Naruto ni Hajime no Ippo no me pertenecen son de sus respectivos dueños así como los animes que salgan aquí.

Sin mas que decir se despide su amigo y que comience este jodido capitulo.

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Kamogawa estaba viendo por la ventana, tenía sus ojos cerrados mientras tarareaba.

Sus puños estaban fríos, el pensó en hacer sacar a Naruto al menos un gramo de valentía, pero ahora no sabía qué hacer.

Con Takamura fue diferente, el vio en los golpes de Takamura golpes de púgil de nivel mundial, por ello le prometió el título mundial.

Pero en Naruto.

En Naruto no vio nada de eso.

En Naruto vio los de un campeón mundial.

La forma en que lanzó esos jabs apostaba que ni siquiera Takamura los hubiera visto estando dentro.

Eran los jabs de de un púgil de nivel mundial.

Un jab con el menor movimiento, Kamogawa supo que Yuno sólo vio el guante hacerse más grande y luego dolor.

Flush.

La puerta se abrió mientras de dejaba ver a dos hombres con el mismo uniforme que Kamowaga.

-Yagi, Shinoda, ¿Como esta Yuno?-Pregunto Kamowaga viendo a sus segundos quienes negaron.

-El daño está echo, su recuperación no debería tardar pero....-Hablo Yagi antes de ser interrumpido por Kamowaga.

-Pero le ha dejado una marca psicológica-Hablo Genji viendo que Yagi asintió.

No había peor herida que una psicológica, para un boxeador ser herido físicamente era común considerando su oficio, pero podía llegar a ser mortal para su carrera ser herido psicologicamente.

-¿Que tan mal está?-Pregunto Genji viendo a ellos quienes se vieron.

-Mal diría yo, tembló solo cuando vio que apreté mi puño-Hablo Shinoda ya que indirectamente lo hizo a propósito.

Kamogawa Genji suspiro ante aquello, Yuno era una promesa de Peso Gallo, quiso ver que tenía el niño que trajo Kimura pero había perdido a un púgil de competitividad japonesa.

Pero había ganado un púgil de clase mundial.

"¡Te lo dije anciano...."

Kimura hablo entrando al estudio pero se congeló al ver los ojos de Kamowaga.

-Kimura, ¿Donde encontraste al niño?-Preguntó Kamowaga viendo a Kimura quién se puso recto.

Kimura sabía que no era el momento para vacilar, dio un paso atrás mientras se cruzaba de brazos.

-Lo estaban golpeando unos matones-Habló Kimura mientras que Kamowaga le veía.

-Golpearlo a él, no me hagas reír-Hablo Kamowaga viendo con enojo a Kimura por tal mentira descarada.

-¡Oye es cierto! ¡Porque mentiría con algo así!-Habló Kimura viendo a su entrenador.

Kamowaga entonces lo pensó, Kimura no daba excusas tan patéticas, se lo creía de Aoki o de Takamura pero de Kimura no, era el más inteligente del trío de estúpidos.

-Así que decidí intervenir, no hice nada grave, solo les quite los botones de sus camisas para que se fueran, decidí traerlo aquí para curar sus rasguños-Hablo Kimura omitiendo el echo que lanzó un jab a Naruto y este lo esquivo, no quería morir por una paliza indiscriminada del viejo.

-Ya veo-Para Kamowaga tal parecía que la estupidez de estos tres traía consigo un poco de suerte.

-Pero ahora hablemos de negocios viejo, Naruto gano....-Hablo Kimura poniendo una sonrisa diabólica.

Una vena se inflo en la mejilla del viejo hombre, no hacia falta recordarle la apuesta.

PAM.

PAM.

PAM.

PAM.

Kimura grito de dolor cuando un bastón impacto su cuerpo en reiteradas ocasiones.

-¡Tienes muchos cojones bastardo! ¡Crees que no tengo los huevos para hacerme cargo de mis apuestas!-Grito enfurecido Kamogawa viendo al niñato.

Shinoda y Yagi suspiraron al ver al viejo enfurecido por haber perdido la apuesta, ahora ellos tenían que aguantarlo toda la semana así.

Tiempo después.

Naruto estaba sentado esperando pacientemente a Kimura sentado en la banca de espera del Gimnasio.

Entonces Naruto vio que aquel anciano se podía enfrente suyo viéndole con dureza.

-Asi que eres el mocoso que noqueo a nuestro novato, como te llamas, se que es Naruto, pero nombre completo-Hablo Kamowaga viendo al muchacho.

-Según lo que decía la carta, es Naruto Uzumaki Namikaze-Hablo Naruto viendo al anciano quien asintió.

-Tienes 10 000 yens que te sobren al mes-Preguntó Kamowaga viendo al niño quien negó.

-Entonces perfecto, trabajarás aquí de medio tiempo, se abre a las 8 am y se cierra a las 10 pm, puedes venir a las 3 y entrenar dos horas más, tienes estudios, tus notas no deberán de bajar de 8.9 si lo hacen adiós al boxeo, sábados y domingos estas ocupado todo el año, entrenaras de 8 a 4 de la tarde, créeme que no querrás salir a ningún lado despues...-Hablo Kamowaga entre cerrando los ojos viendo al niño.

Los ojos muertos de Naruto vieron al hombre, todavía lo hallaba la respuesta que el buscaba, todavía no encontraba a alguien con aquel brillo.

Naruto abrió los ojos al ver que tenía el bastón del viejo en su hombro, apenas pudo verlo moverse.

-Tienes buenos reflejos y un buen jab, pero te falta mucho para tu verdadero nivel, si hubiera querido te hubiera golpeado y eso que ahora soy un anciano, entrenarás tres veces a la semana por ahora a lo que se refiere en técnicas de boxeo, los otros días será solo acondicionamiento muscular, debemos aumentar tu masa si queremos comenzar bien, ¡TAKAMURA SE QUE ESTÁS ESCONDIDO EN LA ESQUINA! ¡TRAE TU TRASERO PEREZOSO AQUÍ!-Grito Kamowaga sin ver para atrás.

-¡A quién le dices perezoso anciano senil!-Grito Takamura viendo al anciano saliendo de una esquina.

Takamura supo que el anciano estaba serio en estos momentos así que decidió no provocarle.

-Llevará tu dieta cuando no estés en control de peso, o bueno la dieta que te di pero como todo lo que cae en ti nunca respetas-Hablo Kamowaga viendo con una vena en su cuello al hombre que se sacaba un moco.

-Creo que la tengo, tengo que buscarla, esta junto a las revistas porno-Hablo Takamura limpiandose el moco en su ropa deportiva.

-Lo que sea, búscalo y dáselo al niño, también, ¿Donde vives?-Pregunto Kamowaga viendo que el niño se quedó en silencio.

-En el callejón Ami-Hablo Naruto con tranquilidad.

Ambos hombres se quedaron en silencio ante aquello mientras que Kamowaga suspiraba.

-Asi que eres de la calle, ¿Como haces para tener uniformes y tus útiles?-Habló Kamowaga viendo al niño y su uniforme.

-A la par hay un prostíbulo, siempre hablan de bigotes, pensé que era un gato pero al parecer es un niño, supongo que ellas te ayudan con eso-Hablo Takamura y Naruto asintió ante aquello.

Kamowaga observó a Takamura apretar sus puños hasta que sangre bajo de ellos.

Takamura por más egolatra que fuera nunca había soportado las injusticias, esto seguramente era un sentimiento amargo.

-Ya veo, buscaré algo para ti-Hablo Kamowaga viendo al niño quien asintió.

-No es necesario, mi departamento es para una familia por lo que tiene dos habitaciones, hay que limpiar un poco pero servirá bien-Habló Takamura mientras que Kamowaga asintió.

-Muy bien entonces con todo eso dicho, empiezas mañana a trabajar aquí-Hablo Kamowaga viendo que el niño asintió.

Naruto observó al hombre retirarse mientras que se quedaba con Takamura.

Takamura en cambio puso una mueca diabólica al ver que ese niño iba a ser su sirviente, por fin podría invitar nenas a su casa.

Su casa era una pocilga, pero haría este pobre esclavo trabajar para que fuera un lugar mejor, como pago tendría la deidad Mamoru Takamura como compañero y tal vez le daría un par de consejos.

-Muy bien niño ve a alistar tus cosas, desde hoy vives conmigo!-Grito Takumura sonriendo mientras se iba silbando.

Naruto vio al hombre retirarse mientras que veía sus puños, todavía tenía el sentimiento de los guantes de box en sus manos.

"¡Oye niño!"

Kimura se acerco con varios parches en su rostro, observó que Naruto bajaba sus manos viéndole.

-Eh sido aceptado, como no tengo dinero me han dado trabajo, además Takamura se ha propuesto para darme donde vivir-Hablo Naruto mientras que el rostro de Kimura se puso morado.

Este niño no sabía en lo que se estaba metiendo con Takamura, seguramente, el hombre seguramente lo quería como una criada, lo conocía perfectamente.

Naruto sintió que Kimura ponía su mano sobre su hombro viéndole con pena.

-Si te pone a hacer algo envíalo al carajo-Hablo Kimura viendo al niño quien asintió confundido.

Tiempo después.

Naruto llevaba un bolso viejo y gastado, estaba al frente de una puerta abierta.

Basura.

Basura por todos lados.

También apestaba a comida podrida.

También juro ver una rata llevarse un hueso por una esquina.

-¡Muy bien! ¡Estamos en casa!-Habló Takamura mientras que se quitaba los zapatos.

Naruto dejó su mochila a un lado mientras que caminaba dentro del departamento.

Era pequeño pero habían tres entradas, Naruto supuso que dos eran de las habitaciones y una era para el baño.

-Vamos, vamos, siéntate a tomarte algo conmigo-Habló Takamura sacando una lata de jugo de tomate.

El alcohol estaba prohibido o más bien regulado, solo podía tomar dos veces a la quincena.

El motivo de esto era que el alcohol tenía un alto contenido calorico sin tener los nutrientes de una comida, el almidón hinchaba su cuerpo sin aumentar la masa muscular y producía problemas a la hora de conectar puños, pies y cerebros.

Por ello Takamura tenía tan regulado sus salidas a algún lado, debido a su estricto control de peso una sola gota de alcohol en un mal momento podría  significar que perdió una pelea debido a que no pasó el pesaje.

Takamura extendió un jugo en lata de pera a Naruto quien lo acepto, ambos se sentaron en la mesa.

-Dime niño que te llevo a estar en la calle-Habló Takamura viendo a Naruto quien tomó un trago.

-Me dejaron en un orfanato apena nací debido a que mi madre murió cuando me dio a luz y mi padre chocó llendo al hospital, el reporte dice que un conductor borracho se estrelló de frente cuando invadió el carril de mi padre, también tengo una carta pero es cuando tenga 18 años-Hablo Naruto ya que todavía tenía la carta sin abrir.

Takamura asintió ante aquello mientras veía al niño con nuevos ojos, sin duda no sabía cómo este niño no había intentando suicidarse.

-Me adoptaron, pero la mujer se volvió un golpeadora, me golpeaba todos los días, incluso cuando estába en silencio me golpeaba, lo que derramó todo fue cuando ella me quebró mi brazo, ya no quería vivir así, hizo cosas muy feas, así agarre una botella....-Hablo Naruto antes de ser interrumpido.

-¡Espera! Creo que leí sobre eso, un niño asesino a una mujer cuando le dio con una botella de Jack Daniel's en la nuca-Habló Takamura recordando aquella noticia.

Esa noticia recorrió Japón por completo, la identidad del niño fue protegida pero se decía que el hermano del hombre que era policía filtro su identidad, Takamura aunque impactante prefirió centrar su atención en otras cosas además tenía 17 años, preferido centrar su atención máxima en el Boxeo.

-Si, me llevaron de vuelta al orfanato debido a que, los negocios del hombre no resultaron y se suicidó cuando su mujer lo engaño con otro hombre-Hablo Naruto mientras que Takamura se quedó pasmado.

Takamura vio los ojos muertos de Naruto, ahora entendió porque aquella mirada, la vida no le había dado una mala mano a este niño, sino que se ensaño con él.

-¡Basta de hablar de temas así! ¡Hace que yo el gran Mamoru Takamura pierda su brillo!-Grito enojado Takamura para cambiar de tema.

Takamura y Naruto conversaron unos minutos más o más bien Naruto escucho a Takamura regodarse de comenzar su carrera igual que el, noqueando a su primer sparring.

Takamura recordaba muy bien aquello, dijo que era un sujeto de 22 años con 4 peleas y todas las había ganado, según el hombre fue una pelea dura pero de un gancho le había echo comer la lona.

-Te interesa no es así, puedo verlo en tu mirada muerta, sientes el vibrar de los guantes incluso en este momento, el solo pensar en el cuadrilátero provoca un cosquilleo en tus pies...-Hablo Takamura viendo que Naruto apretó sus puños ligeramente.

Naruto entonces vio el hombre sonreir tranquilo mientras terminaba su jugo de tomate.

-Lo sentí por primera vez cuando golpee el saco, el viejo, Kimura incluso el idiota de Aoiki pueden ser molestos, pero no dudes que te llevarán a la cima, gente como nosotros solo en un Ring encontramos felicidad, no olvides tus inicios ya que sino perderás tu futuro-Habló Takamura viendo su jugo de tomate con una sonrisa tranquila.

Naruto entonces abrió los ojos al ver que Takamura también tenía aquel brillo, el mismo que Kimura.

Voluntad.

El quería saber que se sentía pelear con alguien así, alguien que tuviera una voluntad fuerte, solo lo había visto en Kimura.

Mañana siguiente.

Ya amanecía, Takamura roncaba cuál camion, tenía una sonrisa mientras murmuraba algo sobre una mujer y un tubo.

"¡Hum!"

Los ojos de Takamura se abrieron de golpe cuando una fragancia invadió sus fosas nasales.

-*Que es esto, donde está el olor a basura, donde está el olor a comida podrida*-Se preguntó Takamura levantándose de su cama mientras olía fuertemente.

No había nada de eso, se preguntaba si estaba en una clase de sueño.

Entonces sintió como si un peso pesado le hubiera dado en la nariz, una fragancia lleno su nariz.

Takamura observó a sus lados con shock eh impresión.

No había nada.

Donde estaban sus bolsas de basura que decía que las sacaría mañana, donde estaban sus revistas porno pegajosas de tanto uso.

Solo había oscuridad y vacío junto a un olor agradable a pinos.

Takamura se lavanto mientras caminaba a la salida de su habitación.

Afuera.

-¡Pero que es esto! ¡Que demonios paso aquí!-Grito Takamura viendo para el frente.

Naruto usaba un uniforme escolar de su escuela, pero lo que más destacaba era que estaba cocinando con tranquilidad.

El antes chiquero estaba completamente limpio, el olor había desaparecido por completo las revistas porno a la par de un televisor completamente ordenadas.

Naruto observó de reojo al hombre quien estaba en el cuarto viéndole con ojos abiertos.

-Las mujeres de Amori Dancing Club me enseñaron a limpiar y ordenar, yo limpiaba las habitaciones por las noches y ellas me daban comida y ropa-Habló Naruto mientras que Takamura asintió tontamente.

Takamura vio que la comida que siempre traía su hermana se convertía en un dulce manjar frente suyo.

Consistía en un plato de yogurt natural debido a su color, avena, granola con pasas junto a un vaso de jugo de naranja, a la par había unas tostadas de pan integral con aguacate y tortillas de champiñones.

Takamura babeo al ver aquello mientras corría y se sentaba en el suelo agarrando los palillos.

-¡Gracias por la comida!-Grito Takamura mientras comenzaba a comer con rapidez.

-¡Esta buenísimo!-Grito Takamura viendo al niño.

-También ellas me enseñaron a cocinar, me dijeron que las mujeres se conquistaban por el estómago más que el físico-Habló Naruto recordando las lecciones que le dieron cuando estaban aburridas.

También Naruto sirvio de chef cuando Grey faltaba a trabajar, así que de la cocina no se preocupaban y ponían a Naruto.

Naruto se estremeció al recordar sus enseñanzas más oscuras, aquellas sonrisas raras cuando les daba un masaje o los sonidos extraños que hacían.

-¡Diablos que si! ¡Vas a ser mi compañero de toda la vida!-Grito Takamura ya que su escla...decía su compañero era multifuncional.

No podía evitar imaginarse el con varias nenas una a cada lado mientras Naruto en traje de mayordomo traía comida sirviendoles.

Takamura siguió devorando su desayuno sin detenerse y bebiendo el jugo de naranja.

Naruto observó el reloj que marcaba las 6.13 am, tenía una hora antes de partir, tiempo suficiente para comer tranquilo.

También encontró dentro de una revista de 1991 un par de hojas todas viejas seguramente de muchos más años que las revistas, ahí tenía una rutina de comidas junto a un entrenamiento.

Ya había echo el entrenamiento de hoy, sentía que el solo echo de levantar la cuchara con la tortilla de champiñones era un esfuerzo demasiado grande.

Hoy era jueves por lo que hizo lo que él jueves decía, 150 abdominales, 200 sentadillas, 130 lagartijas y correr 10 kilómetros, todos en rondas de 15 o 20, el correr lo dividió en 2 de 5 kilómetros.

-Muy bien el Gran Mamoru se siente como si hubiera nacido de nuevo-Grito Takamura al terminar su comida.

8:57 am.

PAM.

PAM.

PAM.

PAM.

PAM.

PAM.

Kamowaga veía a Takamura entrenar mientras que Shinoda y Yagi sostenían el saco mientes ponían muecas de cansancio y dolor al recibir los golpes.

Todos estaban impresionados al ver la energía de Takamura, nunca lo habían visto así desde hace mucho tiempo.

PAM.

Yagi y Shinoda cayeron para atrás cuando recibieron el brutal izquierdazo de Takamura.

-¡QUE PASA, APENAS VENGO INICIANDO Y YA CAYERON, EL GRAN TAKAMURA NECESITA MÁS PARA CANSARSE!-Grito Takamura viendo a Yagi y Shinoda atrás del saco.

Takamura sentía que todavía ni siquiera había alcanzado el límite, todavía tenía mucho más que dar.

-Es suficiente Takamura-Grito Kamowaga mientras veía al muchacho.

-¡Que pasa anciano todavía puedo seguir!-Habló Takamura mientras respiraba fuertemente.

-Lo se pero ellos no, dime que ha pasado, espero que no estés consumiendo esteroides o te daré una tunda que te sacará toda esa porquería de tu sistema-Hablo Kamowaga viendo al muchacho frente suyo.

-Quien crees que soy, no necesito de ellos para ser el mejor, simplemente hoy eh desayunado como los campeones-Hablo Takamura poniendose en una pose heroica, su escla....decia compañero de cuarto supo que hacer para desayunar.

-¿Que has desayunado?-Pregunto Kamowaga con intriga.

-Yogurt natural, avena, granola con pasas y jugo de naranja, ah, también habían tortillas de champiñones-Habló Takamura viendo al anciano.

-Ma-Maldicion y te pones así con solo eso, n-no quiero saber co-como te pondrías con esteroides-Jadeo Shinoda mientras se sentaba temblando debido al cansancio de recibir golpes indirectos.

PAM.

PAM.

PAM.

PAM.

-¡MALDITO VAGABUNDO PORQUE NO HAS COMIDO ENTONCES ESO DESDE EL INICIO, SEGURAMENTE YA IRÍAS POR EL TÍTULO DE PESO PESADO! ¡MOCOSO ESTÚPIDO!-Grito Kamowaga impartiendo su justicia sobre Takamura al ver que  todo lo que bastaba para hacerle resucitar era su régimen alimenticio.

Buenas comidas se necesitaban para avanzar en los deportes, no podías pensar que un tazón de ramen te daría los mismos nutrientes que un almuerzo balanceado.

Takamura insulto al anciano que ahora lo castigaba por no seguir el régimen de alimentación.

Shinoda y Yagi se vieron y luego suspiraron, ahora tendrían que aguantar los golpes de tal bestia, genial simplemente genial.

Todos sudaron al ver la escena frente a ellos, pero rápidamente volvieron a seguir su rutina de entrenamiento.

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Fin del capítulo.

Sin mas que decir se despide su amigo y pana del alma Escritor-san.