...Un guerrero siempre mantiene su espada afilada...pero jamás la saca sin una causa...

Universo GOW-014
Línea temporal principal

Acto 1: Presentaciónes.

En una ciudad.

- Atrapen al niño !!!

Grito un guardia mientras un grupo de estos perseguía a un chico de cabello negro largo, piel morena y de al parecer 15 años por las calles de una gran ciudad. Lo que más resaltaba de este era una bufanda de color cyan oscuro. Este solo trataba de despistar a los guardias trepando los edificios, los puestos e incluso atravesando los interiores de los hogares.

- Lo siento mucho !

Dijo cuando atravesó uno de los hogares interrumpiendo el almuerzo de una familia a la vez que los guardias aparecieron casi al mismo tiempo que este salió del hogar.

- Ustedes no se rinden nunca, no les pagarán más solo por capturar a un niño chicos.

Este entonces fue rodeado por los guardias. Estos solo tenían sables y cuchillos en sus manos mientras se acercaban poco a poco al chico.
Este solo trataba de calmarlos a la vez que se daba cuenta de que se encontraba en una zona comercial y veía a su alrededor como habían sacos de distintos colores, pero los más llamativos eran los amarillos, rojos, blancos y verdes.

- Compañeros...juro solemnemente que esto es un mal entendido, verán, yo pagué por esa fruta, pero el vendedor me la quería vender por mas monedas he hizo ese gran escándalo

- Ahora explica la parte en dónde empezaste a correr por media ciudad.

- Jejeje...créanme que está será una buena anécdota para nuestros hijos y nietos.

Dijo el chico mientras subía su bufanda usándola como un tapabocas a la vez que subía una capucha morada.
Este pondría sus manos hacia atrás, más en específico en la zona de un cinturón de cuero, en un rápido movimiento lanzaría un total de 8 cuchillos pequeños en dirección a distintos sacos provocando que el interior de estos se vacearan.

Estos eran sacos con especias.
Los guardias y las personas de los alrededores empezarían a quejarse debido a que las especias invadian su vista, olfato y en unos pocos la piel.
Los guardias al recuperar la vista notaron que el chico ya no se encontraba ahí. Sin embargo lo dejarían ir ya que lo conocían muy bien. Era un escurridizo ladrón joven con el nombre de Sungai.

En alguna parte de un callejón

Sungai al perder a los guardias decidió entrar a un callejón, se dirigió a unas cajas de madera para moverlas y revelar una grieta por la cual entro, no sin antes mover las cajas lara tapar la grieta.
Después de caminar agachado por unos segundos llegaría a una camara en dónde la luz del sol pasaba gracias a unas rejillas.

- Siguiendo sus mismos pasos, he ?

Diría un anciano sentado en una silla mientras iba atrás y adelante pero sin dejar de ver al muchacho.

- Aja viejo.

Dijo para lanzarle una manzana al mayor, este la atraparía para limpiarla en su ropa.

- Muestra más respeto

- Quieres hablar de respeto en estos momentos ?

El anciano entonces solo volteria con una mirada enojada para después darle una mascada a su manzana.
El chico haría lo mismo para sentarse en una mantas y acto seguido caer dormido.
Un suspiro se escucho para después verse al anciano sentarse al frente de una pequeña estatua para empezar a meditar.
Después de un largo rato se levantaría para después nuevamente sentarse en la silla y ver al niño quien seguía durmiendo. Este entonces sacaría un collar para verlo por un rato.

- Quédate junto a él...cómo siempre lo hiciste...

Un par de días después.

Sungai estaba haciendo su rutina diaria, robar, escapar de los guardias y salirse con la suya.
Fue entonces que oyó rumores de que con el regreso del emperador a la ciudad este había traído una valiosa reliquia entregada por los mismos dioses a un viejo héroe que trato de expandir sus ideales. Sin embargo, este había sido condenado por esos mismos ideales, muy pronto se propagó el rumor de que el héroe había desaparecido, siendo está reliquia lo único que quedaba de que alguna vez está leyenda fue cierta.

Conocía está historia desde muy pequeño, era su leyenda favorita. Su madre le contó la historia y cada vez que se la contaba de nuevo cambiaba el final.
Fue un tiempo en dónde su padre, el anciano, se había marchado para después regresar con su hijo al enterarse que la madre del niño había sido quemada por supuestamente practicar brujería.
El chico seguía teniendo rencor a su padre, las pocas veces que le dirigía la palabra era para saber si algún rumor era cierto y así poder hacer un golpe.

- Ese rumor.....es cierto....

Dijo más preocupado de lo normal el anciano.

- Bien.

-...Espera, solo bien ?

- Por supuesto viejo. Tomó la reliquia, me largo de está ciudad, la vendo a un precio accesible y me largo de estas tierras.

- Te irás ?

- Si. El último golpe...No hay nada aquí para mí.

- Te olvidas de mi

El muchacho entonces daría un gran suspiro para ver a su padre con una mirada seria.

- Tú...te has olvidado de gente mucho más importante que yo o incluso más importantes que tú mismo.

- Y que creés que estoy haciendo ? Crees que me siento solo a meditar y a rezar a los dioses ?

- Hay algo que demuestre lo contrario ?

El padre entonces daría un gran silbido para acto seguido lanzarle el collar.
Sungai lo atraparía pero no lo vería.

- Espero que siempre que veas eso...recuerdes a gente mucho más importante que tú y yo.

Diría el padre seriamente solo para ver cómo su hijo se largaba.

Unos momentos después.

-........Mierda......

El chico diría esto congelado mientras tenía en sus manos una pequeña bolsa con monedas.
Vendió el collar, creyó que estafaria al comprador con su "encanto". En lugar de eso solo obtuvo una miseria cantidad de monedas.
Sin embargo guardo la bolsa para después poner en marcha su plan.

Acto 2: Cuando la noche cubre.

En alguna parte del palacio.

El plan fue puesto en marcha. El chico espero al anochecer para su golpe.
Era un plan simple, esperar al momento de cambio de turnos entre los guardias.
Siempre le pareció un palacio muy muy inseguro y mal construido. Se encontraba en una colina con vista a la ciudad, en las esquinas del terreno habían torres y en el centro la cámara real. A y por supuesto...ninguna muralla o alarma. No es para menos si tenían en ese momento al emperador más incompetente y confiado.

Más de una vez había entrado para robar alguna que otra cosa junto a su madre, siendo está la razón por la que empezó a robar.
Entonces empezó a adentrarse poco a poco en el palacio con ayuda de la vegetación y la oscuridad.

(Nota del autor: No me extendere mucho en las "dificultades" que tuvo que pasar Sungai para llegar a su objetivo, así que daré un pequeño resumen)

Aprovechando el cambio de puesto de los guardias, se escabullo como un gusano en una grieta hasta llegar a la cámara real. Pudo ver guardias, consejeros e incluso al mismo emperador, este último estaba siendo consumido por una ira incontrolable. En manos tenía un pergamino que tiró por ahí.

Sin embargo, Sungai se quedó viendo por un buen rato el enojo del emperador, ya que más que un arrebato o una persona de verdad enojada, parecía más un niño pequeño haciendo un berrinche.
Lo cual hizo que no se percatara de un guardia que lo tomo del cuello para acto seguido darle un fuerte golpe en la cabeza con el mango de su espada, haciendo que cerrara sus ojos de golpe.

Minutos después.

Los ojos de Sungai se abrirían de golpe tras sentir como el agua fría recorría todo su cuerpo empapandolo por completo.
Atrás de él había una gran cantidad de consejeros y guardias , uno de ellos sosteniendo un balde. Y delante de él se encontraba el emperador, quien solo tenía una cara de absoluto repudio al ver a un sucio indigente en sus aposentos.

- Quien eres tú ? Y que haces aquí ?

Dijo el emperador de forma amenazante y aguantandose las ganas de darle una serie de abofetadas al mocoso.

-...Sungai...

- Habla fuerte y claro !

- Sungai !

Al niño le llegaría una abofetadas por esa subida de tono. El emperador solo daría una mueca de asco para después limpiar su mano en su traje de tela morada y roja.

- Sungai...no ? Que te trae a ROBAR de nuevo aquí ? Si no te hagas el incrédulo, ahora reconozco al ladrón que me ha estado robando durante estos últimos 6 años.

-...Lo mismo que usted supongo...

Dijo de forma repelente mientras lo miraba fijamente, más que enojado, solo se estaba burlando de él.

-...Te refieres a Fēngbào...aaaa...solo hay un pequeño problema joven....tu preciada arma.....NO ES MAS QUE UNA FARSA.

Entonces este agarraría el mismo pergamino que hace unos momentos lanzo con rabia para abrirlo ante él niño y revelar una hoja bastante vieja y descuidada con un patron bastante curioso de color azul en todos sus tonos.
Sin embargo, para el emperador y los guardia era un simple dibujo, para Sungai era una frase.

-.....Yi-gi...è ?....dōu shì...

- Que haces niño ?

Dijo un consejero irritado mientras interrumpia al niño.

-...Tiene un significado

- Explícate

- Parece un patrón simple, Pero en realidad son letras, en otra lengua.

- Como lo sabes ?

- Mi madre me enseñó la misma lengua...abra el pregamino.

Acto 3: La reliquia.

El emperador orgulloso pero hambriento de poder decidió hacerle caso, por lo que abrió el pergamino.

-... Yīqiè dōu shì shuǐ... Yīqiè dōu shì yètǐ... Nǐ jiāng zhǔzǎi yīqiè... Rúguǒ nǐ pèi dé shàng wǒ...

Cada palabra que salía de Sungai provocaba que el papel fuera iluminandose de un blanco similar a la nieve, de comienzo a fin.
De la nada el papel como si de arte de magia se tratara saldría disparada para impactar en el pecho de Sungai.
El pergamino se desintegraria, en los brazos descubiertos del niño se verían como una serie de tatuajes azules de formaban para luego brillar de un gran azul deslumbrante.

El niño solo estaba en shock mientras veía como se formaban los tatuajes.
Empezo a ver todo en un parpadeo mientras veía a los hombres a su alrededor impresionados.
Fue entonces que Sungai entro en si, cayó al piso por lo que empezaría a recomponerse, pero entonces sentiria algo proveniente de su mano izquierda, lentamente giro su mirada la cual paso a una de sorpresa e incrédulidad.
Tenía en su mano la reliquia que tanto oía de pequeño, Fēngbào.

- Fēngbào....

Diría atónito el emperador mientras poco a poco se acercaba al chico con intenciones de arrebatar el bastón.
Este pondría sus manos en la reliquia para empezar a usar todas sus fuerzas e intentar arrebatarle el bastón al niño, quien solo se mantenía quieto con una mirada de terror.

- Ya dame el maldito bastón !!!!

Gritaría el emperador al niño, este último solo daría un susurro.

-...No la estoy sosteniendo...

El emperador entonces sacaría sus manos, solo que no pudo hacerlo ya que estás al parecer se habían aferrado a la reliquia. El bastón entonces empezaría a brillar de un intenso blanco, el cual dejaría ciegos a varios presentes.
El emperador entonces sintió algo extraño...ya no sentía las manos.

Bajo su mirada y con terror vio como estas se habían congelado al cero absoluto, este entonces se dió cuenta que el congelamiento pasaba de sus manos a sus brazos y de sus brazos hasta llegar su torso y así con todo su cuerpo.
El hombre solo daría un grito antes de quedarse callado por completo al convertirse en una estatua de hielo total.

La estatua entonces caería al piso, rompiendose en miles de pedazos.
Sungai volvería en sí, sus tatuajes dejarían de brillar a la vez que vio como
Fēngbào desaparecía convirtiéndose en agua.
Uno de los consejeros se adelantaría al resto y vería los restos de la estatua, la cual alguna vez fue el emperador de la ciudad.

-...El emperador...está muerto !!!

- Lo mató el niño !!

-...Brujo...Brujo !!!

Dirían varios presentes mientras los guardias desvainaban sus espadas y rodeaban al chico quien solo tenía miedo y estaba confundido.

- N-no...yo solo...ESCUCHENME !!!

Al elevar la voz de forma accidental, sus tatuajes volverían a brillar y una onda expansiva haría retroceder a los guardias a los consejeros.
Al ver cómo se recomponian con dificultad, Sungai decidío correr...correr...y correr. Más que antes, corrió como nunca mientras escuchaba como varias trompetas se escuchaban a sus espaldas.
Este solo pudo pensar en un lugar donde ocultarse y planear algo, su hogar.

Acto 4: La fuga.

En las calles de la ciudad.

- Agh...dónde está este niño ahora ?

Dijo enojado y preocupado el anciano padre mientras caminaba por las calles de la ciudad nocturna en busca de su hijo. Entonces oiria las trompetas, quedando muy confundido a la vez que escuchaba los rumores. Si algo caracterizaba esos rumores, era que eran igual de rápidos que la llama de una mecha.

Escucho en shock como el emperador había sido destruido por un niño.
De inmediato supo de quién se trataba, rápidamente decidío subir a un edificio cercano para tener mejor vista.
Después de un largo rato buscando con la mirada, lo vio escabullendose entre la multitud con su capucha y bufanda puesta.

-...Que hiciste ahora Sungai ?...

Unos momentos después.

El chico entonces decidío improvisar y seguir con su plan, solo que está vez se saltaría la parte en dónde vendía la reliquia y se subiría directamente a su vehículo de escape.
De forma silenciosa llegaría con éxito a los muelles en dónde vio como un barco estaba apunto de zarpar.

Por suerte, vio que no había ningún guardia por lo que subió al navío sin que nadie lo vea. Este se ocultaria en unas cajas ubicadas en la proa.
Este solo se aguantaría las ganas de reír. Ya podía iniciar de nuevo en otra tierra, dejaría atrás este lugar sin valor alguno para él.

- OIGAN USTEDES !!! Detengan el barco

Sungai borraría su sonrisa tras oír la voz del guardia.

- Que ocurre ?

- Creemos que por aquí ronda un asesino...queremos ver si está en el barco

Los guardias entonces subirían al navío. Primero revisarían de abajo a arriba, fue un largo rato en dónde el chico aguanto la respiración como pudo.
Su corazón empezó a palpitar de forma rápida al escuchar los pasos de los guardias acercandose a su posición.

Abrían de una en una las cajas hasta que solo quedó una, la que estaba el niño.
Uno de los guardias se acercaria para después sacar un cuchillo y abrir la caja.

- Oigan !!

Gritaría una voz familiar para Sungai mientras el guardia le ponía más atención al grito que a la caja.

- Supe del asesino del emperador ! Creo que ya se dónde está !

- Quien eres viejo ?!

- No hay tiempo !! Solo síganme !!!

- Bien... hagamosle caso, pueden zarpar en paz y que Buda esté con ustedes !!

Diría uno de los guardias para después seguir al anciano a la vez que este tenía un pensamiento.

-...Adiós hijo...

-...Viejo

Susurraria Sungai mientras sentía como el barco dejaba el puerto de la ciudad para adentrarse a las aguas del océano. También sentiría algo colgando de su cuello. El mismo collar que le dió su padre y que vendió por unas cuantas monedas había vuelto a él.

Acto 5: De las aguas llega un forastero.

2 días después. En alta mar.

De los creadores de "El ascenso de los monstruos"...

El chico solo tiritaba por el hambre y el frío del océano. Este solo pensaba en como sería su nueva vida en la nueva tierra. Quizás empezar como un humilde campesino, limpiar su legado de ladrón y está vez, ser más lfiel a su honor e ideales.
Sin embargo no pudo pensar mucho debido a que estuvo como en la lejania se escuchaban los truenos.

-...Se acerca una tormenta....

Una historia original basada en la saga God of War...

El barco se movía de un lado a otro de forma violenta, el viento azotaba con todas sus fuerzas la embarcación, el agua golpeaba a los marineros como si de rocas de un derrumbe se tratarán.
Sungai solo se mantenía en calma, eso fue hasta que escucho un trueno seguido por el sonido de algo cayendose.

- El mastil cayó !!!!!

Gritaría uno de los marineros antes de salir volando por el viento, perdiendose en la infinita marea.

- OLA !!!!!

Lo último que vio Sungai mientras salía de la caja era una gran ola monstruo que amenazaba a toda la tripulación. Él solo cerró los ojos y escucho la madera destruyendose, el viento y los truenos.

Llega a Wattpad...

Sungai poco a poco abriría los ojos, este se encontraba en una costa, lo último que vio antes de cerrar los ojos de nuevo para caer inconsciente fueron 2 de quizás su mismo porte.

The Tale of Rain

Fin del prologo.