Prólogo

Corría sin cesar a través del territorio de Kaon, con 5 cybertronianos pisando los talones. Necesitaba obtener tiempo, necesitaba perderlos de vista para tomar su modo cyberwolf y correr, necesitaba un respiro de la guerra.

Ser un sin bando no es fácil, y menos en Kaon o Iacon, donde son las bases de ambos bandos, decepticons y autobots respectivamente. Sin una manada estaba perdido, aun así había sobrevivido un buen tiempo, a base de hacer favores a ambos bandos sin el conocimiento de los lideres, de estos favores había conseguido energon y prefirió guardar algunos, presentía que los necesitaría en un futuro.

Él nació a inicios de la guerra, y tan pronto como pudieron trasladaron su chispa a una protoforma, claro que seguía siendo un sparkling (sus creadores decían que no, solo por que les conviene), por mucho que lo negara necesitaba a un adulto.

En fin, tras pasar por lugares demasiado clandestinos para ser nombrados, los perdió, y corrió unos kilómetros más antes de perderlos de vista, entonces se dio la libertad de transformarse en modo cyberwolf, que era demasiado oscura para su gusto, pero no se podía quejar, le ayudaba a confundirse entre la eterna oscuridad que cierne los malos barrios. No se atrevió a descansar, después de una persecución así, lo más seguro era que lo seguirían buscando, y no podía darse el lujo de que lo encontraran.

"Si huyes, ninguno de los dos bandos te dará refugio, serás perseguido por todos y querido por ninguno, solo podrás encontrar la calma en la oscuridad, entre tinieblas y silencio." Todavía recuerda recuerda esas palabras, las palabras de su progenitor antes de que huyera, antes de que se alejará del destino de ser un experimento eterno de los Decepticons, con ayuda de Blitzwing y Starscream, a pesar de lo extraño que suene. 

—Seguro tienen segundas intenciones... —pensó con fervor, negándose a parar hasta estar en un sitio seguro.

Al pasar a otro lado de Kaon, finalmente encontró refugio cerca de un barrio abandonado e inhóspito, junto a un antiguo coliseo. Al inspeccionar el área, encontro viejos cubos de energon, antiguamente usados para alimentar a maquinaria, y viejos archivos. Volvio a su forma cybertroniana mientras inspeccionaba los archivos, y dando por concluida su inspección los reprodujo.

—Tampoco es que pueda hacer otra cosa —pensó detenidamente, sin dejar de analizar cuidadosamente los archivos— Tampoco son inútiles, tienen mucha información.

No esperaba los datos obtenidos de ellos, pues resultaron tener la historia de cybertron -le aterraba el hecho de que no conocía nada hasta que salió de el laboratorio- desde sus inicios -incluyendo las míticas leyendas de los primes y "El Caído"- hasta los inicios de la guerra que asola su planeta, sus causas y más datos como leyes, tanto de cybertron como a través de la galaxia -incluyendo el acuerdo de Tyrest y leyes de algo llamado "consejo galáctico"- como idiomas antiguos y actuales, además de datos de como hackear, experimentar o infiltrarse. No podía evitar pensar que por la calidad de los datos, eran archivos perdidos de historiadores, políticos, científicos o bots especializados en tecnología y comunicaciones, pero realmente no se iba a quejar del conocimiento.

Tras observar que no había energon consumible, solo el destinado a las maquinas -siempre son más tóxicos, aunque nada como Tox-E -, y no podía seguir así, por eso estaba escapando de los bots, había intentado agarrar un par de cubos sin éxito, pero tenia que consumir energon pronto o caería en un apagado de emergencia, así que con gran pesar agarro el energon de las maquinas.

—Bueno, si no me mata llenare mis reservas de energon —pensó sarcásticamente, no había probabilidades de que sobreviviera, pero no podía evitar ser sarcástico.

Con un suspiro se tomo los cubos de un tirón, y por cada trago le invadía una sensación extraña, no estaba muriendo, de eso estaba seguro, pero tampoco estaba como de costumbre, bebió hasta que no le entraron más en sus reservas. Todavía quedaban un par de cubos, que guardo en un compartimento, se sentía mareado y sus sensores detectaban actividad anormal en su cod y en el compartimento de su chispa, sabía que no debía, pero no pudo evitar entrar en un estado de recarga. Al despertar se dio cuenta que habían pasado varios Megaciclos, pues la puesta del astro ya estaba en orden, cuando llego al refugio apenas salía.

—Me perdí todo un ciclo solar —pensó sorprendido— afortunadamente, nadie me encontró

Se hizo un autodiagnóstico de sus sistemas, se sentía bien, mejor que nunca, sus reservas estaban llenas y él no había muerto de momento, lo único afectado fueron los sensores de temperatura ubicados en la camara de su chispa, pues no dejaban de volverse locos, diagnosticando temperaturas de extremo a extremo, a temperaturas que, incluso un cybertroniano no soportaría, repentinamente se sentía cansado, como si hubiera estado corriendo por Deca-Cyclos, lo que solo pasaría si recorriera todo Cybertron en su modo cyberwolf.

—Debería moverme, quizás a Blaster City, es el lugar más cercano —razonó consigo mismo, sin creer todavía que siguiera vivo— debería llevar energon, por si acaso.

No quería perder tiempo, podía salir relativamente ileso de Kaon si aprovechaba la noche, guardo todo lo que consideraba podría ser útil, lo cual no era mucho, el energon, los archivos y mapas, así como un sistema de orientación funcional, él cual tras buscar que no contuviera virus instalo en su sistema.

— Demasiado sospechoso, la verdad —pensó alterado— si es de algún cybertroniano que también se refugió aquí, puede llegar en cualquier momento, es mejor darse prisa.

No tardo mucho en llegar a los limites de Kaon, donde Decepticons patrullaban sin descanso, se deslizó entre los puntos ciegos que los Decepticons niegan tener, y con cautela se dirigió a Blaster City, que era el sitio más cercano a Kaon, donde después iría a Tyger Pax, si es que aún existía.

—Debería actualizar mi base de datos —pensó preocupado— trataré de hacerlo en Blaster City.

Un par de Megacyclos después

Base Decepticon

Con un sobresalto se despertó, lo último que recordaba era correr, casi llegaba a Blaster City hasta que todo se volvió negro en su optica, podía asegurar aun sin mirar que estaba de nuevo en una base Decepticon, él aroma se lo decía, olía a un par de procesadores fritos -probablemente los vehicons-, tampoco es como si entre bases variaran el color de sus paredes, siempre las mismas, negro con morado, aburrido, simplemente aburrido. 

—Deja de fingir, Hot, no tenemos mucho tiempo —gruñó uno de los tres Seekers dispuestos a ayudar, de momento. 

—¿Qué ocurre ahora, Strascream? —no era la primera vez que intentaba ayudarme de alguna manera, así que no me sorprendía que estuviera aquí.

—Planean matarte —dijo sin rodeos.

Bufé, no era la primera vez tampoco, se suponía que yo sería un vehicon mejorado, no tendría conciencia ni voluntad, solo obedecería ordenes de mis creadores y Megatron, pero al ver que no funcionó han intentado de diversas formas acabar conmigo, y de no ser por Starscream y Blitzwing, en su último intento lo hubieran logrado.

—Esto no es como las veces anteriores, planean enviarte a través de una cápsula, sin posibilidad de cambiar de ruta, a una estrella para que te consumas —vociferó preocupado— 

—¿Finalmente se desharán de mi, entonces? —expuse no muy preocupado por mi destino.

—No si esta en nuestros servos, Blitzwing los distraerá para que Skywarp, Thundercreaker y yo podamos cambiar las coordenadas a un planeta habitable, y con energon, lo único que tienes que hacer es que cuando te saquen de aquí debes lucir un poco confundido y perturbado, se supone que entre para torturarte mentalmente antes de tu despegue —aseguró confiado— no te preocupes por el planeta, ya lo tenemos seleccionado, es uno muy bonito, seguro te gustará.

—Si tu lo dices.

No paso mucho antes de que Starscream se tuviera que retirar, y no mucho después vinieron por mi, ciertamente no esperaba menos de los Decepticons, pues como siempre, primero me llevaron ante Megatron, atado claro.

—Hoy morirás basura de cyberwolf —y como siempre, te dio esas miradas de "eres basura".

No esperaron mucho la verdad, pues tan pronto como dijo eso Megatonto me arrastraron a las capsulas, lo único notable fue que quien nos recibió en las capsulas fue Thundercreaker, al parecer si cumplieron su palabra, y sin medir su fuerza me lanzaron a través de la capsula con las coordenadas modificadas, sin fijarse si eran correctas o no, mejor para mi, supongo, la cerraron y adiós Cybertron, hola espacio basto e infinito.

Quien sabe, puede que haya sido lo mejor, ¿no?

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