"Hola"
— ¡Gohan!
— ¿Qué sucede?
—¿Cuanto falta para llegar?
—Mucho.
— Gran respuesta Son.
—Disculpa, ¿Segura que te encuentras bien?
—Si, el medicamento funciona... A veces.
—Bien, ¿Te divertiste ayer?
—No me quejó.
—Seguro estas feliz por ver a tus amigas.
—Claro, ellas son casi como mi familia.
—Les tienes mucho cariño.
—¿Cómo no tenerlo si han estado conmigo?
—Lo comprendo.
—Me sirven los libros que me prestas, gracias.
— De nada, veo que tienes gran interés en estudiar y eso lo admiro.
No dijeron más y siguieron el camino en silencio, ¿Por qué?, hablar en ocasiones era agotador.
—Cuidate, si comienzas a sentirte mal me hablas.
—Lo considerare.
Ya habían llegado a la escuela de ella, la misma rutina de antes.
—¡Melani! — Su amiga Alek corrió a abrazarla— ¿Por qué no viniste a la escuela?, no preocupamos, el día fue horrible.
Si habría que distinguir a Alek entre miles de personas sería por su personalidad atrabancada y segura.
—Lo lamento, uno no controla su salud.
—Aww, entremos a la escuela y me cuentas.— Dejó de abrazarla y comenzó a caminar.
—Si, tranquila — Despidió a Gohan con la mano y entró al lugar.
—Estará bien.
Él se fue a clase como siempre pero ella tuvo que aguantar un interrogatorio por parte de sus queridas amigas, preguntas como: "¿Estas bien?", "¿Tienes algo con aquel chico?", "¿Te gusta?", "¿Cuando iras a los preparativos?"
—Dejen de enfadar
—No, el chico parece ser muy lindo — Lili suspiró.
—No me interesa, chicas mejor hablemos de otra cosa, ¿Si?
—No hay remedio contigo, bien, ¿Vas hoy al salón? —Preguntó con emoción la de cabello negro pintado con rojo.
—Supongo, los preparativos parecen nunca acabar.
—¡Imagina para tu cumple 18!, fieston que se va a armar.
—Ni lo digas Itzel, jamás aceptaré algo así otra vez.
—Ajá.
Un día normal en la secundaria para ellas, mientras que con el Son algo difícil pasaba.
—Gohan no estés así, fue un error lo-
—Ya basta Videl, eso es pasado.
—¿Entonces podemos volver?
—No, cada uno con su camino.
La de cabello negro y corto lo seguía por los pasillos de la escuela pidiendo una oportunidad más pero Son ya estaban cansado de lo mismo.
—Pero, se todo lo de tu familia puedo revelar-
—No importa, como quieras pero ya dejame.
—Te dejaré tranquilo el día en el que tengas a alguien más.
—Ush.
Se fue de allí para tomar rumbo a la escuela de su amiga, dentro de minutos sería la hora de salir, llegó justo a tiempo, los alumnos de la secundaria comenzaban a salir pero no estaba interesado en otros.
—Oh, allí esta.
Al verla sonrió y ella también, pronto estuvieron de frente saludándose de forma normal y caminando lejos de allí.
—¿Cómo te fue?, ¿No te sentiste mal?
—Relajate, estuve bien y mi día fue como cualquier otro, ¿Tu?
—En clase bien pero pasaron otras cosas desagradables.
—¿Quieres hablar?
—Necesito hacerlo.
—Bien, te escucho.
—Aquí no, andando.
Caminaron a un pequeño restaurante, tenían hambre, era un lugar económico y tranquilo, perfecto para hablar.
—Si, gracias.
—En unos momentos lo traigo — La mesera se fue.
—¿Listo?
—Si... ¿Te acuerdas de todas las veces que corrimos de repente? — Ella asintió, ya sospechaba— Tuve novia de nombre Videl.
—Ya entiendo por donde va la cosa.
—Bien... Teníamos una buena relación o eso creía, en fin, un día malo me entere que me engañaba con su amigo, lo peor de todo es que yo lo vi.
—Continua.
—Rompimos hace un año pero ella insiste en darnos otea oportunidad y es lo ultimo que quiero.
—Solo alejate de ella, deja las cosas claras de forma calmada.
—Ya lo hice, no es sencillo, hoy me dijo que me dejara tranquilo hasta que me vea salir con alguien.
—Que fastidio.
—Ni que lo digas.
—Si ya no sientes nada por ella entonces dejalo pasar, estoy segura de que en algún momento encontrarás a alguien más, no te estés martirizando.
—Si, esta bien — Suspiro mientras la miraba— ¿Quieres ir a otro lugar después?
—Al salón, debo reportarme, ¿Me acompañas?
—Claro, tengo que estar cuidandote.
—Gracioso.
Tardó minutos en llegar su comida, estuvieron allí solo una hora para después tomar camino al salón donde estaban las primas de ella y su madre organizando todavía algunas cosas, saludaron y pasaron ambos a elegir una cosas.
—¿De que color los manteles hija?
—Eh... Celeste con blanco.
—Bien llamaré para mandarlo a hacer, ¿Los centros de mesa?
—Lo normal, flores. Clavel rojo con lazos de la decoración de la mesa.
—Ve con Natalie y Adalia, necesitas elegir un peinado.
—Bien, vamos Gohan.
—Melani, ¿No crees que tu acompañante se siente incómodo?
—Oh, descuide, estoy bien y es divertido. — Sonrió el más alto haciendo convencer a la madre de su amiga.
—Entiendo.
Fueron a buscar a las primas de Melani, se encontraban en los jardines revisando varios libros, al verla casi se lanzan sobre la futura cumpleañera.
—¿Qué peinado?, a mi me gusta mucho este con forma de moño gigante.
—Adalia eso es de la época antigua, mejor una coleta súper alta con cabello lacio, ¿Verdad prima?
—La verdad no — Vio al de cabello negro con nervios— Prefiero algo menos extravagante.
—Se que este asunto no es de mi incumbencia — Habló Son— Pero,¿Qué tal este?
Las convenció el peinado, no era tan complicado como los otros y además se veía bien, después de tantas decisiones caminaban por la ciudad tranquilos, eran las 6 de la tarde, estaban agotados.
—Al parecer tu fiesta saldrá de maravilla.
—Si, esperó que sea divertida.
—Aún no te ves convencida.
—¿Cómo es posible que tu lo notes y mi familia no?
—No se, simplemente no muestras emoción, por cierto aun no tienes acompañante.
—Si, es que no se quien, mis amigos y primos son algo... Especiales.
—Bueno ya encontraras a alguien — Le sonrió de forma amable.
—Espero, si no pues solo el baile sorpresa y ya.
—En caso de que no encuentres podrías ponerte en contacto con nuestros amigos.
—Lo he considerado.
—Piensalo, será muy divertido con ellos.
—Claro que los invitaré y lo del acompañante pues a ellos tal vez.
—¿Te imaginas?, mi papá y Vegeta compitiendo por quien come más.
—Sin duda una escena que quisiera ver.
—Hola, Veo que seguiste mi sugerencia Gohan.
En ese momento el Son deseaba que la tierra lo tragara, Videl estaba frente a ellos con una cara seria, rápido Melani entendió todo lo que pasaba así que solo se limitó a quedarse callada y esperar que su acompañante dijera algo.
—Vamos del otro lado.
Se sorprendió la menor al ver que él solo quería correr lejos.
—No huyas, de verdad que es linda pero... — La miró detenidamente— Se ve menor, aún así te felicito.
—¿Puedes dejar de molestar?, nos incomodas.
—Cielos, que no te de pena, admite que es tu nueva novia.
—Bien, ¿Y si es así?, ¿A ti que te interesa? — Por fin habló la de cabello largo con total calma.
—Nada, solo me interesa saber con quien se junta.
—En todo caso ya lo sabes, si nos permites tenemos cosas que hacer.
—¿Cual es tu nombre?
—Demasiada información.
—Ja — Puso los ojos en blanco— Soy Videl, ahora tu.
—Nunca te lo pedí pero te lo diré, Melani, Gohan vamos que nos esperan.
Ella comenzó a caminar Rosando su hombro con el de la chica de ojos azules, Gohan la siguió mientras la veía incrédulo, si había algo por lo que ella destacaba era por ser cero respondona. Cuando estuvieron en una distancia prudente decidió preguntarle su duda.
—¿Qué fue eso?
—Tu no hablabas así que tuve que hacerlo yo. — Lo vio molesta.
—Lo siento, deje que tu lo hicieras.
—Esos asuntos no debería resolverlos, son tus problemas.
—Fue incomodo lo se pero-
—Si tanto te incomoda como acabo de ver, significa que aun la quieres, no te engañes.
—No la quiero, no hable porque pensaba solo irme contigo, no quería que te incomodara como ya lo hizo.
—Pero pasó, vamos a casa o tu mamá se enoja.
—Melani perdón.
—No tienes que pedirlo, olvidemos esto.
Se fueron a la montaña, incluso en la cena familiar él tocaba el tema pidiendo disculpas, a lo que Goku decidió dar su opinión.
—¿Qué pasa?, ¿Por qué pides tantas disculpas?
—Seguro tiene que ver con Videl, ¿Verdad hermano? — La inocencia de Goten ante la pregunta hizo entender al resto la situación.
—No hay nada que perdonar.
—Estas seria.
—Normalmente así soy.
—Gohan — La madre lo vio calmada— En ocasiones solo queremos tranquilidad y ese es el caso de Melani.
—Entiendo. — Su voz sonaba decaída.
—Ya paso Gohan, tranquilo.
Realmente no estaba molesta con él, más bien estaba presionada por su fiesta, no la quería, aunque lo gritara a los cuatro vientos nadie le haría caso, ni siquiera el vestido era de su gusto, un horrible tono de amarillo chillante lleno de quien sabe que tantos moños, peor aun era que si no se decidía pronto por un acompañante su madre le elegiría uno le guste o no.
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