Eran puras chicas las que no tenían rodeados, no sabíamos que hacer todas nos apuntaban con armas.

—Hola, lamento interrumpir su camino, pero ya saben cómo es esto, nos dan todo y los dejamos ir con vida.

Saqué de mi mochila la escopeta, todos nosotras sacamos las armas y arrojamos las mochilas.

—También las armas. —Dijo la chica.

—Por favor no. —Dije. —Nos dirigimos hacía la sexta zona y hemos escuchado que la entrada está llena de zombies, tenemos que tener armas con la cual defendernos.

La chica nos miró.

—No me importa que van a hacer, así que denme las armas.

Yo me quedé sin movimiento, si les dábamos las armas sería una muerte segura.

Voltee a ver a las chicas y todas negaron muy levemente.

Todos apuntamos rápido a las chicas y matamos a dos, para quedar completamente iguales.

Lia apuntaba a la chica que estaba atrás de nosotros, Brenda apuntaba hacía una joven que estaba a la izquierda de nosotros, Mack apuntaba a un joven que estaba a la derecha, mientras que yo apuntaba a la líder.

— ¿En serio quieren pelear?

—Nos han asaltado tantas veces, que ya no podremos aguantar una más, llévense la comida, pero no les daremos nuestras armas.

Ella rio.

—No creo que sean capaz de vencerme.

—Pruébanos, si no te largas ahora mismo los mataremos sin piedad.

Ella rápidamente sacó un arma.

—No dejaré que mates a nadie más.

—Y yo no dejaré que nos dejes sin armas y mucho menos que mates a alguien de nosotros, somos una familia y nos protegeremos mutuamente.

Ella me sonrió de nuevo, como minutos antes lo había hecho.

—Tener una familia te vuelve débil, porque cuando maté a tu queridísima familia, quedarás destruido y morirás por alguna tontería que hagas.

Me quedé absolutamente quieto, tenía que hacer algo, tenía que idear algo.

—Sabes eso no pasará, te lo repetiré de nuevo, lárgate o sufre las consecuencias.

Ella nuevamente soltó esa sonrisa que sinceramente ya me estaba cansando.

Metí mi mano en mi bolsa.

—Ríndanse. —Les dije a mis hermanas.

Ellas se hincaron y soltaron las armas.

—Cúbranse los oídos.

Ellas se pusieron las manos atrás en la nunca.

— ¿Se rinden tan fácil?

Yo le sonreí de la forma más segura que pude.

—Nosotros no somos de rendirnos tan fácil.

Apreté el botón del artefacto que Lia me había dado hace mucho provocando un ruido estruendoso, los que nos apuntaban tiraron sus armas y se taparon los oídos.

—Ahora.

Todas las chicas agarraron sus armas y dispararon, le disparé en el brazo, me fulminó con la mirada y corrió.

Ya había muertos todos, pero yo no tuve las agallas de matarla.

— ¡Eso! —Dije.

Chocamos los cinco mutuamente.

— ¡Cuidado! —Gritó Mack empujándome.

De repente vi como una bala le daba en su pecho.

Voltee y vi a la chica, agarre mi pistola y le disparé.

Ella cayó inmediatamente al piso, yo corrí hasta donde estaba Mack.

La tomé en mis brazos, tenía el pelo en la cara delicadamente lo hice hacía atrás, sus ojos verdosos me miraron.

Oía como respiraba con dificultad.

—Mack, todo estará bien. —Dije.

Ella estaba sangrando mucho, una parte de mí sabía que eso no era cierto.

—Mack, te pondrás bien, iremos a la sexta zona y ahí te atenderán.

Ella negó con la cabeza.

—Creo que hasta aquí llegué. —Dijo.

Lia abrazaba a Brenda mientras lloraba descontroladamente.

—No, no. —Dije llorando. —No puedes morir ahora que estamos tan cerca.

—Creo que solo ustedes tres llegarán a la sexta zona.

—No, vamos tienes que levantarte, tenemos que irnos...

—Jason... —Al decir esto tosió y escupió sangre. —Está bien, está bien... Yo les agradezco por ser mis hermanos, espero que jamás me olviden. Toma Jason.

Ella con gran dificultad se quitó el anillo y me lo dio.

—No, por favor no.

—Quédatelo para que me recuerdes, para que nunca me olvides.

Su mirada se dirigió hacia las dos chicas.

—Muchas gracias por ser mis hermanas, siempre las querré mucho.

—Nosotras también te queremos mucho y jamás te olvidaremos.

Ella les sonrió.

—Mack, por favor quédate, no quiero perder a alguien más.

—Jason, me tengo que ir.... Ya no siento dolor, escuchó los pájaros y es hermoso, lo único malo es que hace mucho frío.

Al decir esto ella miraba al cielo.

Después de decir esto, ella cerró los ojos y se quedó profundamente dormida para siempre.

—Mack. —La moví ligeramente. —Mack, por favor no. ¡¿POR QUÉ DIOS?!

La abracé como si no hubiera mañana hasta que mis brazos estaban cansados, pero quería abrazarla, ella había dado su vida por mí, por eso siempre la recordaría.

—Jason... —Dijo Lia.

Dejé a Mack en el suelo, ella parecía una muñeca tan delicada, con su cabello rojizo, su piel pálida... La acosté y junte sus piernas y brazos, le puse flores a su alrededor, me quité la chaqueta y se la puse.

—Para que ya no tengas frío.

Le di un beso en la frente, Brenda cayó al suelo y la abrazó mientras lloraba desconsoladamente.

Lia le dijo algo en el oído y le dio un beso en la frente.

Ellas avanzaron primero, yo caminaba de espaldas para ver a Mack, hasta que al dar vuelta desapareció y ya no vi su cuerpo nunca más.

N/A

Mack & Jason </3

Sinceramente este es el capítulo más triste que he escrito.

Espero que les guste el capítulo.

Nos vemos el viernes con el capítulo final y el epílogo :3