capítulo 3
La situación era catastrófica, el tipo con una ballesta lo estaba mirando demasiado. Parecía estar a segundos de saltar sobre su cuello y decirle lo muy idiota que era por dejar que su hermano se amputara la mano.
-¿Siempre tienes cara de oler mierda? -la pregunta lo tomo por sorpresa, el rostro tenso del hombre pareció calmarse, casi como si consultara que tan idiota era el pelirrojo-. Es solo una pregunta, no lo tomes a mal.
-Mocoso insoportable.
Eso fue lo único que le dijo, el resto del día Daryl se dedicó a pelear con Rick, casi luchando para irse solo entre ese montón de zombies a buscar al otro tonto.
-Se ve que viene de familia eso de ser idiota.
Dixon dejo de discutir cuando lo escucho, lanzándose sobre Elio. La figura delgada del pelirrojo, choco con la pared mientras las manos del rubio apretaban con fuerza su cuello, dejándole poco espacio para respirar.
Rick y Glenn intentaron sacarlo de arriba suyo, sin embargo sus esfuerzos no servían de nada.
-Abre esa maldita boca una vez más y juro que la partire.
-¿Partir de que forma? -Eso basto para que Dixon lo soltará, proporcionando un golpe en su rostro que lo hizo temblar- Me gustan los hombres violentos, pero creo que se te pasó la mano, guapo.
Glenn fue a su ayuda, cubriendo su nariz para que detuviera aquel horrible sangrado. Daryl era bueno con los puños y Elio no volvería a cuestionar eso, pero de todas formas seguiría siendo una pequeña molestia a su alrededor.
El plan establecido por el grupo era un poco confuso, recuperarían la bolsa con armas que el señor policía había dejado tirada en la calle, ¿inteligente? No, ¿peligroso? Sí.
Al final acabaron demorando más de lo esperado en regresar al famoso campamento, un pequeño imprevisto fue lo que los retraso; Glenn fue secuestrado, un grupo de latinos casi les vuela la cabeza y una ancianita salvó el día. Elio recibió galletas por parte de la amorosa señora, pero no le diría a nadie sobre eso.
Cuando consiguieron regresar, solo llevaban consigo la mitad de las armas prometidas, Rick al parecer era más imbécil que él. Admiraba eso.
Al llegar al campamento todo era un desastre, los chicos gritaban y se defendían como podían. Andrea estaba ahí, tendida en el suelo con un cuerpo entre sus manos.
Elio corrió, sin conocer a nadie y entre lo que parecían ser cientos de muertos vivientes. Su hermana luchaba y lloraba con un palo en su mano, la pequeña no dudo en atravesar con la filosa lanza la garganta del caminante. El pelirrojo se detuvo con asombro y ella aprovecho la oportunidad de correr a sus brazos, lanzándose en busca de su protección.
-Prometiste que no me dejarías -la pequeña grito y pateó, Elio la sujeto con fuerza contra su cuerpo-. Pero cuando gire tú ya no estabas, me mentiste.
Daryl se mantuvo detrás del chico, observando en silencio como la pequeña niña lloraba con rabia y enojo. Ella había estado a segundos de perder a su hermano solo porque el tipo se quedó junto a Merle, solo para proteger a un hombre que había puesto un arma en su cabeza.
Esa noche fue la peor, Elio se mantuvo sentando en el suelo de tierra, su hermana estaba aferrada a su cuello mientras lloraba y escuchaba como los otros hombres arrastrabanos cuerpos sin vida. Había sido sin lugar a dudas un ataque horripilante.
Andrea tampoco dejo sola a Amy, su hermana menor, la rubia espero pacientemente hasta que el sol salió y la chica volvió a la vida. Murmurando unas silenciosas palabras ante de dejarla descansar con una bala en su cráneo.
Elio se prometió a si mismo jamás permitir que algo así le sucediera, apenas fuese mordido; pondría una bala en su cabeza.
El caos fue extenso, un infectado no muerto y una disputa sobre dónde ir. Por eso los grupos no iban con él, pero si deseaba mantener viva a Ahvi tal vez lo mejor era seguirles la corriente durante algún tiempo.
-Lo que va vuelve...
Daryl murmuró mientras arrastraba a un hombre, uno que antes pertenecía al grupo.
-¿Por qué no te callas? -Ladro Glenn, parecía un campo de batalla.
-Abandonaron a mi hermano -Dixon grito y con eso alteró a la pequeña masa rubia que antes estaba sobre el pelirrojo-. Lo tienen merecido.
La niña camino directo hacia él, Elio se levantó a toda prisa para detenerla, pero ya era tarde. Ahvi estaba delante del hombre, su rostro seguía rojo e hinchado por haber llorado, y las manchas de sangre descansaban de forma espeluznante en sus mejillas.
-Deberia calmarse -Daryl la observo y ella a él, parecía que ambos hablaban solo con miradas-. A mi hermano también lo abandonaron, ¿usted ve que él se queje? No, y aún así está aquí escuchándolo llorar por un señor feo y desagradable.
El rubio refunfuneo un instante y luego volvió al trabajo pesado, arrastrar cadáveres.
-¡Muéstrame Jim! -Elio se puso de pie y luego todos también, rodeando poco a poco al hombre de gorra- Lo mordió, un zombie mordio a Jim.
T-Dog lo sostuvo desde atrás, Elio elevó su remera y la clara marca de los dientes se vio en el abdomen del hombre. Al parecer Jaqui no había visto mal, el hombre estaba infectado.
Eso era el principio de una asamblea que duró un buen rato, también una que no tuvo solución. Al final Daryl intento darle con un pico en la cabeza, Elio se abalanzó sobre él y luego Rick le apunto con un arma, una linda tarde en familia.
-¡Sal de arriba, maldito niño!
Rick agito su cabeza, dejándole en claro que no le permitiera al grandulon moverse, Elio obedeció. El joven pelirrojo sostuvo con fuerza las muñecas ajenas. Alejando el pico de sus peligrosas armas.
-No matamos a los vivos.
-Es irónico que digas eso cuando me estás apuntando con un arma y tengo a este mocoso sobre mí.
-Admite que la última parte te encanta.
Y Dixon lo dejo en el suelo, al parecer siempre había tenido la opción de liberarse con facilidad, haciendo que una sonrisa encantadora se pintara en el rostro del pecudo.
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