.:: The Sweetest Thing ::.
#21
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Escucho risas que provienen del pasillo.

Es un sonido suave y angelical que por primera vez no me molesta, incluso me gusta.

No me había percatado hasta ahora de que existen sonidos en el mundo que pueden fascinarme.

Bebo un sorbo de mi café, disfrutando de aquella melodía mientras cierro los ojos. Quiero trasladarme a otra época, a una cuando reía más seguido.

El instante fue aparente pues cuando abro los ojos veo a Kaito empujar la puerta de mi oficina y hacer pasar a mi inquieta practicante. Ambos con una sonrisa genuina y un café en la mano. 

Las risas cesan y un clima de tensión se instala entre las cuatro paredes.

—Disculpa, Li —dice el moreno cuando me ve fruncir el ceño—, no sabía que ya estabas acá.

Alzo una ceja. ¡Siempre estoy aquí!

—Te extrañamos en la reunión del viernes —continúa con soltura. El viernes fue el after-office, el tradicional happy-friday que organiza el área de Kaito y claro que no estuve, ¡nunca estoy! Eso no es novedad. Idiota.

Además, Mei-Ling quiso comer pizza e imposible negarse a sus caprichos.

Así que no le respondo y fijo mi mirada en el lienzo.

—Adiós, Sakura. —Escucho decir y por poco derramo la tinta—. Piensa en lo que hablamos.

¿Sakura? ¿Por qué tanta familiaridad con él? ¿Qué hay entre ellos? ¿A él también le habrá traído galletas? O peor aún... ¿muffins?

¿Y por qué me debería importar si le trajo muffins o no? Pufff

—Sí, claro —le responde.

La sonrisa socarrona del azabache se acentúa más al fijarse en mí.

—¿Sabes qué? Pásame tu número, así te llamo y nos ahorramos todo el protocolo.

Ah no.

Ahora sí voy a quejarme. Este lugar no es para flirtear ni nada, además, los ojos de Kaito se muestran más oscuros y eso sólo me causa repulsión.

Maldito pervertido. Ella es casi menor de edad. Y por su facilidad de palabra, de seguro ya la engatusó.

Mierda. Mierda. Mierda.

No debería preocuparme, pero es mi practicante y de cierto modo siento que debo protegerla; más porque su imagen es la imagen del área y por supuesto, de la mía también.

Sólo por eso.

—Tenemos que trabajar —hablo con voz enérgica—. Adiós, Kaito.

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Notas:
Otro drabble por aquí. Es uno que quise publicar desde el inicio, ya se imaginarán porqué 🤣😌💚 Pero hay que darle su tiempo.

Lo que sí les digo: prepárense para lo que viene. ¿teorías? 👀

Muchas gracias por sus comentarios. Me faltan responder algunos, pero ya lo haré! 😊
Besos, Lu.