Se suponía que este día debia de ser uno normal como cualquier otro, pero por el gran error que había cometido esto iba a ser todo menos normal. Ya que en medio de la noche debido a su confusión por el cambio de cuartos debido a la estadía de los padres de Rías y del Maou Sirzechs, a Issei no le quedó más que compartir con el Maou su habitación. Sin embargo todo esto cambió cuando salió de su cuarto al pasillo rumbo a la cocina para beber un poco de agua, no solía darle mucha sed en mitad de la noche pero esta se sintió más sediendo de lo normal.

Sin embargo después de haber bajado a la cocina y haber bebido algo de agua se topo con algo sorprendente al volver de nuevo a su habitación. Y es que ahora la habitación que se suponía era suya para su sorpresa tenía un invitado extra, solo que esta no había ido a la habitación en busca de él sino del Maou que dormía a dos metros de su cama, o bueno cuando se fue parecía dormido pero ahora tenía demasiada energía a su parecer.

Ya que antes de irse a la cocina Issei por costumbre dejaba la puerta de su cuarto entre abierta por diversos motivos que a decir verdad no eran relevantes, pero en este momento gracias a esa costumbre se evito una situación incomoda. Y es que a su habitación había llegado Grayfia en el atuendo más seductor que había visto en su vida o bueno eso si pudiera viera pero no podía debido a su posición que solo le permitía ver como las sábanas iban de la forma más evidente posible moviéndose.

No era un ingenuo en eso, al contrario al ver eso supo en ese instante que pasaba, sin embargo le sorprendió demasiado el hecho de que el Maou Sirzechs Lucifer y su Esposa Grayfia Lucifugue, estuvieran teniendo sexo intenso en su habitación o al menos eso parecía debido a lo que era capaz de ver en ese momento. Debido en gran parte a su posición solo podía ver a Sirzechs mover sus caderas debajo de la cobija del futon, que el agradecía no ser capaz de ver directamente pero debido a esto supo al instante que Grayfia estaba boca abajo en el futon.

Ya que ante los constantes movimientos de Sirzechs la cobija del futon se movió, mostrando en parte los pies de ambos y al mismo tiempo era capaz de ver como apretaba el puño aferradonse al futon a causa de los movimientos. En base a eso y más supo que Grayfia se encontraba al menos debajo de su esposo Sirzechs que parecía haber olvidado que esta era por mucho su habitación y no la suya por lo que queriendo evitarse varias cosas por ejemplo interrumpir la "diversión" que tenían decidió irse a otra habitación.

Fue esto lo que lo que le hizo comenter un error, y es que en su casa habían en total cinco habitaciones sin contar baño ni cocina, en una estaban sus Padres, a lado estaba el Cuarto donde los Padres de Rías dormían, y justo en frente de la habitación estaba donde se suponía se encontraban durmiendo Rías y Asia en compañía de Grayfia. Quien parecía no iba a volver en un tiempo al estar en su habitación qué era el cierto cuarto en el sugj di piso, por lo que se limito a bajar de nuevo las escaleras en rumbo hacia esa última habitación que se suponía se debía encontrar disponible.

No lo había pensado mucho así que solo se dirigió a ese lugar una vez bajo hacia el primer piso, sin saber que esto estaba por llevarlo a una difícil situación que a pesar de ser buena en algunos aspectos iba a causerle demasiados problemas. Y eso lo supo cuando entró a la habitación del primer piso que como espero estaba vacío, algo obvio considerando que eran la una de la madrugada marcados sobre el reloj en la mesa de noche.

— "Es una suerte que tengamos aún esta habitación, o de lo contrario tendría que esperar a que ellos terminaran" — Pensó Issei mientras se sentaba en la orilla de la cama.

Pensando en lo que sucedía dentro de su habitación, donde esperaba que el Maou utilizará algún tipo de magia para poder limpiar lo que estaba haciendo, entendía que momentos como este donde se podía liberar del cargo que tenia y pasar algún tiempo de calidad con su esposa (sexo) se podía llamar Especial. Sin embargo debió de considerar primero el lugar donde iba a hacer eso (sexo) con su esposa, aunque si lo pensaba mejor seguramente creía o creyó qué después de su platica antes de dormir fue a la habitación de Rías y Asia a comprobar sus teorías, una que si bien le parecía exitante sabia que Rías no iba a estar de acuerdo y Asia tampoco por lo que eso solo quedaría como una teoría a la que recordar, sin embargo había algo de lo que estaba totalmente seguro.

— Sirzechs-sama es bastante afortunado de tener a alguien como Grayfia-san a su lado como su esposa — Susurro Issei así mismo.

Mientras se imaginaba a la Maid dentro de su mente, sin duda la Demonio era al menos una de las más grandes bellezas de todo el Inframundo, sin contar todos sus demás aspectos físicos la actitud de la Maid era realmente perfecta para la esposa japonesa que muchos tenían en mente. Estricta cuando tenía que serlo, pero sumisa cuando estaba con alguien que amaba realmente, eso había dicho Akeno en una ocasión cuando tenía un poco de curiosidad por la Maid que en sus palabras podía llegar a ser bastante aterradora o ridículamente suave como una Doncella enamorada dependiendo de su estado de ánimo.

— De verdad es alguien afortunado... — Se susurro nuevamente Issei mientras daba un ligero suspiro mientras veía el suelo.

— ¿Oh~ de verdad? — Pregunto una voz diferente que sorprendió a Issei cuando la reconoció. — ¿Crees que un hombre se sentiría lo bastante afortunado de poder casarse conmigo?.

— ¿Eh? ¡G-G-Grayfia-san! — Susurro con sorpresa Issei al ver a la Maid frente a él causandole un ligero Deja Vu.

Y es que esta escena ya había pasado un tiempo atrás, cuando perdió ante Raiser en el Rating Game por la mano de Rías a quien terminó rescatando después de la recuperación qué tuvo gracias a Grayfia, que además le entrego un panfleto para poder ir e impedir la boda junto con un Griffo para poder irse después con Rías.

— Shhh~ vas a despertar a todos si gritas así de fuerte — Susurro Grayfia mientras una señal de silencio con su dedo aun si veía sorprendido al castaño qué asintió.

— Lo lamento — Respondió Issei aun en un susurro.

Quedando confundido unos instantes al ver a Grayfia en ese lugar, ya que hasta hace unos momentos ella había estado en su habitación con Sirzechs teniendo sexo. Pero si ya estaba ahí significaba al menos para el que ya habían terminado de hacerlo, algo extraño para Issei qué asumía qué la estamina de un Maou no se terminaria tan rápido, y como si ella supiera lo que pensara sonrió de forma ligera.

— No te preocupes por eso, Sirzechs no es alguien que se canse tan rápidamente con solo una ronda — Explico Grayfia aun en un susurro avergonzado a Issei al saber que supieron lo que pensaba. — Tardará un poco así que descansa el tiempo que te parezca en la habitación, no me molesta.

Con sus palabras Grayfia camino hacia el interruptor de la habitación, activandolo aun bajo la mirada extrañada de Issei en verla en ese lugar, ya que sus palabras le habían dado a entender que quien ahora estaba con Sirzechs en su habitación no era ella por obvias razones como había creido sino que era alguien más que con algo de pensamiento probablemente era una amante del Maou o un miembro del Harem qué tenia, algo a lo que Issei no se inclinaba por que según le contaron uno que otro Demonio, Sirzechs no tenía un Harem en disposición como lo tenia su padre o un Demonio diferente, lo que por obvias razones le confundía.

— Gra... — Trato de llamar a la Maid en ese momento el castaño antes de ver lo más sorprendente de su vida.

Y es que ahora misma Grayfia estaba en medio de un cambio de ropa sin tener a consideración su presencia, algo que no sabia si debía de recordar o disfrutar en silencio el ver como la Maid se iba de un modo lento desvistiendo. Bajando con el movimiento más normal el cierre detrás de su espalda, qué al llegar hasta la base del uniforme cerca de su trasero dejo en evidencia la espalda desnuda de la Maid qué a su vez le permitió a Issei ver tanto el sujetador del bracier como la liga de la ropa interior inferior que desde su punto de vista parecia ser de color negro.

Sin embargo pronto comprobo que en la ropa interior había otro color cuando en un instante, Grayfia tomaba su vestido y lo bajaba hasta dejarlo en el suelo. Claro que esta acción exigió que se agachara y expusiera de una forma más evidente su trasero a Issei, qué observo hipnotizado la forma de corazón qué tenía, como las marcas que provocaban su ropa interior sobre su trasero que estaba adornado y marcado por un tono gris con negro qué realmente hacía resaltar el trasero de la Maid en frente suyo.

Pero gran parte de la atención de Issei se había ido hacia la zona más especial, que solo Sirzechs Lucifer había visto, pero en ese momento gracias a la pose sugerente de Grayfia. Issei pudo ver perfectamente la forma que tenía ese lugar, el como iba remarcandose sus labios así como forma dejo al castaño totalmente perdido en su forma qué olvido por algunos instantes su obsesión por los pechos.

— Ufufu~ ¿Estas disfrutandode la vista? Issei~ — Comento Grayfia al ver a Issei viéndole directamente el trasero.

Quien al ser atrapado giro su mirada al mismo tiempo que tomaba una de las 2 almohadas de la cama para cubrir que tenia una ereccion a causa de la vista.

— M-Me disculpo — Susurro como pudo Issei mientras trataba de ocultar no solo su ereccion sino su vergüenza.

Algo que le pareció tierno a Grayfia qué antes de poder decir algo, noto como en ese instante el pequeño reloj de bolsillo dentro de su traje de sirvienta brillaba, sorprendiendola completamente que al instante se agacho para tomarlo sin ser vista por Issei qué aún veía a otro lado.

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Era lo que marcaba el reloj dejando a la última mujer del Clan Lucifugue en una total sorpresa al punto que puso el reloj contra su pecho, mientras sonreía como nunca antes lo había hecho en su larga vida. Por lo que giro su mirada a Issei el cual seguía avergonzado, ignorando que Grayfia ahora lo veía de otro modo, una que jamás se habría imaginado antes en su vida. Por lo que aprovechando que el castaño seguía observando a otro lado y pareciendo que no iba a voltear pronto, decidió mantenerse de esa manera para lograr ahora su nuevo objetivo y ahora.

Aún con esa vestimenta Grayfia volvió a acercarse a la cama, misma donde Issei aun se encontraba sentando tratando lo mejor que podía en calmarse, sacandole una ligera sonrisa a la Maid que se sento en la cama captando la atención de Issei qué captando el movimiento se giro para verla encontrandose a Grayfia vistiendo aún con su ropa interior qué no espero ver perfectamente.

Verla así hizo que el corazón de Issei con sorpresa diera un salto, qué lo dejo entre un sentimiento bastante pecaminoso qué no debía tener en ese momento. Algo a lo que Grayfia río ligeramente mientras sus miradas se encontraban, Issei parecía en verdad nervioso y confundido por lo que sucedía, en cambio Grayfia parecía estar feliz como expectante por algo que era al menos para el castaño un enigma debido a su mirada qué el había visto más de un momento a otro con las chicas por lo que sus pensamientos se hicieron pesados al punto en que cuando abrió su boca para decir algo, recibio una propuesta que no se esperó recibir jamás en su vida.

— Issei... Hazme tuya — Dijo Grayfia con el tono de voz sensual y seguro.

Uno que Issei jamás escucho en su vida o pensó llegar a escuchar, como ese tipo de propuesta que realmente lo tomó con sus defensas abajo, dejándolo sorprendido al punto que creyó haber escuchado mal lo dicho por la Maid.

— ¿Eh? — Pregunto Issei incrédulo.

— Escuchaste bien Issei~... — Respondió Grayfia mientras se acercaba al castaño aun más. — Quiero que me hagas tuya... Eres el único Hombre que le puedo pedir como permitir hacer eso y mucho más.

La mente de Issei dio un vuelco cuando Grayfia sin decirle algo más tomo de un modo suave su mano para colocarlo del mismo modo sobre su escote, dejándole tocar parte de sus pechos qué ella sabia facinaban al castaño. Mismo que ahora se sentía estar en un sueño al ver de un modo sorprendente su mano sobre los pechos de la Esposa de Lucifer qué para este punto parecía continuar dentro de su habitación sin saber lo que ocurría a sorpresa suya en esta habitación.

— Así que te lo pediré de nuevo Issei... Yo, Grayfia Lucifugue quiero que me hagas tu mujer aquí y ahora, bajo Scarlet Law pido qué seas mi amante y futuro esposo al ya haber cumplido mi parte del trato en todo este tiempo... — Dijo Grayfia mientras se acercaba a Issei.

Que para este punto sentía su mente en lo profundo de un abismo, al punto que fue su subconsciente quien respondió a la propuesta de Grayfia siguiendo todos los sentimientos más profundos de Issei que realmente ignoraba qué los tenía en lo más profundo de su ser, o mejor dicho Grayfia los había sacado por la fuerza en este momento al actuar de esta manera.

— Yo... — Trato de hablar Issei por un momento al recuperar su conciencia.

Sin embargo antes de poder decir algo a Grayfia al respecto una luz apareció por un momento entre ellos, justo sobre sus manos derecha, la misma que Issei tenía sobre los pechos de Grayfia quien usaba su mano derecha para sostener a la suya para que le tocara los pechos, dejando a la vista de ambos como una figura se iba formándo sobre ambas muñecas.

Uno que sorprendió al castaño al verlo y sentirlo en su interior, donde un calor le recorrió lentamente el cuerpo causando que su respiración se agitara casi en ese instante, casi como si anhelara algo que había deseado desde hace mucho y este fuera el mejor momento para obtenerlo.

— Gra... — Trato Issei de llamar una vez más a la Maid.

Pero como la vez anterior sus palabras se volvieron a quedar en su boca cuando en sus labios se colocaron otros, impidiendo qué pudiera decir algo más mientras esa sensación comenzaba a inundar parte de su mente lentamente. Como si nublara el juicio que tenia, dejándolo a merced por mucho de sus deseos más profundos que habían estado encerrados y reprimidos muy dentro de su ser, todos saliendo del mismo modo que un volcán cuando este hacia una erupcion, una que era en una palabra bastante violenta.

Dejando totalmente inutilizado cada uno de sus sentidos racionales permitiendole a sus más bajos instintos, tener el control total de su cuerpo. Mismo que actuó bajo este nuevo control intensificando el beso entre el y Grayfia, la lengua de ambos se enredaban entre si en la búsqueda de su unión más perfecta.

— Nmh~ Ahn~ Ah~ Slurp~~ Oh... Hhn~~ Ah~ Slurp~ Nmh~ Slip~ — Era el sonido provocado por sus labios.

Mismos que se acercaron aun más con el agarre de Issei a la mejilla de Grayfia, un acto que la Maid respondió con poner su mano libre en el hombro del chico en un movimiento para acercarlo más a ella en ese beso tan hambriento. Sus labios iban moviendose uno sobre el otro tratando a simple vista de devorarse mutuamente.

Algo que sus lenguas también imitaban a simple vista con sus labios separándose y volviendo a unirse era posible ver por un instante como sus lenguas se enredaban, buscando el contacto una de la otra hasta que los labios de Grayfia atrapaban de la misma manera la lengua del castaño por momentos en los que parecía chuparlo y saborearlo antes de reanudar el beso.

— Nmh~ Ahn~ Slurp~~ — Fue el último sonido antes de que sus labios por fin se separaran.

Dejando a la vista un claro hilo de saliva entre sus lenguas, dicha vista dejaría sin dudas sorprendido a cualquiera e Issei a decir verdad no era la excepción a eso. Y es que después de ese lascsivo beso todo ese calor en su cuerpo no había hecho lo más mínimo por calmarse, al contrario a su parecer parecía arder con aun mucha más fuerza que antes impulsandolo con creces a continuar.

Algo que Grayfia parecía estar deseando lo mismo que el o incluso aún más, y eso solo se reafirmo cuando movió de forma lenta sus brazos a su espalda, donde con un par de movimientos quito el broche a su bracier. Y antes de poder reaccionar o pensar Issei fue empujado al centro de la cama donde quedo recostado, viendo sin parpadear como Grayfia se sentaba en su entrepierna para quitarse así su bracier.

Todo bajo la atenta mirada del castaño al que simplemente no le quedo más que el admirar, los grandes pechos de la Esposa de Lucifer qué desconocía totalmente los sucesos de esta habitación. Como Grayfia iba mostrandole lentamente su cuerpo al chico que se suponía iba a ser dentro del futuro su cuñado, pero ahora las cosas y los futuros planes habían cambiado por completo gracias a ella.

— Issei... — Fue el susurro de Grayfia al tomar las manos del castaño para poner ambas sobre sus pechos.

Enterrando así todas las posibilidades de detener este suceso, la noche continuaba para todos los que estaban en la casa con un sueño profundo. Un sueño que no iba a permitir que despertarán tan pronto, y eso solo beneficiaba a los amantes en esa habitación en la primera planta, donde a Issei le habían quitado su playera junto a sus shorts dejandolo únicamente con sus bóxer rojos.

Mismos en los que ya era imposible el no notar su gran ereccion estimulada por el suave movimiento de caderas de Grayfia, que se aseguraba de que su vagina fuera restregandose contra la ereccion de Issei qué realmente sentía aún a través de sus últimas prendas los labios vaginales qué se restregaban contra el aumentando su deseo por la mujer sentada sobre el.

Misma que había vuelto a besarlo de un modo hambriento, mientras dejaba a su vez a Issei jugar con sus pechos ya fuera aplastandolos brevemente o moviendo a ambos en círculos. Al mismo tiempo que se aseguraba de estimular sus pezones al apretarlos momentáneamente usando la palma de su mano o sus dedos sacandole a la peli plateada un par de gemidos más contra los labios del castaño.

Quien no contento con eso, separo de un modo directo sus labios para luego bajar sus manos de los pechos de Grayfia a su trasero donde la empujó ligeramente. En un claro intento de acercar los pechos de la Maid a su rostro, accion qué funcionó al haber sido captado por Grayfia qué se dejó guiar por el castaño colocando de la forma que quería sus pechos encima de su rostro donde los labios del chico casi no se demoraron en atrapar uno de sus pezones en su boca.

Acto qué sacó más gemidos de Grayfia al sentir como el castaño iba chupando sus pezones casi como si tratara de sacar un poco de leche de estos, sin embargo esto era algo imposible debido al tiempo que lacto por última vez hace ya once años y si quería volver a hacerlo debía quedar embarazada de nuevo.

— Ah~~ Ise~ — Gimió Grayfia cuando los labios de Issei atraparon ambos pezones en su boca.

Y con sus dientes y lengua comenzará de la misma manera a estimularlos para un placer suyo como para Grayfia, la cual al sentir eso su deseo por complacer a Issei se intensificaba. Ya fueran por su sentido de Lujuria o su deseo de servir como una Maid, pero realmente deseaba complacer a Issei de un mismo modo que lo hacia el en este momento.

Pero aun si esos eran sus planes, Issei no tenía la intención de dejarla hacer algo a pesar si era su deseo en este momento al recibir gran placer con sus acciones. Que con un movimiento más suyo cambio los papeles, en un instante sin darle ningún tipo de oportunidad de reaccionar Issei cambio de lugares con Grayfia, siendo al momento con ella recostada en la cama mientras Issei estaba sobre ella.

Con la respiración agitada y mirada casi perdida ambos se quedaron quietos por unos instantes, como si meditaran sobre lo que venía a continuación. Sabiendo al menos en esos cortos ocho segundos que en el momento que decidieran seguir ya no habría marcha atrás, que sería en un sentido la responsabilidad de ambos los resultados de esta noche.

Una en la que dejando todo aun lado, se volvieron a unir en un suave beso que a pesar de lo que significaba, sello todo lo que estaba por venir en ese momento. Y solo habiendo pasado unos minutos más de ese suave beso, desde el exterior de la habitación se comenzaron a escuchar los suaves y algo fuertes gemidos de Grayfia.

Como aquel sonido de aplausos que iban de una forma un tanto rítmica, causados y repetidos por Issei quien al fin se había graduado de aquel Título que muchos le dijeron por un largo tiempo que no iba a perder, sin importar cuanto se esforzara por ello jamás dejaría de ser virgen. Pero esta noche, Hyoudou Issei había logrado lo que muchos dijeron le era imposible y mucho más, al perder su virginidad con una de las Demonios más Hermosas del Inframundo, Grayfia Lucifugue... Esposa del actual Maou Lucifer.

Qué pronto pasaría a ser su ex esposa, y eso lo sabía la persona que estaba fuera de la habitación escuchando el gemir de Grayfia, sabiendo perfectamente que era lo que hacian ahí dentro limitandose por ese momento a suspirar antes de darse la vuelta y regresar a su habitación. Donde muy probablemente pensaría lo que iba a hacer con esta situación que podría en verdad beneficiar a sus planes, mientras tanto dentro de la habitación el sonido y las acciones eran más evidentes.

Con el cuarto casi a oscuras, teniendo de iluminación únicamente la luz de la luna se pudo apreciar perfectamente, como el cuerpo de Issei se apoyaba en sus brazos mientras movía de una forma constante sus caderas, qué ante su movimiento era posible distinguirse el cuerpo de Grayfia debajo de el, que se movía ante cada uno de los movimientos de cadera que hacía.

Ya fuera su cuerpo o sus grandes pechos los que se movían, era bastante evidente que disfrutaba de lo que sucedía al estar sujetando con fuerza la almohada sobre su cabeza al estar disfrutando del placer generado por la constante penetracion a su zona más especial al que solo Sirzechs había logrado acceder antes. Pero eso ya no era así con las acciones de Issei, qué a pesar de ser su primera vez se movía del mismo modo que lo haría alguien con un poco de experiencia, algo que permitía al chico poder satisfacer a su ahora amante qué gemia constantemente debajo de el y parecía desearlo aún más.

— ¡Ahh~! Ah~ ¡Mmm~! Ah~ ¡Mas~! Ahh~ ¡Hazlo más fuerte~! ¡Ahh~! ¡Issei~! Mmm Ahh~ ¡Issei~~! — Gemia constantemente Grayfia mientras su cuerpo temblaba del placer que la abordaba en cada golpe de caderas.

Qué honestamente el castaño hacia con un nivel de fuerza, que una humana no podría soportar pero al ser Grayfia una Demonio al nivel de un Maou, podía sin problemas soportarlo y pedir más de lo que recibía como ahora.

— Carajo... Tu interior se siente bien... Realmente bien Grayfia... — Gruño con voz casi entre cortada Issei mientras se mantenía moviendo y observando.

Como los pechos de Grayfia se movían a los lados o en círculos por momentos, lo que le daba un gran espectáculo al verlo desde su perspectiva arriba de ella.

— Ah~ ¡Ahh~~! Puedes hacermelo~ ¡Las veces que queras~~! Mmm~ Solo dímelo y te dejaré~ ¡Ah~! ¡Hacerme todo lo que quieras~! ¡Ahh~! ¡¡ISSEI~!! — Gimió con fuerza Grayfia cuando el chico al fin dio con una zona sensible en su interior.

Una clara señal para el castaño que sin desperdiciar la oportunidad comenzó a golpear esa zona y su alrededor, dando aun más placer a Grayfia qué gimió más fuerte en respuesta. Mientras soltaba la almohada y estiraba sus brazos hacia el castaño sobre ella, que captando lo que quería la Demonio acercó su cuerpo de tal manera que Grayfia pudo pasar sus brazos alrededor de su cuello.

Y así mismo atrapar su cintura con sus piernas, juntando sus frentes Issei dejo las sutilezas a un lado para comenzar a moverme más fuerte y rápido. Esta sola acción significó para ambos, que ya era el límite y que el clímax estaba cerca de ocurrir para ambos.

— ¡Issei~! ¡Ahh~! ¡Issei~! ¡Issei~! ¡Mm~! ¡Ah~! ¡Ahh~! ¡Issei...~! — Gemia Grayfia constantemente mientras veía a los ojos miel del castaño. — ¡D-Dentro...~! ¡Ahh~! ¡Hazlo dentro...! ¡Issei~! ¡Mmm~!.

— Grayfia...~ — Murmuro Issei tambien el nombre de la Maid mientras seguía el constante movimiento de sus caderas.

Mismas que habían encontrado la zona más sensible de la última Lucifugue del Inframundo, que para evitar hacer más ruido comenzó a besar al castaño entre ese lapso de tiempo que los llevaría con seguridad al clímax. Sus lenguas fueron en busca de la otra mientras el sudor en sus cuerpos era más notable que antes y fue en ese preciso momento cuando dio fin a este primer encuentro.

La velocidad de Issei aumentó haciendo más evidentes el sonido de los aplausos mientras que Grayfia se aferrara con un grado de fuerza mayor al castaño qué se concentro únicamente ella durante esos últimos segundos donde el placer llegó a su maximo nivel al fin.

— ¡¡ISSEIII~~!! — Gimió Grayfia con una gran fuerza mientras arqueaba un poco la espalda.

Aun con el peso extra del castaño pudo hacer ese movimiento, sentiendo como entraba el caliente semen de Issei en su útero qué se abrió solo para recibirlo y resguardarlo en su interior. Algo que el castaño parecía intuir, mientras seguía dando ligeros movimientos de caderas, como si quisiera depositar totalmente hasta la última gota de su semen dentro de su útero.

Qué no tardo en desbordarse por la gran cantidad de semen que entró en su útero en pocos segundos, mismo que comenzo a filtrarse lentamente al exterior aun con el miembro del castaño dentro de ella. Al cual a pesar de haber llegado al clímax y soltado una gran cantidad de semen aun continuaba como si nada, por lo que una vez estuvo seguro de que lo había dejado salir todo en su interior.

Comenzo a salir del interior de Grayfia a quien se le escapó un ligero gemido ante la salida del miembro del chico, que dejo salir varios hilos blancos de su interior a los cuales Issei observó por un momento antes de enfocarse en la hermosa mujer, que estaba recuperando el aliento poco a poco. Precensiar como sus pechos subían y bajaban, habían causado que su ya casi semi erecto miembro recobrara fuerza a pesar de haber alcanzado el climax poco antes, un suceso que dejó a Grayfia algo sorprendida al verlo.

— Pareces que aún no estás satisfecho... Issei~ — Hablo un tanto cansada Grayfia mientras se apoyaba en sus brazos.

Observando al castaño que como ella ya tenian algunas gotas de sudor cubriendo sus cuerpos, sin embargo parecía que lo que acababan de hacer era solo el inicio de algo más grande. Ya que pase a ser lo suficientemente consciente de todas sus acciones, Issei no sintió remordimiento, o algún tipo de culpa por haber tenido a Grayfia gimiendo su nombre.

Qué aun si se sintió demasiado corto, en realidad habían durado casi una hora al ver de reojo el reloj que Grayfia tomó de manera suave antes de moverlo hacia el lado contrario. Dejando a Issei de cierto modo sorprendido y extrañado, pero no pudo decirle algo al respecto cuando sin decirle más la peliplateada se giraba en su lugar para acomodarse lo suficiente.

Quedando en una posición donde usaba sus brazos y piernas para sostenerse en cuatro patas, una posición que dejaba a la vista su trasero al castaño qué solo se quedó hipnotizado por la vista. Que aún si ya era erotica alcanzo un nuevo nivel, con la acción de Grayfia, que usando sus dedos de su mano derecha separo con la mayor seducción posible los labios de su zona inferior, dejando salir un poco más de ese líquido blanco que aún estaba en su interior llenandola.

— No te preocupes por el tiempo y todo lo demás... Solo enfocate en mi... — Dijo Grayfia mientras su mirada parecia con creces desearlo aún más. — Por favor... Hazme tuya las veces que quieras... Sin importar si pierdo el conocimiento no dejes de hacerme tuya... Convierteme en tu mujer Issei~.

Esas últimas palabras bastaron para dar nacimiento a un nuevo deseo en Issei, el que si ya había recuperado una parte de su lucidez. Ahora había vuelto a caer en lo profundo de su mente al hacer lo que Grayfia le había pedido, posicionandose detrás de ella para luego adentrarse una vez más en su interior al sujetarla de su cintura para luego comenzar a mover al ritmo de antes sus caderas.

Ignorando el hecho de que la marca que había aparecido en su mano derecha, se extendió desde su mano hasta llegar por poco a su codo, de la misma manera que ocurrió con la marca de Grayfia. Sin ver eso, ambos continuaron sumergiendose en el placer que sentía permitiendo a la marca aferrarse aún más a sus brazos y exterderse hasta sus hombros donde sin detenerse se extendió hasta cubrir una ligera parte de sus pechos y espalda.

Donde aun si ya era lo suficientemente visibles al haber cambiado de posición después de media hora, ninguno fue lo suficientemente consciente para poder notarlo aún si ambos estaban sentados sobre esa cama. Grayfia sujetaba con la misma pasión la cabeza de Issei usando sus brazos y sus piernas rodeaban de la misma manera su cintura, Issei por otro lado tenía las piernas cruzadas mientras sujetaba a Grayfia del trasero donde iba levantandolo y bajandolo permitiendo a su miembro moverse en el interior de la maid qué movía sus caderas de un modo suave pero erotico.

Ayudando al castaño a que la siguiera de la misma manera penetrando mientras a ambos les consumía también el deseo de besarse, usando sus leguas, habían dado inicio a otro beso lascivo entre ellos que los hacía ignorantes de las marcas de los tentáculos qué cubrían sus brazos y una parte de sus pecho como espalda.

Y es que mientras compartían ese beso apasionado junto con el movimiento de caderas, siguieron sin percatarse sobre los movimientos de los símbolos en sus manos derecha. Los cuales comenzaron lentamente a brillar en diferentes tonos de color, el de Grayfia se volvió de color banco con toques azules similares a ese color que tenía el hielo, en Issei fue una forma más fuerte con un Carmesí qué a decir verdad, comenzaba a mostrar ese mismo tono azul que tenia Grayfia, que como la marca de Issei la suya presentó un tono Carmesí qué se mezclaba con el Carmesí antes de desaparecer.

Simbolizando de esa manera la unión y compromiso de ambos estaba completa en su totalidad, siendo sellado con otro final cuando Grayfia alcanzó otra vez el orgasmo al igual que Issei, qué dejando aun lado todo volvió a soltar su semen dentro de Grayfia qué respiraba de una forma erratica qué no oculto su sonrisa satisfecha como alegre de al fin haberlo disfrutado totalmente.

Marcando así un nuevo camino para si misma, como para Issei qué sin saberlo conctetamnete había causado que todo dentro del Inframundo estuviera en un nuevo camino que iba a cambiar todas las cosas en el, incluyendo su posición como Peon y la posición de Grayfia con ser la Reina más Fuerte.

Continuará...

Aqui BlackRedZX con una historia que espero Wattpad no me borre, de no ser el caso seguiré actualizando. Todo tiene un por que así que esperen el próximo capitulo donde se revelarán algunas cosas que aclararan todo o generarán más dudas, lo que pase primero.

En fin eso era todo lo que tenia que decir así que sin nada más que decir me despido hasta la siguiente actualización.