Lincoln llegó corriendo a casa, contaba con la suerte que Lori seguía ahí.

-¡Lori! ¡Lori!

Entró a la casa encontrandola en el sofá viendo una Sitcom mientras se pintaba las uñas de un púrpura encendido. La rubia mayor pasaba las vacaciones de la Universidad en casa de sus padres para hacerles algo de compañía pues Luna, Luan, Leni, Lisa y Lincoln ya no vivían en aquella casa.

-¿que pasa Lincoln? -respondió con una sonrisa tranquila mientras dejaba de lado sus esmaltes y brochillas.

-¿me prestas tu auto?

Hubo algo de silencio mientras Lori lo miraba con los ojos muy abiertos para, segundos después, comenzar a reír con ganas.

-Jajajajajajajaja, esa estuvo Literalmente buena Lincoln, le heredaste el humor a Luan o algo así.

-Lori, hablo en serio, necesito tu auto para una carrera en la que podré...

-Lincoln, estás loco, no te dejaré usar mi Mustang, mucho menos para una carrera.

-yo pagaré los daños, lo prometo, pero lo necesito con urgencia, podré ganar otro auto para poner en si lugar a los que amenazaron a Lily.

La mayor frunció el seño y acarició su tabique mientras pensaba en una respuesta.

-¿cuando es la carrera? -dijo al fin.

-pasado mañana... pero... ¿me prestaras tu auto?

-si, está bien, tu ganas, tienes hoy y mañana para trabajar en el pero... -agarra a Lincoln del cuello de la camisa- ...si algo le pasa a mi auto, tu estás muerto, y tú pagarás todos los daños que le resulten.

-lo prometo, lo prometo.

-bien, ahora ve a bañarte que hueles a grasa, chico McDonald's.

Mañana del día siguiente
Garaje de la casa Loud.

Lola y Lincoln comenzaron a trabajar en el auto, no había demasiado que hacerle pues Lori y Bobby ya le habían instalado unas cuantas bellezas para hacerlo más veloz y controlable así que solo debían ajustar un par de cosas.

-¿que te pasó en el trabajo que andas tan alegre y optimista? -le preguntó Lana al verlo sonreír mientras trabajaba- amo esa sonrisa pero me es curioso.

-no fue en el trabajo, Jefa, fue anoche... digamos que la mejor deportista que conozco me dio un discurso motivador.

Y así les llevó toda la mañana trabajar en el Clásico Mustang de Lori, no había demasiado por hacer y terminaron algo cansados.

-Lana, nunca lo supe pero... ¿como sabes tanto de mecánica?

-hice varios cursos profesionales, a niveles internacionales por virtualidad y asistiendo a talleres locales... nada genial...

-supongo que si llego a entrar a la NASCAR podré llamarte a ti como Jefa de Boxes.

-eso me encantaría, aunque tendría que elegir porque ya le debo a Fletcher ¿recuerdas?

-oh si, la Piloto del concurso de Hamburguesas Eructo... ¡oye! ¿La elegirías a ella?

-jajajajaja, esa mirada lo vale todo... no creas, te eligiria a ti.

Noche de la carrera
Pista de obstáculos de arena de EverGreen
Afueras de Royal Woods.

Lincoln llegó al lugar conduciendo el Mustang, los demás pilotos se veían más amenazantes con guardas y defensas en sus autos. Lynn iba en el asiento trasero, no se iba a perder el evento donde su hermano sacaría adelante el apellido Loud.
Lana iba en el asiento del copiloto, Lucy iba detrás junto a Lynn.

-hijo de...

La pista tenía muchos obstáculos como barriles de aceite, reductores de velocidad, charcos de lodo profundos, púas en los bordes altos de la pista ovalada y más.

-esto va a ser duro Lincoln -le habló Lana.

-espero que no avergüences el apellido Loud -le reprochó Lynn viendo los demás autos.

-tu puedes Lincoln, pero espero que tengas suficiente dinero para reparar el auto de Lori después del evento -le reclamó Lucy.

Lana se bajó, empujó la silla hacia adelante para que Lucy y Lynn bajasen y se despidió de Lincoln con la mirada dejándolo solo en la zona de partida.

Ronnie Anne llegó al rato, venía en un Ford Fiesta Sedán bastante tuneado.

Los demás pilotos se burlaron de Lincoln en cuanto este bajó pues traía puesta la chaqueta que Leni le hizo. Era una chaqueta de corredor, pero tenía cintas de colores recorriendo los brazos y la palabra Loud en mayúsculas en la parte trasera en color rosado brillante, el color general de la chaqueta era negro y naranja.

-¿y esas pintas? -preguntó Anne saludando de puño a Lincoln.

-la hizo Leni.

Varios corredores se acercaron a mirar de cerca a Lincoln y su auto.

-¿cabello blanco? Vamos, creí que solo los hombres y mujeres de verdad eran permitidos aquí -se burló uno de ellos- y miren, viene en un Mustang familiar.

-¿Tu mami te hizo esa chaqueta? -se burló otro.

-no, fue mi hermana -respondió Lincoln mirándolo con seriedad a los ojos.

Una bocina indicó que la carrera estaba por empezar y los pilotos fueron a sus respectivos vehículos. Ronnie Anne hizo una seña de saludo a Lincoln y entró a su auto.

-¡Buenas noches damas y caballeros! Soy su presentador, Anthony Sullyvan, narrando desde la pista de barro y arena de EverGreen, en Royal Woods, donde solamente los más habilidosos podrán salir en una pieza... y para esos tontos que no saben de qué consiste, aquí va la explicación: los autos empezarán desde el punto de partida, van a correr compitiendo por el primer puesto, esquivando los obstáculos que están dispersos por la pista que, como pueden ver, tiene forma ovalada. El primero en completar las 10 vueltas gana el premio mayor de una carrocería exclusiva y las piezas requeridas para armar el coche. Buena suerte corredores y la competencia empieza... ¡ahora!

Lincoln aceleró a toda velocidad con un arranque perfecto haciendo chirriar las llantas y tomando buen impulso, posicionándose rápidamente en la primera posición.
Esquivó por poco el alambre de púas viendo como uno de sus adversarios se estrellaba de lleno el el obstáculo.

Giró suavemente evitando tocar los barriles y charcos dispersos por la curva 1, conservando su ventaja pero con un rival pisandole las llantas tratando de quitarle el primer lugar chocandole el guardabarro constantemente con la intención de hacerlo perder el equilibrio.

-vamos Linc, tu puedes -se decía Lana a si misma cada que veía que su hermano estaba cerca de perder el control del vehículo.

Lincoln llegó a la curva 2, tenía varias vigas de acero por el suelo que hacían que los autos temblaran cada que pasaban sobre ellas haciendo que sus pilotos perdieran la concentración y se mareasen. El peliblanco no supo esquivar bien los últimos y su auto se sacudió violentamente antes de volver al terreno normal. Ahora había perdido velocidad y su rival de hace rato lo había adelantado.

-me cago en la... -murmuró Lincoln pisando a fondo en lo que el Mustang clásico le permitía.

Para la curva 3 habían cables eléctricos aún aún corriente. El auto que chocase con alguno recibiría una descarga equivalente al pulso PEM, desestabilizando la batería y apagando por completo el auto. Lincoln zizagueo bruscamente buscando evitar el contacto con los cables, lograndolo por pura suerte y llegando a estar a la par que su rival de hace rato.

Su contrincante, que conducía un Subaru BRZ 2015, trató de ir más rápido pero el auto de Lincoln tenía más aceleración y consiguió adelantarle. Y por fin cruzó la línea marcando la primera de Nueve vueltas más que debía dar.

Pasó la segunda, la tercera, la cuarta vuelta sin mayores complicaciones. Pero para la quinta, el Subaru se empeñó en adelantar a Lincoln está vez por las malas, chocó a Lincoln por detrás y comenzó a empujarlo hacia un costado consiguiendo que el Mustang se diera de frente contra el borde de la pista y girara 180 grados dándole la espalda al terreno.

Sin embargo, Lincoln no se daría por vencido así como así, movió la palanca de dirección y retrocedió a toda velocidad, adelantando al Subaru dando reversa, luego movió el freno de mano, aceleró a la vez que daba un volantazo enderezando el vehículo y ajustando la dirección acelerando y volviendo a conseguir la primera posición.

El Subaru aceleró y chocó a Lincoln de costado pero él supo mantener el control del vehículo y superó la vuelta cinco, luego la seis, siete, ocho y nueve.

Ya estaba llegando a la vuelta final, ya faltaba poco y ganaría el auto que le habían prometido, y no dejaría que el insistente Subaru le quitara la oportunidad de volver a la pista. Recibió dos choques de parte del Subaru, el enemigo dañó severamente la cajuela del Mustang y doblando levemente el guardabarro dañando un poco la dirección de Lincoln.

Perdiendo el control, Lincoln consiguió derrapar chocando violentamente contra un costado destrozando el espejo derecho pero logró cruzar la línea de meta ganando el premio final.

-¡no lo puedo creer! ¡El Mustang de Lincoln Loud ha ganado la carrera de tierra, el auto de calle usado solo por amas de casa despeinadas le ha ganado al Subaru de Chandler, el mismo ganador de la competencia nacional de carreras callejeras!... denle al muchacho su premio!

-espera ¿que?... ¿Chandler?

Ronnie Anne se acercó a Lincoln y lo abrazó de medio lado revolviendo en cabello blanco de su colega.

-¡ganaste, perdedor! ¿Quien iba a decirlo? -festejó ella- el auto es tuyo... bueno, las partes del auto...

-¿Tu organizaste esta carrera? -Le preguntó Lincoln- ¿y por qué invitaste a Chandler?

-yo no lo invité, solo corri la voz, solo a ti te invité porque... porque eres un corredor muy bueno, idiota.

-bueno, quizá no tan bueno como tu.

-no me hagas sonrojar, o te mato aquí mismo.

-jajajaja

-como sea -siguió ella- el camión con las piezas irá a tu casa a dejarlas allí, quizá debas avisarle a alguien para que lo reciba y firme.

-si -sacó el albino su teléfono- llamaré a Lola, es la única en casa.

El chico quiso iniciar la llamada pero fue interrumpido por Chandler quien llegó enojado y le tiró el teléfono al suelo.

-¿que te pasa?

-asi que también vienes a la pista de tierra ¿eh Larry?

-vete al diablo, Chandler, tu eres quien me sigue a todos lados. Ya me arruinaste una vez, ya tienes lo que quieres, déjame en paz.

-tu no lo entiendes Larry.

-pues hazte entender, baboso.

En ese momento, la pista se vio iluminada por un helicóptero de la policía. La carrera no era legal.

-¡corredores, la pista está rodeada! Entreguense al departamento de policía y no les haremos daño a sus vehículos.

Lucy, Lynn y Lana llegaron con Lincoln, se hicieron señas con la mirada y corrieron al Mustang, Chandler corrió a su Subaru y Ronnie Anne a su auto. Lucy, Lynn y Lana subieron al Mustang y Lincoln aceleró a toda velocidad en reversa saliendo por la entrada principal de la pista estrellando abruptamente a un coche de policía quitandoselo del camino, luego cambio de dirección y aceleró lejos de ahí derrapando dirigiéndose a la ciudad.

Una gran cantidad de policías lo seguían, entre ellos el comisario que lo amenazó la semana pasada quien, sin saber Lincoln como, logró comunicarse con el peliblanco por radio.

-Lincoln, Lincoln, Lincoln... tan solo cinco días te tomó romper el trato que hicimos y volviste a las calles... escucha esto chico, entrégate y no le haremos nada a tus hermanas... si, sabemos que tus hermanas queridas van contigo... ¿que dices muchacho?

-no le hagas caso Apestoso, acelera -le gruñó Lynn.

-abrochen sus cinturones... en serio... por favor -murmuró Lincoln mientras maniobraba violentamente entre el tráfico.

-Lincoln, sé que debes huir y todo pero... aún no me quiero morir -habló Lana asustada aferrándose de todo lo que pudiera.

Lincoln giró con violencia hacia una zona con callejones donde tuvo la esperanza de perder a los policías, era seguido por el Subaru. Sin embargo, antes de poder llegar ahí, un camión del SWAT lo chocó de costado consiguiendo levantarlo varios metros en el aire haciéndole dar vueltas...

El auto rebotó dos veces contra el asfalto dando vueltas violentas hasta que rodó otras tres veces quedando de cabeza y mayormente destruido.

Lincoln tosió fuertemente, seguido de Lana y Lynn.

-¿están... están bien? -les preguntó Lincoln muy agitado y con la voz quebradiza.

-si... creo que me rompí la pierna -se quejó Lynn con sobrehumana tranquilidad- ¿que hay de ti?

-eso no importa -siguió él aferrando con fuerza el volante doblado- ¿Lana?

-estoy bien, solo perdí mi zapato izquierdo... ¿Lucy?

La chica no respondió.

-mierda, Está inconsciente -avisó Lynn tomando el pulso de Lucy.

-esto es mi culpa, no debí traerlas conmigo, sabía que se lastimarian, esto...

-Lincoln...

-yo debí saber que se lastimarian, no sé que estaba pensando...

-Lincoln...

-yo volqué, como es que sigo con vida, no lo merezco.

-¡Lincoln! ¡calmate! -le gritó Lana- tranquilo, respira y pensemos en como salir de aquí.

En ese momento la puerta de Lincoln fue arrancada de su lugar revelando al responsable de querer salvarlos.

-¡salgan de ahí Loud, el auto está goteando! -gritó Chandler con una barra de metal en su mano.

Uno a uno salieron, algo aturdidos. Chandler venía con un compañero, con Ronnie Anne y con otro sujeto.

Uno de los ayudantes de Chandler ayudó a Lynn a salir y otro a Lucy quien aún seguía inconsciente pues su cabeza se había golpeado violentamente contra el vidrio al volcar.

Lana salio por su cuenta, ya cuando estuvieron fuera caminaron hacia un callejón donde Ronnie Anne había aparcado un auto diferente para ayudar a escapar a los Loud.

Lucy y Lana fueron subidas al auto de Ronnie, Lynn iría con el otro tipo.

-espera... ¿te conozco? -gimió ella por el dolor en su pierna

El ayudante se dio a ver mejor.

-¿Francisco? -volvio a decir emitiendo un pequeño gruñido de dolor.

-quedate quieta, te llevaré al hospital, Anne llevará a tus hermanas... Chandler llevará a Lincoln.

Los autos arrancaron dejando a Chandler y Lincoln solos en ese callejón mientras recuperaban el aire.

-¿Como me hayaste? -le dijo Lincoln a su rival jadeando- más importante aún, ¿por qué me ayudaste?

-yo también choqué... debía ayudarte no podía... no podía quedarme viendo otra vez...

-¿que sucedió?

Las Sirenas de policía sonaban cada vez más lejos, parecía que los habían perdido por un momento así que comenzaron a cojear por el callejón.

-no te incumbe Larry -siguió el pelirrojo quejándose cada tanto de su dolor- no es asunto tuyo...

-como sea. Tienes un severo caso de Bipolaridad.

-estoy a punto de matarte....

-mmh... cierto, debo llamar a Lola, a que reciba el auto que gané.

-no me lo eches en cara, Loud...

Llegaron al segundo auto de Chandler, el Dodge. Las sirenas volvieron a sonar cada vez más cerca.

-sube, te dejaré con Liam en su granja... El plan era quedarme yo allí para esconderme pero creo que él te tiene más confianza a ti -le dijo Chandler respirando pesadamente- tengo otra idea...

Se bajó del auto y le hizo señas a Lincoln para que subiese.

-¿que pasa contigo? Nunca eres así de amable... ¿que te picó?

-Callate y sube al Dodge, Larry... no voy a vivir toda mi vida jugando sucio... papá no querría eso...

-¿Tu padre se...?

-accidentó... y yo solo miré... me prometí a mi mismo que seria el mejor... ahora largo, la policía viene para acá.

-¿Tu que harás? -le preguntó el albino subiendo al auto, cerrando la puerta y abrochando su cinturón.

-conseguiré tiempo...

Lincoln aceleró, sin exceder el límite de velocidad, y pasó desapercibido entre el tráfico llegando a las afueras de la ciudad. En el camino llamó a Lola y, aunque le costó algo, logró convencerla de que hiciera ese favor a cambio de que él la llevaría a pasear en su auto recién ganado.

Por fin llegó a la granja, estaba desolado y oscura, apagó las luces del auto y aseguró las puertas, reclinó el asiento y trató de calmarse. Cuando la adrenalina en su cuerpo hubo disminuido, Lincoln por fin sintió el dolor de los golpes por el choque, pero aún no sentía algún quiebre en sus huesos así que estaba bien.

No quería volver a su casa, aún era peligroso porque la policía podría seguirlo y porque el comisario sabía perfectamente que él había estado en esa carrera.

-¿y ahora que hago? ¿Debería salir de la ciudad? -se habló a si mismo llevándose una mano a los ojos para sobarlos- ¿que hago con el auto que gané? ¿Que hago Con el Dodge de Chandler?...

Recibió una llamada de Lola.

-Lincoln, llegó otro paquete... son piezas "Junkman" ¿que es eso? ¿Lo firmo?

-si hermanita, gracias... te debo una Lola...

-¿te sientes bien?... suenas decaído.

-escucha, si la policía llega a casa diles que no dirás nada sin que yo esté ahí ¿entendido?

-¿policía? Lincoln ¿que hiciste ahora?

-te lo explicaré luego, lo prometo, por ahora firma el paquete, llévalo al garaje y no le abras a nadie más a no ser que sea un familiar... cuídate Lola y, si algo pasa...

-Linc, me asustas, tu no eres así... ¿que va a pasar?

-Escúchame... si no vuelvo, si no te vuelvo a ver a ti o a alguna... te amo ¿si?, sé que no lo parece porque nos tratamos mal mutuamente, pero te amo hermana.

-Lincoln...

-cuidate -colgó.

Respiró profundo, lo pensó bien... de hecho, era muy posible que no las volviera a ver por protección. La Blacklist de Royal Woods seguía por ahí, ahora la policía lo perseguía y, por si fuera poco, recordó que TheLeague también estaba en su contra.

-carajo, ¿qué diablos es esto? Todo el mundo me está persiguiendo... de repente soy el más buscado...

En eso, una llamada de un número desconocido entró a su teléfono y una luz se encendió a distancia. Lincoln contestó a la vez que volteaba a ver en dirección a la luz.

-¿hola?

-se como te sientes ahora, chico... yo también pasé por eso.

-¿quién es usted?

Una silueta masculina se vio a lo lejos en la fuente de luz.

-tranquilo, no quiero hacerte daño, pero escucha... tu familia corre peligro en este tipo de trabajos... yo tuve que dejarlos a todos atrás... no he hablado con mi hermano en años, décadas amigo...

-yo también se que corren peligro pero... no sé que hacer, gané esa carrera solo para demostrarme a mi mismo que podía seguir corriendo... pero lo arruiné todo, mi hermana está inconsciente, mi otra hermana se rompió la pierna...

-Lo sé, te he estado vigilando

-¿que? ¿Desde cuando?

-desde que comenzaste a correr con mi BMW M3... sabía que lo merecías tú, por eso nunca intervine.

-¿Tu BMW? Entonces solía ser tuyo ¿eh?...

-si, solía romper el asfalto con él en RockPort