Pov's ___

Me encuentro fuera de la casa de los esqueletos, esperando a por Sans ya que éste me invitó a comer en el bar de Grillby. Con solo pensar en su nombre me sonrojo demasiado, ese monstruo de llamas vivas me atrae mucho, y no lo puedo negar. Ojalá tuviera el valor de decirle que me gusta mucho, pero él es muy serio y no muy hablador.

Suspiro imaginándome aquel camarero y yo cogidos de la mano mientras caminábamos al son de la Luna. Un momento, me podría quemar, ¿verdad? No estoy segura del todo, pero ser abrazada por él mientras te congelas de frío sería agradable.

—¡Ey niña! —Me despierto de aquel sueño al escuchar la voz de Sans, mientras sale de ahí con una sonrisa de oreja a oreja—. ¿Estás bien? —me pregunta mientras se acerca—. Te noto algo sonrojada. —Ríe divertido al ver mi expresión.

—¡Cállate saco de huesos! —le grito casi cerca del oído mientras me sonrojo aún más—. ¡Anda, vamos antes de que mi trasero se congele del todo! 

—Eso suena sanstástico.

—¡Sans! —Maldito esqueleto, como le gusta hacerme reír cuando me enojo.

El bar de Grillby no está muy lejos de la casa de los esqueletos, pero, como siempre, Sans toma atajos para llegar bien al sitios. Y entramos y está el ambiente bastante tranquilo. Puedo oler a comida y alguna que otra bebida y, ahí está, el camarero que me robó el corazón. Noto como mi órgano más vital bombea a cada paso que doy porque nos estamos acercando a la barra. ¡Vamos ___! ¡Mantente determinada!

—¡Ey Grillby! —le llama Sans y yo le saludo a lo que él me responde con una sonrisa. ¡Amo esa sonrisa!—. ¿Qué quieres pedir?

—Una hamburguesa, por favor.

—Dos hamburguesas y una buena botella de kétchup.

—Muy bien, enseguida os lo traigo. —¿Por qué eres tan poco hablador, si tienes una voz muy varonil y que dan ganas de escucharte todos los días?

No sé cuanto tiempo nos hemos metido aquí, pero creo que bastante porque no paro de reírme de los chistes del esqueleto más bajo. Pero mi mirada se centra más en Grillby. Debe de haber una forma de llamar su atención, pero no sé como. Como sería ser besada por ese sujeto llameante, a la hora de ser acariciada, a la hora del sexo... ¡___ pervertida! Ver mucho anime con Alphys no es saludable.

—Ops... —Mi mirada se clava en la de Sans, que rebusca algo en su chaqueta y los pantalones—. Niña, se me olvidó la cartera. —¡¿Cómo?!

—¿Y ahora qué ,genio? —le gruño algo furiosa, se supone que el iba a pagar la cuenta y me está diciendo que no trajo la cartera.

—Creo que te toca pagar a ti.

—¡Si yo no traje! —No me dio tiempo de terminar la frase, ya que el esqueleto huye tomando uno de sus famosos atajos—. ¡Maldito saco de huesos!

Mi grito llama la atención de todos los presentes y yo no miro a ninguno, pero noto la mirada de alguien que me mira con expectación. Sí, mi amado Grillby que tiene una ceja levantada y mira el asiento donde antes ocupaba Sans.

—¿Dónde está Sans?

—Huyó el muy cobarde —lo dije con tal enojo y con los brazos cruzados.

—Es la primera vez que lo hace. —¿Y por qué ahora en este preciso momento?—. Bueno, tendrás que pagar la cuenta.

—Grillby. —Tierra trágame—. Yo no traje la cartera.

—Pues tenemos un problema muy serio. —Su voz, por primera vez, es algo más serio.

—Déjame ir a casa de Toriel para pagarte y...

—No puedes irte del bar —me argumenta Grillby, limpiando uno de los vasos—. Si no pagas, no puedes irte.

—Puedo hacer algo para pagar la deuda. —Me levanto un poco del asiento inclinándome a la barra y él me mira con el ceño fruncido.

—¿Ah sí?

—Sí. —Asiento con fuerza mirando cualquier cosa—. Puedo lavar los platos o el piso cuando se vaya la clientela. —Junto las manos a modo de súplica y le miro con ojitos de cordero—. Por favor, Grillby.

El monstruo de las llamas apoyó/a las manos en la barra sin dejar de mirarme, dime por favor que está pensando. No me gustaría irme sin haberlo ayudado antes, porque el pobre hombre trabaja solo. No sé si son cosas mías o que, pero la llama de su cabeza se aviva un poco más que antes y me fijo que ha formado una sonrisa. ¡Oh Dios, esto es demasiado para mi cuerpo!

—Conozco la forma en que puedes pagarme —grito internamente al cielo por esta gran noticia. Grillby se aleja de la barra para luego dirigirse a la puerta, donde supuestamente nadie puede entrar, salvo el propietario.

Me hizo una seña con el dedo pidiéndome a que le siguiera, tengo mucha curiosidad que hay detrás de esa puerta, así que le sigo con mucha determinación. Me abre la puerta, dándome paso a que entrara primero y lo hice asintiendo con la cabeza, y él entra después de mí, cerrando la puerta ¿con llave? Alzo la ceja un tanto confusa, ¿a qué vino eso?

Grillby aún mantiene esa sonrisa que me dio hace unos segundos, se dirige a un gran sillón que hay ahí. Ahora que caigo, estamos en una especie de habitación con sillones, sillas, una chimenea y una mesa. ¿Aquí juegan al póker? Lo pienso mentalmente porque veo en un mueble unas cartas y fichas de ese juego.

—Bien. —Le miro un tanto nerviosa ya que estamos los dos solos en esa habitación—. ¿Qué tengo que hacer?

Su mirada no para de recorrer mi cuerpo muy lentamente y yo me estremezco ante tal mirada. ¿Qué es lo que quiere realmente? Aprieto un poco los labios, esperando una respuesta hasta que el me mira, quitándose esos anteojos y dejar ver esos ojos tan sexys que tiene. ¡Dios! Es terriblemente guapo y más aún sin sus gafas.

—Como ya dije hay una forma, pero es muy... —dice mientras sus dedos recorren con lentitud sus gafas sin dejar de mirarme—, tentador.

—¿Qué quieres decir? —Pude notar como mi voz tiembla y escucho una risa proveniente de él. ¡Mamá socorro!

—Pequeña humana, desde que te conocí no pude aguantar las ganas de saber como sería el cuerpo de una joven humana tan hermosa como tú. —Mis mejillas ardieron con tal intensidad al escuchar aquellas palabras en la boca de Grillby. Que esto no sea un sueño—. Y haré que ese deseo se cumpla. —Veo que deja sus gafas en una mesita que está al lado del sillón.

—¿Grillby? 

—Oh, ¿ya me tienes miedo, ___? —El monstruo empieza a quitarse con lentitud la corbata, mientras se desabrocha dos botones de la camisa y remangando la parte de los brazos sin dejar de mirarme.

—No —respondo aún temblorosa de lo que va a pasar.

—No deberías tenerlo. —Su voz cada vez se hace más hipnotizante, ¿desde cuando era tan jodidamente sexy? Si hace apenas unos minutos no hablaba y ahora es diferente—. Sabes perfectamente que no te haría daño, sobre todo lo que hay detrás de esa ropa. —Acomoda la espalda en el gran sillón y junta las manos esperando a que hiciera algo.

Trago saliva esperando a alguna orden o algo porque esto me está matando.

—Deleitame con tu cuerpo —lo dice con un pequeño susurro que pude escuchar perfectamente—. Quisiera verlo.

Asiento tímidamente y con mis manos temblorosas empiezo a quitarme los botones de la camisa. No puedo creer que está pasando realmente, aquí en esta habitación junto con Grillby que me devora con la mirada. Ya al quitarme los botones, me dispuse a quitármelo muy lentamente dejando que vea cada poro de mi piel. Puedo sentir que todo mi vello se eriza con su mirada.

Luego sigo con mis pantalones que me bajo la cremallera y quito el botón, me sonrojo aún recordando de que el pantalón era muy corto y encima las medias llegan hasta mis muslos. Dejo que se cayeran por sí solas y yo me aparto un poco, dejándolos a un lado. Y me abrazo con la cabeza agachada, algo avergonzada y con las mejillas rosadas.

Puedo escuchar la respiración de Grillby y alzo un poco mi mirada para ver lo que está haciendo. La llama de su cabeza aumenta un poco más el tamaño, como si es una advertencia de que le está gustando lo que ve. Mi yo interno salta de alegría al saber que el monstruo de llamas le gustara ver un cuerpo humano como el mío.

—Date la vuelta —me ordena a lo que yo accedo con gusta dándome la vuelta.

Mi vista está clavada en la puerta con ganas de salir corriendo, pero no puedo porque tengo que pagar una cuenta pendiente. Mis oídos se afinaron cuando escucho los pasos de Grillby acercarse hacia mí. Mi corazón comienza a bombear con salvajismo esperando algún toque, alguna caricia por parte de él. Que me dijera que ya es suficiente, que ya puedo irme. Sin embargo, me estremezco al sentir su aliento en mi oído a lo que me sonrojo aún más.

—Eres realmente hermosa, pequeña humana —me dice suavemente, mientras noto su mano caliente, que no quema, acariciar el moño que sujeta mis cabellos y lo deshizo, mientras que mi pelo cae como si de una cascada se tratase—. Pero más aún así. —Noto un leve escalofrío por mi espalda, ya que comienza a acariciar por mi columna vertebral—. No quemo, ¿verdad?

—No —lo dije tímidamente intentando evitar mirarlo.

—Me gusta saber eso. —Se acerca más a mis cabellos aspirando el olor de aquel champú bastante caro que me compró Toriel. Él ríe a lo que yo me sonrojo aún más.

—¿Qué tiene gracia? —Le miro de reojo a lo que el me toma del mentón haciendo que lo mirase mejor.

—Que soy el monstruo más afortunado del subsuelo. —Posa el pulgar en mi labio inferior y lo baja un poco haciendo que yo abriera la boca un tanto sumisa. Oh, por favor Grillby, si deseas besarme hazlo. Pero suelta del mentón, dejándome con las ganas de besarlo.

Hice puchero al dejarme en ese estado, pero noto que el tira con fuerza el tiro de atrás del sujetador a lo que yo suelto un jadeo. ¿Qué es lo que hace? Quiero mirar, pero él me toma del mentón de nuevo, haciendo que mirase a la puerta de nuevo.

—No mires, ___ —me susurra de nuevo cerca del oído—. Quiero seguir mirando tu espalda. Y para ello... —dice y, con desdén, desabrocha mi sujetador dejando libre esas dos montañas que decoran mi tórax—, tengo que deshacerme de esta prenda molesta. —Noto que de un movimiento, lanza esa prenda al otro lado de la habitación.

—Grillby, ¿qué sacas con esto? —pregunto finalmente mientras que él aparta un poco mis cabellos, para seguir acariciando mi espalda haciendo que se me escaparan leves suspiros.

—¿Qué saco yo con esto? —Hizo la misma pregunta, cuando siento su lengua recorrer desde mi hombro hasta mi cuello, tocando unas zonas sensibles que yo desconozco—. Tal vez... —dice mientas sus manos empiezan a recorrer por mis muslos lentamente, torturándome en cada caricia que me proporciona—, placer y... —susuura, y yo encojo el vientre al sentir sus manos ahí y subieron poco a poco hasta tocar mis pechos sujetándolos con firmeza a lo que yo gimo con sorpresa—, a ti.

—¿A mí? —Me sonrojo con mayor fuerza al escuchar esa palabra.

Pero no obtuve respuesta, porque ya empieza a masajear mis pechos, a lo que le respondo con leves gemidos bastante suaves y eróticos. Sus manos no me queman, y eso que es un monstruo de fuego, pero me produce ciertas corrientes eléctricas por mi columna y noto como me mojo poco a poco. Me muerdo el labio con fuerza y puse mi mano en la boca intentando no producir gemido alguno.

—Grillby hay gente en el bar. —Intento articular palabra alguna, pero éste monstruo masajea mis pechos con maestría, haciendo que me derritiera de placer.

—Olvídate de ellos y concéntrate en nosotros, ¿sí? —me dice, dándome una lamida larga y erótica en mi oreja mientras que empieza a retorcer uno de mis pezones con sus dedos y yo gimo un poco más alto de lo habitual.

—¡Grillby! —Por favor, que esto no sea un sueño y que de verdad está pasando, porque lo estoy disfrutando como nunca.

Pero por desgracia deja de tocarme los pechos alejándose de mí, mientras yo aprovecho para respirar profundamente. Siento como mis mejillas arden sin cesar, pero mis oídos se agudizaron cuando escucho como muebles moverse. Echo un vistazo y veo que Grillby aparta las sillas dando un gran hueco en la mesa.

—Siéntate. —Me ordena un tanto dominante y yo me acerco tímidamente y temblorosa aún por las caricias que me proporcionó antes.

Me siento con algo de dificultad, pero mis ojos se agrandaron de la vergüenza, cuando Grillby se posiciona entre mis piernas haciendo que las rodeara en sus caderas. Nos encontramos en una posición bastante íntima, ya que nuestros sexos están rozándose, pero aún mantenenos la ropa puesta. Apoyo las manos en su camisa, mientras él me atrae aún más y con un movimiento brusco me besa introduciendo su lengua en mi cavidad bucal.

Yo no tengo experiencia en estas cosas, pero tengo que intentarlo, no quiero quedar mal delante de él. Sin embargo, su instinto de dominancia me lo impide, devorando cada parte de mi boca, como si estuviera a punto de desvanecerme. Está desesperado y lo noto un poco con sus caricias que descienden poco a poco hasta llegar a mi sexo.

Gimo en su boca al sentir que comiena a acariciar por encima de mis bragas aquel botoncito que ya está hinchado. Presiono un poco más mis muslos y me separo de él por falta de aire, pero apoyo mi cabeza en su pecho ahogando los gemidos. Ese dedo aparta un poco la tela para acariciar, tocar mi sexo con desesperación y yo mientras tiemblo de placer y mis caderas se mueven por si solas queriendo que me penetrara ahora mismo.

—¿Tan desesperada estás, pequeña humana? —me pregunta, susurrándome en el oído mientras da una pequeña risa como que le está gustando—. Tenemos todo el tiempo del mundo, además... —dice, metiendo un poco el dedo que hizo que yo me echara atrás soltando un gemido—, me encanta ver tu rostro y escuchar tus gemidos mientras que yo te follaré duro y rítmicamente.

—¡Grillby! —gimo su nombre mientras que un poco de saliva cae sobre la comisura de mis labios, a lo que él lo lame.

—Me gusta como suena mi nombre cuando gimes —Mete aún más aquel intruso empezando a moverlo muy lentamente—. Lo estás apretando muy fuerte —dice Grillby, haciendo que me sonrojara aún más de la vergüenza—. Entonces, no podré imaginarme como se sentirá mi polla cuando esté dentro de ti.

Le miro con algo de súplica a que lo haga, a que me folle en ese momento. Quiero que sea el primero en quitarme la virginidad, que compartamos esta atracción juntos. Yo ya no puedo más, lo necesito con urgencia.

—Grillby fóllame, por favor. —Él detiene el movimiento de su dedo a lo que yo me muerdo el labio muy necesitaba, acerca su rostro al mío mordiendo mi labio inferior y lo tira con un poco de fuerza a lo que yo jadeo.

—¿Segura? —me lo dice con un tono bastante inseguro mientras me quita las bragas con desdén—. No quiero que luego me odies por esto. —Sus manos se dirigen a su cremallera para comenzar a bajarlos lentamente.

—Yo nunca te odiaría. —Le miro fijamente a su rostro—. Yo he estado esperando, ansiosa, de hacerlo contigo. —Me pude fijar que el rostro de Grillby era puro poema al escuchar mi confesión—. Quiero que seas el primero. —Agacho un poco la mirada clavando la vista en su pecho—. Y que me quites la virginidad. —Y lo miro a lo que yo recibo una sonrisa satisfactoria por parte de él.

—Seré muy suave contigo. —Posa la mano sobre mi hombro y me empuja lentamente, quedándome acostada en la mesa—. Pero ya luego —gimo al sentir aquel miembro rojo como el fuego rozar sobre mi sexo y ahora apoyando la punta sobre mi entrada—, seré muy rudo contigo.

Ahoguo un gemido de dolor al sentir aquel intruso desagarrar en mi interior quitando mi virginidad por completo. Unas lágrimas caen lentamente sobre mi rostro a lo que Grillby los retira, lamiéndolos un poco. No se ha movido en ningún momento esperando a que me acostumbrase a su tamaño, a lo que yo muevo un poco mis caderas avisándole que ya puede.

Empieza a moverse bastante lento dentro de mí a los que ambos gemimos al mismo tiempo, yo notando su gran virilidad mientras que él nota lo estrecha que estaba. Una risa torcida sale de su boca, como si tuviera ganas de follarme duramente contra la mesa, pero él como dijo antes todavía queda tiempo para eso.

¡Dios! No puedo creer que lo estoy haciendo y más con el ser que amo en el mundo. Me besa con más furor que nunca, mientras aumenta un poco los movimientos notando, así que la mesa se moviera e hiciera ruido. Me percato de que hay gente afuera, pero ¿sabéis qué? ¡A la mierda! ¡Quiero disfrutar de esta primera vez con él!

—¡Grillby! —Toca en zonas sensibles que yo desconocía que existían en mi útero y él hace que me maravillara de sus movimientos.

—Gime ppara mí, ___ —me suplica él apoyando las dos manos sobre mi cabeza, mientras se mueve más rápido aún a una velocidad casi inigualable—. Quiero escuchar ccomo gimes mi nombre.

—¡Grillby! ¡Grillby!

Lo atraje aún más con mis piernas haciendo que profundizara aún más y el gruñe y, como recompensa, se mueve con más fuerza que antes, sujetando mis caderas profundizando más y que yo notara que está tocando una zona que sería la parte final del útero. ¡Estoy en el bendito paraíso! Pero noto que sus movimientos tan salvajes y, a la vez, inigualables son algo irregulares. Hasta que siento que algo a punto está llegando a mi zona más baja haciendo que arqueara la espalda.

—¡Me voy a correr! —me advierte Grillby apoyando la frente en mi hombro.

—¡Creo que yo también!

Y unas estocadas fuertes por parte de él hicieron que los dos nos vinieramos al mismo tiempo, mientras que yo recibo su semilla caliente y pegajosa dentro de mí. ¡Dios! ¡Es lo mejor que ha pasado en años! Respiro algo agitada, mientras abro mis ojos para encontrarme a un Grillby jadeante y que me sonríe algo satisfecho a lo que yo le sonrío también.

—Tu cuenta está pagada, pequeña humana —me dice para que finalmente me diera un beso en los labios a lo que yo correspondo. Creo que nuestra relación va a seguir floreciendo, y lo sabes muy bien.

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¡Aquí el One-Shot que mencioné en la conversación! ¡Amo a Grillby en serio! Es un monstruo demasiado sexy para mi body ¬///¬

Aquí lo tenéis ya que es un especial de los 200 lectores porque quiero agradeceros a todos y a cada uno de vosotros por apoyarme y hacer que esta cuenta siga creciendo con fics muy zukulentos~

También quiero mencionar que este fic está dedicado a dos personitas que las voy a nombrar: la primera es Korine-chan ¿y por qué? Porque me dedicó un fic muy zukulento de mi waifu Papyrus el sumiso y espero que te guste éste el de Grillby (que vi un fic tuyo de éste ewe). Y la segunda persona es Blue-Senpai porque mi niña cuando escribiste aquel fic también de mi sumiso Papyrus y dijiste que soy un claro ejemplo para ti te quería dar un abrazo de verdad, en serio.

También quiero mencionar que nuestra amiga HoliAmigui nos ha hecho un dibujo del fic "The Maid" y ha mencionado que va hacer 4 o 5 más sobre este fic. Y yo querida sinceramente tengo ganas de verlos *-*. Aquí lo tenéis:

Nos vemos en el próximo fic ¡chau!