XI
El mismo momento de la plática de Elwood y Meredith, en otro lugar de la casa
Chicago
Diciembre 1947
Luego de escuchar la plática de Meredith y Lilith, me ha hecho reflexionar demasiado sobre los posibles sentimientos de mi esposa ante mi ausencia desmedida
Pero tampoco soy hipócrita al fingir un amor que no siento por ella, pero puedo tratar de remediar aquello con un poco de comunicación
Ambos nos encontrábamos en el patio trasero de la casa, con un ambiente no tan frío.
—Escuchaste lo que dijimos...¿verdad?— Ella me miró por primera vez hablando como personas civilizadas
—Completamente
Ella tocó su cabello delicadamente y comenzó a agitarlo con cierto nerviosismo
—No tengas miedo por lo que escuché— Me acerqué tranquilamente hacia ella
—¿De verdad?
—Por supuesto... sé que me equivoqué mucho al hacerte a un lado por una mujer que ya no quiere saber más de mí, te hice daño sin darme cuenta, al verte tan arrepentida junto a Meredith esta noche—Suspiré— Me hizo comprender que aunque no te ame con locura, aún tenemos posibilidad de intentarlo y no terminar peleados por nuestro orgullo
Ella sonrió fugazmente
—Creo que es cierto... es la primera vez en años que hablamos de este tema sin tirar el colchón hasta la puerta de la habitación
Los dos reímos ante eso
—¿Has visto esto Lilith? si podemos hacer que funcione este matrimonio— Dije dándole los ánimos suficientes
Ella se acercó a mí y me abrazó, tardé algunos segundos en reaccionar, pero luego de ver su acción, decidí imitarlo
Toqué con delicadeza sus hombros, luego su cabello y al final su rostro
—¿Crees que esto funcione Jake?— Preguntó aún temerosa de mi reacción
—Por supuesto que si, solo es cuestión de tener empeño para poder lograrlo
—Te quiero Jake
—Yo igual te quiero Lilith
Nos dimos un gran abrazo y nos quedamos varios minutos de este modo
"Espero que esto sea real"
10:00 am
Es sábado y hoy es día de descanso para todos
Lilith me animo rotundamente para hacer el desayuno juntas.
"La verdad que esta nueva Lilith me agrada demasiado"
—Bueno... creo que este desayuno fue todo un éxito— Comente motivada
—Nos sacamos un diez con esto— Entusiasta contestó— Está para chuparse los dedos
Ambas chocamos los cinco, al darnos cuenta el tan buen equipo que somos
—Hay que ir por las niñas y levantar a nuestros maridos
—Buena idea Lit
—Disculpa, ¿me llamaste Lit?— Preguntó sorprendida
—Oh... perdón— Sonreí apenada— Siempre suelo abreviar los nombres de personas que se empiezan a ganar mi aprecio
—¿De verdad me estoy ganando tu aprecio?
—Claro... Porque no habría de hacerlo
Sonreímos y no dijimos nada más
Ambas fuimos a nuestros respectivos lugares a hacer lo que nos correspondía y bajamos casi al mismo tiempo con las bebés.
Minutos después nuestros esposos bajaron y se sentaron al comedor.
—Esperemos les guste— Comentó con alegría Lilith
Todos nos sentamos a comer al mismo tiempo, Lilith y yo nos miramos fijamente para ver los rostros de nuestros maridos al probar la comida.
Nos alegramos al ver sus rostros llenarse de un placer delirante con la comida.
—¡Tienen que cocinar más seguido juntas!— Jake agradeció nuestra comida con su comentario
—Bueno... fue gracias a Lit que esta comida quedó tan deliciosa, yo solo coopere un poco
—Pues cocinaron estupendo mi cielo—Elwood me halagó con sus palabras
—Gracias, amor— Le contesté con alegría
—Me sorprende que cocines estupendo, ¿Dónde aprendiste este a realizar este sazón tan extraordinario Lilith?— Jake preguntó a su mujer
—Pues... cuando una mujer lleva en la sangre ser una gran cocinera, tiene que aprender a desarrollarlo sin ningún temor— Detuvo su hablar— Lo que jamás les comenté es que mis padres son de los mejores chefs en todo Canadá, ambos se enamoraron en un restaurante al instante de probar su comida, fue tanta su pasión que cuando cumplí seis años... me enseñaron técnicas y métodos correctos para preparar distintos platillos y postres con sabores delirantemente exquisitos, en cierta forma les agradezco que hayan sabido aprovechar mi don de buena manera.
—Vaya que lo hicieron bien Lit— Aprecié su comentario de manera positiva— ¡Debo conocer a los Brown!, son realmente unos genios en la cocina y quiero que me den muchísimos tips en esto
Ella río ante mi comentario
—Por supuesto... cuando se preste la ocasión te presento a mis padres sin mucho compromiso
—Gracias— Dijo Jake— Pero ahora hay que comer, que este manjar no merece enfriarse
El silencio se hizo notorio en la mesa
Lilith debería explotar más su gran don.
"Espero un día reencontrarme con Susan y poderle presentar a Lilith y a su hija sin ser irrespetuosa con nadie"
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top