Capítulo 13

Me desperté y mi pierna aún dolía, mi brazo estaba dormido, pero había valido la pena, ya que estaba abrazando a Lia.

Me levanté un poco, en seguida Lia se hizo a un lado y siguió dormida.

Mack estaba sentada en las escaleras, Brenda estaba acostada en una de las bancas.

Caminé lentamente hasta la ventana, corrí las cortinas y me asusté al ver muchos zombies caminando por la calle.

—Chicas, creo que tenemos un problema.

Mack caminó hasta donde estaba yo y vio todos los zombies, había más de 100 y solo en esa calle.

—No, no, esto no puede estar pasando, hace unas horas estaba vacía la calle.

—Tranquila, siempre hay una salida, solo tenemos que encontrarla.

—Podemos subir arriba, donde está la campana, ahí podremos ver todo... Que tonta, iré sola.

—No, voy contigo.

—Pero tu pierna, estas lastimado.

—Iré, además si quieres vamos lento.

Ella asintió con la cabeza.

—Pero te apoyarás en mí, es un largo camino.

Puse mi brazo en su hombro y caminamos hasta ir arriba.

Después de unos minutos llegamos arriba.

El aire era más frío ahí arriba, sentía que si no me sostenía de la pared, podría caer ya que además de frío era muy fuerte.

Al estar ahí vimos que en todo el pueblo estaba invadido de zombies, todas las calles habían muchos zombies, no podríamos con ellos.

— ¿Ves algo? —Pregunté.

—Tengo una idea, ellos aman el ruido, tenemos una campana... Al tocarla hará un ruido estruendoso, así que podríamos aprovechar y huir.

—Pero no nos alcanzaría a huir, además alguien se tendría que arriesgar.

—Podríamos todo estar arriba, tocar la campana y huir hacía esa casa.

—Está muy lejos, ¿Cómo quieres llegar a ella?, volando...

—Que gracioso, aún no lo sé, pero es la única manera, estamos rodeados, si logramos que todos vengan a la iglesia podríamos llegar a esa casa y después llegar a ese carro, que está en la cochera.

—Bien, hay que encontrar una manera de llegar a esa casa.

—Vamos por las demás, tendremos que buscar en toda la iglesia cosas que sean de utilidad.

Ella se quedó viendo la distancia que había entre la casa y la iglesia, se paró y me ayudó a bajar.

Cuando estuvimos en el primer piso, vimos que Lia y Brenda estaba platicando.

— ¿Dónde estaban? —Dijo Lia furiosa.

—Estábamos arriba, viendo una manera de salir de aquí.

—Estamos rodeados, además hay muchos zombies cerca de aquí, hemos ideado un plan, pero necesitamos instrumentos. —Dijo Mack. —Paso uno: Ir arriba y tocar la campana, para que vengan todos los zombies. Pasó dos: Irnos a la casa que está a un lado... Ahí está el problema, está lejos... Así que necesitamos algo como una cuerda para poder llegar a dicha casa.

—Busquemos algo que sea de utilidad.

Todos fuimos por diferentes habitaciones, por toda la iglesia de arriba abajo.

Después de una hora ya estábamos todos reunidos en medio de la iglesia.

—Encontré ganchos.

—Encontré una roca y ropa sacerdotal.

—Encontré un cable gruso y largo.

—Yo encontré esta cosa que parece un gancho.

Me quedé viendo todas las cosas.

—Creo que tengo una idea.

Mack y yo volvimos a subir, ella agarro su pistola, apuntó hacía la ventana y disparo, la ventana se hizo añicos, los dos vimos para ver que ningún zombie se alertara, voltearon arriba, pero después siguieron caminando.

Los dos soltamos un gran respiro, estaba funcionando.

Ella sacó el arco y la flecha que había hecho especial con todos los ganchos, los habíamos fundido y moldeado para que tuviera cuatro picos, la habíamos pegado al cable.

Ella apuntó hacía la casa y con un gran esfuerzo la lanzó, esta falló, la volvimos a agarrar y lo volvimos a intentar desde distintos puntos, aunque ninguno daba, hasta el intento 30 se pudo, el gancho se quedó en la ventana, lo movimos de una manera muy brusca pero no se caía.

— ¿Crees que nos aguante? —Preguntó Mack.

—Eso espero, tengo muchas esperanzas hacía este plan.

—Voy por los demás, tú quédate aquí.

Me quedé ahí sentado esperando a que las chicas subieran.

Mack.

Bajé las escaleras de dos en dos, logré llegar al primer piso, vi que Lia estaba bloqueando la entrada, mientras Brenda corría por todas partes en busca de cosas para cubrir la puerta.

— ¿Qué pasa? —Pregunté.

—Los zombies, quieren entrar.

—Tenemos que dejar la entrada desbloqueada para que ellos puedan entrar.

—No podemos, tenemos que retenerlos lo más que podamos. —Dijo Lia.

—Alguien tiene que quedarse. —Dijo Brenda.

—Yo me quedaré, llévense las cosas, cuando toquen las campanas, subiré lo más rápido que pueda, ahora váyanse. —Propuso Lia.

—No, nos iremos, tiene que haber otra forma. —Dije.

—Estaré bien.

Agarré las vestimentas y Brenda las cosas que teníamos abajo y corrimos arriba.

Llegamos al puso de arriba y vimos que Jason estaba sentado viendo hacia abajo.

— ¿Qué está pasando? —Preguntó. — ¿Dónde está Lia?

—Los zombies están tratando de entrar, ella se ha quedado tratando de bloquear la puerta.

—No me voy a ir sin ella.

—Jason, tú tienes una cortada inmensa, así que tú irás primero.

Él negó con la cabeza.

—Vete, yo esperaré a Lia.

Después de razonar con él, rompimos la vestimenta se la pusieron en las manos, Jason se paró y se agarró del cable, miró hacia abajo y se quedó viendo.

—Sí muero recuerden que las quiero.

Él comenzó a caminar, era como si estuviera en un pasamanos, iba dando pasos lentos, pero concisos.

—Chicos. —Dijo cuándo estaba en medio. —Me duelen los brazos.

—Vamos Jason, tienes que seguir.

Él siguió avanzando hasta que logró llegar a la ventana.

—Es tu turno Brenda.

Ella se puso la ropa en las manos y comenzó a imitar los movimientos de Jason, ella se tardó menos.

—Chicos agarren el gancho, se está haciendo más flojo.

Ellos lo sujetaron con mucha más fuerza.

Agarre la cuerda de la campana y con mucha fuerza la jale, provocando que la campana hiciera un estruendoso sonido y se escuchará en todo el pueblo.

Todos los zombies corrieron hacía la puerta de la iglesia y trataban de entrar pero algo o alguien se los impedía.

Toqué la campana nuevamente, hasta que vi que los zombies entraban, Lia no llegaba y yo comencé a preocuparme.

Hasta que ella logró subir, cerró la puerta y la bloqueamos con tablas.

—Tú ve primero.

Ella agarró la ropa y se la puso en las manos, se apresuró y logró llegar en menos de un minuto, ella volteo a verme y estaba sudada, asintió con la cabeza.

Agarré la ropa y la coloqué en mis manos, agarre el cable, y comencé, volteaba hacía abajo y veía que estaba muy lejos de la calle, si caía moriría.

Seguí avanzando cuando el gancho se zafó y caí un par de centímetros, pero Jason, Lia y Brenda había agarrado la cuerda.

—Vamos.

Avancé rápidamente y llegué lograr a la ventana.

—Corran.

Todos bajamos las escaleras de la casa, llegamos al carro. Lia lo prendió y condujo lejos de ese pueblo.

Lejos de ese zombie y comenzamos a celebrar.

Mientras veía que Jason le daba miradas cómplices a Lia.

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