Capítulo XXVIII
Narrador omnisciente:
El jovencito de azules cabellos estaba acostado sobre una manta... Le habian dado de alta hace unos pocos dias, y su cuidador lo habia llevado de paseo al campo.
Él solo tenian su mirada perdida al cielo, pero no era eso exactamente a lo que le prestaba atención. Con elegancia y destreza, el azabache de desplazaba por los aires con sus magnificas alas, teniendo al pequeño facinado antes tal belleza. El mayor se acerco al niño sin tocar el suelo aun, estaba frente al menor dando sulces aleteos.
Sebastián: ¿Disfrutas?
Ciel: Mucho...
Sus labios se encontraron en un dulce beso, al separarse, el hombre volvio a dominar los cielos.
Ciel: No entiendo ¿Porque decidiste tomar una vida normal?
El contrario dio un par de vueltas en el aire, parecia que disfrutaba mucho de volar.
Sebastián: No es que yo lo decidi... Fue un trato justo.
Ahora estaba intrigado... El azulino se sento, mirando fijamente al suyeto que se paseaba por los aires.
Ciel: No entiendo. ¿Un trato justo con quien? ¿Que paso exactamente?
Sebastián: Un sujeto... No humano... Me perdono la vida con tal de comportarme como tal. Claro, no antes de tener una epica y complicada batalla entre nosotros, pero él era mas fuerte.
¿Eso era posible? ¿Mas fuerte que su Sebastián? ¿Que podia ser mas fuerte que esa especie?
El jovencito estaba confundido, algo que el mayor noto con facilidad. Bajo hasta que sus pies descalzos tocaron el pasto mojado por el rocio, se acercó al niño y acaricio su menton para que sus ojos se encuentren.
Sebastián: Entenderas... Los de mi especie somos mas como alimañas en este mundo, si logramos pasar a este lado es a través de distintos medios no muy bien vistos. Yo, por ejemplo tuve que matar a...
Ciel: ¿Un humano?
El hombre abrio de golpe sus ojos, sorprendido ante la insinuación... Y aunque la muerte violenta no fuera algo sorprendente o espantoso para él, no queria que el niño se aterra... Igual, la teoría era incorrecta.
Sebastián: No... A uno de mi especie rival. Al tomar su sangre fui capaz de pasar a este lado. Pero al parecer quien me ataco protegía este lugar y a la especie que lo habita. Después de casi perder contra él, me ofrecio una vida completamente nueva... Tipo, morir y volver siendo alguien mas... Me dejaria vivir con la condicion de dejar mi vida completa atrás.
Ciel: Eso incluye tu vida demoniaca...
El mayor no dijo nada por unos segundo, solo acomodo un mechon de cabello detrás de su oreja.
Sebastián: Si, eso incluye mi vida demoniaca. Me cambie de nombre, me instale en un pueblo y con el tiempo me resuto aburrido. Asi que comence a viajar, y viajar, y viajar sin rumbo alguno. Al final, volvi aqui.
El niño no dijo nada, no sabia que decir... Sentia como si una angustia se apoderara de su cuerpo, algo que, por supuesto, su cuidador no quería.
El hombre se arrodilló frente al infante, sus alas los cubrieron a ambos, dejandolos en un capullo de plumas, estando ahí, comenzo la sesión de besos... Sus labios se daban ligeras caricias entre si, se besaban por un breve tiempo y se alejaban, tomando apenas unos centímetros de distancia, después jugaban con sus narices, sus manos se encontraron para que sus dedos se enlazarán, se agarraran y no se soltaran. Aun con la oscuridad que aquel manto negro de plumas les ofrecia, el brillo de sus ojos aun prodia hacer que se miraran fijamente. Los rubis carmesí que tenia el azabache resaltaban con una ligera luz mayor a lo "normal", pero como no hacerlo, él ni siquiera entraba en la primera legra de esa palabra.
El niño se habia deprimido al enterarse que Sebastián tuvo que abandonar todo para empezar otra vez... Pero, por otro lado, si no pasaba eso seguramente no se conocerian.
El sol comenzaba a caer, el cielo se tornaba en un color azul y la temperatura bajaba. El hombre abrio sus alas para rencontrarse con el exterior. Una brisa fresca recorrió sus cuerpos, provocando un pequeño temblor por parte del menor, aunque el mayor ni se inmutó.
Sebastián: Te llevare a casa.
Tomo al niño entre sus brazos, cubriendolo con la manta en la que antes se encontraba... Extendió sus enormes alas, dando a entender exactamente lo que estaba por hacer.
Ciel: Espera... ¿Que crees que haces?
Sebastián: Sujétate fuerte... No te dejare caer, lo juro.
En cuanto los aleteos comenzaron, el azulino se aferró a su cuidador de manera rapida... y de un momento al otro, ya se encontraban a varios pies de altura.
Al princio fue aterrador, pero mientras los segundos pasaban, la experiencia se hacia cada vez mas agradable. El mayor volaba de forma prolija, jugaba en el aire para el niño, pasaba por las nubes para que el menor sintiera como estas atravesaban su cuerpo.
Al estar a pocos metros de la mansión, el hombre bajo nuevamente, y con el niño aun en sus brazos, camino tranquilo hasta el portón... Con cada paso que daba, su cuerpo producia un sonido extraño y espantoso, el cual indicaba que sus huesos se estaban comprimiendo y modificando para que sus alas desaparecieran. Una vez estuvieron el la entrada, el hombre hasta parecia humano.
Subio a la habitación del pequeño, dejándolo reposado en su cama.
Sebastián: Preparare un baño para ti... Esperame aqui.
El contrario solo afirmo con su cabeza, a los pocos minutos estaba solo en la habitación... Su mente solo estaba distraida en los recuerdos de la hermosa tarde que habia pasado.
Camino hasta su vestidor, para poder guardar el calzado que llevaba puesto... Pero se cruzo con uno de los espejos que este tenia. La imagen reflejada le resultaba espantosa y abominable ¿Como algo tan pequeño y lindo podia ser tan horroroso? Tal vez podria salvarse de no ser por aquellas asquerosas manchas escamosas que cubrian gran parte de su cuerpo, o tal vez era por que estaba jodidamente delgado, lo hacia parecer enfermo, aunque eso si era... Esas eran algunas de las cosas que pensaba mientras se miraba a si mismo. Inconsciente, su mano se dirijio a su cuello, sus dedos encontraron un punto específico, y comenzo con ligeros movimientos... Pero antes de pasar a mayores, una mano lo detuvo.
Sebastián: No te rasques...
El joven no dijo nada, ni siquiera se habia percatado que estaba haciendo tal cosa.
Despues de la hora del baño, el pequeño Phantomhive estaba su cama, con la compañía de su perro y su cuidador, quien terminaba de acomodar unas cosas de su cuarto. Al hacerlo, se acerco al niño para besar su frente antes de despedirse.
Ciel: Fue estupendo hoy... Gracias.
Sebastián: No hay de que. Te veré mañana.
Ciel: Hasta mañana.
Sus labios se dieron un ligero toque, un beso dulce y corto. El mayor salio de la habitación, deseando que el dia de mañana llegara rapido.
Las horas pasaron... El hombre azabache estaba observando por la ventana, acariciaba a uno de sus gatos quien estaba en el marco de esta. Logro oir la puerta abrirse, pero no se sorprendió en lo absoluto, incluso sabia quien entraba, si él mismo lo habia llamado. El infiltrado no dijo ni una palabra, solo se sento en el sillon, mirado fijamente a quien le daba la espalda, este solo tenia su mirada perdida en el horizonte, no tenia la intencion de ver a su "invitado", aun no, por lo menos.
Sebastián: Hace varios años, prácticamente, me perdonaste la vida con la condicion de abandonarme a mi mismo.
Tomo una pausa mientras debaja espacar un suspiro de su boca... Volvio a acariciar al gato en busca de calmarse un poco. Sabia que el contrario tenia sus ojos clavados en él.
Sebastián: Exactamente... ¿Porque me cruzaste con él? ¿Que carajos paso por ti cabeza en ese maldito momento?
Cansado, estresado y confundido... El azabache volteo para encontrarse con los frios ojos de su oponente, mientras daba un golpe a la pared, no demasiado fuerte como para romperla, pero lo suficiente para que el felino se asutara y saliera en direccion a la habitación.
Sebastián: ¡¿Que mierda esperas de mi?!
Quien estaba en el sillón se puso de pie, camino hasta estar cerca de el demonio. El brillo de sus ojos era intimidante y aterrador, pero Sebastián se mantenia firme a su posición
Undertaker: Tenemos que resolver un asunto...
~○~
Bueno... Hasta aqui por este capítulo.
Queria aprovechar para comentarles que quiero escribir un especial de Halloween de Kuroshitsuji, pero lo voy a hacer en mi historia de parodias... Para los que no lo hayan leido, seria esta:
Deje una encuesta para ver de que querian que trate el especial... Los invito a votar, seguro voy a tardar unos dias en publicarlo 😂
Gracias por su atencion ♡
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