Esto es totalmente random pero se los juro, fue un día realmente pesado y largo TT_TT

Espero que les guste de cualquier manera~

P-D: Recuerden que acepto peticiones mi gente ^_^

Ink cerro la puerta de su habitación de un golpe, caminando hacia su cama mientras se sacaba lo que tenía puesto y se ponía algo mucho más cómodo, una mueca formándose en su rostro. Había sido un día largo, nerviosa por aquello de gran importancia que debía entregar y que aun no había terminado el día anterior. Lo logro por suerte pero termino por recibir un reto de parte de su profesora, quien de paso se había equivocado de alumno y recibió un reto gratis. Increíble, dicho con mucho sarcasmo y cansancio.

Suspiro y se masajeo ligeramente el cuello, sintiéndolo tenso y adolorido. Ya había terminado el día pero el encuentro con aquella profesora le había dejado un mal sabor en la boca.

-¿He?- alzo la vista con curiosidad cuando un fuerte brillo llamo su atención. -El espejo...- dudo por un momento pero termino por cerrar los ojos con fuerza, corriendo hacia el espejo antes de pensarlo mucho más. Aterrizo de pie en el otro lado, abriendo los ojos y sonriendo muy ligeramente al ver el gran castillo del Páramo, con muchos toons caminando a su alrededor y hablando con gran animo.

-¡Ink!- alguien la llamo a al distancia. Podía verlo acercarse con los brazos en alto y una gran sonrisa en su rostro.

-Mug...- sonrío y corto la distancia entre ambos rapidamente, abrazándolo sin decir nada más y enterrando su rostro en su hombro, bajando las orejas mientras se aferraba a la ropa ajena.

-¿Ink?- él la miro con preocupación, devolviendole rapidamente el abrazo y llevando una de sus manos a la nuca ajena, dándole una ligera caricia. -¿Estás bien?- pregunto al sentir que el agarre de ella se apretaba un poco.

-Si...- se separo lentamente, mirándolo con timidez y algo de cansancio. -...es solo que...bueno...- dudo, sin saber como expresar lo que tenía en mente.

-¿Día malo?- Mug le sonrío ligeramente, tomando las manos de ella con tranquilidad.

-Algo así- sonrío ligeramente.

-No te preocupes~- él sonrío enormemente, soltándola para rodear sus hombros con su brazo y empezar a guiarla hacia el castillo. -Apuesto que los chicos y yo podemos alegrarte el día- rió ligeramente.

-Si, seguro que si- sonrío, apoyándose en él y dejando que la guiara. Se relajo, sintiéndose más tranquila.