12 - "Me gustas"

   

        Esta maňana me despierto sola. Mis ojos estan entrecerrados de tanto resfregarmelos, y es lo mas molesto que tengo esta maňana. Me entero que estoy sola cuando estiro mi brazo en el lado en donde Dwight dormia, y solo toco las mantas arrugadas. Bufo al ponerme a pensar en donde estará ahora y que estara haciendo. Aunque tengo en mente no pensar en el ahora, se me hace inevitable. Ayer me ayudo mucho y ni siquiera le di las gracias; se comportó muy extraňo... El no tiene la culpa de lo que Negan me ha hecho... No se porque ha dicho eso. Tal vez porque solo me ve como una responsabilidad como Salvador. Tal vez.

    En verdad, no estoy muy segura aun de lo que Dwight quiere de mi.

     Trato de levantarme de la cama, con lo unico que mas me duele: mi pierna. Es la parte del cuerpo en la que Nash me golpeó demasiadas veces, y aun esta morado con azul. Eso no es bueno, ya que cada dia que pasa me duele mas al pisar el suelo. Me siento en la cama y bostezo, aun con sueňo. Parece que tendre que dormir con Dwight mas seguido, ya que las pesadillas no han aparecido. Ni siquiera he tenido la pesadilla que aun me remuerde la mente: Negan abusandome, divirtiendose conmigo como si fuera un juguete que le pertenece. No me gusta recordarlo, y no me gustaria vivirlo de nuevo.

  Espero que no.

     Click. Escucho el sonido de la puerta abrirse, dejando ver a mi compaňero de habitacion. Entrecierro los ojos aun mas para poder observarlo mejor desde aqui. Su cabello es mas rubio cuando los rayos del Sol chocan contra el, sus ojos verdes me observan desde la puerta, directamente a los mios. En sus manos lleva una bandeja, que no distingo desde aqui que contiene. Sus pasos aceleran hacia donde estoy y se sienta a mi lado, ahora extendiendo su mano hacia mi hombro. Los choques electricos vuelven a recorrer todo mi cuerpo al sentir su tacto, su suave y cariňoso tacto que conozco bien.
Dwight: Recuestate - dice, dulcemente. Es extraňo escucharlo hablar de esa manera. Obedesco y cuando apoyo mi espalda en el suave colchon, me relajo. Aunque me duele la maldita espalda gracias a los golpes, relajo todo mi cuerpo. La crema que D me puso ha funcionado con algunas partes de mi cuerpo, a excepcion de mi espalda y mi pierna amoratada, que es con lo que mas sufro. Aunque he tenido cosas peores, como flechas o disparos en el hombro y piernas (que en ese tiempo, Hershell las curaba). Siento algo caliente en mi regazo, y bajo la mirada para encontrarme con la bandeja con un cafe y galletas. Agarro la bandeja a la vez que miro al rubio, y alzo las cejas.
Dwight: ¿Qué? - pregunta, alzando una ceja, a la vez que me mira fijo.
- ¿Que es lo que quieres?
Dwight: ¿A que te refieres con eso? - me pregunta. Ahora noto que su voz es elevada.
- Me refiero a esto - exclamo, apuntando la bandeja. El me frunce el ceňo, aun mirandome fijo, pero eso no me intimida.
Dwight: ¿Que te tengo que demostrar para que confies en mi, Lauren? - me susurra, ahora acercandose mas - ¿Que tengo que hacer para que me aceptes?
- No es eso, Dwight, es que... Aun no se porqué estoy viva - niego con la cabeza, aun mirandolo -. Si no puedo salir de aqui, mi unica opcion es... - dejo de hablar al entender a donde llegan mis planes. Suicidarme seria una buena opcion, prefiero eso que servirle a los Salvadores. Pero luego pienso en mi hermano, en Rick, Carl y los demas, y eso hace que eluda aquel primer pensamiento. El rostro de Dwight me llama la atencion ahora, al ver que sus cejas y hombros estan caidos, y sus ojos verdes vidriosos me miran. Defino su rostro como uno desconcertado.
Dwight: No puedo creer que digas eso - me dice, ahora acariciando mi mejilla. Tu tacto hace que aquellas se pongan rojas -. No se que haria si no estuvieras aqui, conmigo - niego con la cabeza y sonrio.
- No harias nada - le digo -. Por que, al fin y al cabo, seguiras sirviendo a los Salvadores. Mi muerte no te cambiaria en nada - ahora siento como se me quiebra la voz, al bajar la mirada -. Ni hoy, ni maňana...
Dwight: NO pienses de esa forma, Lauren - dice, ahora con la voz quebrada. Sus manos toman mis mejillas y hace que lo mire -. Tu eres la mujer mas fuerte que conozco. Eres alguien especial, ¡y no solo para mi! ¡Para tu hermano, para la gente de Alexandria! Tu eres mas que una arquera, eres mas que esa muchacha odiosa que conoci aquel dia - ahora siento las lagrimar caer por mis mejillas, a la vez que el las limpia con su pulgar - Eres una sobreviviente - esa palabra me hizo acordar a Rick. El nos llamó asi a todos cuando estabamos en una casa abandonada. Dijo que eramos los muertos vivientes. No estuve de acuerdo con ello, pero era lo que Rick pensaba. Sonrio a mi amigo, a la vez que asiento.
- Gracias D... Y disculpa..
Dwight: No te disculpes Dixon - dice, ahora soltando mi rostro, pero sigue mirandome con esos ojos que tanto me hionotizan -. Hoy bajaremos algunas provisiones, y se necesita ayuda, ¿quieres venir? - me quedo meditandolo un momento. Si salgo, tendre que hacer algo para servirles, y si les sirvo soy una de ellos, y si soy una de ellos, soy Negan. Y si me llego a considerar Negan, el estara cerca. Demasiado cerca, como la otra horrorosa que ahora se refleja en mi mente. Ahora me doy cuenta que estoy mirando a la nada, pensandi en todo esto, con rostro preocupado -. Se que no quieres salir por... - Lo miro de inmediato. Se refirio a que tengo miedo. Si, debo admitir, que tengo miedo, miedo a que el se acerque de nuevo, a que me toque un pelo y que no pueda hacer nada por el riesgo de perder a algun miembro de mi familia. Pero soy Dixon, y estaria deshonrrando a Merle si me consideran cobarde.
- Lo hare - le respondo. El rubio aun me mira, aun con sus ojos vidriosos. Aunque ahora solo veo una sola expresion en el: preocupacion.
Dwight: ¿Estas segura de lo que dices?
- Tan segura de que mi apellido es Dixon.
Dwight: Saldras con una condicion - dice, apuntandome con el dedo indice, e inclinandose mas hacia mi.
- ¿Cual? - el espera un momento, hasta que habla.
Dwight: Quedate conmigo, en cada momento alla fuera - sus palabras ahora retumban en mis oidos como una dulce musica. Parpadea un par de veces y me mira, y cambia de expresion. Ahora el miedo amenaza con aparecer en el -. No me dejes.
- No te dejare, D - siento las llemas de sus dedos rozar mi mano, para luego sentirla entrelazarse con la suya. Su agarre es fuerte, pero me reconforta, y me hace sentir segura.
Dwight: ¿Lo prometes? - susurra, aunque creo haber escuchado su voz quebrada. Asiento.
- Estaré bien - es lo unico que le puedo responder.
Dwight: Eso me dijiste ayer, y mira lo que te sucedio gracias a mi - niego con la cabeza cuando escucho la barbaridad que dice. ¿Sigue teniendo culpa? Eso es algo tonto de su parte, querer protegerme. No soy una princesa.
- No soy tu responsabilidad, Dwight - el ahora me mira molesto, y ahora no siento su mano entrelazada con la mia. Se levanta de la cama y camina hacia la puerta, y antes de abrirla, me habla.
Dwight: Termina tu desayuno - lo mas extraňo al escucharlo es que su voz es seria ahora. Como si hubiera cambiado de personalidad -. Tu ropa esta en el armario. Te veo afuera. Veinte minutos - y con eso, cierra la puerta detras de el.

Luego de terminar de desayunar, voy hacia el armario, y al abrirlo, en mi boca se forma una O. La ropa guardada aqui es la mia, la que tenia en mi armario de Alexandria, ni se como llegaron aqui. ¿Habra sido Dwight? Ahora que recuerdo, mi arco estaba en mi armario, y al dia siguiente apareció aqui en el Santuario, en las manos de D. Un lindo gesto de su parte. Luego tendre que agradecerselo.
   Me dirijo al baňo, hago mis necesidades para luego observar mi reflejo en el espejo. Mis ojeras son grandes debajo de mis ojos, y en mis claviculas y cuello se visualizan las marcas de aquellos chupetones del lider de los Salvadores. Toco con mi pulgar mi labio partido, y observo la caida de una lagrima por mi mejilla. Todavia estoy alli, todavia siento que estoy en la otra noche, la noche en la que alguien arruinó mi vida. En realidad no la arruinó del todo, por que mi vida ya estaba arruinada cuando empezó el Apocalipsis. Mis amigos, mi hermano Merle. Todos no estan. Ahora me pongo a pensar en mis dos amigos. En aquella noche horrorosa, esa fria y sangrienta noche. Cuando muevo un poco el espejo hacia la izquierda, veo dos siluetas en el espejo, y abro los ojos como platos. Dos hombres, uno con la cabeza ensangrentada, alto y pelirrojo. El otro, de cabello negro, cabeza ensangrentada, con un ojo mas grande que el otro, casi salido; su rostro lleno de sangre. Son ellos. Son Abe y Glenn. Lanzo un pequeňo grito y me tapo los ojos con las manos por un momento, y luego me destapo. No estan. Ya no estan. Se han ido.

   Me pongo una musculosa negra y mis vaqueros azul marino, para luego sacar del armario una chaqueta, la chaqueta que tanto extraňaba. Es parecida a la de mi hermano, solo que las alas son del diablo, y no la de un angel. Sus detalles son rojos, negros y los bordes son dorados. Lo dorado es por lo de a pesar de que tenga un corazon frio, como el de mi hermano, aun brilla en mi la esperanza.

Me coloco la chaqueta, agarro mi arco, me cuelgo el carjac con flechas y abro el picaporte. Empiezo a caminar, aunque rengueando por el el dolor de mi pierna, a la vez que bajo las escaleras al terminar cada pasillo. Aunque me resultó interminable, llegue al patio del Santuario, frente a la reja de los caminantes. Una mano aprieta mi hombro y me doy vuelta rapidamente, para cruzarme con esos ojos verdes que veo cada maňana. Sonrio cuando el lo hace, y asiento.
Dwight: ¿Estas bien? - alzo una ceja, y sonrio de costado.
- ¿Por qué la pregunta?
Dwight: Por la sonrisa que me diste - sin querer, sonrio ante lo que me dice.  Bajo la cabeza un momento, para mirar mis botas y no a esos hipnotizantes ojos -. Me gusta - lo miro de vuelta, y el esta mirandome ahora -. Me gustas asi - creo que ahora mis ojos brillan, y mi corazon late a mil por hora. ¿Acaba de decir que le gustaba? ¿O estoy perdiendo la audicion? El cambia la expresion de su rostro a uno serio, tose un par de veces - Quiero decir, que me gusta verte sonreir - entrecierro los ojos, esta bien, me la crei. La proxima no me la creere. Unos sonidos fuertes suenan en mis oidos, y los identifico como disparos. Dwight me agarra de mano y corremos los dos hacia uno de los camiones que hay cerca, y cuando me suelta, veo como se avalanza contra alguien y lo tira al suelo para forcejear con el. Me acerco rapidamente hacia donde esta Dwight, que sostiene una metralleta entre sus manos, y observo al tipo tirado en el suelo. Es un muchacho, en realidad. Y cuabdo me fijo bien en el, lo reconozco por el sombrero que lleva y la venda en su ojo derecho.
- Carl...

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