El tiempo paso, ambos crecieron y maduraron, pero el amor seguía fresco y jovial.

Los besos seguían sintiéndose como el primero, la electricidad que recorría sus espinas dorsales cuando se tomaban de las manos seguía presente.

Todo era brillante y hermoso.

Taehyung entro a la universidad, a la facultad de docencia, especializándose en las artes.

Luego le toco a Jungkook, seria un gran astrónomo.

Día tras día le prometía a Taehyung encontrar una nueva galaxia para ponerle de nombre "Dark Coffee" y este solo reía mientras observaba con amor como su chico hablaba con tanta fascinación de galaxias y el café.

Se habían mudado juntos cuando Jungkook estaba cursando el segundo ciclo, sin embargo, el verse fuera de casa y tener citas se había convertido en algo complicado debido a sus horarios y el hecho de estar en diferentes universidades. Pero cada vez que lo hacían lo disfrutaban al máximo.

Años después, cada uno termino su respectiva carrera y trabajaban dictando clases en diferentes universidades.

-Y entonces Felix casi rompe el telescopio...CASI SE ME VA EL ALMA DEL CUERPO- ambos habían salido a una cita y Jungkook le estaba contando el drama que había ocurrido hoy en la clase.

-Te entiendo, hoy Jihyo quiso mezclar los oleos sin aplicar el aceite de linaza...Y CON UN LAPICERO- Taehyung tembló de solo recordarlo, los oleos eran un tema serio para él, eran sagrados.

-Uhhh suena malo, mejor dejemos ese tema de lado y terminemos el café- Jungkook levanto su taza y tomo un gran sorbo de ella para luego soltar un suspiro de satisfacción al sentir el sabor amargo en su boca.

-Aún no puedo creer que te guste el café sin azúcar, sabe horrible- Taehyung bebió su té de naranja 

-Es lo mejor del mundo, es peligroso pero delicioso- ambos estallaron en risas, el mayor no entendió a lo que se refería Jungkook con lo ultimo que dijo, pero no pudo evitar reírse y olvidar el asunto al ver la pose "elegante" que había puesto el menor.

Una vez terminadas sus bebidas y platicar un poco mas salieron del local.

Taehyung tomo la mano de su novio para poder cruzar la pista, su pequeño siempre era muy descuidado y cruzaba como si fuera inmortal.

Una vez estando al otro lado de la calle subieron al auto de Taehyung, tuvo que dejarlo ahí ya que no había lugar de estacionamiento fuera de la cafetería.

-Hay un lugar al que quiero llevarte, Joven Jeon- abrió la puerta e hizo una reverencia extraña, invitándolo a entrar y sentarse en el asiento de copiloto.

-Por mi encantado de acompañarlo, señor Kim- Jungkook puso su mano derecha en su corazón e inclino ligeramente la cabeza.

Ambos atesoraban esos momentos en donde se comportaban extraño o extremadamente educados, era divertido y mantenía vivo su amor.

Taehyung se dirigió a la puerta del piloto,  una vez sentado tomo el volante entre sus manos y arranco.

Jungkook miraba a través de la ventana, era un día soleado y fresco y amaba el olor a vainilla que tenia el auto, lo relajaba. Al parecer su pareja no tenia intenciones de decirle a donde iban ya que ni siquiera lo miraba, así que supuso que seria una sorpresa. 

Sonrió en grande al ver que los pequeños detalles seguían ahí presentes, pero soltó un leve quejido de dolor al sentir una punzada en su cabeza.

-Mi amor, ¿estas bien?- Taehyung poso su mano en el muslo de su pareja ya que no podía apartar los ojos de la carretera.

-Estoy bien, solo es un mareo, sabes que no soy muy fan de los paseos en auto y se me revuelve todo, no te preocupes-

El mayor hizo un sonido de afirmación y continuo manejando, aumentando un poco la velocidad para llegar mas rápido y que el mareo de su novio no se incremente. 

-Oye, ¿Por que estamos yendo a la escuela? Se supone que ya nos libramos de ese lugar hace tiempo y es fin de semana, hoy no hay nadie, solo los encargados de la limpieza- Jungkook hablaba con la voz algo ronca debido a sus "mareos".

-Tengo algo importante que mostrarte, por eso debemos ir- Taehyung doblo una esquina y se estaciono justo en frente de su antigua escuela.

-Bueno, ya llegamos, es hora de despertar y bajar mi diamante- movio ligeramente el hombro de su novio, este tenia el ceño fruncido, supuso que estaba dormido así que se acerco a sus labios para darle un dulce y suave beso.

Jungkook fue despertando poco a poco, siguiendo el movimiento de los labios que chocaban contra los suyos.

-Despierta bello durmiente- dijo Taehyung mientras rosaba su nariz con la de su chico de ojos brillantes.

-Si, creo que estoy algo cansado por el tema del trabajo- ambos rieron y abrieron las puertas del auto para salir.

Jungkook se quedo parado, esperando a que Taehyung cruzara el auto y llegara a su lado para sostenerse de su brazo. Se sentía cansado y su cabeza no dejaba de darle punzadas muy seguidas, tal vez era momento de contratar a algún asistente que lo ayude en las clases para que pudiera descansar sus 8 horas completas, el no descansar le estaba jugando una mala pasada.

-Muy bien mi pequeño diamante, ¿estas listo?- el mencionado se sostuvo del brazo de su novio para sostenerse, disfrazando esta acción con un abrazo.

-Claro que si-

Ambos se dirigieron hacia el pasillo en el que se encontraban los casilleros, habían muchos recuerdos dentro de aquella escuela, pero sin duda, el que tenía ese pasillo era sumamente especial.

-Aqui joven Jeon...fue nuestro primer...golpe- Taehyung hizo una pose de pelea e hizo el ademán de golpear la mejilla de Jungkook con el puño, obviamente en plan de juego.

-Lo recuerdo, me tiraste al suelo- el chico de ojos brillantes se apoyó en los casilleros, las piernas le temblaban y sentía la garganta angosta pero no quería preocupar a su novio, no cuando se veía sumamente feliz y emocionado.

Ambos sonrieron al recordar los tiempos de escuela, las veces que estudiaron juntos a ultimo minuto antes del examen, cuando Taehyung pisaba a Jungkook en el taller de baile...eran muchos recuerdos...

No había mejor lugar ni ocasión como esta para hacerlo, tomo aire, bajo la mirada y fue arrodillándose lentamente.

-Estamos juntos desde hace mucho y, a pesar de eso, los días a tu lado son igual de emocionantes que la primera vez, cada beso, cada caricia, cada cumplido...se siente mágico, me hacen sentir como si estuviera en otra galaxia...por eso...Jeon Jungkook, mi chico de ojos brillantes...¿Me darías el honor de ser tu esposo?- Taehyung levanto la mirada, encontrándose con la de su amor, aunque...esta estaba fija en la nada y algo acuosa, pensó que seria por la emoción del momento.

-¿Amor?- lentamente acerco su mano a la de su pareja, pero este cayo desplomado al suelo antes de que pudiera tomarla.

Desesperado abrazo el cuerpo inerte, acuno su rostro con sus manos y con sus pulgares levanto los parpados de su chico de ojos brillantes....pero....sus ojos ya no brillaban...

-Jungkook, deja de jugar, despierta, ya estuvo buena la broma- comenzó a reír de los nervios al ver que Jungkook no se movía, no despertaba.

Rápidamente tomo su celular y marco a una ambulancia.

No recuerda que paso después, solo que escucho el sonido irritante de la sirena de la ambulancia y luego todo se volvió negro, hasta que vio blanco...un fuerte y pulcro tono blanco y un penetrante olor a medicina y alcohol.

Despertó de golpe, se encontraba en el hospital y con varios dispositivos conectados a su pecho y uno a su dedo para medir su pulso.

Se desespero, se arranco la vía que tenia en el brazo, importándole poco que este sangrara y fue corriendo para tratar de encontrar a alguien que le diga que esta pasando.

Corrió, dejando un rastro de gotas de sangre en el camino, hasta que llego a la recepción.

-Señorita...ayúdeme por favor...- Taehyung se estaba ahogando por haber corrido de forma alterada.

-Joven debe volver a su habitación, enviare a un doctor a que cure su herida- la recepcionista se levanto y tomo al muchacho del brazo.

-No...usted no lo entiende...debo encontrarlo...¿DONDE ESTA JEON JUNGKOOK?- comenzó a exaltarse y respirar de forma pesada.

-¿Jeon Jungkook?- la señorita se sentó y tecleo rápidamente el nombre antes mencionado -El llego demasiado tarde, aquí dice que le dio un paro cardiaco por presión alta y una obstrucción en sus arterias debido al exceso de cafeína-

Y entonces..Taehyung soltó el grito mas frenético, roto y desesperado de toda su vida.

Su diamante de había ido...su principe...su chico de ojos brillantes...

Una de las cosas que mas amaba...termino con su vida...

AgustXVQ

Weno, aquí esta la muerte de Jungkook.

Besitos en la cola, nya.