asesinato -me quede helado con el bocado a mitad de camino -no es nada de lo que debas sorprenderte, él tipo se lo merecía, había matado a su madre, y de no hacerlo, ambos estaríamos muertos.

-¿Su padre?

-Padrastro, como sabrás nuestra historia no es bonita, tampoco es que tengamos algún trauma grave, lo resolvimos conforme crecimos, buscamos como saber nadar en la mierda sin llenarnos hasta el cuello de ella.

-En verdad estoy preocupado por él.

-Estará bien, no se lo digas, pero es demasiado listo, lo que yo tengo de fuerza bruta él lo tiene en cerebro y eso lo hace más peligroso que yo, pero es un impulsivo de mierda que no se sabe medir, Janbei esta en problemas, no debió amenazar a quien Yoongi ama de verdad.

-Janbei es un cerdo, no pensé que algún día valiera tanto para alguien.

-Yo nunca pensé ver a Yoongi interesado en alguien.

Di un bocado y después tomé un poco de jugo, el siguió comiendo con tranquilidad, pero yo seguía inquieto.

-¿Tu estas interesado en alguien?

-¿Esa mierda amorosa? -asentí -no ha llegado, la verdad no se si exista para mi -comí un poco más - hasta ahora mis proyectos son solo para follar.

-¿Algún trasero lindo hoy en día?

-No lo sé, vi uno que llamo mi atención hace como una semana, pero no tengo idea si deba tenerlo, la mocosa ha rechazado a cada sujeto que se le acerca.

Me pareció tierno de alguna forma, aunque no me imagino a Jungkook siendo romántico, creo que su tipo es de lo más salvaje, una domadora de bestias es lo que va a necesitar en un futuro. Es agradable sentir que no todos son como los sujetos que me tope en mi vida, ellos son están llenos de sangre pero de alguna manera no se han vuelto un demonio sin sentimientos por ello.

¿Qué tan bueno es eso?

Yoongi

El clima se había vuelto una mierda, había conseguido por fin la pista de donde se encontraba Janbei, también estoy seguro de que me espera, pero no me importa, si ambos morimos aquí, Jungkook tiene instrucciones de darle a Jimin su libertad, deje una buena cantidad de dinero para que él no se tenga que preocupar de nada durante demasiado tiempo.

Solo espero que no me extrañe demasiado si me voy. No soportaría hacerlo llorar.

¡Qué diablos!

Pero hice una puta promesa, le dije que volvería, también me prometí no verlo llorar de nuevo, y como mi nombre es Min Yoongi, cumpliré lo que le prometí.

Me estacione frente al club donde estaría, no era uno de los de Namjoon, tampoco alguno de los Kim, era extraño que estuviera lejos del territorio donde salía a trabajar. Encendí mi cigarro y lo fume casi de una calada. Me acomode la pistola y las municiones suficientes para lo que venía hacer.

Pase la seguridad noqueando al cadenero después de que se pusiera un poco pesado, por lo de mi arma, los otros no dijeron nada solo me dejaron pasar, era una buena elección por ellos. Subi al palco VIP, lo vi con una chica totalmente golpeada entre sus piernas, la estaba ahogando con su asqueroso miembro, mientras le vertía whisky en la nariz, haciéndola ahogarse.

-En un momento estoy contigo, déjame termino con esta puta -arrojo a la mujer para acomodarse los pantalones -¿Y bien? ¿Dónde esta Minnie?

-Eso no es de tu puta incumbencia.

-¿Viniste a mí con las manos vacías?

Tomo un puro y lo encendió, mirándome con desafío, creo que se sintió como un capo de la mafia haciendo eso, pero yo seguía viendo una basura. Movió el rostro un poco y dos sujetos me tenían apuntando con sus armas directamente a la cabeza.

-Me entere que hablaste con mi jefe, bueno con él que era mi jefe. ¿Kim te dijo dónde encontrarme?

-No fue difícil, las ratas como tu salen de las peores alcantarillas, es normal que desees un poco de lujo de vez en cuando.

-Y aun asi viniste aquí, sabiendo la desventaja que tendrías.

Sonreí primero antes de soltar la primera carcajada, la vena de la frente de Janbei se exalto. Me crucé de brazos y negué con la cabeza.

-¿Sabes siquiera donde estas parado? Al jefe Im no le gustan las personas como tú.

-Este no es territorio de los Im -escuche como engatillaron los guardaespaldas tras mío, yo solo saque otro cigarro -solo fanfarroneas.

-¿Sí?

De la nada la música se para y la gente comienza a salir, yo enciendo mi cigarrillo mientras veo que Janbei mira a su alrededor, desenfunda su arma en modo de alerta, yo estoy al pendiente, porque es seguro que no dejara que ninguno de ellos me dispare, planea hacerlo él.

-Necesitas entender algo -fume de manera tranquila -en este negocio, no siempre uno utiliza todos sus recursos, al contrario de ti, a mí no me gusta fanfarronear, este lugar es de alguien de quien me debe la vida prácticamente, asi que si deseo que cierre para poder matarte a ti y a tus leme huevos, es lo que pasara.

En cuanto termine de hablar me disparo, logre moverme, sujetando el brazo de uno de los hombres que me apuntaban, haciendo que me sirviera de escudo, el tiroteo empezó, quedaban dos más a parte de Janbei, debía concentrarme. Corrí hacia la barra esperando que no me diera ningún tiro, cuando salte, el bartender me preparaba una escopeta corta.

-Trata de salir de aquí.

-Dijo el jefe que te diéramos lo que necesites.

-Estere bien con esto, cúbrete.

Puse la escopeta recargada a la barra para levantarme, dispare dos veces y me agache de nuevo, no necesitaba puntería con esto, solo darle a esos malnacidos para ganar tiempo.

-¡RINDETE SUGA, SOMOS MAS QUE TU!

-¡SOLO ES UNO MAS!

Se quedo en silencio a juzgar por el número de balas disminuyendo, había caído uno, pero no podía confiarme de ello, mire los espejos de la barra, para salir por el otro lado, me moví lo más rápido que pude, hasta que de nuevo quede en su campo de tiro, me lance detrás de una de las mesas disparando la escopeta nuevamente, escuche el ruido seco de alguien cayendo al piso. Era ahora o nunca.

Ambos salimos a enfrentarnos, disparamos mientras nos movíamos, cuando ambos quedamos sin municiones, solo quedaba enfrentarnos a puños, Janbei me llevaba ventaja en cuanto a tamaño. Los golpes que me acertaba eran como si me golpeara contra una roca, juro que escuche como una de mis costillas se rompía.

Me sentía débil y las piernas me temblaban, pero saque una navaja de mi zapato para enterrarla en el muslo de Janbei haciéndolo doblarse de dolor, aproveche para darle puñetazos en el rostro sintiendo que su nariz crujió bajo mis nudillos, empezó a escupir sangre, yo sentí el dolor de mi costilla rota.

-Una basura como tu jamás podría tener a Jimin a su lado.

No lo deje moverse, cuando saque la navaja de su muslo para meterla en su garganta. Mi respiración se hizo pesada y me desmaye finalmente.

-Puede que solo sea mas feo de lo que ya era, pero sobrevivirá.

-Quisieras que él fuera feo, pero sabes que no le llegas ni a los talones.

Aun no abría los ojos, pero sabía de quien eran esas voces.

-Este imbécil esta vivo de milagro, soy un doctor, no hago milagros.

-Mil gracias por venir a verlo tan rápido, se que él solo te tiene confianza a ti.

-No pasa nada, me agrada ver tu lindo rostro también por eso vengo.

Abrí los ojos y sujeté la muñeca de Minghao.

-Sera mejor que no lo observes mucho, no tientes tu suerte -Jimin salto sobre de mi y yo me queje un poco -te dije que volvería.

-Les dije que estaba despierto, ya les deje todas las instrucciones a estos dos, es mejor que no te muevas mucho que si abres mis puntadas te grapare sin anestesia.

-Acompañare a el doctor a la salida y comprare tus medicamentos, no quiero que me de diabetes con la escena que tendrán ustedes dos.

Nos dejaron solos, Jimin se había metido en mi cuello, acariciaba mi pecho con sus delgados dedos pero no decía nada, solo podía aspirar el aroma de su cabello, mientras su delgado cuerpo se amoldaba a la perfección entre mis brazos, podría quejarme porque en realidad me dolía, pero que este a mi lado siento que es lo único que necesito.

-Quiero una familia -dice sin mas -no importa si ese tarado de Jungkook esta en ella, pero quiero una familia contigo, quiero que podamos adoptar o algo, quiero tener una larga vida a tu lado, no me vuelvas hacer esto.

Acaricie el dorso de su mano y después la tome para llevármela a los labios, deje un par de besos antes de contestar.

-Te daré todo lo que me pides, pero necesito un poco de tiempo, ya había hablado con el jefe respecto a mi retiro de esto, él lo entendió y me pidió solo unos cuantos favores más, prometo que en menos tiempo de lo que crees, tendrás la vida tranquila y la familia que me pides, es una promesa y yo nunca las rompo.

-Solo una cosa mas -me quede tranquilo escuchándolo -quiero que lo digas, necesito que lo digas.

-Te amo Jimin, te amo mas que a mi propia vida, si me pides que lo grite lo hare, si me pides que me lo tatué lo hare, pero no existe una manera en la que pueda demostrar cuanto lo hago.

-Te amo Yoon, gracias por aparecer en mi vida.

Terminamos este pequeño fic, los que leyeron azul, saben que pasa mas adelante, me gusto escribir de esta pareja secundaria, en verdad amo el Yoonmin.

mil gracias a las que me leen y besitos sucios.