El pelirrojo corria y corria por la colina, sus piernas estaban agotadas y le faltaba la respiración pero pensar que sus hijos corren peligro le daba la fuerza suficiente como para seguir, vio ya su casa y escucho tres balasos, abrio los ojos aterrados.

"No, no otravez, no..."

Recuerdos cuando tuvo su primer hijo se hicieron presente, entro silenciosamente y a paso veloz fue a la cocina y saco un arma. De escalon en escalon hasta llegar al segundo piso, cargo la pistola y tomo la perilla de la puerta de las habitaciones de sus hijos y la abrio.

Sus ojos no podian creer lo que veian.  A sus menores hijos siendo golpeados.

Furia era lo que sentia en ese momento, apreto la pistola con fuerza y con una punteria precisa disparo a dos de los tres señores, a los que tenian golpeando a sus hijos.

-¡¿P-Pero que...?!-consternado miraba a sus compañeros ya muertos, levanto la vista encontrandose con la mirada carmesi-¡Oye niño!

Esa fue la gota que derramo el vaso.

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-Heine...

Licht miraba sorprendido y comfundido como llevaba a su costados a dos chicos de seguramente la misma edad que Licht golpeados y con malestas en mano.

-¡¿Pero que les paso?!-pregunto Viktor preocupado acercandoseles sin importar que su hijo menor lo viera-¡¿Estan bien?! ¡¿Porque estan golpeados?!

-Nada, nada, es que mamá se molesto por que no hicimos los quehaceres y nos dio con el latigo-respondio Shira rascandose la cabeza recibiendo un peñiscon de parte de su madre.

A Licht le recorrio un escalofrio, si la patado de su profesor le habia dolido ¿Como seran sus golpes de verdad?

-Lo que mi hermana quiere decir, padre-tomo la palabra Daniel acercandose a el, sobandose la cabeza donde tenia un gran chinchon-Es que nos atacaron unos tres... bandidos, supongo.

-¡¿P-Pero como?!-pregunto Viktor preocupandose mas.

-Pues simple, entraron por la ventana con un enorme siguilo y me golpearon la cabeza-dijo Shira.

-Pero lo raro es que no se robaron nada, solo nos golpearon-dijo Daniel-eso no hace un bandido...

-Viktor ¿Ya empezo?-pregunto Heine viendo al rubio mayor, el ojiazul arrugo el entrecejo molesto.

-¿Empezar?-preguntaron los adolescentes, para luego mirarse.

-Padre...-llamo Licht con un gesto sombrio.

-¿Si, Licht?

-¿Por que ellos te llamaron "papá"?

-Te lo explicare luego, ahora tengo que irme-dijo viendo los caballos que venian para llevarselo.

-¿Y porque estas vestido de camarero?-pregunto Daniel mirando su ropa.

-¿Te jubilastes padre?-pregunto Shira con una sonrisa.

-No, bueno, estuve aaui para arreglar un pequeño malentendido-dijo mirando a Licht que se sonrojo levemente ante eso-Heine, los dejo en tus manos. Seguramente traeran un carruaje por ustedes, lleva a Daniel y Shira con Licht y que se queden en el castillo.

Los mellizos se miraron asustados ¿Vivir en el castillo? No querian causar problemas a su padre, ya le causaron mucho por nacer ambos, eso era lo que pensaban.

Al irse con los guardias miro a los tres adolescentes.

-Creo que hay que pasar hasta que venga el carruaje por los cuatro.

-¿Ellos vendran con nosotros?-pregunto Licht.

-Si principe Licht.

-Esperemos no incomodarle, principe-dijo Daniel.

-¿Porque me tratan con tanta formalidad? Somos hermanos ¿No?

Los tres wittgenstein se miraron sorprendidos.

No crelleron que uno de ellos lo aceptarian tan rapido.