Los ojos de Alice se abrieron como platos al ver a aquel chico tirado a sus pies, tocándose la cabeza y quejándose un poco.

— no puede ser, realmente lo siento no fue mi intención golpearte de esa manera... — la chica estaba realmente nerviosa y esos mismos nervios la hicieron salir casi corriendo en lugar de ofrecerle su ayuda a aquel chico, dejándolo tirado frente a la puerta del baño.

La castaña se adentro un poco entre las personas tratando de encontrar la cocina y a su amiga, pero no lograba verla por ningún lado hasta que llego a una de las tantas puertas de la casa, Sally estaba ahí dentro junto a un par de chicos.

— ¡corazón! — la rubia recibió a su amiga con una enorme sonrisa, tomando su mano para guiarla hasta donde se encontraban dos chicos de rostros amigables. — quiero presentarte al chico con el que estoy saliendo... 

— mucho gusto... 

— igual, Sally me habla todo el tiempo sobre ti. — Alice continuaba nerviosa después de aquel incidente en el baño, era notorio. — mi nombre es Bobby y él es mi amigo Alex. — dijo el chico refiriéndose a un rubio que se encontraba en el mismo lugar.

— ¿Hermosa te sientes mal? — la castaña miro a su amiga y negó al instante lo que acababa de preguntarle. — te ves muy pálida Alice, ¿paso algo en el baño?

— nada, es solo que no me siento muy cómoda en este lugar y quisiera irme en cuanto te desocupes.

— puedo llevarlas si quieres, de igual manera tocamos hasta dentro de veinte minutos. — la rubia le dedico una sonrisa a su chico.

— no hace falta, la casa de Alice queda cerca y podemos irnos caminando. 

— no tienes que irte conmigo, veo que hay movimiento y puedo irme sola...

— no te voy a dejar ni loca, eres mi hermana y no me perdonaría si algo malo te pasara. — ambas chicas se abrazaron. — pero quiero pedirte un favor... — dijo la rubia mientras se separaban. — esperemos a que toque la banda, quiero que los veas y veras que no te vas a arrepentir. — Alice suspiro profundo para después asentir con la cabeza recibiendo una enrome sonrisa de agradecimiento por parte de su amiga.

La rubia nuevamente se lanzo a los brazos de Bobby dejando a su amiga junto a Alex, un chico de pocas palabras al igual que Alice. Ambos se dedicaron una sonrisa algo tímida mientras observaban como la feliz pareja conversaba a su lado.

— espero que les guste nuestra presentación, apenas estamos comenzando y solemos tener errores.

— sera un honor escucharlos... — Alex rio un poco ante eso. — ¿eres quien canta?

— pues suelo hacerlo, pero realmente mi aporte es tocar la batería principalmente.

— eso suena interesante, cuenta con nuestros aplausos. — dicho eso los otros dos chicos se aceraron hasta ellos, Bobby le dijo a Alex que debían irse preparando para poder dar una excelente presentación y de esa manera ambos chicos salieron de la cocina. — no son tan desagradables como pensaba por su forma de vestir.

— solo usaban cuero, nada que ver tu comentario. — dijo la rubia riendo. — ademas, esas risas que soltaste con Alex no con cualquiera lo haces eh...

— estas alucinando, solté una sola risa y no tiene nada que ver.

— pues estudian en la misma escuela a la que iras, puedes conocerlos mejor durante nuestro ciclo escolar.

— no seas ridícula, quiero iniciar la preparatoria de una buena manera y sin distracciones.

— no seas ridícula, no vas a iniciar la preparatoria porque pasamos a segundo año. — la castaña simplemente rodo los ojos. — el hecho de que tu primer año hayas estado en una escuela para niñas católicas no lo hace diferente.

— una pena que las hermanas se tengan que ir. — ambas chicas comenzaron a caminar en dirección a la salida de la cocina. — pude terminar mis estudios en ese lugar de no ser por eso y ahora no tendría que lidiar con la presión de ser la chica nueva en un lugar totalmente desconocido y raro.

— mi escuela no es rara, es de las mejores del lugar y tus padres por algo te inscribieron en ella. 

— pues quizás tienes razón. — la rubia asintió mientras pasaba un mechón de su cabello detrás de su oreja. — por cierto, me da curiosidad saber porque dijiste que mi hermano iba a estar aquí, realmente no lo veo por ninguna parte.

— solo lo dije para poder convencerte un poco rápido, tu hermano no se encuentra aquí. — la castaña nuevamente miro mal a su amiga. — deja de verme de esa manera y mejor tratemos de meternos hasta adelante para poder ver de cerca. — dijo en cuanto llegaron a la entrada del jardín de Chloe, en donde el dichoso concierto se iba a realizar.

Alice no podía contar a todas las personas que se encontraban dentro de la casa de la chica, estaba totalmente repleta que nadie podía caminar libremente en el lugar y sin mencionar que todo el jardín estaba igual. Sally tomo la mano de su amiga tratando de moverse entre las personas para poder llegar hasta el frente, pero era muy complicado y en un momento la música comenzó a sonar provocando de las personas a su alrededor comenzaran a gritar y a bailar como locos.

La castaña trato de tapar sus oídos soltando el agarre de su amiga quien no se dio cuenta y continuo su camino dejando a su amiga detrás, encerrada por las personas que se atravesaban evitándole el paso.

— ¡Sally! — pero ese grito había sido en vano, la castaña estaba segura de que su amiga estaba a punto de llegar a su destino y ella continuaría el resto de la noche atrapada entre chicos que nunca había visto en su vida. Alice suspiro pensando en regresarse a su casa en ese preciso momento, pero alguna fuerza extraña que ni siquiera ella comprendía la hizo retomar su camino y comenzar a empujar a las personas para tratar de llegar a su amiga.

*

Su esfuerzo resulto dar frutos en el momento en que logro ver la luz de la luna reflejada en el azulejo de la pared del jardín, sus ojos comenzaron a buscar a Sally de inmediato pero en lugar de encontrarla a ella...se encontraron con un par de ojos color café que pertenecían a un chico que se encontraba en aquel escenario diminuto, nadie más y nadie menos que el mismo chico al que Alice había golpeado afuera del baño.

— ¡Alice! — la voz de su amiga la hizo regresar a la realidad, volteando a su derecha en donde se encontraba ella. — te me perdiste, me asuste porque pensé que podrías irte sola. — la castaña simplemente negó. — eres capaz de hacerlo mujer... 

— no te voy a negar que lo pensé.

— mejor concéntrate en disfrutar de la buena música. — dicho eso la rubia comenzó a saltar como loca mientras cantaba al ritmo de los chicos. Alice por su parte solo estaba con los brazos cruzados tratando de no prestarle atención al chico que se encontraba cantando pues le daba mucha pena haberlo dejado tirado con un golpe en la cabeza, aunque no hubiese sido grave. — ¡quita tu cara de amargada hermana! — pero le era imposible hacerlo, por su cabeza pasaba la idea de que ese chico estuviera molesto o algo parecido, no quería enfrentar a nadie esa noche y mucho menos en su primera fiesta.

— ¡Sally! — dijo llamando la atención de su amiga quien muy apenas se la dio. — ¡si no te molesta quisiera irme antes de que terminen de cantar! — en ese momento la rubia la miro mal, pero accedió al comprender que su amiga no se sentía cómoda en ese lugar desde que puso un pide dentro de la casa.

*

— que te quede claro que esta es une verdadera demostración de amistad. — ambas chicas caminaban en medio de la calle mientras se dirigían a la casa de Alice. — espero lo recuerdes bien en el futuro.

— lo voy a recordar siempre, créeme. — dicho eso ambas chicas se abrazaron. — bueno, si quieres puedes retirarte a la fiesta sin tener miedo de que me pase algo. — la rubia rio asintiendo para luego darse la vuelta y caminar en dirección contraria.

Alice entro a su casa buscando a su madre, pero solo encontró una nota en donde le informaba que se había ido al supermercado con su hermano. Ella fue directo a su cuarto que se encontraba totalmente obscuro, ella solamente se recostó en su cama y aunque quiso evitarlo, no pudo evitar pensar en aquel chico y eso hasta que se quedo dormida.

...

SEGUNDO CAPITULO PUBLICADO Y POR AHI SE PUEDEN ENCONTRAR CON EL ACTO UNO, ESPERO SUS COMENTARIOS Y SUS VOTOS. LES AMOOOO Y NOS ESTAMOS LEYENDO LUEGO, BESOSSS.