—¿Qué es lo que ocurre? —Volví a preguntar ansiosa.

—Veras Beka... estos representan los colores del arcoíris—Decía el hada.

—Así es, yo tengo los colores rojo, verde, azul, blanco inclusive el violeta—Comentaba Elliot avanzando hacia donde me encontraba y me explicaba de manera calmada.

—Azura tiene un color más que el mío, pero a ti. Eso Te convierte en una «Anótatos»—Mencionaba Elliot acercándose a mí.

—¿Anótatos?—Pregunté sorprendida mirando a los chicos.

—Es alguien que tiene más poder que todos juntos, incluso podrías ser lo que Azura es, una sacerdotisa o incluso mucho más que una simple sacerdotisa —Explicaba Luke de igual manera.

—Así es Beka —Decía el hada observándome con una sonrisa—. Veras los colores del arcoíris se componen por rojo, naranja, amarillo, verde, cian, azul y violeta, y tú tienes muchos más de esos colores—Exclamaba el hada riéndose.

—Si, por lo que no es necesario de las runas, tienes los cuatro elementos, incluido el quinto elemento y mucho más, tienes demasiada capacidad—Decía Elliot asombrado y emocionado por mí.

—Sí, con...—Titubeo—. ¡con esto se da terminado la bienvenida! —Mencionaba Azura un poco sorprendida y a la vez nerviosa en su voz, ya que comenzó a decir que daba por terminado la ceremonia, por lo que me causó curiosidad e intriga de que actuará de esa forma aquella sacerdotisa, además de que tanto como Luke y Elliot, observaron sorprendidos como se retiró inmediatamente del lugar.

—Azura es sacerdotisa pero tú podrías ser una Druidesas—Comentaba Luke muy alegre por la noticia.

 Ilana se acercaba hacia donde nos encontramos, me felicitó y me abrazó de manera efusiva.

—¿Druidesas? —Pregunté anonadada por los nuevos conceptos.

—Eso lo sabrás más adelante —Me guiñó el ojo Elliot—. Tienes tanto que aprender Beka —Dijo con una sonrisa y dando un suspiro que para mí fue como un canto celestial, aunque lo supe disimular muy bien.

—Sé que soy una iniciada y no me quedare con la duda—Dije riéndome para mirar a ambos chicos.

Ilana se había acercado estando al lado mío junto a su hada, quienes conversaban entre ambas, mientras que daban piruetas cortas.

—Tu elemento es agua y además de ser viajera cae perfectamente con tu personalidad Ilana —Sonreí mirándola.

—Sí, de hecho me hubiera gustado el hielo, como te había dicho me encanta—Comentaba Ilana decepcionada con un dejo de tristeza en su voz haciendo un pequeño puchero.

—Ilana, no te preocupes, el anillo puede decirte que ese es tu don con el que naciste, ósea yo nací con el fuego pero poco tiempo después tengo el rayo y eso no es muy común que alguien lo tenga —Mencionó Luke con una sonrisa dándole esperanza.

—Tienes razón Luke, debo indagar más en mí, en conocerme—Indicó Ilana regalándole una sonrisa a Luke.

Observé a ambos chicos, sin duda harían una linda pareja, eso no lo discutía, pero tampoco quería que dañaran a mi amiga, mi primera amiga que tengo después de todos estos años de burlas que había pasado en la secundaria, una amiga real, de esas en las que puedes contarle todo y a pesar de que pasaron tres años, todavía nos faltaba por descubrir grandes cosas entre ambas. También pasé grandes incertidumbres de lo que me estaba pasando pero obtuve respuestas que para mí eran más que suficientes.

Por ahora.

La bienvenida había terminado y por ende todos los iniciados comenzaron a irse y las hadas también, nuestras hadas tanto como la de Ilana y mía se despidieron de nosotras y regresaron junto al grupo en donde pertenecía, viéndose a lo lejos estelas de todos los colores que dejaban.

—Bueno, creo que debemos regresar a nuestra habitación ¿no crees Ilana?—Mencioné con una sonrisa.

—Sí, fue muy linda la bienvenida, todo estaba muy lindo, además hay muchos profesores que a simple vista con su sola presencia denotan autoridad—Destacó Ilana mirando que muchos se estaban yendo, otros estaban tomando algunas bebidas que burbujeaban saliendo una especie de humo.

—Bueno, que tal si comemos algunas cosas y después nos vamos a la habitación ¿Te parece Ilana? —Sonreí.

—Me parece una fantástica idea, pueden venir también los chicos—Dijo con una sonrisa mirando a Elliot y a Luke quienes estaban bastantes alegres para dirigirse junto a nosotras hacia la mesa.

Pero al momento que nos iban a seguir hasta el centro de la mesa para comer y beber, un grupo de chicas que al parecer eran mayores de grado que nosotras interrumpieron, al ver a Elliot fueron hasta el mencionado rodeándolo al igual que Luke, empezando a gritar incluso una de las del grupo comenzó a insinuársele, rodeándolo con sus brazos, otras protestaban, otras preguntaban de que era el mejor junto con Luke.

¿Mejor en qué? ¿En clases tal vez? ¿O en algún deporte? Realmente no entendía, pero aun así decidí que aquella escena no sea mi centro de atención, rodee mis ojos y elevar mis hombros. Ilana me siguió de la misma forma al demostrar aquella actitud.

Esas chicas eran muy chillonas y gritaban demasiado. 

No lo soportaba.

Observamos con Ilana estando a unos metros de distancia, paradas y hacia un costado de la mesa viendo aquel espectáculo que se había montado y uno de los maestros le decía al ejército de las chicas chillonas que debían irse ya que la fiesta había terminado y que no pertenecían aquí ya que era una bienvenida para los iniciados, el rostro de una de las chicas se horrorizo, pareciera que no le gustaba que le dieran órdenes y con Ilana estallamos de la risa al ver su rostro desencajado por aquella orden que dio uno de los maestros.

La chica nos quedó observando por un buen rato, entrecerró sus ojos, para murmurar unas palabras que pude distinguir bien: «Me las pagarán»  y se fue.

A simple vista ella llevaba un cabello de un color rubio cenizo, unos ojos enormes de color grises con unas pestañas un poco largas de manera exageradas, unos labios gruesos con un poco de lápiz labial en ellos, además de tener la marca que llevábamos todos en el rostro y manos, a ella le encajaba a la perfección, diría que a simple vista parecía modelo, llevaba uno de esos crop top negros que hacían mostrar su abdomen trabajado, unos leggins de cuero ajustados a su cuerpo y unos botines con unos tacos. Mi gran pregunta era la siguiente: ¿Ahora que hice yo? Sin saberlo me había ganado una enemiga en tan solo en un par de horas.

Que lindo.

*Reeditado: 22.10.21