-Lincoln Loud, por fin podemos hablar, una gran carrera hiciste allí atrás.

-muchas gracias señorita Fletcher... pero ¿qué hace usted acá?

Uno de los ejecutivos sacó un portafolios y Fletcher sacó un paquete de hojas.

-vengo a hacerte una propuesta que no podrás negar -le dijo ella sonriendo y buscando un bolígrafo en su chaqueta- quiero que seas el siguiente corredor 72 en la NASCAR.

En 2014, Bobby Fletcher militó en la NASCAR Energy para la casa Toyota bajo el patrocinio de Hamburguesas Eructo y con el numeral 88. Sin embargo y con el pasar de los años cambió a la NASCAR Rumble bajo el número 56 para la casa Ford bajo el patrocinio de Levi's. Finalmente, un año antes de su retiro, en 2019 para ser exactos, usó la dorsal 72 de vuelta en la Energy NASCAR bajo el patrocinio de Electronic Arts para la casa Chevrolet.

-¿y bien? -le dijo ella al peliblanco quien estaba atontado creyendo que vivía un sueño- si tienes dudas o crees que es un engaño, tus padres ya leyeron el documento que tendrías que firmar y hay directivos oficiales de la NASCAR presentes. Solo tendrías que asistir al examen de admisión para ver si EA se decide por ti como competidor 72, es básicamente un examen donde verán que tan rápido tomas las curvas, que tan rápido tomas los planos y que tan ágil eres al volante de un V8.

-yo... yo... yo...

-creo que es un si -animó Lynn Padre- ¿que dices hijo?

-yo... si, firmaré -decidió al fin llevándose el festejo de sus familiares, sobre todo el de Lana y Lily quienes más lo apoyaban en eso.

Sin embargo, al momento de terminar de leer los términos y condiciones, de ver sus derechos y de pasar todos los trámites legales... Lincoln frenó antes de firmar...

-solo quisiera pedir algo, si no es molestia -pidió el Peliblanco- quiero que mi Hermana Lana entre a Pits como mi jefa y que haga parte de mi equipo mecánico... todos los autos que usé para llegar hasta aquí y su gran rendimiento fueron gracias a ella...

-ah, Lana... como se lo prometí en 2013, la incluiría en mi equipo de mecánicos pero  como me retiré y ella aún tiene dieciséis años... podría participar en tu equipo de mecánicos pero, como Jefa de Pits lo veo dificil pues la edad mínima para eso es 18 años y, para entrar en el equipo de mecánicos teniendo aún 16 debe presentar títulos o credenciales que acrediten que es diestra en lo que hace y que se le puede otorgar el permiso de manipular maquinaria... bien, ella puede entrar, pero tendrás que esperar a que tenga 18 para que participe en los Pits ¿trato?

Lincoln asintió y todos festejaron mientras él firmaba y le tomaban fotos los representantes legales de dicha competencia.

Cuando firmó, Fletcher le regaló una gorra con su número, el 72, a él y a los demás miembros de la familia. Por fin lo había logrado, por fin había entrado a la NASCAR.

Tarde del día siguiente.
Casa Loud
Celebración por el regreso de Lily a casa y por la entrada de Lincoln a NASCAR.

La mayor de los Loud caminaba de un lado a otro moviendo decoraciones, ordenando algunas cosas y asegurándose que el lugar estuviera en perfectas condiciones para el festejo de esa noche.

Los santiago vendrían, también el abuelo Albert, algunos amigos de las hermanas Loud y de Lincoln y un par de amigos de los padres. Iba a ser una reunión grande, todo debía estar perfecto.

-muy bien, casi todo está arreglado, las demás chicas llegarán en cualquier comento -suspiró Lori revisando su reloj- ¿y en donde se metió Lincoln?

-salió con Lynn y Lily -respondió la madre desde el comedor- fueron a comer helado.

-mmh, ahora que no tiene auto ¿como le hizo para salir? Dudo mucho que haya usado la Van.

-le presté mi auto -respondió Luna acomodando algunas decoraciones en las escaleras

-pésima idea.

En ese momento Lincoln, Lily, Lynn y Clyde llegaron a la casa seguidos de Lana, Lola y Leni.

-muy bien, por fin llegan.

-relajate Lori -respondió Lola- ahora que estamos aquí ya podemos empezar a comer.

-alto ahí señorita -la detuvo Lynn padre- la cena aún no está lista del todo y los demás invitados no han llegado.

-malo -susurró ella- Lincoln ¿a quienes invitaste que aún no llegan?

-solo a Clyde y a Brian -se defendió- pero no estoy seguro que Brian aparezca.

-bien, ya que no falta nadie -volvió a dirigirse a la cocina pero fue detenida nuevamente por su padre- ¡vamos!

-faltan los Santiago y algunos amigos más como Benny, Margo, Kotaro y el amigo de Lincoln, Brian, así que aún no comerás lasaña -sentenció el padre.

Dos horas más tarde.
La familia Loud y la familia Santiago se reúnen en la casa Loud para el festejo.

Todos se hayan hablando entre sí, hablando de como Lily logró superar no sólo una enfermedad grave sino también el cáncer y el como su cabello, a pesar de ser corto, estaba creciendo con rapidez y se veía bien. También hablaron de Lincoln, de su encuentro con Fletcher y de su ingreso a la NASCAR. En un mes, Lincoln debía presentarse en Daytona para presentar el examen de admisión junto a Lana quien debía demostrar sus habilidades como parte del equipo de mecánicos.

Lori, Bobby, Clyde y Lincoln hablaban en la sala.

-... y destrozó el Mustang, totalmente, lo dejó hecho chatarra... Literalmente acabó con mi bebé.

-superalo Lori, ya te dí los diez mil dólares del premio, tu y Bobby pueden comprar otro auto... uno más feo aún.

-si... ¡oye!

Bobby y Clyde rieron ante la aparente discusión entre hermanos.

-así es Lincoln, mi mejor amigo.

-tambien el mío.

-me alegra que hayan superado eso de disputarse de quien era más hermano -rió Lincoln.

Y entonces tocaron la puerta. Clyde, Bobby y Lori se defendieron dejando a Lincoln como encargado de abrir la puerta, su madre también se había aproximado pero Lincoln terminó llegando primero, Rita solo miró detrás de Lincoln para asegurarse que no fuera nada malo.

Cuando Lincoln abrió la puerta una combinación de sentimientos entre ira y alegría se combinaron.

-¿que hay Linc?

-¿Brian? ¿Tienes idea de cuanto te busqué?

-si, lo imagino... eeeh, verás, tenía que hacer algo importante con mi auto y tuve que irme...

-con tu auto... amigo, creí que estarías ahí cuando gané.

-lo estuve, solo que cuando tu familia llegó yo... -hizo una pausa para suspirar profundamente como si dejara salir algo que lo agobiaba desde varios años atrás- me recordó a la vez que mi Familia me dejó, me dio envidia y nostalgia porque ellos siempre te apoyaron pero... a mi me abandonaron a mi suerte, Darius tuvo que apoyarme y darme un lugar en el mundo... así que, quería alejarme de ese lugar, de ese ambiente...

-vaya, lo siento mucho amigo, no sabía eso.

-tranquilo, tampoco me iba a ir para siempre antes de entregarte tu regalo...

Señaló detrás suyo, revelando el ya conocido BMW, esta vez estaba limpio, lavado, repintado a su irónica paleta de colores y diseño, con llantas nuevas, luces más potentes y un aromatizante nuevo, además con el Nitrógeno N2O de Lisa instalado.

-wow, tu auto, se ve como nuevo -alabó Lincoln, su madre seguía mirando con algo de duda al hombre con el que su hijo hablaba.

-en realidad es tu auto -señaló otro auto detrás del BMW- ese detrás es el mio...

-no querrás decir que...

-sip, el BMW es tuyo... ese auto es el símbolo vivo de las carreras callejeras, del esfuerzo, de la dedicación y de la valentía... quiero que sea tuyo...

-Brian, No puedo aceptarlo...

-si, tienes que hacerlo, es más, te echo una carrera que le de la vuelta al barrio. Tu casa es el punto de partida y de llegada.

Lincoln miró a su madre, ella asintió y el muchacho corrió al BMW, se subió y arrancó a la par que Brian.

Mientras conducía, esta vez con más cautela para no rayar la pintura, Lincoln recordaba los buenos momentos con ese auto, todo lo que vivió, todo por lo que luchó y la razón por la que entró a ese mundo en primer lugar. Viviría la vida como si fuera la última vuelta, siempre seguiría adelante poniendo el máximo empeño que pudiera poner en cada cosa que hiciera.

Por parte de Brian, este estaba orgulloso de Lincoln, sabía que había sido buena idea el dejarle el auto con el que luchó en Rockport, en Palmont City y en Blackridge... Lincoln lo merecía, era su momento ahora, era su oportunidad de salir adelante con ese auto o en lo que hiciera en el futuro, ahora él tendría la vida que Brian no pudo tener, la vida junto a ese auto que Brian no pudo disfrutar.

Dieron la primera vuelta, esquivando varios buzones, camionetas, peatones que cruzaban sin cuidado y postes de luz

-muy bien Lincoln, ya vamos a llegar y aun tienes la ventaja, pero veamos si no te dejas ganar en el último tramo.

-ya quisieras.

Llegaron al último tramo, Lincoln aceleró a fondo aprovechando que la amplia calle se encontraba vacía, así que pisó el acelerador escuchando el suave silbido que ocasionaba el motor del M3. Frenó al llegar a su casa viendo como toda su familia se hallaba afuera esperándolo alegres. Todos aplaudieron al ver que fue el quien ganó.

Brian se bajó del auto emocionado, Lincoln también y ambos rieron por tal improvisado encuentro.

-ahora... es todo tuyo -le entregó las llaves al peliblanco- disfrútalo campeón.

-gracias Brian -le dio la mano- esto será genial.

-espero que así sea.. bueno, supongo que es el adiós, aun hay otros corredores que debo visitar... debo encontrar más gente talentosa como tu para hacer de este deporte algo legal y justo...

-espera ¿te vas?

-si, no me quedaría para siempre -pone su mano en el hombro del chico- escucha Linc, sé que harás mucho en la vida, eres alguien genial y muy bondadoso, sé que sabrás que hacer con ese auto, se que saldrás adelante y sé que seras alguien exitoso en la NASCAR...

-entonces, es un adiós.

-creo que si, pero, nos volveremos a ver, quizá. Suerte Linc.

Chocaron puños mientras él volvía al Honda Civic en el que había llegado.

-¡espera! -gritó Lynn Jr- ¿quién eres tu?

-¿yo? -volteó Brian antes de subir a su auto- soy el Most Wanted.

Y se alejó del lugar a toda prisa pitando con la bocina del auto despidiéndose de Lincoln y de su familia. Fue la última vez que lo vio.

Casa Loud
Diez de la noche
Aún en la fiesta.

A pesar que varios miembros tanto de la familia Loud como de la familia Santiago se habían dormido y había que acoplar las habitaciones para alojarlos a todos, Lincoln, Lily, Lynn Jr, Bobby y Lana seguían despiertos en la Sala comiendo Pizza. Lola se hayaba en el comedor recibiendo coqueteos de Carl quien no la dejaba en paz y Luna se hayaba en el pórtico hablando con Sam mientras daba pequeñas notas a su guitarra. Carlota, Lori y Leni hablaban de moda y relacionados en la habitación de la mayor y los padres y abuelos se hayaban todos en el patio Trasero viendo una película en el proyector. Lisa, Lucy, Luan, Carlitos, Carlos Jr, Clyde, Margo y Benny se hayaban dormidos, agotados por su día a día.

-Bobby -preguntó Lana- ¿Donde está Ronnie Anne?

-no lo sé -levantó los hombros- sinceramente no lo sé. Hace tiempo no hablamos, sobre todo desde que ella se dedicó a las carreras callejeras y yo ingresé al cuerpo policíaco de Royal Woods.

-quizá te odia -mofó Lynn.

-Lily ¿no deberías estar durmiendo? -le avisó Lincoln a Lily quien se hayaba aún despierta escuchando atentamente la conversación.

-no, ya nos separaron mucho tiempo, ya fue suficiente -respondió ella haciendo un puchero y cruzándose de brazos.

Entonces la puerta sonó y, como era costumbre, a Lincoln le tocó abrir. No pensaba que aún recibirían visitas a esas alturas pero de todas maneras abrió con cautela pues no sabía de quien se trataba y podría ser algo malo. Cuando abrió la puerta se sorprendió mucho al ver de quien se trataba.

Ronnie Anne se hallaba frente a él con el brazo izquierdo doblado aparentemente roto y bastante maltratada, estaba agitada y asustada, se podía ver que la habían golpeado bastante. Bobby se asomó y se asustó al ver a su hermana tan herida y demacrada.

-¡Lincoln! -gritó ella cuando el peliblanco le abrió- gracias a Dios, pensé que ya te habías ido de Royal Woods.

-Ronnie Anne, ¿que sucede? ¿Te sientes bien? ¿Que te pasó, quien te hizo esto?

-los hombres que secuestraron a Syd -respondió ella aún algo agitada- ella se arrepintió de traicionarte y me buscó para pedirme disculpas, yo no pensaba disculparla pero al menos quería hablar con ella... pero los hombres para los que trabaja no lo vieron tan bien, arribaron al taller donde nos habíamos reunido, yo ya estaba lista para irme del pueblo cuando llegaron, nos golpearon a los dos y se la llevaron a las malas... Los seguí pero me chocaron, creo que tengo el brazo roto.

Lincoln y Bobby oían algo asustados el relato, debían hacer algo pero ¿qué?.

-¿que debo hacer? ¿Por qué no avisas a la policía?

-porque ella está huyendo de la policía -afirmó Bobby- lo leí en los registros de mi jefe, la están buscando por tráfico de piezas y refacciones... ¿no es así Ronalda?

-Bobby... por favor... necesito su ayuda, la de ambos -suplicó ella- Syd es mi mejor amiga, es como mi hermana... Lincoln, por favor, eres el mejor piloto que conozco.

Tanto Lincoln como Bobby suspiraron de manera pesada y asintieron, Lincoln tomó las llaves del BMW y Roberto las de su patrulla.

-les avisaré al cuerpo que no te persigan, Lincoln, mientras tanto los trataré de buscar, tu lleva a Ronnie al hospital y reunete conmigo, te avisaré si los veo -ordenó Bobby para después encender la alarma de su patrulla y arrancar alarmando a sus compañeros de la persecución en cuestión y que el BMW M3 Gtr estaba de su lado.

Lincoln y Ronnie subieron al BMW, Lincoln la llevó al hospital, en el camino no hablaron ni se toparon con los maleantes.

-esos cabrones -dijo Lincoln al fin- ¿son de la Blacklist?

-si

-mierda... ¿en qué auto van?

-no vi bien, creo que un Nissan Nismo... Un Gtr nismo...

Llegaron al hospital.

-Lincoln... gracias, de verdad...

‐no me agradezcas, solo entra por la entrada de emergencias para que atiendan tu bra...

No pudo terminar porque Ronnie Anne, con el brazo bueno que le quedaba, agarró a Lincoln del cuello y lo besó de una forma tan cariñosa y apasionada, abrazándolo y soltandolo solo para respirar y volver a besarle, ella cerró los ojos, anhelaba ese momento desde la secundaria... lo besó de tal manera que parecía significar que nunca se volverían a ver...

Y así fue...

Centro de Royal Woods

Bobby avisó a los secuestradores de Blacklist, debían ir a atraparlos cuanto antes, cada segundo valía.

Lincoln llegó en el M3. El alguacil de la policía, quien en algún momento amenazó a Lincoln (pero ahora agradecía que los estuviera ayudando) se unió a la persecución.

Estaban llegando al sur de Royal Woods, a la salida sur para ser precisos, eran dos Nissan enemigos y varias patrullas aliadas junto con el BMW de Lincoln.

Los policías los persiguieron tratando de hacerlos chocar para que Lincoln pudiese dar la estocada final, pero tuvieron que cambiar de planes pues los enemigos se encaminaron por los terrenos baldíos dificultando la persecución pues las patrullas no estaba diseñadas para el Offroad (aunque los Nissan tampoco así que se arriesgaban a perder también). Lincoln se adentró en el terreno offroad y persiguió a los Nissan mientras la policía recurría a traer los 4x4.

Los enemigos comenzaron a sufrir el terreno en sus autos, la suspensión se dañó en uno de ellos haciendo que perdiese el equilibrio y el control de su vehículo, volcando bruscamente. Lincoln se bajó rápidamente para ayudar al sujeto a salir antes de que el auto se incendiase por los daños y de paso revisó si Syd se hallaba dentro. Para su fortuna (por el choque) y a la vez decepción, ella no se hallaba allí

Volvió rápidamente a su M3 y aceleró siguiendo el rastro del siguiente vehículo.

Después de perseguirlo un buen rato sin encontrarlo, Lincoln Volvió al pueblo. La policía ya tenía cerrada la ciudad y no había rastros ni datos de los guardias de fronteras de algún auto abandonado el pueblo. Lincoln condujo buscando rastros de algún Nissan Gtr Nismo con rayones y mugre... pero eso era demasiado pedir.

-esto no está funcionando chico, mejor vuelve a casa, son casi las 12 de la madrugada -le aconsejó el alguacil- nosotros nos encargaremos.

-con todo respeto, oficial, una amiga muy cercana me pidió este favor y no la voy a defraudar.

-Señor, hay avistamientos del auto tratando de escapar en el puerto... según testigos, va con una chica de cabello rapado, castaña, rasgos orientales, cresta punk, va en un Nissan...

-Lincoln, tu estás cerca, ve con cuidado, los refuerzos irán en camino, el sujeto podría estar armado.

-voy en camino -suspiró, podría ser una situación muy peligrosa.

Cinco minutos después
Puerto de Royal Woods.

-deja de moverte, zorra inmunda -le gruñó el secuestrador a Syd- vas a pagarla caro por lo que hiciste.

-hijo de puta! -le gritó Syd, pero fue callada por un puñetazo.

-¡cállate! No hay quien te salve, nos deshicimos de esa tal Ronnie Anne y no hay nada que Lincoln Loud pueda hacer.

El sujeto Volvió a su auto, se sentó en el asiento de conductor y abrió la guantera buscando su teléfono para indicarle a su jefe que la fase final de su plan estaba listo.

-Jefe -habló en cuanto le respondieron- si, ya sé que está trabajando en RockPort otra vez pero... El plan está listo...

La idea, el castigo por traición, era atar a Syd a una viga y atropellarla con el auto hasta que no quedara más que solo puré de persona.

-lo siento niña -le avisó el maleante apunto de arrollarla- pero te llegó la hora.

En ese momento el motor del M3 sonó y tanto Syd como el sujeto voltearon a ver al bellísimo BMW frente a ellos. Sin dudarlo, Lincoln aceleró a fondo hasta estrellar al sujeto, empujandolo varios metros hasta quedar al borde del muelle.

-hijo de... -el sujeto enderezó el auto y comenzó a empujar al M3 pero Lincoln no se dejó y comenzó a hacer presión sobre el acelerador. Y así los dos autos se empujaban mutuamente.

Detrás de ellos una patrulla apareció, la patrulla de Bobby, que aceleró hasta chocar a Lincoln por detrás para ayudarle a empujar el Nismo hasta tirarlo al agua.

El Nissan cayó con violencia al agua, cayó de cabeza y Lincoln frenó al borde de caerse también. Retrocedió y se puso a salvo, agradeciendo a Bobby con el "choca esos cinco" por aparecer para ayudarlo.

Acto seguido, Lincoln corrió hacia Syd y la desató.

-¿Estás bien?

-si... Loud... yo...

-tranquila, lo pasado es pasado...

-¿me perdonas entonces?

-ya lo hice.

Cuando la liberó ella se abalanzó sobre él abrazándolo como agradecimiento, luego se despidió con la mano y subió a la patrulla para ser llevada al hospital para una revisión y después a la jefatura para testificar y pagar por la enorme multa que debía de todos eso años.

A partir de esa noche, The League no existía más.

Una grúa de la policía sacó el auto y a su ocupante casi ahogado, llevándolo al hospital de la policía.

Esa noche Lincoln volvió a casa, sus hermanas lo recibieron algo preocupadas pero felices que no le haya pasado nada.

Media noche
Habitación de Lincoln.

Ya casi todo el mundo se hallaba dormido, pero el teléfono de Lincoln sonó a esas horas. Era Syd.

-¿si? -respondió Lincoln somnoliento.

-Linc, soy syd... oye, gracias por el rescate... en la Jefatura dijeron que hablaste bien de mi y... me redujeron la condena a solo servicio comunitario y libertad condicional con licencia totalmente revocada... pero, es mejor que la cárcel ¿no?

-ya lo creo que si...

-¿entraste a la NASCAR?

-si, debo alistarme estos días porque el siguiente mes debo estar en Daytona.

-Daytona... vaya, te fue bien a pesar de lo que te hice... escucha Linc, fui un asco de persona pero, si me perdonas, ¿quisieras salir a comer un día de estos? Quizá invite a Ronnie Anne... aunque no sé si ella acepte...

-seria genial, digo, somos amigos ¿no?

-cool... te estaré escribiendo... descansa y disculpa la llamada tan tarde.

-no hay problema, y tú también descansa.