[🏯]

— Esta es la razón por la que las personas huyen en cuanto escuchan mi nombre —comenté burlonamente mientras caminaba hacia la maldita escoria que había estado persiguiendo por horas.

— Lo esperaré pacientemente en el infierno, después de todo ¿En que nos diferenciamos usted y yo? —parloteo por quinta vez desde que lo capture.

— No se confunda, después de todo tu estas atado y yo estoy aquí —indiqué ya algo irritado de su actitud.

Mire rápidamente mi reloj, justo a tiempo, ya es hora de deshacerme de esta molestia que había estado aguantado desde hace casi una hora. Sabía que una vez que caen en mi poder ya es imposible que puedan escapar

— Fue un placer, charlar contigo, pero ahora ya es hora de despedirnos —finalicé colocando mis dedos sobre su frente, liberando sus ataduras que lo mantenían en este mundo.

— Te crees muy feroz, pero solo eres un maldito bastardo...—dijo antes de desaparecer en una niebla oscura y densa.

Mi trabajo había terminado por el día de hoy, todos los días a la medianoche vago por las frías calles de Seúl en busca de este tipo de escorias impertinentes. Que solo causan caos y pánico, lo que interfiere con la tranquilidad de la humanidad.

— ¡Enhorabuena su Alteza! ha cerrado un nuevo acceso, este es un nuevo logro para usted—exclamó estruendosamente Jihyun.

— Jihyun ¿sabes que hora es? —pregunté mirándola— ya es muy tarde y solo quiero ir a dormir.

— Pero su Alteza, prometió que si lograba capturar algo esta noche tendríamos una noche de películas —afirmó— y usted siempre nos dice que tenemos que cumplir una promesa.

Desde mi reencarnación, aparte de otorgarme una nueva vida me asignaron dos "ayudantes" con la orden de custodiarme para que cumpla con el decreto ya establecido.

— ¿Y bien seguiremos perdiendo el tiempo o veremos algo de una vez por todas? —preguntó Sunghoon sentándose en medio de nosotros dos.

— Propongo que veamos un maratón de películas de acción —anunció Jihyun parándose frente a mi —¿Qué opina su Alteza?

— No tengo otra alternativa, así que si esta bien —dije ante las miradas atentas de los presentes.

Oficialmente había tomado mi séptima taza de café del día de hoy.

— ¡Su Alteza! aunque ya no sea humano, no es saludable que siga tomando más café —Exclamó Jihyun arrebatándome la taza de las manos.

— ¿Y de quien es la culpa, que yo este en este estado? —Pregunte sarcásticamente.

— ¿Y porque no va a descansar a su habitación? —indago curiosamente— ha estado sentado aquí tomando tazas de café sin parar ¿Por qué no simplemente va a dormir?

Jihyun he estado teniendo pesadillas vividas de mi vida pasada, así que ahora temo dormir y que estas vuelvan a suceder...

— Tengo mucho trabajo pendiente y no podré descansar si no lo terminó —respondí acomodándome en mi lugar.

— Entonces lo ayudaré, ha estado trabajando muy duro y necesita energías para esta noche —dijo Jihyun animadamente.

Estuvimos gran parte de la tarde revisando y organizando el papeleo que había estado aplazando desde hace tiempo, el trabajo fue aún mas rápido cuando llegó Sunghoon y se unió a nosotros, habíamos estado documentando las victorias de las cacerías de forma tradicional, pero tiempo después Jihyun me convención de guardarlas digitalmente, ahora teníamos que subir esas viejas notas.

— hyung, ¿aún estas buscando a ese joven soldado? —preguntó Sunghoon sacándome de mis pensamientos.

— Le hice una promesa y tengo que encontrarlo para poder cumplirla —dije seriamente— ¿Por qué lo preguntas?

—Logré contactarme con mi amigo en la oficina de registro —respondió— en tres días me entregara su hoja de vida y podrá encontrarlo como tanto desea.

— ¡Excelentes noticias! —exclamé bastante emocionado.

— Su alteza, ¿por qué no va a descansar? hoy parece que va a ser una noche difícil —anunció Jihyun guiándome a mi habitación.

— Jihyun se donde queda mi habitación, no es necesario que hagas esto —pedí mientras era prácticamente empujado por las pequeñas manos de Jihyun.

Me recosté en la cama y me acomodé esperando que el sueño y cansancio hiciera su trabajo, para permitirme mi ansiado descanso.

— ¡Muerte al rey! ¡Muerte al rey! ¡Muerte al rey! ¡Muerte al rey! ¡Muerte al rey! ¡Muerte al rey! —exclamaron con fuerte voz. 

— Yo Han Sung, que privilegiado debo haber sido para que su Alteza quiera reencontrarse conmigo en la próxima vida —murmuró con su última fuerza.

Me levanté sudoroso y con una punzada en mi pecho, la habitación estaba bastante oscura y el silencio era sepulcral. Han Sung ¿Cómo te esta yendo en esta vida? 

— Hyung, ¿Se encuentra bien? —preguntó Sunghoon entrando en la habitación

— Si, solo fue un mal sueño —respondí tranquilamente 

— Recibimos un informe de que hubo un accidente en la calle de Insadong —reportó Jihyun entrando de repente —debido a que se detecto una fuerte energía resentida.

— ¿¡Tan temprano!? creí que solo atacaban a la medianoche —exclamó algo confundido.

— Los accidentes fatales y otros actos inmorales son una oportunidad perfecta para atacar —expliqué brevemente — sin embargo es mucho mas fácil deshacerse de ellos a la medianoche, cuando los tres reinos están en sintonía.

— Claro, aunque también es mas fácil que ellos puedan escapar —mencionó Jihyun 

— Parece que en verdad será una larga noche —dije levantándome de la cama.

Ya habíamos llegado, esta calle era muy concurrida por sus bellas galerías y centros turísticos, el aire estaba lleno de energía, felicidad parecía un buen lugar para sentirse acompañado. Sin embargo a medida que íbamos llegando a la zona del accidente, el aire se sintió mas asfixiante, la agonía y el pánico abundaban el lugar, esta clase de sentimientos se me hacían muy conocidos.  Las sirenas de ambulancia, policías llegaron a mis oídos y me sentí repentinamente ansioso.

— Este sonido es bastante molesto ¿no cree? —preguntó Jihyun susurrando a mi lado.

— Lo se, pero necesitamos observar si aparece alguien extraño —respondí tranquilamente— recuerden que no buscamos  a una persona, buscamos al responsable de esta aura negativa.

Mientras esperábamos a que apareciera alguien que se viera sospechoso, una mujer salió del auto, pasando delante de la vista policial, estaba bastante desaliñada, con la ropa cubierta de sangre, parecía que trataba de llamar la atención de la gente, pero nadie parecía verla.

— Hyung, ¿tu también puedes verla, cierto? —preguntó Sunghoon de repente.

— Si y parece que somos los únicos —respondí mirando a nuestro alrededor.

La mujer parecía buscar algo desesperadamente, cuando los forenses sacaron el cuerpo de las victimas, una de ellas se veía exactamente igual a la mujer que ha estado rondando hace algunos minutos, cuando lo que parecía que era el cuerpo de un niño, la mujer se abalanzó desesperadamente, pero nadie le hizo caso.

— Su Alteza, ¿es seguro que la sigamos? —indagó Jihyun sujetándose a mi brazo.

— Jihyun hemos capturado demonios desde tiempo inmemorables ¿en serio le temes a un espíritu indefenso? —pregunté burlonamente

— ¡No se burlé esto es algo serio! —exclamó algo molesta.

Estuvimos rondando por algunas calles, pero parecía que habíamos perdido el rastro, me adelanté porque creí ver una sombra, pero cuando voltee Sunghoon y Jihyun habían desaparecido.

— ¿Su alteza, es usted? —preguntó una voz algo similar a mis espaldas.

— ¿Han Sung? —interrogué acercándome hacia el.

Todo parecía transcurrir de forma lenta, al fin lo había encontrado...después de tantos años.

.

.

.

Z I D I A N